Excelente debut del ariete argentino, que anotó uno de los goles del triunfo malaguista en La Rosaleda y dió la asistencia del segundo. Los malacitanos firman su mejor inicio liguero.
El Málaga continúa refrendando su sensacional inicio de temporada. Hoy venció al Levante por 3-1 jugando bien y demostrando ser mejor que los granotas. Y sobreponiéndose al empate del cuadro visitante a los 45 segundos de reanudarse el partido. Un triunfo que coloca a los blanquiazules con 10 puntos de 12 posibles, algo impensable después de todo lo ocurrido en el duro mes de agosto en los despachos.
Junto con el juego del equipo hay que
destacar a la afición. Prácticamente llena La Rosaleda en una jornada de
32 grados y 53% de humedad, lo que daba ganas de todo menos de ir al
fútbol. Pero la afición está en comunión con el equipo y ha sido clave
en el apoyo durante el choque.
El inicio lo daba todo a entender.
El Málaga disponía del balón y el Levante a parar a los hombres calves
locales y buscar un contragolpe. Una jugada clave pudo llegar en el
minuto 16 con Saviola, tras jugada individual, derribado en el área.
Velasco Carballo, abroncado en todo el partido, no pitó penalti con el
público abroncándole. Pero el buen juego tuvo premio tras un gran pase
de Isco a Saviola, que controló en el área pequeña el balón y batió por
bajo a Munúa para el 1-0.
Después llegaría otro posible penalti
no señalado por derribo a Sergio Sánchez a los 35´. Los ánimos cada vez
peor contra el árbitro en el campo y así se llegó al descanso tras otro
disparo de Eliseu que desvió el meta levantinista.
Pero el
inicio del segundo tiempo no pudo ser peor para los locales. Una
indecisión de Demichelis que no entró a Michel desde casi el centro del
campo terminó con un chut de este al entrar en el área que representó
el 1-1. 46 segundos de la reanudación y un jarro de agua fría para la
afición en la veraniega tarde que se vivía en Martiricos. Lo acusó el
equipo de Pellegrini pero el Levante no apretó y parecía conformarse con
el punto. Poco a poco se rehizo el Málaga y entre Isco y Joaquín se
echaron el equipo a los hombros. A los 58´un pase de Saviola a Joaquín
permitió que el portuense batiera por bajo a Munúa. Un 2-1 que hacía
justicia a lo desarrollado en el campo.
JIM intentó reaccionar
dando entrada a Pedro Ríos en el campo, pero el control del balón por
parte del Málaga sólo dejaba al rival con la opción de una jugada
aislada o una de estrategia. La defensa local funcionó bien y solo se
vio con más presión cuando se quedó con un hombre menos a los 87´, tras
recibir Sergio Sánchez la segunda tarjeta amarilla por un salto con
Juanfran. El Málaga usó la cabeza y en el tiempo extra remató la faena
con el 3-1. Fue en el minuto 93 con un centro de Duda que remató el
canterano Portillo con bote picado a la red. La alegría y la
confirmación de la victoria.
A destacar el debut en casa de
Saviola, que se fue aclamado por la grada tras ser cambiado en el minuto
68 por Santa Cruz, y la aportación de Isco y Portillo. Pero el conjunto
brillaron todos. El Levante fue a lo suyo y nunca quiso exponer excepto
en los últimos instantes del choque.
Málaga CF: Caballero; Sergio Sánchez, Weligton, Demichelis, Monreal; Isco, Portillo, Camacho, Eliseu (Duda, m. 81); Joaquín (Recio, m. 73) y Saviola (Santa Cruz, m. 68).
Levante UD: Munúa; Chris, Ballesteros, Navarro, Juanfran; El Zhar (Pedro Ríos, m. 62), Diop (Rubén, m. 75), Barkero (Pallardó, m. 65), Juanlu; Míchel y Gekas.
Goles: 1-0, m. 27: Saviola. 1-1, m. 46: Míchel. 2-1, m. 58: Joaquín. 3-1, m. 90: Portillo.
Árbitro: Velasco Carballo (Colegio Madrileño). Expulsó, por doble tarjeta amarilla, al local Sergio Sánchez (m.35 y m. 87) y además amonestó a Camacho (m. 54) y Caballero (m. 79), y a los visitantes Chris (m. 8), Ballesteros (m. 25), Diop (m. 69) y Míchel (m. 86).
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga de Primera División disputado en el estadio de La Rosaleda ante unos 30.000 espectadores.
¿Bálsamo para despegar?
Feghouli y Cissokho aprovecharon sendos errores defensivos de un Celta que mereció más. El Valencia suma su primera victoria pero sigue ofreciendo dudas en su juego en este inicio de temporada.
Llegaban los jugadores del Valencia con la lección bien aprendida, no podían dejar escapar más puntos, había que ganar ya. Sin embargo, necesitaron 45 minutos para poner la teoría en práctica y la presión de ganar maniató al equipo durante la primera parte. El Celta puso el juego y las ocasiones, pero su fragilidad defensiva fue un lastre demasiado pesado. La Liga BBVA no entiende de justicia y dos fallos en defensa hicieron que el conjunto de Paco Herrera se fuera con los mismos puntos con los que llegó a Mestalla.
A los 4
minutos Feghouli puso a su equipo por delante, pero fue todo un
espejismo con lo que vino a continuación. El fútbol lo ponía el Celta,
su centro del campo movía el balón con criterio mientras los chés
corrían detrás de la pelota. Y cuando la posesión era valenciana tanto
Tino Costa como Parejo se quedaban sin ideas, no sabían o no podían
imponer su juego. Resultado, juego lento, balones perdidos, el Celta se
sobrepone al gol inicial y consigue empatar el partido.
Al cuarto de hora de partido llegó el
empate. Saque de esquina para el cuadro vigués, juegan en corto y centro
pasado buscando la espalda de la defensa valencianista. Cissokho no
corta, Diego Alves sale mal y Gustavo Cabral caza el balón para poner el
empate en el marcador. Todo con la ayuda de Kronh-Delhi, que por si
había alguna duda empujó el balón hacia el fondo de las redes cuando
éste superaba la línea de gol.
Lo que quedaba de primera parte siguió la
misma tónica, dominio de un Celta que tocaba y llegaba bien por bandas,
mientras que el Valencia era un quiero y no puedo. Un equipo plano y
sin ideas que a pesar de ello pudo cazar otro gol en un córner aislado.
