domingo, 11 de marzo de 2012

ANÁLISIS DE LA JORNADA 27 DE LA LIGA BBVA


La Real se acerca a la salvación a costa del Zaragoza

Los donostiarras fueron muy superiores ante un rival a la deriva. Un doblete de Agirretxe y un tanto de Carlos Vela sentenciaron el partido.

 

 

La Real Sociedad ganó al Zaragoza, por 3-0, en el partido disputado este sábado en el Estadio de Anoeta, correspondiente a la jornada vigésimo séptima de la Liga BBVA, por lo que los blanquiazules se alejan de los puestos de descenso consiguiendo su cuarta victoria seguida en Anoeta.

Los hombres de Montanier dominaron el encuentro desde el inicio a base de tocar y tocar el esférico con tranquilidad, y a pesar de los intentos zaragozanos, el partido quedó sentenciado en la primera mitad, donde llegaron los tres goles.

El partido comenzó con mucha igualdad, ya que el encuentro se presentaba como un duelo importante por la salvación. La Real Sociedad controló el partido desde el inició, con tranquilidad tocó y tocó el balón en el centro del campo para buscar los huecos, aunque en algunos momentos tuvo dificultades para sacar el balón controlado desde atrás debido a la presión de los maños. 

Mientras, el conjunto de Jiménez intentó crear peligro por la banda derecha, aunque las mejores ocasiones llegaron del lado 'txuri-urdin'. Tras una buena jugada de los de Montanier por la banda derecha llegó el gol de Agirretxe que abrió el marcador, y tres minutos después, anotaron el segundo. Carlos Vela marcó tras un error de la defensa del Zaragoza.

Con el 2-0 los pupilos de Jiménez se vinieron abajo. Y otro error de la defensa visitante significó que Agirretxe anotara el tercer gol de la Real Sociedad, en una primera parte dominada de principio a fin por los donostiarras. 

Tras el descanso, los maños cambiaron de actitud, pero la Real Sociedad no quiso correr riesgos y siguieron marcado el ritmo del partido y creando las mejores ocasiones, aunque según pasaban los minutos el duelo fue perdiendo intensidad. 

A pesar de los intentos de Manolo Jiménez por acercarse en electrónico, los 'txuri-urdin' dominaron el juego y se hicieron con una victoria trabajada que les coloca en la zona tranquila de la tabla. Por su parte, los de Manolo Jiménez se alejan de la salvación y se hunden en la clasificación.


Real Sociedad: Bravo; Estrada, Íñigo Martínez, Mikel González, De la Bella; Illarramendi (Bergara min. 75), Aranburu, Xabi Prieto (Griezmann, min. 71), Zurutuza, Vela, Agirretxe (Llorente, min. 77).

Real Zaragoza: Roberto; Obradovic, Da Silva, Lanzaro, Pablo Álvarez; Micael, Apoño, Luis García (Juan Carlos, min. 62), Oriol (Ortiz, min. 72), Abraham (Lafita, min. 52); Aranda.

Árbitro: Velasco Carballo (Colegio Madrileño). Tarjeta roja a Lánzaro (min. 82) por doble amonestación. Tarjetas amarillas a Mikel González y Álvarez.

Goles: 1-0, min. 18: Agirretxe. 2-0, min. 21: Vela. 3-0, min. 40: Agirretxe.

Incidencias: 23.500 espectadores en el estadio de Anoeta. Temperatura fresca y campo perfecto.


Rondón decide el duelo de los soñadores Champions

Un solitario tanto del futbolista venezolano dio la victoria a los andaluces, que de esta forma superan a los granotas en la clasificación y se colocan cuartos.

 

 

Ya lo dijo Manuel Pellegrini en la previa: "Hay que asegurar los tres puntos más que pensar en el average". Quien fue a La Rosaleda pensando que el Levante sería un rival cómodo se equivocó totalmente. El Málaga ganó 1-0 y supera a los valencianos en la cuarta plaza, pero ni fue nada fácil. Los de JIM venían con la lección bien aprendida.  

 

Aguantar, buscar contras con la conexión Ghezzal-Kone y desgastar al Málaga para aprovechar su ocasión en la segunda mitad. No le salió bien el plan porque el equipo de Pellegrini fue mejor, dominó más el balón y creó mucho peligro, especialmente durante el primer tiempo.

