martes, 18 de septiembre de 2012

ANÁLISIS DE LA JORNADA 4 DE LA LIGA BBVA


Saviola enamora a La Rosaleda

Excelente debut del ariete argentino, que anotó uno de los goles del triunfo malaguista en La Rosaleda y dió la asistencia del segundo. Los malacitanos firman su mejor inicio liguero.

 

 

El Málaga continúa refrendando su sensacional inicio de temporada. Hoy venció al Levante por 3-1 jugando bien y demostrando ser mejor que los granotas. Y sobreponiéndose al empate del cuadro visitante a los 45 segundos de reanudarse el partido. Un triunfo que coloca a los blanquiazules con 10 puntos de 12 posibles, algo impensable después de todo lo ocurrido en el duro mes de agosto en los despachos.

 

Junto con el juego del equipo hay que destacar a la afición. Prácticamente llena La Rosaleda en una jornada de 32 grados y 53% de humedad, lo que daba ganas de todo menos de ir al fútbol. Pero la afición está en comunión con el equipo y ha sido clave en el apoyo durante el choque.

El inicio lo daba todo a entender. El Málaga disponía del balón y el Levante a parar a los hombres calves locales y buscar un contragolpe. Una jugada clave pudo llegar en el minuto 16 con Saviola, tras jugada individual, derribado en el área. Velasco Carballo, abroncado en todo el partido, no pitó penalti con el público abroncándole. Pero el buen juego tuvo premio tras un gran pase de Isco a Saviola, que controló en el área pequeña el balón y batió por bajo a Munúa para el 1-0.

Después llegaría otro posible penalti no señalado por derribo a Sergio Sánchez a los 35´. Los ánimos  cada vez peor contra el árbitro en el campo y así se llegó al descanso tras otro disparo de Eliseu que desvió el meta levantinista.

Pero el inicio del segundo tiempo no pudo ser peor para los locales. Una indecisión de Demichelis que no entró a Michel desde casi el centro del campo terminó con un  chut de este al entrar en el área que representó el 1-1. 46 segundos de la reanudación y un jarro de agua fría para la afición en la veraniega tarde que se vivía en Martiricos. Lo acusó el equipo de Pellegrini pero el Levante no apretó y parecía conformarse con el punto. Poco a poco se rehizo el Málaga y entre Isco y Joaquín se echaron el equipo a los hombros. A los 58´un pase de Saviola a Joaquín permitió que el portuense batiera por bajo a Munúa. Un 2-1 que hacía justicia a lo desarrollado en el campo.

JIM intentó reaccionar dando entrada a Pedro Ríos en el campo, pero el control del balón por parte del Málaga sólo dejaba al rival con la opción de una jugada aislada o una de estrategia. La defensa local funcionó bien y solo se vio con más presión cuando se quedó con un hombre menos a los 87´, tras recibir Sergio Sánchez la segunda tarjeta amarilla por un salto con Juanfran. El Málaga usó la cabeza y en el tiempo extra remató la faena con el 3-1. Fue en el minuto 93 con un centro de Duda que remató el canterano Portillo con bote picado a la red. La alegría y la confirmación de la victoria.

A destacar el debut en casa de Saviola, que se fue aclamado por la grada tras ser cambiado en el minuto 68 por Santa Cruz, y la aportación de Isco y Portillo. Pero el conjunto brillaron todos. El Levante fue a lo suyo y nunca quiso exponer excepto en los últimos instantes del choque. 

 



Málaga CF: Caballero; Sergio Sánchez, Weligton, Demichelis, Monreal; Isco, Portillo, Camacho, Eliseu (Duda, m. 81); Joaquín (Recio, m. 73) y Saviola (Santa Cruz, m. 68).

Levante UD: Munúa; Chris, Ballesteros, Navarro, Juanfran; El Zhar (Pedro Ríos, m. 62), Diop (Rubén, m. 75), Barkero (Pallardó, m. 65), Juanlu; Míchel y Gekas.

Goles: 1-0, m. 27: Saviola. 1-1, m. 46: Míchel. 2-1, m. 58: Joaquín. 3-1, m. 90: Portillo.

Árbitro: Velasco Carballo (Colegio Madrileño). Expulsó, por doble tarjeta amarilla, al local Sergio Sánchez (m.35 y m. 87) y además amonestó a Camacho (m. 54) y Caballero (m. 79), y a los visitantes Chris (m. 8), Ballesteros (m. 25), Diop (m. 69) y Míchel (m. 86).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga de Primera División disputado en el estadio de La Rosaleda ante unos 30.000 espectadores.


¿Bálsamo para despegar?

Feghouli y Cissokho aprovecharon sendos errores defensivos de un Celta que mereció más. El Valencia suma su primera victoria pero sigue ofreciendo dudas en su juego en este inicio de temporada.

 

 

Llegaban los jugadores del Valencia con la lección bien aprendida, no podían dejar escapar más puntos, había que ganar ya. Sin embargo, necesitaron 45 minutos para poner la teoría en práctica y la presión de ganar maniató al equipo durante la primera parte. El Celta puso el juego y las ocasiones, pero su fragilidad defensiva fue un lastre demasiado pesado. La Liga BBVA no entiende de justicia y dos fallos en defensa hicieron que el conjunto de Paco Herrera se fuera con los mismos puntos con los que llegó a Mestalla.

 

A los 4 minutos Feghouli puso a su equipo por delante, pero fue todo un espejismo con lo que vino a continuación. El fútbol lo ponía el Celta, su centro del campo movía el balón con criterio mientras los chés corrían detrás de la pelota. Y cuando la posesión era valenciana tanto Tino Costa como Parejo se quedaban sin ideas, no sabían o no podían imponer su juego. Resultado, juego lento, balones perdidos, el Celta se sobrepone al gol inicial y consigue empatar el partido.

Al cuarto de hora de partido llegó el empate. Saque de esquina para el cuadro vigués, juegan en corto y centro pasado buscando la espalda de la defensa valencianista. Cissokho no corta, Diego Alves sale mal y Gustavo Cabral caza el balón para poner el empate en el marcador. Todo con la ayuda de Kronh-Delhi, que por si había alguna duda empujó el balón hacia el fondo de las redes cuando éste superaba la línea de gol.