Víctor Ruiz de volea se encontró con un Javi Varas espectacular que
salvó a su equipo de un castigo inmerecido, como habría sido irse al
descanso por detrás en el marcador. Sin embargo, el Celta dominó pero no
supo convertir esa superioridad en goles y a la postre, les costaría el
partido.
La pitada que dedicó Mestalla a sus
jugadores al final de los primeros 45 minutos pareció activarles de cara
a la segunda mitad. El Valencia salió con un punto más de actitud, que
no de fútbol, y con ello consiguió hacerse con el control del partido.
Más si cabe después de empezar el segundo acto igual que el primero.
Así, a los 4 minutos de la reanudación Cissokho, de cabeza, adelantaba
de nuevo a su equipo en una falta muy mal defendida por la defensa
gallega.
A medida que pasaban los minutos el Celta
perdía frescura en su juego pero siguió metido en el partido. Ningún
equipo dominaba con claridad y hubo ocasiones para ambos. Soldado
perdonó la sentencia en un mano a mano que mandó fuera y el mismo
resultado tuvieron dos buenas oportunidades de Iago Aspas, el jugador
más peligroso del ataque vigués.
Los cambios terminaron de matar el
choque, que se decantaba hacia el lado local. Valdez entraba por Jonás
por parte che mientras que el Celta buscaba el gol del empate con la
entrada de De Lucas. Ninguno de ellos tuvo mucha incidencia en el
desarrollo del juego y a 15 minutos del final Paco Herrera sorprendió
quitando del terreno de juego a su mejor hombre. Iago Aspas dejaba el
partido en un doble cambio con el que el Celta quemaba sus últimos
cartuchos.
Ni Bermejo ni Park inquietaron la meta de
Diego Alves y el Valencia tiró de oficio para amarrar su primera
victoria en esta liga. Tres puntos sufridos que deben servir para
asentar las bases de un equipo que todavía deja muchas dudas y en el que
Mauricio Pellegrino tiene mucho trabajo por delante. Por su parte, el
Celta sigue adaptándose a la categoría y necesita ganar en madurez para
sumar puntos en su objetivo de mantener la categoría, mejorar la
concentración defensiva y el acierto de cara a puerta marcarán su
futuro.
Valencia CF: Diego Alves, Barragán, Rami, Víctor Ruiz, Cissokho, Parejo, Tino Costa, Feghouli, Jonas (Valdez, m.66), Viera (Joao Pereira, m.78) y Soldado (Ricardo Costa, m.90+).
RC Celta de Vigo: Javi Varas, Hugo Mallo, Túñez, Cabral, Lago, Oubiña, Álex López, Augusto (Bermejo, m.72), Natxo Insa (De Lucas, m.62), Krohn-Delhi y Iago Aspas (Park, m.72).
Goles: 1-0, m.4: Feghouli. 1-1, m.15: Cabral. 2-1, m.50: Cissokho.
Árbitro: Paradas Romero (Colegio Andaluz). Amonestó por el Valencia a Parejo, Barragán y Rami y por el Celta a Natxo Insa y Cabral.
Incidencias: Partido disputado en el campo de Mestalla ante 40.000 espectadores. Mestalla estrenó un nuevo césped, que se mantuvo en perfectas condiciones.
La reserva de lujo mantiene al Barça en órbita
El Barcelona gana con autoridad en Getafe y desactiva un partido trampa. Adriano abrió el partido, Messi sentenció con dos goles desde el banquillo y Villa volvió a marcar.Ocho puntos de diferencia sobre el Madrid a tres jornadas del primer Clásico.
No hay Virus que valga para el Barça de Tito Vilanova. Y eso que eran muchas e importantes las bajas que tenían los azulgrana. Además, se presentaron en el Coliseum con un once inicial en el que no estaba Leo Messi, que disfruto de descanso en la primera mitad y que en la segunda salió para dar más ventaja a su equipo.
El FC Barcelona salió, a pesar de todas
sus bajas, muy fiel a su estilo. Tito Vilanova, veía desde el palco como
sus pupilos se hacían con el dominio del esférico y pronto iban a gozar
de ocasiones. La primera de ellas iba a venir de un pase en profundidad
de Cesc para Tello que desviaba fenomenalmente Moyá en el mano a mano.
La segunda iba a ser el reclamo de un penalti. Pedro controlaba dentro
del área y el balón daba en la mano de Miguel Torres, pero el colegiado
del encuentro Teixeria Vitienes no lo consideró así.
Por su parte el Getafe, bien replegado atrás buscaba salir a la
contra. Los azulones con Barrada, Pedro León, Diego Castro y Colunga
metían pases en profundidad, pero ninguno de ellos llegó a generar
demasiado peligro. En el banquillo Luís García se desesperaba y pedía
calma a sus hombre.
Tras unos primeros minutos más intensos, el partido entró en una fase
de calma, esa calma que precede a la tormenta cuando el rival es el
Barcelona. El primer trueno resonó en el Coliseum tras un lanzamiento al
larguero de Thiago. Pocos minutos después iba a ser un disparo de Xavi
el que inquietase a Moyá. Pero el gol acabaría llegando tras una jugada
de Fábregas que se marchaba de dos rivales, se internaba en el área y el
balón, quedó muerto para que Adriano que acompañó a la perfección lo
mandase al fondo de las mallas. Segundo gol del brasileño consecutivo en
liga.
Tras el tanto, la situación del encuentro no cambió. El Getafe seguía
buscando las contras, pero salvo en un balón parado lanzado por Pedro
León no puso en dificultades a Moyá. Mientras los azulgrana seguían
moviendo el balón a placer, y apunto estuvo Thiago, tras una gran
combinación de equipo de poner el segundo en el electrónico. Finalmente
el marcador no se movió y se llegaría al descanso con la mínima ventaja
de un tanto para los visitantes.
En la segunda mitad los azulones salieron con un planteamiento más
valiente. Subieron las líneas y buscaron desde el primer minuto la
portería de Víctor Valdés. Pero aún así las ocasiones más claras serían
del Barça. Tello y Pedrito hacían mucho daño por los costados y
obligaron en varias ocasiones a intervenir de forma espectacular a Moyá.
Aún así la fortuna no terminaba de acompañar a los catalanes. Puyol
se tenía que retirar lesionado y Teixeira Vitienes no señalaba un
penalti de Miguel Torres sobre un Messi que acababa de entrar en el
terreno de juego. En el Getafe, más pundonor que cabeza. Barrada ponía
la calidad, pero no inquietaban a Valdés.