En esos primeros 45 minutos el Málaga fue dueño y señor del choque. Pellegrini fue a por todas y sacó un once ofensivo con Joaquín, Eliseu e Izco volviendo Demichelis al puesto de central. La falta centro de Cazorla, a los 4´, donde no llegó por centímetros Rondón era la declaración de intenciones. Se sucedió el peligro ante la meta de Munúa con ocasiones de Rondón e Isco, pero el balón no entraba. La primera jugada de peligro de los visitantes llegó a los 37´ en un contragolpe culminado por Ghezzal con disparo alto dentro del área. Pero el susto no amilanó a los blanquiazules que reclamaron un penalty por manos de Farinós tras un córner y cerró este período con dos claras ocasiones de gol. Un disparo colocado de Joaquín con paradón de Munúa( 44´) y un cabezazo de Rondón que sacó un defensa tras el córner.

El segundo tiempo fue distinto. Comenzó con aviso del Levante cuando en el minuto 47 Ghezzal, tras llevarse el balón con la mano, lanzó un disparo duro que rozó el poste. Pero la reacción local fue fulminante y a los 50´ llegó el gol de la victoria. Una falta excelentemente centrada por Joaquín la cabeceó Rondón a la red. Su séptimo gol en la Liga y que valen tres puntos valiosísimos. A partir de ahí cambió el choque con un Málaga aguantando más el balón y un Levante que intentó adelantar líneas.

Los locales tuvieron varias ocasiones para sentenciar el partido. Un jugadón de Izco salvado por Munúa en el 69 y un cabezazo picado fuera de Rondón a los 76 casi llevan el gol a la red. JIM intentó quemar opciones sacando a Rubén Suárez( lío incluido con el cuarto árbitro porque no quería quitar a Pedro López) y El Zhar, pero las ocasiones buenas solo estaban para el Málaga, que perdonaba con un disparo de Sebas Fernández ( 80´ ) y una falta de Cazorla ( 87´). Al final el Málaga se echó para atrás y la última oportunidad en la última acción de la tarde ( minuto 95) fue un chut de El Zhar que salió rozando el larguero. Susto para la parroquia de La Rosaleda y final.

El Málaga continúa fuerte en casa y esta vez ante un Levante que nunca dio facilidades pero que en ataque tenía pocos elementos. Vino a hacer su partido y aprovechar el desgaste local, pero no le salió bien la estrategia. El Málaga fue mejor y marcó el gol. Esta noche duerme en puesto de Champions League, algo histórico en la Costa del Sol.
 

 


Málaga CF: Caballero; Gámez, Weligton, Demichelis, Monreal; Joaquín (Sebastián Fernández, m.77), Toulalan, Cazorla, Eliseu (Camacho, m.70); Isco (Duda, m.90) y Rondón.

Levante UD: Munúa; Pedro López (Rubén, m.78), Ballesteros, Cabral, Del Horno; Valdo, Oscar Serrano (Botelho, m.56), Farinós, Barkero; Ghezzal (El Zhar, m.88) y Koné.
Gol: 1-0, M.50: Rondón.

Árbitro: Iglesias Villanueva (Colegio Gallego). Mostró tarjeta amarilla a los malaguistas Isco (m.85), Duda (m.90), Sebastián Fernández (m.90) y Toulalan (m.90), y a los futbolistas del Levante Pedro López (m.28) y Ballesteros (m.87).

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo séptima jornada de Liga de Primera División, diputado en el estadio de La Rosaleda ante 28.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento de los ex jugadores Pepe Arias y Juanito Franch.


El Sporting ve la luz con el sello de Clemente

El equipo de Míchel se aleja muchísimo de Europa tras caer ante los asturianos por un solitario gol de André Castro en el primer tiempo. 

 

 

Sporting y Sevilla se enfrentaron en una contienda en la que ganaron los locales con un golazo de André Castro. Los andaluces pudieron merecer más, sobretodo en el último tramo de encuentro. Si se hubiera pitado el penalti a Reyes quizás hubiéramos visto otro encuentro, pero el Sevilla fue muy fallón y los asturianos no perdonaron.

El partido comenzó con un Sevilla con mucha posesión ante un Sporting que atacaba muy verticalmente. Pasado el cuarto de hora, Cala comete un error clamoroso al pasarle la pelota a Barral, quien falla el mano a mano contra Palop. Apenas un minuto después, Cala vuelve a cometer un fallo en el pase que propicia un chut lejano que bloca bien el cancerbero visitante.