Lo que quedaba de primera parte siguió la misma tónica, dominio de un Celta que tocaba y llegaba bien por bandas, mientras que el Valencia era un quiero y no puedo. Un equipo plano y sin ideas que a pesar de ello pudo cazar otro gol en un córner aislado. Víctor Ruiz de volea se encontró con un Javi Varas espectacular que salvó a su equipo de un castigo inmerecido, como habría sido irse al descanso por detrás en el marcador. Sin embargo, el Celta dominó pero no supo convertir esa superioridad en goles y a la postre, les costaría el partido.

La pitada que dedicó Mestalla a sus jugadores al final de los primeros 45 minutos pareció activarles de cara a la segunda mitad. El Valencia salió con un punto más de actitud, que no de fútbol, y con ello consiguió hacerse con el control del partido. Más si cabe después de empezar el segundo acto igual que el primero. Así, a los 4 minutos de la reanudación Cissokho, de cabeza, adelantaba de nuevo a su equipo en una falta muy mal defendida por la defensa gallega.

A medida que pasaban los minutos el Celta perdía frescura en su juego pero siguió metido en el partido. Ningún equipo dominaba con claridad y hubo ocasiones para ambos. Soldado perdonó la sentencia en un mano a mano que mandó fuera y el mismo resultado tuvieron dos buenas oportunidades de Iago Aspas, el jugador más peligroso del ataque vigués.

Los cambios terminaron de matar el choque, que se decantaba hacia el lado local. Valdez entraba por Jonás por parte che mientras que el Celta buscaba el gol del empate con la entrada de De Lucas. Ninguno de ellos tuvo mucha incidencia en el desarrollo del juego y a 15 minutos del final Paco Herrera sorprendió quitando del terreno de juego a su mejor hombre. Iago Aspas dejaba el partido en un doble cambio con el que el Celta quemaba sus últimos cartuchos.

Ni Bermejo ni Park inquietaron la meta de Diego Alves y el Valencia tiró de oficio para amarrar su primera victoria en esta liga. Tres puntos sufridos que deben servir para asentar las bases de un equipo que todavía deja muchas dudas y en el que Mauricio Pellegrino tiene mucho trabajo por delante. Por su parte, el Celta sigue adaptándose a la categoría y necesita ganar en madurez para sumar puntos en su objetivo de mantener la categoría, mejorar la concentración defensiva y el acierto de cara a puerta marcarán su futuro.



Valencia CF: Diego Alves, Barragán, Rami, Víctor Ruiz, Cissokho, Parejo, Tino Costa, Feghouli, Jonas (Valdez, m.66), Viera (Joao Pereira, m.78) y Soldado (Ricardo Costa, m.90+).

RC Celta de Vigo: Javi Varas, Hugo Mallo, Túñez, Cabral, Lago, Oubiña, Álex López, Augusto (Bermejo, m.72), Natxo Insa (De Lucas, m.62), Krohn-Delhi y Iago Aspas (Park, m.72).

Goles: 1-0, m.4: Feghouli. 1-1, m.15: Cabral. 2-1, m.50: Cissokho.

Árbitro: Paradas Romero (Colegio Andaluz). Amonestó por el Valencia a Parejo, Barragán y Rami y por el Celta a Natxo Insa y Cabral.

Incidencias: Partido disputado en el campo de Mestalla ante 40.000 espectadores. Mestalla estrenó un nuevo césped, que se mantuvo en perfectas condiciones.


La reserva de lujo mantiene al Barça en órbita

El Barcelona gana con autoridad en Getafe y desactiva un partido trampa. Adriano abrió el partido, Messi sentenció con dos goles desde el banquillo y Villa volvió a marcar.Ocho puntos de diferencia sobre el Madrid a tres jornadas del primer Clásico.

 

 

No hay Virus que valga para el Barça de Tito Vilanova. Y eso que eran muchas e importantes las bajas que tenían los azulgrana. Además, se presentaron en el Coliseum con un once inicial en el que no estaba Leo Messi, que disfruto de descanso en la primera mitad y que en la segunda salió para dar más ventaja a su equipo.

 

El FC Barcelona salió, a pesar de todas sus bajas, muy fiel a su estilo. Tito Vilanova, veía desde el palco como sus pupilos se hacían con el dominio del esférico y pronto iban a gozar de ocasiones. La primera de ellas iba a venir de un pase en profundidad de Cesc para Tello que desviaba fenomenalmente Moyá en el mano a mano. La segunda iba a ser el reclamo de un penalti. Pedro controlaba dentro del área y el balón daba en la mano de Miguel Torres, pero el colegiado del encuentro Teixeria Vitienes no lo consideró así.

Por su parte el Getafe, bien replegado atrás buscaba salir a la contra. Los azulones con Barrada, Pedro León, Diego Castro y Colunga metían pases en profundidad, pero ninguno de ellos llegó a generar demasiado peligro. En el banquillo Luís García se desesperaba y pedía calma a sus hombre.

Tras unos primeros minutos más intensos, el partido entró en una fase de calma, esa calma que precede a la tormenta cuando el rival es el Barcelona. El primer trueno resonó en el Coliseum tras un lanzamiento al larguero de Thiago. Pocos minutos después iba a ser un disparo de Xavi el que inquietase a Moyá. Pero el gol acabaría llegando tras una jugada de Fábregas que se marchaba de dos rivales, se internaba en el área y el balón, quedó muerto para que Adriano que acompañó a la perfección lo mandase al fondo de las mallas. Segundo gol del brasileño consecutivo en liga.

Tras el tanto, la situación del encuentro no cambió. El Getafe seguía buscando las contras, pero salvo en un balón parado lanzado por Pedro León no puso en dificultades a Moyá. Mientras los azulgrana seguían moviendo el balón a placer, y apunto estuvo Thiago, tras una gran combinación de equipo de poner el segundo en el electrónico. Finalmente el marcador no se movió y se llegaría al descanso con la mínima ventaja de un tanto para los visitantes.

En la segunda mitad los azulones salieron con un planteamiento más valiente. Subieron las líneas y buscaron desde el primer minuto la portería de Víctor Valdés. Pero aún así las ocasiones más claras serían del Barça. Tello y Pedrito hacían mucho daño por los costados y obligaron en varias ocasiones a intervenir de forma espectacular a Moyá.