El resultado a mitad del segundo tiempo era incierto, pero dejaría de
serlo en apenas diez minutos. Pedro se internaba por la banda izquierda
y Valera cometería un penalti que transformaría Messi. Y pocos minutos
después una gran jugada combinativa de los hombres de arriba del Barça
acabaría en un centro de Montoya que se encargaría de rematar a placer
Leo Messi.
De esta manera sentenciaba el Barcelona un partido que a priori se
podía considerar complicado por todas las bajas que tenía. El Getafe se
tendría que conformar con el gol del honor de Sarabia, en un disparo que
rebotó en Mascherano y despistó a Valdés.
Por último, también acabaría teniendo su premio David Villa que
aprovecharía un balón largo para adelantarse a la defensa y batir por
bajo a Moya. El Barça con este resultado consigue mantener el liderato y
despejar dudas sobre si le podía afectar el más que temido ‘Virus
Fifa’.
Getafe CF: Moyá, Valera, Lopo, Alexis, Miguel Torres, Xavi Torres, Michel (Lacen, m.68), Abdel Barrada, Diego Castro, Pedro León (Sarabia, m.78) y Adrián Colunga (Álvaro Vázquez, m.60).
FC Barcelona: Víctor Valdés; Montoya, Piqué, Puyol (Mascherano, m.57), Adriano, Busquets, Xavi, Thiago (Messi, m.59), Tello (Villa, m.76), Pedro y Cesc Fábregas.
Goles: 0-1, m.33: Adriano; 0-2, m.74: Messi, de penalti. 0-3, m.78: Messi; 1-3, m.80: Mascherano, en propia puerta. 1-4, m.90: Villa.
Árbitro: Teixeira Vitienes (Comité Cántabro). Mostró tarjeta amarilla a Busquets (m.23), Piqué (m.37), Michel (m.61), Valera (m.62)
Incidencias: Encuentro de la cuarta jornada de Primera División disputado en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe (Madrid) ante unos 10.000 espectadores.
El Madrid pasa de la tristeza a la absoluta depresión
El Real Madrid acabó desquiciado e impotente ante un Sevilla práctico. Trochowsky marcó en un córner en el minuto uno. CR7, voluntarioso pero flojo en general. A ocho del Barcelona con cuatro jornadas disputadas.
El Real Madrid estrenó este sábado en Sevilla su equipación verde, que en noventa minutos adquirió un tono de desesperanza. Y es que el cuadro madridista se mostró impotente y desquiciado ante un Sevilla arrollador en la primera mitad, y que demostró muchísimo oficio en la segunda parte. Todo el que le faltó a los pupilos de José Mourinho, que entraron dormidos, encajaron el gol de Trochowsky nuevamente en un córner al primer minuto, y volvieron a mostrar su lado más vulgar en el Sánchez Pizjuán. Algo a lo que ayudó también José Mourinho acumulando jugadores en ataque infructuosamente como ya hiciera en Getafe. Igual que lo hizo un Cristiano Ronaldo voluntarioso en la primera parte, pero desenchufado en la segunda, flojo en el balance total. Y el nefasto resultado para el madridismo, cuatro puntos de doce posibles en Liga, y nada menos que a ocho del líder, el Barcelona.
Si el Real Madrid llegaba con dudas al
Sánchez Pizjuán, por su mala imagen en Liga y por la zozobra generado
con el ‘caso Ronaldo’ estas dos semanas, el Sevilla se propuso
acrecentarlas desde el primer momento. O más concretamente, logró
acrecentarlas. Porque en los primeros dos minutos hizo más que en las
dos anteriores visitas de los blancos, hoy de verde, al coliseo
hispalense. En el primer minuto, un mal despeje de Casillas a un tiro de
Jesús Navas acabó con el guardameta tirado a los pies de Negredo,
regalando un córner. Jugada a balón parado que resultaría, una vez más,
fatídica para los intereses merengues. Pues Trochowsky aprovechó muy
bien el hueco que le abrieron sus compañeros (y que le dejaron los
rivales) para fusilar a Iker desde el punto de penalti y poner el 1-0 en
el marcador. Tanto mérito del Sevilla como demérito del Real Madrid,
especialmente de un Di María nefasto este sábado.
Pero el gol no
fue algo casual propio de una pájara de los primeros minutos, sino el
reflejo del poderío que impuso el Sevilla. Y es que ambos parecieron
intercambiarse los papeles. El Sevilla exhibió una versión arrolladora,
basada en una presión asfixiante centrada en la marca individual de
Rakitic sobre Xabi Alonso más la fortaleza de Medel y Maduro en la
medular, y saliendo con contraataques tan vertiginosos como dañinos.
Mientras el Real Madrid se mostraba impotente, sin fluidez en ataque,
impreciso, perdido, desbordado, y sobre todo, muy frágil en defensa, con
Pepe teniendo que extinguir todos los incendios que provocaba el
Sevilla.
Los hispalenses le estaban jugando al Madrid con sus
mismas armas, y éstos no sabían por dónde meterle mano al partido,
acostumbrados a estar en el bando contrario. Así las cosas, empezaron a
aparecer los nervios. Higuaín pudo haber sido expulsado en el minuto
cinco por una patada alevosa a Navarro después de que éste entrara con
dureza a Arbeloa. Y Di María también pudo haber visto su segunda tarjeta
amarilla en un encontronazo con Rakitic donde soltó el brazo con clara
intención de atizar al croata sin llegar a darlo. Nadie se lo puso fácil
a Undiano Mallenco, que no tuvo tampoco su día.
Entre medias de
ambas polémicas, Ronaldo probó en dos ocasiones a Palop, de falta
directa y con un tiro tan fuerte como escorado. Higuaín también tuvo su
oportunidad en el único pase en profundidad de Ozil, pero mandó su tiro
por encima del larguero. Y del lado contrario, Casillas también tuvo que
emplearse a tiros de Navas, Cicinho y Trochowsky. Ocasiones que ponían
la emoción del gol a un partido ya de por sí tenso, duro, largo. Y que
el descanso no mermó en absoluto. Pues nada más volver de los
vestuarios, tanto Negredo como Modric pudieron marcar.
Un Modric
que tomó el testigo de Ozil al descanso, pues Mourinho movió el
banquillo poniendo todo su arsenal sobre el campo para intentar dar la
vuelta al electrónico: Modric, también Higuaín por Di María, y en el
minuto 65, Callejón por Arbeloa. Unos movimientos que recordaron mucho a
los realizados en Getafe, donde la propia acumulación de jugadores
arriba auto atascaba al Madrid, y que obtuvieron los mismos frutos. Pues
aunque Sergio Ramos e Higuaín tuvieron el gol muy muy cerca con sendas
ocasiones dentro del área pequeña, lo cierto es que con el paso de los
minutos se fue diluyendo la sensación de peligro y acoso contra la meta
de Palop. Es más, era el Sevilla el que parecía más cerca del gol con
numerosos contraataques frente a la raquítica defensa merengue de tres.