El Sporting se iba creciendo, y si no llega a ser por una fantástica intervención del portero andaluz, Trejo hubiera marcado el primero con un lanzamiento de falta. Los locales empezaban a acorralar en su área el conjunto de Míchel. No obstante, los visitantes siempre que llegaban lo hacían con peligro. Perotti, con un remate de cabeza a centro de Navas, mandó el balón al palo. Otra tuvo Manu del Moral, pero la mandó encima del larguero. Y en esas llegó el gol de los asturianos: André Castro rompe desde segunda línea y aprovecha un pase al espacio de Colunga para enviar el esférico dentro de la portería de Palop. El tanto le sentó al equipo sevillano como un jarro de agua fría, que hasta el momento dominaba en cuanto a control de balón se refiere. Poco a poco el encuentro se fue parando y hasta el final de la primera parte sólo hubo dos ocasiones remarcables: un chut lejano de Navas que se marchó desviado y un remate de Cala que se fue fuera. En esa jugada hubo un penalti claro a Reyes no pitado. Con esto el árbitro marco el final del primer periodo.

La segunda mitad comenzó muy igualada, con ambas escuadras jugando a un ritmo muy rápido. Rakitic, después del rechace de un córner, lo tenía todo a favor para anotar, pero la mandó inexplicablemente fuera. Míchel se la jugó y apostó por Campaña, sustituyendo a un Cala que no cuajó su mejor partido. Los de Nervión se iban poco a poco adueñándose del duelo, un ejemplo fue una que Juan Pablo paró, a un tiro de navas en la frontal del área.

Míchel seguía apostando por gente de arriba, esta vez fue Babá por un Reyes un tanto espeso. Y si por un lado apostaban por delanteros, por el otro lo hacían por defensas. Clemente sacó a Lora relevando a un Barral siempre peleón. El Sevilla estaba ahogando al Sporting, quienes no podían hacer otra cosa que cerrarse. Coke desvió por encima del travesaño un remate en un saque de esquina. Y en ese asedio constante Mendy se fue en velocidad de la zaga visitante y su centro raso lo empujó Bilic demasiado suave, lo que propició otro lucimiento de Palop.

Los últimos compases fueron una locura, con un centro del campo partido, en el que el equipo hispalense atacaba sin pausa. A falta de un minuto Mendy estuvo apunto de marcar, pero pecó de individualista.

Al final se montó una tángana, lo que fue un lamentable final para un encuentro muy bonito marcado por el coraje de los locales, favorecido por una afición volcada que no quiere ver como su equipo desciende. Se rompe el récord de imbatibilidad de Míchel a manos del conjunto de Clemente.

 


Sporting de Gijón: Juan Pablo; Pedro Orfila, Botía, Gregory, Canella;Galvez, André Castro (Nacho Cases, m.80); Mendy, Trejo, Colunga (Bilic, m.73) y Barral (Lora, m.63).

Sevilla FC: Palop; Coke, Cala (Campaña, m.53), Escudé, Fernando Navarro; Fazio, Rakitic (Trochowski, m.73); Jesús Navas, Reyes (Babá, m.67), Perotti y Manu del Moral.

Goles: 1-0, M.32: André Castro marca con la izquierda de tiro cruzado a pase de Colunga.

Árbitro: Javier Estrada Fernández (Colegio Catalán). Mostró tarjeta amarilla a Trejo (m.5), Coke (m.14), Colunga (m.55), Escudé (m.70),Perotti (m.74), Galvez (m.85), Bilic (m.91), Fazio (m.90) y Botía(m.90).

Incidencias: Unos 25.000 espectadores presenciaron el encuentro en el estadio de El Molinón. Al término del partido se registraron algunos forcejeos en el túnel de vestuarios.


Un gran paso para la Liga, otro gran paso para Cristiano

El portugués consiguió un doblete ante un rival que luchó con sus armas hasta el último momento. Otra victoria de casta que pone cada vez más cerca la Liga, aunque con polémica.

 

 

José Mourinho cumple cien partidos en el Real Madrid, y lo hace con una nueva victoria ante el Betis que le acerca un poco más al título final. Esta vez no fue tan sencillo como en otras ocasiones. De hecho, el Betis puso el triunfo merengue más caro que ningún otro quizás. O al menos, tanto como Mallorca o Valencia. Los verdiblancos llegaron a adelantarse en el marcador en una primera parte donde ató de pies y manos a los pupilos de José Mourinho. En la segunda parte, el partido se convertiría en un choque de ida y vuelta ingobernable, con protagonismo arbitral en varias jugadas (por no decir polémicas), siendo el Real Madrid, y más concretamente Cristiano Ronaldo con un doblete, el que pescaría en el revuelto río. No fue brillante, pero sí sufrida y efectiva. Y sobre todo, la victoria merengue sería tremendamente importante y celebrada.