Aún así la fortuna no terminaba de acompañar a los catalanes. Puyol se tenía que retirar lesionado y Teixeira Vitienes no señalaba un penalti de Miguel Torres sobre un Messi que acababa de entrar en el terreno de juego. En el Getafe, más pundonor que cabeza. Barrada ponía la calidad, pero no inquietaban a Valdés.

El resultado a mitad del segundo tiempo era incierto, pero dejaría de serlo en apenas diez minutos. Pedro se internaba por la banda izquierda y Valera cometería un penalti que transformaría Messi. Y pocos minutos después una gran jugada combinativa de los hombres de arriba del Barça acabaría en un centro de Montoya que se encargaría de rematar a placer Leo Messi.

De esta manera sentenciaba el Barcelona un partido que a priori se podía considerar complicado por todas las bajas que tenía. El Getafe se tendría que conformar con el gol del honor de Sarabia, en un disparo que rebotó en Mascherano y despistó a Valdés.

Por último, también acabaría teniendo su premio David Villa que aprovecharía un balón largo para adelantarse a la defensa y batir por bajo a Moya. El Barça con este resultado consigue mantener el liderato y despejar dudas sobre si le podía afectar el más que temido ‘Virus Fifa’.




Getafe CF: Moyá, Valera, Lopo, Alexis, Miguel Torres, Xavi Torres, Michel (Lacen, m.68), Abdel Barrada, Diego Castro, Pedro León (Sarabia, m.78) y Adrián Colunga (Álvaro Vázquez, m.60).

FC Barcelona: Víctor Valdés; Montoya, Piqué, Puyol (Mascherano, m.57), Adriano, Busquets, Xavi, Thiago (Messi, m.59), Tello (Villa, m.76), Pedro y Cesc Fábregas.

Goles: 0-1, m.33: Adriano; 0-2, m.74: Messi, de penalti. 0-3, m.78: Messi; 1-3, m.80: Mascherano, en propia puerta. 1-4, m.90: Villa.

Árbitro: Teixeira Vitienes (Comité Cántabro). Mostró tarjeta amarilla a Busquets (m.23), Piqué (m.37), Michel (m.61), Valera (m.62)

Incidencias: Encuentro de la cuarta jornada de Primera División disputado en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe (Madrid) ante unos 10.000 espectadores.


El Madrid pasa de la tristeza a la absoluta depresión

El Real Madrid acabó desquiciado e impotente ante un Sevilla práctico. Trochowsky marcó en un córner en el minuto uno. CR7, voluntarioso pero flojo en general. A ocho del Barcelona con cuatro jornadas disputadas.

 

 

El Real Madrid estrenó este sábado en Sevilla su equipación verde, que en noventa minutos adquirió un tono de desesperanza. Y es que el cuadro madridista se mostró impotente y desquiciado ante un Sevilla arrollador en la primera mitad, y que demostró muchísimo oficio en la segunda parte. Todo el que le faltó a los pupilos de José Mourinho, que entraron dormidos, encajaron el gol de Trochowsky nuevamente en un córner al primer minuto, y volvieron a mostrar su lado más vulgar en el Sánchez Pizjuán. Algo a lo que ayudó también José Mourinho acumulando jugadores en ataque infructuosamente como ya hiciera en Getafe. Igual que lo hizo un Cristiano Ronaldo voluntarioso en la primera parte, pero desenchufado en la segunda, flojo en el balance total. Y el nefasto resultado para el madridismo, cuatro puntos de doce posibles en Liga, y nada menos que a ocho del líder, el Barcelona.

 

Si el Real Madrid llegaba con dudas al Sánchez Pizjuán, por su mala imagen en Liga y por la zozobra generado con el ‘caso Ronaldo’ estas dos semanas, el Sevilla se propuso acrecentarlas desde el primer momento. O más concretamente, logró acrecentarlas. Porque en los primeros dos minutos hizo más que en las dos anteriores visitas de los blancos, hoy de verde, al coliseo hispalense. En el primer minuto, un mal despeje de Casillas a un tiro de Jesús Navas acabó con el guardameta tirado a los pies de Negredo, regalando un córner. Jugada a balón parado que resultaría, una vez más, fatídica para los intereses merengues. Pues Trochowsky aprovechó muy bien el hueco que le abrieron sus compañeros (y que le dejaron los rivales) para fusilar a Iker desde el punto de penalti y poner el 1-0 en el marcador. Tanto mérito del Sevilla como demérito del Real Madrid, especialmente de un Di María nefasto este sábado.

Pero el gol no fue algo casual propio de una pájara de los primeros minutos, sino el reflejo del poderío que impuso el Sevilla. Y es que ambos parecieron intercambiarse los papeles. El Sevilla exhibió una versión arrolladora, basada en una presión asfixiante centrada en la marca individual de Rakitic sobre Xabi Alonso más la fortaleza de Medel y Maduro en la medular, y saliendo con contraataques tan vertiginosos como dañinos. Mientras el Real Madrid se mostraba impotente, sin fluidez en ataque, impreciso, perdido, desbordado, y sobre todo, muy frágil en defensa, con Pepe teniendo que extinguir todos los incendios que provocaba el Sevilla.

Los hispalenses le estaban jugando al Madrid con sus mismas armas, y éstos no sabían por dónde meterle mano al partido, acostumbrados a estar en el bando contrario. Así las cosas, empezaron a aparecer los nervios. Higuaín pudo haber sido expulsado en el minuto cinco por una patada alevosa a Navarro después de que éste entrara con dureza a Arbeloa. Y Di María también pudo haber visto su segunda tarjeta amarilla en un encontronazo con Rakitic donde soltó el brazo con clara intención de atizar al croata sin llegar a darlo. Nadie se lo puso fácil a Undiano Mallenco, que no tuvo tampoco su día.

Entre medias de ambas polémicas, Ronaldo probó en dos ocasiones a Palop, de falta directa y con un tiro tan fuerte como escorado. Higuaín también tuvo su oportunidad en el único pase en profundidad de Ozil, pero mandó su tiro por encima del larguero. Y del lado contrario, Casillas también tuvo que emplearse a tiros de Navas, Cicinho y Trochowsky. Ocasiones que ponían la emoción del gol a un partido ya de por sí tenso, duro, largo. Y que el descanso no mermó en absoluto. Pues nada más volver de los vestuarios, tanto Negredo como Modric pudieron marcar.