La
imagen de Pepe pidiendo cabeza a todos sus compañeros era sintomática
de la pájara colectiva entre los visitantes a excepción de arranques
esporádicos con acciones individuales. Y el resultado final no podía ser
otro que la victoria sevillista entre mucho juego subterráneo y un
mediocampismo banal del pasar de los minutos. Gran recompensa para el
buen hacer del Sevilla. Muy poco para lo que se espera de un Real Madrid
supuestamente candidato a todo y que no se parece en nada al Real
Madrid de los récords. El examen del Manchester City puede ser
dramático, visto lo visto.
Sevilla FC: Palop; Cicinho, Botía, Spahic, Fernando Navarro; Rakitic (Manu del Moral, m.60), Medel, Maduro, Trochowski (Kondogbia, m.82); Jesús Navas y Negredo (Luna, m.70).
Real Madrid: Casillas; Arbeloa (Callejón, m.65), Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Di María (Modric, m.46), Özil (Benzemá, m.46), Cristiano Ronaldo; e Higuaín.
Gol: 1-0, M.2: Trochowski.
Árbitro: Undiano Mallenco (Comité Navarro). Amonestó a los locales Fernando Navarro (m.04), Rakitic (m.44) y Luna (m.88) y a los visitantes Higuaín (m.04), Di María (m.28) y Pepe (m.40).
Incidencias: Partido disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante algo más de treinta mil espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. Antes del encuentro recibieron un homenaje las olímpicas sevillistas en Londres 2012 Marina Alabau, oro en la clase de vela RS:X, y Lorena Miranda, plata en waterpolo femenino.
El Rey León vuelve a la manada
Justo reparto de puntos en un partido loco, que tuvo seis goles y mucha emoción hasta el final. Al Espanyol le volvieron a remontar un 2-0, y Llorente regresó marcando.
Bonito partido el que se presentaba en la
matinal de la liga BBVA para esta cuarta jornada del campeonato, en el
que se enfrentaban en el incomparable marco de Cornellá, dos de los
históricos de nuestra liga, el Espanyol y el Athletic Club de Bilbao.
El Espanyol llegaba al encuentro después de una dolorosa derrota en
el Ciutat de Valencia, donde los locales le remontaron un 0-2 a favor
con diez hombres. Por su parte el Athletic, desembarcaba en Barcelona
con la ambición de seguir en la buena senda de victorias que iniciaran
con su primera victoria en liga sobre el Valladolid.
Pochettino mantuvo el bloque que jugó frente
al Levante, aunque dando entrada a Héctor Moreno en lugar de Tejera,
ocupando Forlín la posición de doble pivote junto a Víctor Sánchez. Su
homónimo rojiblanco, Marcelo Bielsa, sacó una alineación muy
experimental, con Iturraspe como central, algo que solo generó dudas a
su zaga, y con la novedad de Fernando Llorente que volvía a una
convocatoria.
Los “periquitos” tuvieron un inicio
parecido al del Ciutat de Valencia, saliendo muy mandones y con ganas de
controlar la posesión y la iniciativa del juego desde el primer minuto,
sobre todo contando con la espectacular dirección de Joan Verdú en la
medular. El Athletic solo creaba peligro con rápidas salidas a la contra
de Muniain y con balones parados aislados.
El dominando españolista no tardó en fructificar con una jugada de
toque en el minuto 18, que concluyó con un magnífico pase al espacio de
Verdú y un remate cruzado abajo de Javi López que batió a Iraizoz.
Tras el gol al Athletic se estiró más, creando peligro sobre todo en
jugadas de estrategia, ya que el juego de los vascos no estaba nada
fluido a la hora de salir al ataque. Y con un córner rozó el empate
Aduriz, cuyo cabezazo se estrelló en el larguero. A pesar de la ventaja,
el equipo local quería más y lo buscó con un tiro lejano de Rui Fonte, y
una clarísima ocasión de Longo que la envió fuera cuando ya encaraba la
portería después de regatear a Gorka Iraizoz.
A “los leones” se les acumulaban las malas noticias ya que Iñigo
Pérez se tuvo que retirar lesionado, sustituido por Mikel San José. Y
justo antes del descanso un nuevo desajuste defensivo de Iturraspe,
supuso el 2-0, merced a una muy buena jugada de Longo dentro del área
cuyo tiro detiene Gorka, y Verdú envía el rechace a la red. La defensa
de los rojiblancos fue una auténtica calamidad en el primer tiempo.
Mala primera parte del Athletic que se vio
superado en casi todo momento por el Espanyol, los bilbaínos no tenían
ideas en ataque, tan solo fogonazos de Muniain y De Marcos, y un tiro al
palo de Aduriz. El Espanyol una vez más dirigidos por Verdú, estuvo
mejor plantado en la primera mitad, tocando con criterio, y generando
muchas ocasiones, la gran mayoría aprovechando la debilidad defensiva
del Athletic, como ocurrió en los dos goles.
Bielsa tenía que reaccionar y metió a Ibai Gómez sustituyendo a un
Oscar De Marcos demasiado desaparecido en la primera mitad. Aunque, el
conjunto periquito salió de nuevo mejor pero poco a poco “los leones”
se iban estirando en busca de ocasiones, sobre todo con la frescura que
el canterano, recién incorporado al terreno, Ibai Gómez aportaba al
hasta ahora, planísimo juego de los bilbaínos.
El Athletic seguía sin ideas, y a los 10 minutos acortó distancias
con una de las únicas formas en las que podía, a balón parado, merced a
un centro espectacular de Ibai que Aduriz envió a la red con un cabezazo
inapelable.
Se animó el equipo rojiblanco después del gol, primero con un
cabezazo de Aduriz a córner sacado, otra vez, magistralmente por Ibai,
que Rui Fonte sacó bajo palos, y acto seguido con un remate cruzado del
propio Ibai que detuvo Cristian Álvarez.
El partido se rompió en estos minutos, con
un Athletic cada vez más volcados y el Espanyol muy vertical buscando
la sentencia a la contra. Mediada la segunda mitad, Bielsa puso ya toda
la carne en el asador con la salida al terreno de Fernando Llorente, que
no jugaba con los rojiblancos desde el 2 de agosto en las eliminatorias
previas de la Europa League, después de su polémica petición para salir
traspasado.