No podría haber tenido el Real Madrid una primera parte más incómoda. El Betis de Pepe Mel, como ya hiciera ante el Barcelona, salió a jugarle de tú a tú a los blancos. Y en su temerario intento, no sólo lo consiguió, sino que durante muchos minutos anuló a los pupilos de Mourinho. El equipo verdiblanco cerró muy bien los espacios interiores, desconectando así a Kaká, que sin espacios no es el mismo Kaká. Ozil salió desenchufado él solito, además que desde la banda no es tampoco el mismo Ozil. Así, con los dos canalizadores del equipo fuera de juego, el Betis pudo robarle muchos balones a un Real Madrid que rara vez conseguía finalizar las jugadas. Lo que nunca le pasa a un conjunto con la pegada de los merengues.

El cuadro verdiblanco por su parte, bien pertrechado atrás, aprovechó las imprecisiones del Real Madrid para luego manejarse como pez en el agua con los huecos que encontraba por delante. Tanto entre líneas, confundiendo constantemente a los Pepe-Ramos-Xabi-Khedira, como saliendo al contraataque con la velocidad y talento que le caracteriza. Y así fue precisamente como llegaría el primer gol a los diez minutos: en una contra, Rubén Castro controló maravillosamente un centro lateral para ceder a Molina, que llegando desde atrás remachó a gol la jugada. Los jugadores merengues reclamaron mano de Castro en el control, pero Iturralde González o no lo vio… o no lo estimó voluntario… o tiene algún tipo de conflicto desconocido en las relaciones con Federación o clubes, la excusa de moda esta semana.

 

Sin quizás merecerlo, el Real Madrid hizo lo más difícil antes de pasar por los vestuarios: igualar el marcador sin llegar a someter al Betis. Aprovechó quizás el único contraataque que tuvo. En un balón que el propio equipo merengue pudo perder en defensa, logró sacarlo adelante a duras penas ante el desorden verdiblanco hasta que le llegó a Ozil, que esa vez sí se sacó de su chistera una asistencia en profundidad al primer toque para Higuaín. El argentino se recorrió medio campo para plantarse ante Fabricio y batirle con un duro chut por el palo corto. Tanto que le vale al Pipita para reivindicarse por enésima vez ante la ausencia de Benzema, y superar así al mítico Juanito en la lista de los máximos goleadores de la historia del club en Liga.

El gol del Pipita serviría para certificar el carácter ingobernable del encuentro, que en los albores del descanso vería abierta la caja de Pandora donde estaban almacenadas todas las ocasiones de gol y el vértigo de los que sólo se había visto una pequeña muestra en los cuarenta minutos anteriores. Antes del paso por los vestuarios, Salva Sevilla estrellaría una falta en el larguero, y tanto Higuaín como Ronaldo tuvieron sendos mano a mano con Fabricio que no acertaron a materializar. Y sería nada más iniciarse la segunda parte cuando llegarían los goles. Primero, uno de Ronaldo (que no había marcado nunca al Betis hasta este sábado) a pase de Marcelo. Y a los dos minutos, otro de Jefferson Montero, aprovechando el rechace a un mal despeje de Arbeloa en un córner. El que sería el undécimo gol encajado por los blancos en jugada de estrategia, el gran punto negro del Real Madrid esta temporada.

El partido estaba loco, un encuentro de ida y vuelta sin sentido ninguno. De ésos donde se olvidan los presupuestos, las nóminas y la clasificación. De ésos donde el gol se torna en el protagonista único, dando la espalda a las alineaciones y las tácticas. Khedira y Marcelo tuvieron dos ocasiones más para el Madrid, mientras que Casillas desbarataría milagrosamente las de Montero y Castro dentro del área pequeña. Xabi llegaría a tocar el balón con la mano involuntariamente dentro de su área en una jugada fortuita que los verdiblancos reclamaron vehementemente al cuarto árbitro (que sustituyó al lesionado Iturralde). Y en ese toma y daca, se llevaría el gato al agua el jugador con más talento sobre el campo, como dicta la lógica: Cristiano Ronaldo, que aprovechó el rechace de Fabricio a un cabezazo de Ramos en un córner para poner al Madrid por delante.

En el último cuarto de hora, Pepe Mel quemaría todas sus naves mientras que Mourinho intentaría tomar el control del partido con la salida de Granero. Pero ninguno de ellos lograría domar un choque anárquico en el que seguiría predominando la tensión y las imprecisiones. Tampoco así el marcador, a pesar de que Montero bien podría haberlo hecho en una última jugada donde los béticos pedirían manos de Marcelo y Ramos. Finalmente, el 2-3 dejaría al Real Madrid como el acreedor de unos tres puntos que le sitúan cada vez más cerca del título final.
 