Un Modric que tomó el testigo de Ozil al descanso, pues Mourinho movió el banquillo poniendo todo su arsenal sobre el campo para intentar dar la vuelta al electrónico: Modric, también Higuaín por Di María, y en el minuto 65, Callejón por Arbeloa. Unos movimientos que recordaron mucho a los realizados en Getafe, donde la propia acumulación de jugadores arriba auto atascaba al Madrid, y que obtuvieron los mismos frutos. Pues aunque Sergio Ramos e Higuaín tuvieron el gol muy muy cerca con sendas ocasiones dentro del área pequeña, lo cierto es que con el paso de los minutos se fue diluyendo la sensación de peligro y acoso contra la meta de Palop. Es más, era el Sevilla el que parecía más cerca del gol con numerosos contraataques frente a la raquítica defensa merengue de tres.

La imagen de Pepe pidiendo cabeza a todos sus compañeros era sintomática de la pájara colectiva entre los visitantes a excepción de arranques esporádicos con acciones individuales. Y el resultado final no podía ser otro que la victoria sevillista entre mucho juego subterráneo y un mediocampismo banal del pasar de los minutos. Gran recompensa para el buen hacer del Sevilla. Muy poco para lo que se espera de un Real Madrid supuestamente candidato a todo y que no se parece en nada al Real Madrid de los récords. El examen del Manchester City puede ser dramático, visto lo visto.

 



Sevilla FC: Palop; Cicinho, Botía, Spahic, Fernando Navarro; Rakitic (Manu del Moral, m.60), Medel, Maduro, Trochowski (Kondogbia, m.82); Jesús Navas y Negredo (Luna, m.70).

Real Madrid: Casillas; Arbeloa (Callejón, m.65), Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Di María (Modric, m.46), Özil (Benzemá, m.46), Cristiano Ronaldo; e Higuaín.

Gol: 1-0, M.2: Trochowski.

Árbitro: Undiano Mallenco (Comité Navarro). Amonestó a los locales Fernando Navarro (m.04), Rakitic (m.44) y Luna (m.88) y a los visitantes Higuaín (m.04), Di María (m.28) y Pepe (m.40).

Incidencias: Partido disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante algo más de treinta mil espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. Antes del encuentro recibieron un homenaje las olímpicas sevillistas en Londres 2012 Marina Alabau, oro en la clase de vela RS:X, y Lorena Miranda, plata en waterpolo femenino.


El Rey León vuelve a la manada

Justo reparto de puntos en un partido loco, que tuvo seis goles y mucha emoción hasta el final. Al Espanyol le volvieron a remontar un 2-0, y Llorente regresó marcando. 

 

 

Bonito partido el que se presentaba en la matinal de la liga BBVA para esta cuarta jornada del campeonato, en el que se enfrentaban en el incomparable marco de Cornellá, dos de los históricos de nuestra liga, el Espanyol y el Athletic Club de Bilbao.

El Espanyol llegaba al encuentro después de una dolorosa derrota en el Ciutat de Valencia, donde los locales le remontaron un 0-2 a favor con diez hombres. Por su parte el Athletic, desembarcaba en Barcelona con la ambición de seguir en la buena senda de victorias que iniciaran con su primera victoria en liga sobre el Valladolid.

Pochettino mantuvo el bloque que jugó frente al Levante, aunque dando entrada a Héctor Moreno en lugar de Tejera, ocupando Forlín la posición de doble pivote junto a Víctor Sánchez. Su homónimo rojiblanco, Marcelo Bielsa, sacó una alineación muy experimental, con Iturraspe como central, algo que solo generó dudas a su zaga, y con la novedad de Fernando Llorente que volvía a una convocatoria.

Los “periquitos” tuvieron un inicio parecido al del Ciutat de Valencia, saliendo muy mandones y con ganas de controlar la posesión y la iniciativa del juego desde el primer minuto, sobre todo contando con la espectacular dirección de Joan Verdú en la medular. El Athletic solo creaba peligro con rápidas salidas a la contra de Muniain y con balones parados aislados.

El dominando españolista no tardó en fructificar con una jugada de toque en el minuto 18, que concluyó con un magnífico pase al espacio de Verdú  y un remate cruzado abajo de Javi López que batió a Iraizoz.

Tras el gol al Athletic se estiró más, creando peligro sobre todo en jugadas de estrategia, ya que el juego de los vascos no estaba nada fluido a la hora de salir al ataque. Y con un córner rozó el empate Aduriz, cuyo cabezazo se estrelló en el larguero. A pesar de la ventaja, el equipo local quería más y lo buscó con un tiro lejano de Rui Fonte, y una clarísima ocasión de Longo que la envió fuera cuando ya encaraba la portería después de regatear a Gorka Iraizoz.

A “los leones” se les acumulaban las malas noticias ya que Iñigo Pérez se tuvo que retirar lesionado, sustituido por Mikel San José. Y justo antes del descanso un nuevo desajuste defensivo de Iturraspe,  supuso el 2-0, merced a una muy buena jugada de Longo dentro del área cuyo tiro detiene Gorka, y Verdú envía el rechace a la red. La defensa de los rojiblancos fue una auténtica calamidad en el primer tiempo.

Mala primera parte del Athletic que se vio superado en casi todo momento por el Espanyol, los bilbaínos no tenían ideas en ataque, tan solo fogonazos de Muniain y De Marcos, y un tiro al palo de Aduriz. El Espanyol una vez más dirigidos por Verdú, estuvo mejor plantado en la primera mitad, tocando con criterio, y generando muchas ocasiones, la gran mayoría aprovechando la debilidad defensiva del Athletic, como ocurrió en los dos goles.

Bielsa tenía que reaccionar y metió a Ibai Gómez sustituyendo a un Oscar De Marcos demasiado desaparecido en la primera mitad. Aunque, el conjunto periquito salió de nuevo mejor  pero poco a poco “los leones” se iban estirando en busca de ocasiones, sobre todo con la frescura que el canterano, recién incorporado al terreno, Ibai Gómez aportaba al hasta ahora, planísimo juego de los bilbaínos.