Y fue salir el riojano, y como se dice besar el santo, ya que en la
primer bola que tocó cuando corría el minuto 25, recibió dentro del área
y la clavó con un tiro cruzado a la red de Cristian Álvarez. Con el
empate “los leones” se vinieron aún más arriba y tan solo dos minutos
Iraola estuvo a punto de hacer el tercero, pero Álvarez respondió con
un paradón.
El Espanyol veía como se le repetía la historia del partido frente al
Levante, y le empataban de un plumazo después de tener una ventaja a
favor de dos goles. Pochettino, no obstante, no se guardó nada y si
anteriormente ya sacó al terreno a Stuani, ahora, quitó a un lateral
como Capdevilla para meter a un centrocampista de toque como es Tejera. El partido se convirtió en un correcalles y era evidente que
cualquiera podía marcar, “los periquitos” acusaban ansiedad después de
perder su ventaja, y el Athletic estaba volcado, pero su debilidad
defensiva le hacía ser un equipo poco fiable. Y en esas que tras varios
acercamientos más de los bilbaínos, el Espanyol hizo tercero gracias a
un mano a mano de Longo con Gorka, que el italiano mandó a la red
después de un pase genial de Wakaso a la espalda de los centrales
visitantes. El gol no fue del todo feliz, ya que Longo se marchó a
celebrarlo con los aficionados del fondo, y eso le costó la segunda
amarilla y la expulsión.
Pero el Athletic no se rindió ni mucho menos, y más aún con la
expulsión del delantero italiano. Y tan solo dos minutos después Aduriz
anotó el que puede ser el golazo de la jornada, con una volea a la
escuadra a centro de Susaeta, haciendo un justo 3-3 en el marcador. Con
el empate y la inferioridad numérica, el Espanyol era un manojo de
nervios y solo esperaban mantener el punto, después de haberlo tenido
todo a su favor.
Después de todas las emociones de los últimos minutos, el partido
solo nos dejó una ocasión más para cada equipo con un remate alto de
Aduriz, y una falta en la frontal para los blanquiazules que Tejera
estrelló en la barrera.
El 3-3 final hizo justicia al buen partido que ambos equipos nos
brindaron en la mañana de hoy, quizás demasiado marcado por los fallos
defensivos que se produjeron en ambas escuadras, y que se repartieron
los puntos en una segunda parte “loca”.
RCD Espanyol: Cristian Álvarez; Javi López, Raúl Rodríguez, Héctor Moreno, Capdevila (Tejera, min.74); Forlín, Víctor Sánchez, Rui Fonte (Stuani, min.66), Verdú, Wakaso (Víctor Álvarez, min.82) y Longo.
Athletic de Bilbao: Iraizoz; Iturraspe, Gurpegi, Amorebieta; Iraola, Susaeta, Iñigo Pérez (San José, min.41), De Marcos (Ibai, min.46); Muniaín, Isma López (Llorente, min.69) y Aduriz.
Goles: 1-0, min.18: Javi López; 2-0, min.43: Verdú; 2-1, min.55: Aduriz; 2-2, min.72: Llorente; 3-2, min.80: Longo; 3-3, min.81: Aduriz.
Árbitro: Pérez Montero (Comité Andaluz). Expulsó al entrenador del Espanyol Mauricio Pochettino (min.45) y a Longo por doble amonestación. Amonestó a Muniaín (min.25), Raúl Rodríguez (min.28), Iñigo Pérez (min.34), Gurpegi (min.48), Forlín (min.52), Verdú (min.61), San José (min.83) y Amorebieta (min.90+).
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga disputado en el estadio de Cornellá-El Prat ante 23.123 espectadores.
Un punto con perspectivas diferentes
Un tanto del delantaro centro italiano a falta de nueve minutos evita la derrota de los de Anquela. Nelson Oliveira había adelantado a un conformista Deportivo antes del descanso.
Hubo reparto de puntos en Los Cármenes. Granada y Deportivo de la Coruña firmaron un empate (1-1) que no deja contento a ninguno de los dos equipos. El conjunto granadino, por una parte, ha visto como se le escapan dos puntos en casa ante un rival directo por la permanencia mientras que el Depor dejó que el conjunto de Anquela le empatase a 5 minutos del final.
El comienzo del partido tuvo al Granada
como protagonista principal. El conjunto nazarí salió mejor al terreno
de juego que el Deportivo de la Coruña pero, pese a su superioridad en
el centro del campo, se atascaban el los metros finales. Conforme pasaba
el tiempo, los dos equipos se fueron relajando y bajo el ritmo del
partido. El choque cambió radicalmente cuando, debido a un golpe en la
nariz, Riki dejó su puesto a Nelson Oliveira que, en el primer balón que
tocaba, aprovechó una falta de entendimiento entre Toño y Mainz y hacía
el 1-0 en el minuto 40.
En el descanso, Anquela aprovechó para dar salida al recién fichado
Brahimi en detrimento de El-Arabi, desaparecido en combate. El Granada
salió en tromba y, nada mas empezar, se fue arriba en busca del tan
ansiado empate. Sin embargo, el Deportivo se aprovechó de los espacios
que dejaba atrás el conjunto granadino y en el minuto 48 Nelson Oliveira
anotó un gol que, aunque votó dentro de la portería, el árbitro no lo
concedió.
El conjunto de Anquela apretaba, dando entrada a Jaime Romero y
Darwin Machís pero las ocasiones mas claras eran para los de Oltra.
Cuando parecía que los gallegos se llevarían los tres puntos del feudo
granadino, una buena jugada de Jaime fue aprovechada por Floro Flores
que, pese a no estar acertado durante el partido, definió perfectamente
para poner el 1-1 en el minuto 81.
En los últimos minutos, el Granada se vino arriba y fue a por la
victoria descaradamente disponiendo de una clarísima ocasión que Jaime
Romero no logró convertir en el tanto de la victoria. Por tanto, el
resultado final fue un empate a uno que hace justicia al pobre partido
que protagonizaron ambos conjuntos.
Granada CF: Toño; Nyom, Siqueira, Íñigo López, Mainz, Iriney, Mikel Rico (Jaime, m.71), Orellana (Machís, m.78), Torje, El Arabi (Brahimi, m.46) y Floro Flores.