 


Real Betis Balompié: Fabricio; Nelson, Dorado, Paulao, Nacho; Beñat, Iriney (Cañas, m.77), Salva Sevilla (Santa Cruz, m.73); Jefferson Montero, Jorge Molina (Pozuelo, m.65) y Rubén Castro.

Real Madrid: Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos, Pepe, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Özil (Benzemá, m.88), Kaká (Granero, m.75); Cristiano Ronaldo e Higuaín (Callejón, m.78)

Goles: 1-0, M.10: Jorge Molina. 1-1, M.25: Higuaín. 1-2, M.52: Cristiano Ronaldo. 2-2, M.54: Jefferson Montero. 2-3, M.73: Cristiano Ronaldo.

Árbitro: Eduardo Iturralde González (Comité Vasco). Amonestó a los visitantes Kaká (m.36), Higuaín (m.37) y Arbeloa (m.92) y al local Iriney (m.35).

Incidencias: Partido disputado en el estadio Benito Villamarín ante algo más de 50.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. Antes del partido se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento del que fuera presidente del Betis Juan Manuel Mauduit. En la segunda parte tuvo que dirigir el partido el cuarto árbitro, Gorka Sagués Orkoz, ya que Iturralde González se quejó de un pinchazo en el muslo izquierdo.


El Atlético endereza de nuevo la ruta hacía la Champions

El ex del Deportivo de La Coruña volvió a brillar y demostró ser uno de los mejores jugadores de la temporada. Miranda y Falcao, goleadores. Juanfran lo bordó como lateral. 

 

 

El Atlético de Madrid logró una victoria importantísima ante el Granada gracias a los goles de Miranda y Radamel Falcao.

Aunque parezca mentira, el partido era delicado para el equipo colchonero, que estaba obligado a conseguir el triunfo si no quería alejarse de la Zona Champions, ya que los hombres de Simeone habían sumado cuatro puntos de los últimos quince posibles, teniendo que retroceder hasta el treinta de enero para encontrar la última victoria (ante Osasuna, 0-1 en el Reyno de Navarra).

Pero el fútbol es justo y, aunque bien es cierto que no hemos visto la mejor versión del Atlético, sí que le ha bastado con un mínimo esfuerzo y algo de orden para derrotar a un Granada que llegó con más seriedad que fútbol y más ilusión que determinación.

Abel Resino puso un autobús en la frontal del área e intentó frenar los ataques del Atlético. Lo logró, pero se tropezó con una genial acción de Miranda que, aprovechando una jugada a balón parado, mandó el esférico a la red tras una espectacular volea desde el corazón del área.

El 1-0 le dio tranquilidad al equipo rojiblanco, que pasó a tener una tranquilidad insultante pese a lo estrecho del marcador. Adrián López, genio y figura durante las últimas semanas, volvió a echarse el equipo a la espalda. Buscó a Falcao, regateó rivales, se asoció desde tres cuartos y desequilibró por la banda. Todo bien y todo sin adornos. Un crack que, semana a semana, crece, muestra y demuestra.

En la segunda mitad, y mientras el Granada buscaba el 1-1 con más corazón que cabeza, el Atlético de Madrid retrocedió metros (Simeone metió en el campo a Assunçao y Perea) y basó su fútbol en el contragolpe. Henrique, tras una dura entrada, fue expulsado y dejó al cuadro andaluz en inferioridad cuando arrancaba el tramo decisivo del encuentro.

Ya en la recta final del choque, una acción maravillosa de Juanfran finalizó con remate de Falcao a la red. El ex de Osasuna robó el balón en su propio campo, se marchó de dos futbolistas con velocidad y le metió un pase magistral al colombiano, que definió con la pierna derecha para poner el definitivo 2-0 en el que, quizás, fue su partido más gris desde que llegó a España.

Así las cosas, tres puntos de oro para un Atlético de Madrid que sigue soñando con la Champions. El Granada deberá trabajar mucho más si no quiere vivir el infierno del descenso a final de temporada.  

 


Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Domínguez; Salvio (Arda Turan, m. 69), Gabi, Mario (Assuncao, m. 56), Koke; Adrián (Perea, m. 79) y Falcao.

Granada CF: Julio César; Nyom, Íñigo López, Mainz, Borja Gómez; Cortés (Ighalo, m. 59), Mikel Rico, Moisés (Geijo, m. 81), Jaime (Henrique, m. 31); Abel Gómez y Uche.

