MUNDIAL DE RUSIA 2018 Jornada 3 Grupo D

NIGERIA [1-2] ARGENTINA

Rojo cambia el guión de la pesadilla y la convierte en milagro

 

Un gol en los minutos finales del central da la vida a Argentina, que ya se adelantó en el primer tiempo por mediación de Messi aunque Moses empataría desde el punto de penalti

 

La noche de hoy iba de sueños y pesadillas. La pesadilla de que al equipo que tanto habías agradecido por mantenerte en pie te quitara tu última bala, o la de que el rival al que perdonaste un penalti te matara por la espalda. Una tercera pesadilla en tres partidos podía dejar a Argentina sin sueño, pasar a octavos, y hundirla en un pozo de críticas del que tardaría en escapar mucho tiempo. Tanto en San Petersburgo como en Rostov iban a salir dos derrotados. Podía producirse el sueño islandés ante una Croacia plagada de rotaciones. Podía pasar Nigeria si aguantaba las embestidas de los albicelestes. Y también podía darse la tormenta perfecta y que, tanto Messi como Argentina, despertaran para evitar la debacle.

El temor produce el delirio. En estos casos, es el miedo al fracaso lo que alimenta el nerviosismo y la ansiedad que te acaban conduciendo a él. Bien lo experimentó Mascherano en los primeros compases, regalando dos balones que ni Musa ni Iheanacho pudieron meter en la portería de Franco Armani. Tras el esperpéntico desempeño de Caballero ante Croacia, el portero de River tuvo por fin su oportunidad de soñar. También vivieron ese miedo los hinchas argentinos cuando vieron en el once a dos de los jugadores más señalados: Di María e Higuaín. Y el estadio cuando este último dejó fuera de combate por unos instantes a Uzoho con su rodilla. A todo el mundo se le notaba la inquietud, con un ojo en este partido y el otro en Rostov, donde seguían las tablas.

A pesar de que haya estado desaparecido, si alguien puede jugar con los sueños de dos países ese es Messi. Tras las dos pesadillas sufridas con anterioridad, parece que el astro ha aprendido a jugar con ellas. Cuando más falta hacía, salió para demostrarlo. Rondando el cuarto de hora, Banega sacó un balón teledirigido al astro. Messi controló y definió al palo largo, imposible para el portero. De esa manera, el sueño argentino estaba más vivo que nunca con Islandia empatando. Pero Messi seguía teniendo ganas de jugar, y pudo duplicar la ventaja con una falta que se topó primero con las yemas de Uzoho, y después con el poste para salir repelida hacia fuera.

Viéndose fuera del Mundial, fue la impaciencia, fruto de la ansiedad, la que se apoderó del combinado nigeriano. Y provocó que los africanos se lanzaran en masa a la presión y en el ataque, dejando descuidada a la defensa y abriendo varios huecos que, por fortuna para Gernot Rohr, su rival no consiguió aprovechar. También se transformó la impaciencia en acciones polémicas, como un centro para Iheanacho que fue despejado por Rojo de una manera peculiar, y propinó una patada en la cara al delantero que, si el colegiado llega a consultar al VAR, hubiera sido otro penalti más que sumar a la larga lista que llevamos en esta Copa del Mundo.

Ya habíamos dicho antes que Mascherano había comenzado el encuentro con errores que no fueron a más. No obstante, la reanudación no le trajo la misma suerte. El ex-jugador del Barcelona pugnaba un balón aéreo en su área y provocó penalti en el peor momento posible. No fue tan clamoroso como el no pitado en la primera mitad, pero el colegiado no cambió su decisión. Moses se plantó y, con la tranquilidad que escaseó en su equipo durante el primer período, puso las tablas. Argentina estaba en estos momentos eliminada, sumida en una debacle. Además, un gol de Croacia lo dejaba todo a merced del partido en San Petersburgo. Sólo podía soñar uno, Argentina o Nigeria, y por el momento lo hacían los nigerianos. Messi, quien lo puso todo de cara en el primer tiempo, volvió a esfumarse en el campo.