RC Deportivo: Aranzubía; Manuel Pablo, Evaldo, Marchena, Aythami, Juan Domínguez, Abel Aguilar, Bruno Gama (Ayoze, m.72), Camuñas (Bergantiños, m.58), Pizzi y Riki (Oliveira, m.39).
Goles: 0-1, m.40: Oliveira. 1-1, m.80: Floro Flores.
Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño). Mostró tarjeta amarilla a los locales Siqueira, Jaime y Toño y a los visitantes Aythami, Manuel Pablo, Evaldo y Aranzubía.
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga en Primera División disputado en el Nuevo Los Cármenes ante 18.500 espectadores.
Dos puntos de vista para un punto sumado
El conjunto bermellón logró empatar después del tanto inicial de Kike Sola. Los rojillos suman su primer punto en Liga.
A pesar de disponer de una primera clara ocasión al poco de comenzar el partido (Sisi González 6’), diez fueron los minutos que tardaron los de José Luis Mendilíbar en darse cuenta de que presionando un poco más se hacían con el encuentro, y así fue, por lo menos hasta el minuto 20 en el que los pamplonicas disfrutaron de dos nuevas buenas oportunidades (Marc Beltrán y Joseba Llorente en los min. 14 y 19 respectivamente).
La primera aproximación bermellona la
protagonizó Michel Pereira en el 21’, la cual hizo despertar de su
letargo a los de Joaquín Caparrós, que volvían a inquietar al equipo
local mediante un cabezazo de Alejandro Alfaro (24’) al que respondió de
forma espléndida Andrés Fernández.
Se igualaron las fuerzas y en
el minuto 34 llegó la jugada que cambiaría radicalmente los planes de
ambos entrenadores, en el forcejeo por un balón alto Joseba Llorente
agredió a José Carlos Nunes, entendiendo Ayza Gámez que la acción había
sido recíproca, expulsando a ambos jugadores.
Decidió no hacer
ningún cambio José Luis Mendilíbar, ocupando Emiliano Armenteros el
espacio dejado por Joseba Llorente, mientras que Joaquín Caparrós dio
entrada a Pedro Geromel, quien debutaba así con su nuevo equipo y en la
Liga BBVA, colocándose junto a su compatriota Anderson Conceiçao para
formar una pareja de centrales que jugaba junta por primera vez.
Aprovecharon
los rojillos el tiempo de reajuste insular para disponer de dos nuevas
buenas oportunidades a cargo de Álvaro Cejudo en los minutos 43 y 44,
tras lo cual se llegó al descanso.
Sin cambios se reanudó el partido,
apretando el acelerador el equipo anfitrión y siendo muy reservado el
conjunto mallorquín, lo cual no es habitual en los comienzos de las
segundas mitades de los pupilos del utrerano.
La primera ocasión
clara se produjo, como no podía ser de otra forma, en el área visitante,
transcurría el minuto 58 y un lejano disparo de Andrés Cejudo puso en
serios apuros a Dudú Aouate.
El dominio navarro no hacía más que
incrementarse, llegando a poner cerco a la portería balear aunque sin
crear excesivo peligro, hasta que llegó el minuto 69 y un buen centro
del recién entrado Roland Lamah lo cabeceó espléndidamente el también
incorporado Kike Sola, libre de marca entre los dos centrales
bermellones.
El Osasuna había hecho mucho más méritos para
conseguir la victoria, el Mallorca no había sabido gestionar el
encuentro de diez contra diez y había desaparecido sin apenas salir de
su propio campo.
Joaquín Caparrós echó el resto dando entrada a
Arizmendi, otro debutante en el día de hoy, por el lateral Ximo Navarro,
que había cumplido a la perfección. En la primera jugada, un lejano
lanzamiento de falta de Javi Márquez no lo llegó a tocar nadie hasta
estrellarse en el larguero.
Lo que hace un gol, el Mallorca
resurgió de sus cenizas y tras varios saques de esquina, en el minuto
77, llegó el magnífico cabezazo del pichichi bermellón Tomer Hemed, que
llegó a tocar Andrés Fernández, pero que finalmente se alojaría en el
fondo de las mallas rojillas.
Quedó noqueado el equipo osasunista
y comenzó un nuevo encuentro con un claro dominador, el Mallorca, que
dispuso de un par de buenas ocasiones, incluido un larguero de Joao
Víctor de magistral saque de falta.
Sólo el último suspiro volvió
a ser pamplonica pero no había tiempo para más. Salomónica pero más que
discutible decisión de Miguel Ángel Ayza Gámez que cambió el devenir
del encuentro y reparto de puntos que le saben a gloria a los
mallorquinistas y a muy poco a los locales, que merecieron algo más.
Atlético Osasuna: Andrés Fernández; Marc Bertrán, Lolo, Miguel Flaño, Damià; Oier Sanjurjo, Timor; Cejudo (Nino, m.85), Armenteros (Kike Sola, m.57), Sisi (Lamah, m.68); y Llorente.
RCD Mallorca: Aouate; Ximo (Arizmendi, m.73), Nunes, Conceiçao, Antonio López; Pereira, Pina (Joao Víctor, m.66), Márquez, Nsue; Alfaro (Geromel, m.42) y Hemed.
Goles: 1-0, m.69: Kike Sola. 1-1, m.78: Hemed.
Árbitro: Ayza Gámez (Comité Valenciano). Expulsó con roja directa al local Llorente y al visitante Nunes por mutua agresión (m.33). Mostró tarjeta amarilla a Oier (m.73) y Damià (m.86), de Osasuna, y a Geromel (m.52), del Mallorca.
Incidencias: Partido de la cuarta jornada de Liga celebrado en el estadio Reyno de Navarra ante 14.698 espectadores.
La Real salva los muebles a balón parado
Partido tan igualado como aburrido. La Real ganó a balón parado. El Zaragoza insiste en sus errores. Íñigo Martínez y Vela, de penalti, decidieron el triunfo txuri-urdin.
Seis puntos lleva la Real Sociedad en Liga
BBVA y los seis han salido de Anoeta. Dice mucho del carácter de los
donostiarras como locales. Le bastó un certero inicio de segunda parte
para finiquitar un partido bastante soso durante su primera mitad.
Media hora tardó el partido en comenzar de verdad, una jugada de De
la Bella por la parte izquierda con pase final a Griezmann acabó con un
disparo al muñeco del jugador francés. A partir de ahí, la Real
incrementó progresivamente el ritmo hasta el descanso sin ningún fruto.