Goles: 1-0, m. 38: Miranda, de media chilena tras un saque de esquina y un toque de cabeza de Godín. 2-0, m. 90: Falcao, tras una jugada de Juanfran.

Árbitro: Mateu Lahoz (Colegio Valenciano). Expulsó con roja directa a Henrique, del Granada, en el minuto 82. Amonestó a los locales Koke (m. 60) y Godín (m. 73) y a los visitantes Nyom (m. 52) y Borja Gómez (m. 63).

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo séptima jornada de Liga en Primera División, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 52.000 espectadores.


Los refuerzos pericos se gustan en Cornellà

El conjunto blanquiazul rozó la perfección con un hat-trick de Kalu Uche y dos goles de Coutinho. Tamudo también marcó ante su ex-equipo y no lo celebró.

 

 

Partidazo del Espanyol en Cornellà ante el Rayo.  Los de Pochettino barrieron a un Rayo muy flojo y sin alma. Uche, con un hattrick, y Coutinho, por dos veces, lograron los goles locales mientras Tamudo, ovacionado por la grada perica, puso el del honor por parte de los de Sandoval. Partidazo para dar carpetazo a la mala imagen de la jornada anterior ante el Madrid.

El Rayo le duró diez minutos al Espanyol. No habían pasado ni cinco minutos cuando Uche inauguraba el marcador tras un buen centro de Javi López que el nigeriano remató al fondo de las mayas. Se intuía un buen partido de los de Pochettino. Los de Sandoval salieron dormidos y lo pagaran caro, muy caro. Mientras se preguntaban por el primer gol encajado, llegó el segundo. Sergio García, que volvía a ser titular tras la lesión, le dio en bandeja el segundo a Coutinho que no lo desaprovechó.

Diez minutos y Cornellà era una fiesta. Los suyos estaban atropellando a un Rayo muy flojo en defensa. Y entonces llegó el éxtasis. Corría el minuto mágico, el 21, el de Dani Jarque, y la magia la puso de nuevo Coutinho. Golazo del brasileño que se deshizo de tres jugadores dentro del área y batió por debajo de las piernas a Joel. Si el gol lo hace Messi da la vuelta al mundo.

El Rayo intentaba achicar aguas pero el vendaval perico era de los fuertes. Coutinho se movía por donde quería, Verdú, uno de los mejores como siempre, hacía rodar la máquina mientras Sergio y Uche buscaban hacer más daño a la defensa vallecana. Y lo hicieron. De nuevo fue Uche, con una exquisita vaselina, quien anotó el cuarto. Festival en Cornellà.

Tras el descanso Sandoval cambió el sistema y puso una defensa de cuatro. El Espanyol salió más relajado y Tamudo no lo desaprovechó. El ex del Espanyol logró reducir distancias con su primer gol en Cornellà con otra camiseta. El público reaccionó con una ovación al que no hace mucho era su héroe. Por unos instantes un murmullo rondaba por la grada viendo como el partido estaba un poco descontrolado. Pero no duró mucho. Tras la entrada de Romaric y con el control de balón recuperado, Uche logró el quinto y con él su primer hattrick con el Espanyol. De nuevo fue Sergio García (partido espectacular del de Bonpastor) quién le dio el pase de la muerte para que Uche rematara a placer. Con el partido ya resuelto Pochettino decidió que Quaye, otra de las perlas del filial, debutara en Primera División.  Pitido final y tres puntos más en el casillero perico. Gran partido.

 


RCD Espanyol: Kiko Casilla; Javi López, Amat, Héctor Moreno, Dídac; Baena, Cristian Gómez (Romaric, min.61); Uche (Quaye, min.87), Verdú, Coutinho (Rui Fonte, min.72) y Sergio García.

Rayo Vallecano: Joel; Tito, Arribas, Pulido (Diamanka, min.46), Raúl Bravo; Movilla (Piti, min.46), Javi Fuego; Trashorras (Lass, min.46), Michu, Armenteros y Tamudo.

Goles: 1-0, min.4: Uche; 2-0, min.9: Coutinho; 3-0, min.21: Coutinho; 4-0, min.44: Uche; 4-1, min.54: Tamudo; 5-1, min.68: Uche.

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes (Comité Cántabro). Amonestó a Javi López (min.35), Michu (min.57), Cristian Gómez (min.60), Amat (min.66), Verdú (min.72) y Lass (min.75).

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo séptima jornada de la Liga disputado en el estadio de Cornellá-El Prat ante 26.110 espectadores



¿Mentalidad ganadora, señor Unai?