El Athletic seguía sin ideas, y a los 10 minutos acortó distancias con una de las únicas formas en las que podía, a balón parado, merced a un centro espectacular de Ibai que Aduriz envió a la red con un cabezazo inapelable.

Se animó el equipo rojiblanco después del gol, primero con un cabezazo de Aduriz a córner sacado, otra vez, magistralmente por Ibai, que Rui Fonte sacó bajo palos, y acto seguido con un remate cruzado del propio Ibai que detuvo Cristian Álvarez.

El partido se rompió en estos minutos, con un Athletic cada vez más volcados y el Espanyol muy vertical buscando la sentencia a la contra. Mediada la segunda mitad, Bielsa puso ya toda la carne en el asador con la salida al terreno de Fernando Llorente, que no jugaba con los rojiblancos desde el 2 de agosto en las eliminatorias previas de la Europa League, después de su polémica petición para salir traspasado.

Y fue salir el riojano, y como se dice besar el santo, ya que en la primer bola que tocó cuando corría el minuto 25, recibió dentro del área y la clavó con un tiro cruzado a la red de Cristian Álvarez. Con el empate “los leones” se vinieron aún más arriba y tan solo dos minutos  Iraola estuvo a punto de hacer el tercero, pero Álvarez respondió con un paradón.

El Espanyol veía como se le repetía la historia del partido frente al Levante, y le empataban de un plumazo después de tener una ventaja a favor de dos goles. Pochettino, no obstante, no se guardó nada y si anteriormente ya sacó al terreno a Stuani, ahora, quitó a un lateral como Capdevilla para meter a un centrocampista de toque como es Tejera.
El partido se convirtió en un correcalles y era evidente que cualquiera podía marcar,  “los periquitos” acusaban ansiedad después de perder su ventaja, y el Athletic estaba volcado, pero su debilidad defensiva le hacía ser un equipo poco fiable. Y en esas que tras varios acercamientos más de los bilbaínos, el Espanyol hizo tercero gracias a un mano a mano de Longo con Gorka, que el italiano mandó a la red después de un pase genial de Wakaso a la espalda de los centrales visitantes.  El gol no fue del todo feliz, ya que Longo se marchó a celebrarlo con los aficionados del fondo, y eso le costó la segunda amarilla y la expulsión.

Pero el Athletic no se rindió ni mucho menos, y más aún con la expulsión del delantero italiano. Y tan solo dos minutos después Aduriz anotó el que puede ser el golazo de la jornada, con una volea a la escuadra a centro de Susaeta, haciendo un justo 3-3 en el marcador.  Con el empate y la inferioridad numérica, el Espanyol era un manojo de nervios y solo esperaban mantener el punto, después de haberlo tenido todo a su favor.

Después de todas las emociones de los últimos minutos, el partido solo nos dejó una ocasión más para cada equipo con un remate alto de Aduriz, y una falta en la frontal para los blanquiazules que Tejera estrelló en la barrera.

El 3-3 final hizo justicia al buen partido que ambos equipos nos brindaron en la mañana de hoy, quizás demasiado marcado por los fallos defensivos que se produjeron en ambas escuadras, y que se repartieron los puntos en una segunda parte “loca”.

 



RCD Espanyol: Cristian Álvarez; Javi López, Raúl Rodríguez, Héctor Moreno, Capdevila (Tejera, min.74); Forlín, Víctor Sánchez, Rui Fonte (Stuani, min.66), Verdú, Wakaso (Víctor Álvarez, min.82) y Longo.

Athletic de Bilbao: Iraizoz; Iturraspe, Gurpegi, Amorebieta; Iraola, Susaeta, Iñigo Pérez (San José, min.41), De Marcos (Ibai, min.46); Muniaín, Isma López (Llorente, min.69) y Aduriz.

Goles: 1-0, min.18: Javi López; 2-0, min.43: Verdú; 2-1, min.55: Aduriz; 2-2, min.72: Llorente; 3-2, min.80: Longo; 3-3, min.81: Aduriz.

Árbitro: Pérez Montero (Comité Andaluz). Expulsó al entrenador del Espanyol Mauricio Pochettino (min.45) y a Longo por doble amonestación. Amonestó a Muniaín (min.25), Raúl Rodríguez (min.28), Iñigo Pérez (min.34), Gurpegi (min.48), Forlín (min.52), Verdú (min.61), San José (min.83) y Amorebieta (min.90+).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga disputado en el estadio de Cornellá-El Prat ante 23.123 espectadores.


Un punto con perspectivas diferentes

Un tanto del delantaro centro italiano a falta de nueve minutos evita la derrota de los de Anquela. Nelson Oliveira había adelantado a un conformista Deportivo antes del descanso.

 

 

Hubo reparto de puntos en Los Cármenes. Granada y Deportivo de la Coruña firmaron un empate (1-1) que no deja contento a ninguno de los dos equipos. El conjunto granadino, por una parte, ha visto como se le escapan dos puntos en casa ante un rival directo por la permanencia mientras que el Depor dejó que el conjunto de Anquela le empatase a 5 minutos del final.

 

El comienzo del partido tuvo al Granada como protagonista principal. El conjunto nazarí salió mejor al terreno de juego que el Deportivo de la Coruña pero, pese a su superioridad en el centro del campo, se atascaban el los metros finales. Conforme pasaba el tiempo, los dos equipos se fueron relajando y bajo el ritmo del partido. El choque cambió radicalmente cuando, debido a un golpe en la nariz, Riki dejó su puesto a Nelson Oliveira que, en el primer balón que tocaba, aprovechó una falta de entendimiento entre Toño y Mainz y hacía el 1-0 en el minuto 40.

En el descanso, Anquela aprovechó para dar salida al recién fichado Brahimi en detrimento de El-Arabi, desaparecido en combate. El Granada salió en tromba y, nada mas empezar, se fue arriba en busca del tan ansiado empate. Sin embargo, el Deportivo se aprovechó de los espacios que dejaba atrás el conjunto granadino y en el minuto 48 Nelson Oliveira anotó un gol que, aunque votó dentro de la portería, el árbitro no lo concedió.

El conjunto de Anquela apretaba, dando entrada a Jaime Romero y Darwin Machís pero las ocasiones mas claras eran para los de Oltra. Cuando parecía que los gallegos se llevarían los tres puntos del feudo granadino, una buena jugada de Jaime fue aprovechada por Floro Flores que, pese a no estar acertado durante el partido, definió perfectamente para poner el 1-1 en el minuto 81.