Hasta entonces, el Real Zaragoza, se había
mostrado como un equipo serio y colocado, tácticamente muy correcto
pero bastante inofensivo, con poca profundidad y nada de chispa en
ataque. Únicamente Postiga puso en dificultades a Bravo en una volea que
despejó fácilmente el portero chileno.
La segunda parte comenzó como acabó la primera, una Real con
intenciones ante unos maños muy serios. Tuvo que ser a balón parado,
como se suelen abrir este tipo de partidos. Carlos Vela lanzó un córner
que cabeceó Íñigo Martínez en la frontal del área pequeña defendida por
Roberto.
Pocos minutos después, el partido se iba a poner más de cara todavía
al equipo de San Sebastián. Paredes cometía penalti sobre Vela, que se
encargaba de transformar él mismo. Prácticamente, el mexicano
finiquitaba el partido.
Tras el segundo gol, Manolo Jiménez movió el banquillo, dio entrada a
Apoño y Aranda y el Zaragoza empezó a empujar. Más por inercia que por
convicción. La Real esperó atrás e intentó correr cuando recuperaba
balones perdidos de los aragoneses pero el marcador no volvió a moverse.
Tres puntos para la Real que certifican la fortaleza del equipo
donostiarra como local y una derrota que debe hacer espabilar a los
hombres de Manolo Jiménez para no volver a las andadas del año pasado.
Real Sociedad: Bravo; Estrada, Mikel González, Iñigo Martínez, De la Bella; Markel, Illarramendi, Zurutuza (Ros, min. 77); Griezmann, Vela (Ifrán, min. 85) y Agirretxe (José Ángel, min. 82).
Real Zaragoza: Roberto; Abraham, Paredes, Álvaro, Sapunaru; Montañés, Zuculini (Apoño, min. 63), Stefan (Álamo, min. 75), José Mari, Edu Oriol (Aranda, min, 63); Hélder Postiga.
Goles: 1-0, min. 55: Iñigo Martínez. 2-0, min. 60: Vela
Árbitro: Iglesias Villanueva (Comité Gallego). Amonestaciones a De la Bella, Bergara, Griezmann, Vela, Abraham y Paredes
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio de Anoeta con una asistencia de 23.281 espectadores.
De Supercampeón a Pupas cuando menos te lo esperas
El Atlético machacó al Rayo y se relajó. Delibasic y Léo acortaron distancias al final con tres goles en los últimos diez minutos.
Comenzaba el partido en el Calderón ofreciendo las dos Supercopas de Europa conquistadas tanto en balonmano como en fútbol por el Atlético de Madrid. Unos prolegómenos que invitaban al espectador a disfrutar con un ambiente festivo que hizo estallar al estadio con el resultado final, sufriendo, eso sí. Con la victoria ante el Rayo, el Atlético firma su tercer partido consecutivo marcando cuatro goles.
Los primeros minutos fueron para el Atlético.
Descarada apuesta ofensiva la del técnico argentino, Simeone, que desde
los primeros instantes puso a prueba a la defensa compuesta por tres
hombres de los franjirrojos mediante un disparo desde la frontal de
Gabi. Por suerte para los de Vallecas, el disparo se topó con los pies
del portero hoy titular, Dani Giménez.
Logró calmar el empuje
inicial el Rayo Vallecano. Culpa de ello tuvieron los cinco
centrocampistas que dispuso Paco Jémez sobre el terreno de juego que se
adueñaron de la posesión, como queriendo dormir a los atléticos que
esperaban en la retaguardia para salir a la contra. Pero ni mucho menos,
el Atlético estaba dormido, al contrario, estaba más vivo que nunca.
Antes de llegar a la media hora de partido, Diego Costa se internó por
banda izquierda para asistir a Mario Suárez que solo tuvo que colocar su
bota en dirección a la meta rayista y el balón supo su destino.
Instantes previos al descanso, Arda Turan
disponía de la ocasión más clara para aumentar la ventaja para los del
Manzanares. Un despiste en el flanco derecho del Rayo fue mal
aprovechado por el turco hasta en dos ocasiones y despejado, en línea de
gol, por los zagueros rayistas. Se llegó así al tiempo de refresco con
un Rayo en carente de pegada y un Atlético picante en la zona de tres
cuartos.
Todo quedó desequilibrado en los primeros cinco minutos
de la segunda parte mediante dos jugadas idénticas que dejaron en
evidencia a la débil defensa franjirroja. Con Falcao en el eje de
creación y Diego Costa en modo asistente los atléticos vieron aumentada
su ventaja con Koke primero y Arda Turan dos minutos más tarde. Por si
fuera poco, el héroe del Atlético convirtió un penalti provocado por
Diego Costa.
No dio su brazo a torcer el Rayo Vallecano, dueño de una
posesión que no acababa de convertirse en ocasiones claras sobre el
arco defendido por Courtois. No así el Atlético, muy incisivo sobre el
área vallecana, incluso con las nuevas incorporaciones del ‘Cebolla’
Rodríguez y Adrián. A falta de diez minutos para la conclusión, el Rayo
volvía a creer en el partido. Un inspirado Delibasic hacía dos goles y
Léo sacaba partido del desconcierto de la zaga rojiblanca para poner al
Calderón a pedir la hora.
Al final, tres puntos que se quedaron
en la ribera del Manzanares. Una victoria sufrida para los atléticos que
acaban la semana con un susto en el cuerpo. El Rayo tuvo su recompensa
en la recta final y acabó soñando con sacar algún punto positivo del
Calderón. Fue solo un sueño.
Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Arda Turan (Adrián, m. 66), Mario (Tiago, m. 62), Gabi, Koke; Diego Costa (Cristian Rodríguez, m. 55) y Falcao.
Rayo Vallecano: Dani Giménez; Tito, Amat, Casado; Trasshorras, Javi Fuego, Adrián (Delibasic, m. 70); Piti (Lass, m. 53), Leo Baptistao, José Carlos; y Nicki Bille (''Chori'' Domínguez, m. 57).
Goles: 1-0, m. 29: Mario Suárez culmina una jugada de Diego Costa. 2-0, m. 48: Koke marca a pase de Diego Costa. 3-0, m. 51: Arda Turan remata un centro raso de Juanfran. 4-0, m. 55: Falcao, de penalti. 4-1, m. 82: Delibasic remate un centro desde la derecha. 4-2, m. 85: Delibasic culmina un envío raso desde la izquierda. 4-3, m. 88: Leo Baptistao aprovecha una serie de rechaces en el área.
Árbitro: Javier Estrada Fernández (Comité Catalán). Amonestó a los visitantes José Carlos (m. 42), Javi Fuego (m. 54) y Adrián González (m. 68).