Incapaz de gobernar un partido que tenía dominado con buen fútbol, el Valencia se deja empatar contra el Mallorca en la segunda mitad y provoca la ira de Mestalla - El "once" ofensivo de Emery responde en ataque pero se evapora en defensa.

 

 

El Valencia ha empatado con el Mallorca en Mestalla en un partido que parecía totalmente controlado por los chés. Los locales comenzaron ganando por 2-0 y terminaron perdiendo puntos muy valiosos que saben a gloria para los pupilos de Joaquín Caparrós.

El partido comenzó muy bien para un Valencia atrevido que saltó al campo con Soldado y Adúriz en punta. Los locales tocaban y dominaban el juego, disfrutando de prácticamente la totalidad de las ocasiones del encuentro contra un Mallorca que estuvo muchos minutos contra las cuerdas.

 

De hecho, Tino Costa, uno de los mejores del partido, creó múltiples ocasiones de peligro hasta que econtró el gol a en el minuto 23 de partido con un disparo desde fuera del área que engañó a Aouate tras golpear en la defensa bermellona.

Tras este tanto, los locales continuaron manteniendo la posesión de la pelota y disfrutando de más ocasiones, llegando el segundo del partido gracias a un tanto de Adúriz poco antes del final de la primera mitad. Tejera comprometió a Aouate con una mala cesión y el portero del equipo balear remató la jugada entregándole la pelota a un Adúriz que no falló.

Ya en el segundo tiempo, el Valencia arrancó con las mismas ganas de la primera mitad, jugando y atacando, aunque fue el Mallorca quien sorprendió con un gol de Nsue que metió el miedo en el cuerpo a los de Unai Emery, y con razón, ya que el propio Nsue realizaría la asistencia del gol del empate anotado por Víctor desde el segundo palo.

Este gol llenó de confianza al Mallorca y de nerviosismo a un Valencia pitado por su afición. Los de rojo se plantaron bien atrás y defendieron el empate, mientras que los locales no fueron capaces de trenzar buenas jugadas debido al temblor de piernas, por lo que el partido llegó a su fin con el resultado de 2-2.

Mestalla despidió a su equipo con pitos y pañuelos, a pesar de que se mantenga en la tercera plaza, pero lo cierto es que el Valencia volvió a confiarse como sucedió contra el PSV, aunque en esta ocasión terminó lamentándolo de verdad.

 


Valencia CF: Guaita, Barragán, Rami, Dealbert, Jordi Alba (Piatti, m.75), Feghouli, Parejo, Tino Costa, Jonas (Topal, m.86), Soldado y Aduriz (Mathieu, m.65).

RCD Mallorca: Aouate, Chico, Nunes, Ramis, Cáceres, Pereira (Pau Cendrós, m.86), Martí, Tejera (Alfaro, m.63), Álvaro (Chori Castro, m.89), Nsue y Víctor Casadesús.

Goles: 1-0, m.23: Tino Costa. 2-0, m.43: Aduriz. 2-1, m.57: Nsue. 2-2, m.66: Casadesús.

Árbitro: Muñiz Fernández (Colegio Asturiano). Amonestó por el Valencia a Rami y por el Mallorca a Cáceres, Casadesús, Chori Castro y Aouate. Expulsó con roja directa al valencianista Tino Costa (m.85).

Incidencias: Partido disputado en Mestalla ante 35.000 espectadores. Terreno de juego en aceptables condiciones.


Messi no pasa hambre, sigue devorando registros

El argentino logró los dos tantos de su equipo y suma treinta goles. Los culés dominaron de principio a fin el encuentro en El Sardinero.

 

 

El FC Barcelona completó un partido muy serio ante el Racing de Santander y logró una nueva victoria que deja al conjunto blaugrana con un buen sabor de boca. Los catalanes fueron mejores de principio a fin y solo su falta de eficacia de cara a puerta evitó que el resultado fuera más abultado.

Los de Pep Guardiola se hicieron dueños de la posesión de un modo casi insultante mientras el Racing de dedicaba a presionar con un gran derroche físico cuando Messi y compañía intentaban construir jugadas más allá de los tres cuartos de cancha.

Con el argentino muy marcado, era el momento para que otros actores secundarios de lujo como Iniesta o Fábregas hicieras de las suyas desgastando poco a poco a un rival que seguía dispuesto a cortar todas las jugadas que nacían de sus botas.