Los minutos avanzaban. Argentina lo intentaba pero no podía, y Nigeria comenzaba a creérselo. El final estaba cada vez más cerca y hasta era más posible otro gol nigeriano que argentino. Incluso pudo llegar otro penalti por una mano involuntaria de Rojo, pero el VAR acertó. En los últimos minutos, incentivado por el miedo (cómo no), Sampaoli metió al Kun y se lanzó al ataque en un último arrebato mundialista. Todos tuvieron una ocasión para lograr ese gol que les hiciera despertar de esta pesadilla. Meza, Higuaín, el propio Messi… Pero no sería ninguno de ellos quien consiguiera el gol del júbilo. Sería Rojo, rematando de primeras un centro perfecto de Mercado para colocar el esférico a la izquierda de Uzoho.

Con este gol, Argentina estaba viva, y aún más al ver que Croacia se había vuelto a adelantar “in extremis”. Sólo quedaba aguantar el descuento, toda Argentina pedía la hora y, con el pitido final, el éxtasis se materializó. Una victoria que sirve para evitar una catástrofe. Nigeria, que creyó y creyó, se quedó a tan sólo unos minutos de la gloria, y se vuelven a casa con las manos vacías. Esperemos que en octavos, ante Francia, no volvamos a ver a una albiceleste sumida en sus pesadillas.

 

 

Nigeria: Uzoho; Moses, Balogun, Ekong, Omeruo (Iwobi, min. 89), Idowu; Ndidi, Etebo, Obi Mikel; Iheanacho (Ighalo, min. 46) y Musa.
 

Argentina: Armani; Mercado, Otamendi, Rojo, Tagliafico (Agüero, min. 79); Enzo Pérez (Pavón, min. 60), Mascherano, Banega, Di María (Meza, min. 71); Messi e Higuaín.

Goles: 0-1, M. 14: Lionel Messi; 1-1, M. 51: Moses, de penalti; 1-2, M. 86: Rojo.

Árbitro: Cuneyt Cakir (Turquía). Amonestó a Balogun (min. 31), Mascherano (min. 49), Banega (min. 65), Obi Mikel (min. 90) y Messi (min. 93).

Incidencias: Partido de la tercera jornada del Grupo D del Mundial 2018 disputado en el Saint Petersburg Stadium de San Petersburgo (Rusia) ante 64.468 espectadores

 

ISLANDIA [1-2] CROACIA

Pleno y sin especulaciones

 

Los vikingos pelearon con todo pero ni la suerte les sonrió ni les sobraron las fuerzas. El penalti convertido por Sigurdsson mantuvo vivo el sueño pero el gol de Perisic puso fin a la andadura de los nórdicos

 

El grupo D llegaba a su última jornada con Croacia de juez, jurado y verdugo. El combinado europeo, ya clasificado, tenía en su mano dejar fuera a Islandia o llevarla a los octavos. Su responsabilidad no privaba a Zatklo Dalic de hacer rotaciones. Sólo Perisic y Modric repetían en un once plagado de menos habituales. Por su parte, Islandia salía con todo y desde el principio iba a presionar a los vatreni.

A pesar de jugar con muchos suplentes, Croacia tenía la iniciativa aunque no las ocasiones. Tampoco los islandeses, que en los primeros compases se preocupaban más por frenar las acometidas rivales y esperar al fallo. El peligro llegaba casi siempre que las aperturas de Modric y Kovacic a la banda de Perisic. Allí el jugador del Inter intentaba la jugada individual o colgar un centro en busca de la cabeza de Kramaric. Islandia encontraba superioridad a balón parado, y su primera ocasión llegaba en una falta directa de Sigurdsson.

A medida que Modric desaparecía se diluía el ataque croata. Islandia se hacía fuerte a base de ganar los duelos aéreos y obligar una y otra vez a su rival a regalar el esférico. Recuperaban muy arriba los de Hallgrimsson Heimir y Finnbogason tenía la más clara. El delantero del Augsburgo le robaba la cartera a la zaga y ponía un disparo ajustado que se marchaban rozando el palo derecho. El colegiado señalaba el descanso justo cuando más asediaban los islandeses la portería de Kalinic.