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga en Primera División, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 45.000 espectadores.
Jaime adelanta las Navidades en Zorrilla
Rubén Castro aprovecha un error garrafal del portero pucelano, que no atajó un centro desde la banda cuando parecía muy fácil.
Valladolid y Betis se han enfrentado en el último partido correspondiente a la 4ª jornada de la Liga. Los verdiblancos consiguieron sacar los tres puntos a última hora cuando parecía que el partido acabaría en empate. Rubén Castro fue el autor del único gol del partido, que condenó al Valladolid a la derrota a pesar de que fue el equipo que buscó más la portería rival, dominando el partido durante mucho tiempo.
La primera mitad comenzó con un dominio claro
del equipo de Miroslav Djukic, y en pocos minutos ya se empezaron a ver
ocasiones. Óscar tuvo una clara que dio en el palo tras parada de
Casto, aunque fue invalidada por fuera de juego, y otra en la que empaló
un perfecto centro de Omar, pero el disparo se marchó por alto y muy
desviado. Al Betis le costó mucho entrar en el partido, aunque poco a
poco lo fue haciendo y le fueron llegando las ocasiones.
La más
clara estuvo en la figura de Salvador Agra, que se internó por el centro
regateando a fuerza de velocidad, pero el último control se le fue
largo y no pudo llegar a definir. Pero no conseguí el conjunto bético
hacerse con un buen dominio del esférico, pues era casi siempre del
equipo local, que lo dominaba con criterio. Al descanso se llegó con 0-0
a pesar de que se podría haber visto algún gol por parte de alguno de
los dos equipos, pero la puntería y la pegada no estaba por parte de
ninguno.
El segundo tiempo fue más tranquilo y parado, sin apenas
peligro, con un Valladolid que movía pero sin incidir y un Betis
perdido con la pelota en los pies. Solo al final fueron cuando empezaron
a verse más cosas. El Valladolid comenzó a insistir conforme se iba
acercando el final, pero se encontraron con un gran Mario, siempre
atento al corte, y con Casto, que se sacó una buena mano al remate de
cabeza de Ebert, que tras la parada dio en el larguero. Fue la ocasión
más clara de la segunda parte sin duda.
Sin embargo, el que
encontró el premio del gol fue el Betis, en una contra llevada
perfectamente por Álex Martínez desde la izquierda. El canterano centró
raso buscando el remate de Rubén Castro, saliendo Jaime para evitarlo.
Pero el portero erró clamorosamente y el balón se le escapó,
aprovechando el delantero canario para recoger la pelota y empujarla al
fondo de la portería. Además, la defensa se había quedado totalmente
despistada pidiendo fuero de juego, que en las imágenes parece que no
son porque Rubén Castro está en línea con el balón.
Debutó Nosa
Igiebor en partido oficial con el Betis, dejando una de las imágenes más
sorprendentes del partido, pues el nigeriano parecía sentirse poco a
gusto en el terreno. Un problema con las botas o con el césped le
impedía correr o incluso andar bien y prueba de ello son las numerosas
caídas que sufrió en el rato que estuvo.
Real Valladolid: Jaime; Rukavina, Rueda, Marc Valiente, Balenziaga; Ebert, Rubio (Sastre, min. 61) Víctor Pérez, Omar (Bueno, min. 83); Óscar y Guerra (Manucho, min. 73).
Real Betis Balompié: Casto; Nelson, Mario, Paulao, Nacho; Beñat, Rubén Pérez; Agra (Alex min. 63), Nono (Nosa, min. 58), Rubén Castro; y Jorge Molina (Pereira, min. 70).
Gol: 0-1: Min. 89, Rubén Castro.
Árbitro: Delgado Ferreiro (Comité Vasco). Amonestó a Paulao, Sastre y Pereira.
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio José Zorrilla. 13.600 espectadores asistieron al encuentro. Antes del encuentro se homenajeó a los deportistas vallisoletanos que han participado en los Juego Paralímpicos de Londres 2012: la nadadora Amaya Alonso, el jugador de baloncesto Dani Rodríguez y la judoca Marta Arce.
CLASIFICACIÓN PROVISIONAL DE LA LIGA BBVA
Posición
|
Equipo
|
Puntos
|
Jugados
|
Ganados
|
Empatados
|
Perdidos
|
GF
|
GC
|
1
| FC BARCELONA |
12
| 4 | 4 | 0 | 0 | 12 | 3 |
2
| MÁLAGA CF |
10
| 4 | 3 | 1 | 0 | 6 | 2 |
3
| RCD MALLORCA |
8
| 4 | 2 | 2 | 0 | 5 | 3 |
4
| SEVILLA FC |
8
| 4 | 2 | 2 | 0 | 4 | 2 |
5
| ATLÉTICO DE MADRID |
7
| 3 | 2 | 1 | 0 | 9 | 4 |
6
| RAYO VALLECANO |
7
| 4 | 2 | 1 | 1 | 6 | 5 |
7
| REAL BETIS BALOMPIÉ |
6
| 3 | 2 | 0 | 1 | 7 | 5 |
8
| RC DEPORTIVO |
6
| 4 | 1 | 3 | 0 | 7 | 5 |
9
| REAL VALLADOLID |
6
| 4 | 2 | 0 | 2 | 3 | 3 |
10
| REAL SOCIEDAD |
6
| 4 | 2 | 0 | 2 | 5 | 7 |
11
| VALENCIA CF |
5
| 4 | 1 | 2 | 1 | 6 | 6 |
12
| REAL MADRID |
4
| 4 | 1 | 1 | 2 | 5 | 4 |
13
| GETAFE CF |
4
| 4 | 1 | 1 | 2 | 5 | 8 |
14
| LEVANTE UD |
4
| 4 | 1 | 1 | 2 | 5 | 8 |
15
| ATHLETIC DE BILBAO |
4
| 4 | 1 | 1 | 2 | 8 | 12 |
16
| RC CELTA DE VIGO |
3
| 4 | 1 | 0 | 3 | 4 | 5 |
17
| REAL ZARAGOZA |
3
| 4 | 1 | 0 | 3 | 2 | 5 |
18
| GRANADA CF |
2
| 4 | 0 | 2 | 2 | 2 | 6 |
19
| RCD ESPANYOL |
1
| 4 | 0 | 1 | 3 | 7 | 10 |
20
| ATLÉTICO OSASUNA |
1
| 4 | 0 | 1 | 3 | 2 | 7 |
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