En los últimos minutos, el Granada se vino arriba y fue a por la victoria descaradamente disponiendo de una clarísima ocasión que Jaime Romero no logró convertir en el tanto de la victoria. Por tanto, el resultado final fue un empate a uno que hace justicia al pobre partido que protagonizaron ambos conjuntos.



Granada CF: Toño; Nyom, Siqueira, Íñigo López, Mainz, Iriney, Mikel Rico (Jaime, m.71), Orellana (Machís, m.78), Torje, El Arabi (Brahimi, m.46) y Floro Flores.

RC Deportivo: Aranzubía; Manuel Pablo, Evaldo, Marchena, Aythami, Juan Domínguez, Abel Aguilar, Bruno Gama (Ayoze, m.72), Camuñas (Bergantiños, m.58), Pizzi y Riki (Oliveira, m.39).

Goles: 0-1, m.40: Oliveira. 1-1, m.80: Floro Flores.

Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño). Mostró tarjeta amarilla a los locales Siqueira, Jaime y Toño y a los visitantes Aythami, Manuel Pablo, Evaldo y Aranzubía.

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga en Primera División disputado en el Nuevo Los Cármenes ante 18.500 espectadores.


Dos puntos de vista para un punto sumado

El conjunto bermellón logró empatar después del tanto inicial de Kike Sola. Los rojillos suman su primer punto en Liga.

 

 

A pesar de disponer de una primera clara ocasión al poco de comenzar el partido (Sisi González 6’), diez fueron los minutos que tardaron los de José Luis Mendilíbar en darse cuenta de que presionando un poco más se hacían con el encuentro, y así fue, por lo menos hasta el minuto 20 en el que los pamplonicas disfrutaron de dos nuevas buenas oportunidades (Marc Beltrán y Joseba Llorente en los min. 14 y 19 respectivamente).

 

La primera aproximación bermellona la protagonizó Michel Pereira en el 21’, la cual hizo despertar de su letargo a los de Joaquín Caparrós, que volvían a inquietar al equipo local mediante un cabezazo de Alejandro Alfaro (24’) al que respondió de forma espléndida Andrés Fernández.

Se igualaron las fuerzas y en el minuto 34 llegó la jugada que cambiaría radicalmente los planes de ambos entrenadores, en el forcejeo por un balón alto Joseba Llorente agredió a José Carlos Nunes, entendiendo Ayza Gámez que la acción había sido recíproca, expulsando a ambos jugadores.

Decidió no hacer ningún cambio José Luis Mendilíbar, ocupando Emiliano Armenteros el espacio dejado por Joseba Llorente, mientras que Joaquín Caparrós dio entrada a Pedro Geromel, quien debutaba así con su nuevo equipo y en la Liga BBVA, colocándose junto a su compatriota Anderson Conceiçao para formar una pareja de centrales que jugaba junta por primera vez.

Aprovecharon los rojillos el tiempo de reajuste insular para disponer de dos nuevas buenas oportunidades a cargo de Álvaro Cejudo en los minutos 43 y 44, tras lo cual se llegó al descanso.


Sin cambios se reanudó el partido, apretando el acelerador el equipo anfitrión y siendo muy reservado el conjunto mallorquín, lo cual no es habitual en los comienzos de las segundas mitades de los pupilos del utrerano.

La primera ocasión clara se produjo, como no podía ser de otra forma, en el área visitante, transcurría el minuto 58 y un lejano disparo de Andrés Cejudo puso en serios apuros a Dudú Aouate.

El dominio navarro no hacía más que incrementarse, llegando a poner cerco a la portería balear aunque sin crear excesivo peligro, hasta que llegó el minuto 69 y un buen centro del recién entrado Roland Lamah lo cabeceó espléndidamente el también incorporado Kike Sola, libre de marca entre los dos centrales bermellones.

El Osasuna había hecho mucho más méritos para conseguir la victoria, el Mallorca no había sabido gestionar el encuentro de diez contra diez y había desaparecido sin apenas salir de su propio campo.

Joaquín Caparrós echó el resto dando entrada a Arizmendi, otro debutante en el día de hoy, por el lateral Ximo Navarro, que había cumplido a la perfección. En la primera jugada, un lejano lanzamiento de falta de Javi Márquez no lo llegó a tocar nadie hasta estrellarse en el larguero.

Lo que hace un gol, el Mallorca resurgió de sus cenizas y tras varios saques de esquina, en el minuto 77, llegó el magnífico cabezazo del pichichi bermellón Tomer Hemed, que llegó a tocar Andrés Fernández, pero que finalmente se alojaría en el fondo de las mallas rojillas.

Quedó noqueado el equipo osasunista y comenzó un nuevo encuentro con un claro dominador, el Mallorca, que dispuso de un par de buenas ocasiones, incluido un larguero de Joao Víctor de magistral saque de falta.

Sólo el último suspiro volvió a ser pamplonica pero no había tiempo para más. Salomónica pero más que discutible decisión de Miguel Ángel Ayza Gámez que cambió el devenir del encuentro y reparto de puntos que le saben a gloria a los mallorquinistas y a muy poco a los locales, que merecieron algo más.
 

 



Atlético Osasuna: Andrés Fernández; Marc Bertrán, Lolo, Miguel Flaño, Damià; Oier Sanjurjo, Timor; Cejudo (Nino, m.85), Armenteros (Kike Sola, m.57), Sisi (Lamah, m.68); y Llorente.

RCD Mallorca: Aouate; Ximo (Arizmendi, m.73), Nunes, Conceiçao, Antonio López; Pereira, Pina (Joao Víctor, m.66), Márquez, Nsue; Alfaro (Geromel, m.42) y Hemed.

Goles: 1-0, m.69: Kike Sola. 1-1, m.78: Hemed.

Árbitro: Ayza Gámez (Comité Valenciano). Expulsó con roja directa al local Llorente y al visitante Nunes por mutua agresión (m.33). Mostró tarjeta amarilla a Oier (m.73) y Damià (m.86), de Osasuna, y a Geromel (m.52), del Mallorca.

Incidencias: Partido de la cuarta jornada de Liga celebrado en el estadio Reyno de Navarra ante 14.698 espectadores.