Ni tras el descanso retiraba a Modric el seleccionador croata a pesar de la derrota de Nigeria. La segunda mitad comenzaba sin cambios pero con una Islandia de nuevo a la carga y a balón parado. Las prisas se palpaban en los jugadores nórdicos pero Croacia se mantenía firme en la figura de Kalinic, que estaba brillando en ausencia de Subasic. No obstante, esta vez la primera gran ocasión llegaba del equipo que no tenía el balón, Croacia. El disparo de Kramaric se estrellaba en el larguero para alivio de Islandia.

Todo apuntaba a que los de Dalic estaban metiendo una marcha más y Badelj lo confirmaba con su tanto. El centrocampista llegaba de segunda línea para cazar un rechace y fusilar la portería de Halldorsson. Contestaba muy rápido Islandia pero de nuevo Kalinic evitaba el gol con una gran estirada. El meta y la mala suerte se conjuraban contra los vikingos, pues el cabezazo de Gunnarsson se estrellaba en la cruceta. Con la momentánea victoria, Dalic se decidía a retirar a Modric. Por su parte, Islandia lo seguía intentando pero con más corazón que cabeza.

El tiempo corría en contra de los nórdicos y para colmo Bjarnason fallaba en boca de gol. Hacía lo propio Kramaric que con un remate cruzado a punto estaba de abrir su cuenta particular. Restaba cuarto de hora cuando Lovren cometía el torpe error de interceptar con la mano un pase de Sigurdsson. Mateu Lahoz no dudaba y señalaba el penalti que el propio Sigurdsson transformaba. Se animaba el encuentro y los de Hallgrimson estaban a un gol de octavos. Islandia lo seguía intentando pero a muchos jugadores les faltaban fuerzas. Se lo jugaban todo los vikingos a balón parado pero Perisic estaba cerca de cerrar el encuentro en una falta.

Ni la entrada de más madera pudo contribuir a que Islandia obrara el milagro. Al contrario, el cansancio acumulado facilitó a Perisic el desempate. En una de sus jugadas por el flanco izquierdo se infiltraba en el área y cruzaba un gran disparo inapelable para Halldorsson. Lo intentaron con toda la valía del mundo pero Islandia terminó su recorrido. Los nórdicos sorprendieron desde el primer encuentro y estuvieron a un gol de clasificarse. Sin embargo, la solidez croata y su eficacia arriba terminaron por derribar sus esperanzas. Argentina estará en octavos, pero los islandeses se marchan con la cabeza alta de este Mundial.

 

 

Islandia: Halldorsson, Saevarsson, Ingason, Ragnar Sigurdsson (Sigurdarson, m.70), Magnusson; Gunnarsson, Hallfredsson; Johann Gudmundsson, Gylfi Sigurdsson, Bjarnason (Traustason, m.90); y Finnbogason (Albert Gudmundsson, m.85).

Croacia: Lovre Kalinic, Jedvaj, Corluka, Caleta-Car, Pivaric; Pjaca (Lovren, m.70), Modric (Bradaric, m.65), Badelj, Kovacic (Rakitic, m.81), Perisic; y Kramaric.

Goles: 0-1, M.53: Badelj. 1-1, M.76: Gylfi Sigurdsson. 1-2, M.90: Perisic.

Árbitro: Mateu Lahoz (España). Amonestó a Pjaca (m.14), Hallfredsson (m.59), Finnbogason (m.64), Jedvaj (m.83), Saevarsson (m.84)
 

Incidencias: Partido de la tercera jornada del Grupo D del Mundial de Rusia 2018 disputado en el Rostov Arena ante 43.472 espectadores

 

CLASIFICACIÓN GRUPO D TERCERA JORNADA 

Posición	Equipo	Puntos	Jugados	Ganados	Empatados	Perdidos	GF	GC	DF
1	CROACIA	9	3	3	0	0	7	1	+6
2	ARGENTINA	4	3	1	1	1	3	5	-2
3	NIGERIA	3	3	1	0	2	3	4	-1
4	ISLANDIA	1	3	0	1	2	2	5	-3