La Real salva los muebles a balón parado

Partido tan igualado como aburrido. La Real ganó a balón parado. El Zaragoza insiste en sus errores. Íñigo Martínez y Vela, de penalti, decidieron el triunfo txuri-urdin.

 

 

Seis puntos lleva la Real Sociedad en Liga BBVA y los seis han salido de Anoeta. Dice mucho del carácter de los donostiarras como locales. Le bastó un certero inicio de segunda parte para finiquitar un partido bastante soso durante su primera mitad.

Media hora tardó el partido en comenzar de verdad, una jugada de De la Bella por la parte izquierda con pase final a Griezmann acabó con un disparo al muñeco del jugador francés. A partir de ahí, la Real incrementó progresivamente el ritmo hasta el descanso sin ningún fruto.

Hasta entonces, el Real Zaragoza, se había mostrado como un equipo serio y colocado, tácticamente muy correcto pero bastante inofensivo, con poca profundidad y nada de chispa en ataque. Únicamente Postiga puso en dificultades a Bravo en una volea que despejó fácilmente el portero chileno.

La segunda parte comenzó como acabó la primera, una Real con intenciones ante unos maños muy serios. Tuvo que ser a balón parado, como se suelen abrir este tipo de partidos. Carlos Vela lanzó un córner que cabeceó Íñigo Martínez en la frontal del área pequeña defendida por Roberto.

Pocos minutos después, el partido se iba a poner más de cara todavía al equipo de San Sebastián. Paredes cometía penalti sobre Vela, que se encargaba de transformar él mismo. Prácticamente, el mexicano finiquitaba el partido.

Tras el segundo gol, Manolo Jiménez movió el banquillo, dio entrada a Apoño y Aranda y el Zaragoza empezó a empujar. Más por inercia que por convicción. La Real esperó atrás e intentó correr cuando recuperaba balones perdidos de los aragoneses pero el marcador no volvió a moverse.

Tres puntos para la Real que certifican la fortaleza del equipo donostiarra como local y una derrota que debe hacer espabilar a los hombres de Manolo Jiménez para no volver a las andadas del año pasado.




Real Sociedad: Bravo; Estrada, Mikel González, Iñigo Martínez, De la Bella; Markel, Illarramendi, Zurutuza (Ros, min. 77); Griezmann, Vela (Ifrán, min. 85) y Agirretxe (José Ángel, min. 82).

Real Zaragoza: Roberto; Abraham, Paredes, Álvaro, Sapunaru; Montañés, Zuculini (Apoño, min. 63), Stefan (Álamo, min. 75), José Mari, Edu Oriol (Aranda, min, 63); Hélder Postiga.

Goles: 1-0, min. 55: Iñigo Martínez. 2-0, min. 60: Vela

Árbitro: Iglesias Villanueva (Comité Gallego). Amonestaciones a De la Bella, Bergara, Griezmann, Vela, Abraham y Paredes

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio de Anoeta con una asistencia de 23.281 espectadores.


De Supercampeón a Pupas cuando menos te lo esperas

El Atlético machacó al Rayo y se relajó. Delibasic y Léo acortaron distancias al final con tres goles en los últimos diez minutos.

 

 

Comenzaba el partido en el Calderón ofreciendo las dos Supercopas de Europa conquistadas tanto en balonmano como en fútbol por el Atlético de Madrid. Unos prolegómenos que invitaban al espectador a disfrutar con un ambiente festivo que hizo estallar al estadio con el resultado final, sufriendo, eso sí. Con la victoria ante el Rayo, el Atlético  firma su tercer partido consecutivo marcando cuatro goles.

 

Los primeros minutos fueron para el Atlético. Descarada apuesta ofensiva la del técnico argentino, Simeone, que desde los primeros instantes puso a prueba a la defensa compuesta por tres hombres de los franjirrojos mediante un disparo desde la frontal de Gabi. Por suerte para los de Vallecas, el disparo se topó con los pies del portero hoy titular, Dani Giménez.

Logró calmar el empuje inicial el Rayo Vallecano. Culpa de ello tuvieron los cinco centrocampistas que dispuso Paco Jémez sobre el terreno de juego que se adueñaron de la posesión, como queriendo dormir a los atléticos que esperaban en la retaguardia para salir a la contra. Pero ni mucho menos, el Atlético estaba dormido, al contrario, estaba más vivo que nunca. Antes de llegar a la media hora de partido, Diego Costa se internó por banda izquierda para asistir a Mario Suárez que solo tuvo que colocar su bota en dirección a la meta rayista y el balón supo su destino.

 

Instantes previos al descanso, Arda Turan disponía de la ocasión más clara para aumentar la ventaja para los del Manzanares. Un despiste en el flanco derecho del Rayo fue mal aprovechado por el turco hasta en dos ocasiones y despejado, en línea de gol, por los zagueros rayistas. Se llegó así al tiempo de refresco con un Rayo en carente de pegada y un Atlético picante en la zona de tres cuartos.

Todo quedó desequilibrado en los primeros cinco minutos de la segunda parte mediante dos jugadas idénticas que dejaron en evidencia a la débil defensa franjirroja. Con Falcao en el eje de creación  y Diego Costa en modo asistente los atléticos vieron aumentada su ventaja con Koke primero y Arda Turan dos minutos más tarde. Por si fuera poco, el héroe del Atlético convirtió un penalti provocado por Diego Costa.


No dio su brazo a torcer el Rayo Vallecano, dueño de una posesión que no acababa de convertirse en ocasiones claras sobre el arco defendido por Courtois. No así el Atlético, muy incisivo sobre el área vallecana, incluso con las nuevas incorporaciones del ‘Cebolla’ Rodríguez y Adrián. A falta de diez minutos para la conclusión, el Rayo volvía a creer en el partido. Un inspirado Delibasic hacía dos goles y Léo sacaba partido del desconcierto de la zaga rojiblanca para  poner al Calderón a pedir la hora.

Al final, tres puntos que se quedaron en la ribera del Manzanares. Una victoria sufrida para los atléticos que acaban la semana con un susto en el cuerpo. El Rayo tuvo su recompensa en la recta final y acabó soñando con sacar algún punto positivo del Calderón. Fue solo un sueño.
 

 



Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Arda Turan (Adrián, m. 66), Mario (Tiago, m. 62), Gabi, Koke; Diego Costa (Cristian Rodríguez, m. 55) y Falcao.

Rayo Vallecano: Dani Giménez; Tito, Amat, Casado; Trasshorras, Javi Fuego, Adrián (Delibasic, m. 70); Piti (Lass, m. 53), Leo Baptistao, José Carlos; y Nicki Bille (''Chori'' Domínguez, m. 57).

Goles: 1-0, m. 29: Mario Suárez culmina una jugada de Diego Costa. 2-0, m. 48: Koke marca a pase de Diego Costa. 3-0, m. 51: Arda Turan remata un centro raso de Juanfran. 4-0, m. 55: Falcao, de penalti. 4-1, m. 82: Delibasic remate un centro desde la derecha. 4-2, m. 85: Delibasic culmina un envío raso desde la izquierda. 4-3, m. 88: Leo Baptistao aprovecha una serie de rechaces en el área.

Árbitro: Javier Estrada Fernández (Comité Catalán). Amonestó a los visitantes José Carlos (m. 42), Javi Fuego (m. 54) y Adrián González (m. 68).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga en Primera División, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 45.000 espectadores.

 

Jaime adelanta las Navidades en Zorrilla

Rubén Castro aprovecha un error garrafal del portero pucelano, que no atajó un centro desde la banda cuando parecía muy fácil.

 

 

Valladolid y Betis se han enfrentado en el último partido correspondiente a la 4ª jornada de la Liga. Los verdiblancos consiguieron sacar los tres puntos a última hora cuando parecía que el partido acabaría en empate. Rubén Castro fue el autor del único gol del partido, que condenó al Valladolid a la derrota a pesar de que fue el equipo que buscó más la portería rival, dominando el partido durante mucho tiempo.

 

La primera mitad comenzó con un dominio claro del equipo de Miroslav Djukic, y en pocos minutos ya se empezaron a ver ocasiones. Óscar tuvo una clara que dio en el palo tras parada de Casto, aunque fue invalidada por fuera de juego, y otra en la que empaló un perfecto centro de Omar, pero el disparo se marchó por alto y muy desviado. Al Betis le costó mucho entrar en el partido, aunque poco a poco lo fue haciendo y le fueron llegando las ocasiones.

La más clara estuvo en la figura de Salvador Agra, que se internó por el centro regateando a fuerza de velocidad, pero el último control se le fue largo y no pudo llegar a definir. Pero no conseguí el conjunto bético hacerse con un buen dominio del esférico, pues era casi siempre del equipo local, que lo dominaba con criterio. Al descanso se llegó con 0-0 a pesar de que se podría haber visto algún gol por parte de alguno de los dos equipos, pero la puntería y la pegada no estaba por parte de ninguno.

El segundo tiempo fue más tranquilo y parado, sin apenas peligro, con un Valladolid que movía pero sin incidir y un Betis perdido con la pelota en los pies. Solo al final fueron cuando empezaron a verse más cosas. El Valladolid comenzó a insistir conforme se iba acercando el final, pero se encontraron con un gran Mario, siempre atento al corte, y con Casto, que se sacó una buena mano al remate de cabeza de Ebert, que tras la parada dio en el larguero. Fue la ocasión más clara de la segunda parte sin duda.

Sin embargo, el que encontró el premio del gol fue el Betis, en una contra llevada perfectamente por Álex Martínez desde la izquierda. El canterano centró raso buscando el remate de Rubén Castro, saliendo Jaime para evitarlo. Pero el portero erró clamorosamente y el balón se le escapó, aprovechando el delantero canario para recoger la pelota y empujarla al fondo de la portería. Además, la defensa se había quedado totalmente despistada pidiendo fuero de juego, que en las imágenes parece que no son porque Rubén Castro está en línea con el balón.

Debutó Nosa Igiebor en partido oficial con el Betis, dejando una de las imágenes más sorprendentes del partido, pues el nigeriano parecía sentirse poco a gusto en el terreno. Un problema con las botas o con el césped le impedía correr o incluso andar bien y prueba de ello son las numerosas caídas que sufrió en el rato que estuvo.

 



Real Valladolid: Jaime; Rukavina, Rueda, Marc Valiente, Balenziaga; Ebert, Rubio (Sastre, min. 61) Víctor Pérez, Omar (Bueno, min. 83); Óscar y Guerra (Manucho, min. 73).

Real Betis Balompié: Casto; Nelson, Mario, Paulao, Nacho; Beñat, Rubén Pérez; Agra (Alex min. 63), Nono (Nosa, min. 58), Rubén Castro; y Jorge Molina (Pereira, min. 70).

Gol: 0-1: Min. 89, Rubén Castro.

Árbitro: Delgado Ferreiro (Comité Vasco). Amonestó a Paulao, Sastre y Pereira.

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio José Zorrilla. 13.600 espectadores asistieron al encuentro. Antes del encuentro se homenajeó a los deportistas vallisoletanos que han participado en los Juego Paralímpicos de Londres 2012: la nadadora Amaya Alonso, el jugador de baloncesto Dani Rodríguez y la judoca Marta Arce.

CLASIFICACIÓN PROVISIONAL DE LA LIGA BBVA

Posición
Equipo
Puntos
Jugados
Ganados
Empatados
Perdidos
GF
GC
1
FC BARCELONA
12
4400123
2
MÁLAGA CF
10
431062
3
RCD MALLORCA
8
422053
4
SEVILLA FC
8
422042
5
ATLÉTICO DE MADRID
7
321094
6
RAYO VALLECANO
7
421165
7
REAL BETIS BALOMPIÉ
6
320175
8
RC DEPORTIVO
6
413075
9
REAL VALLADOLID
6
420233
10
REAL SOCIEDAD
6
420257
11
VALENCIA CF
5
412166
12
REAL MADRID
4
411254
13
GETAFE CF
4
411258
14
LEVANTE UD
4
411258
15
ATHLETIC DE BILBAO
4
4112812
16
RC CELTA DE VIGO
3
410345
17
REAL ZARAGOZA
3
410325
18
GRANADA CF
2
402226
19
RCD ESPANYOL
1
4013710
20
ATLÉTICO OSASUNA
1
401327

No hay comentarios:

Publicar un comentario