Pero que el Barcelona encontrase un espacio en la muralla diseñada por Álvaro Cervera en su debut era cuestión de tiempo. Pese al buen trabajo de Mario, que suplió al sancionado Toño haciendo un gran trabajo, los culés esperaban el momento adecuado para dar un zarpazo que por sí mismo podía ser definitivo.

 

Era el momento de que apareciera el de siempre, Leo Messi, que casi sin hacer ruido aprovechó una asistencia de Cesc Fábregas tras una jugada iniciada por Xavi para rematar e inaugurar el marcador antes del descanso.

El Barcelona evitó en ese momento cualquier rastro de precipitación y siguió cocinando a fuego lento el gol de la tranquilidad. Las jugadas llegaban casi por inercia mientras los hombres de Pep Guardiola se centraban en no conceder contragolpes a un Racing de Santander que hipotecaba todas sus opciones a buscar la espalda de los rivales con la velocidad de Babacar, Arana y Munitis.

Sin embargo, sería de nuevo Leo Messi el encargado de cerrar de forma definitiva el encuentro desde los once metros gracias a un penalti muy discutido en El Sardinero cometido por Cisma sobre Cesc Fábregas. El argentino no falló desde el punto fatídico para alcanzar los treinta goles en Liga esta temporada.

Pudo anotar más el Barcelona, pero ni Pedro, muy discreto a lo largo de todo el encuentro, ni Tello, con una oportunidad muy clara al final del choque, aumentaron un resultado que no reflejó la gran superioridad culé sobre el Racing. Partido dentro de los cauces de la lógica que terminó con un triunfo incontestable pero sin demasiado brillo.
 

 


Racing de Santander: Mario Fernández; Francis, Álvaro, Bernardo, Cisma; Colsa (Adrián, min 62), Gullón; Arana, Diop, Munitis (Jairo, min 70); y Babacar (Stuani, min 46).

FC Barcelona: Valdés; Alves, Mascherano, Puyol; Busquets, Xavi (Keita, min 83), Iniesta, Cesc Fabregas; Cuenca (Tello, min 73), Messi y Pedro (Adriano, min 87).

Goles: 0-1, min 29. Messi. 0-2, min 56. Messi, de penalti.

Árbitro: Carlos Del Cerro Grande (Comité Madrileño). Mostró cartulinas amarillas a Francis, Babacar, Cisma, Diop, Stuani y Álvaro por el Racing.

Incidencias: Partido de la vigésimaséptima jornada de la Liga de Primera División, disputado en los Campos de Sport de El Sardinero ante 18.885 espectadores. Antes del partido se guardó un minuto de silencio en memoria del exjugador cántabro del Racing y del Real Madrid Marcos Alonso Imaz, Marquitos, por cuyo fallecimiento los jugadores del Racing lucieron brazaletes negros.


Osasuna despierta al Athletic del Teatro de los Sueños

Los rojillos hicieron lo que el Manchester United no, y superaron a los bilbaínos en el Reyno de Navarra. Dos balones parados bastaron para ya ser quintos junto al Levante. 

 

 

Fueron los Diablos Rojillos. El Osasuna hizo lo que el Manchester United no, y superó al Athletic de Bilbao en Pamplona. Dos goles en el primer tiempo a balón parado bastaron para que el Reyno de Navarra celebre un triunfo que vale oro. El elenco bilbaíno desaprovecha una buena oportunidad de colocarse cuarto junto al Málaga, mientras que los locales alcanzan el quinto puesto con 38 unidades, compartiendo privilegio con el Levante.

Jugándose un lugar en la próxima Champions League y en uno de los campos más difíciles de la Liga española, Bielsa daba descanso y dejaba en el banquillo a varios titulares y dos campeones del mundo como Fernando Llorente y Javi Martínez. Toquero y San José eran sus reemplazos. Así pues, el argentino sacaba el siguiente once: Iraizoz, Iraola, San José, Amorebieta, Aurtenetxe, Iturraspe, De Marcos, Iñigo Pérez, Susaeta, Muniain y Toquero. Por su parte, Mendilibar plantearía un partido muy disputado con la siguiente alineación: Andrés Fernández, Marc Bertrán, Sergio, Miguel Flaño, Damiá, Puñal, Nekounam, Cejudo, Raúl García, Lamah y Nino.

El equipo rojiblanco (esta noche de verde) hizo una primera parte para el olvido en la que sólo generó una buena ocasión con De Marcos, cuyo remate pegó en el poste derecho de Andrés Fernández y no pudo ser la igualdad parcial. Porque el Osasuna ya se había puesto en ventaja desde temprano, a los 9 minutos, cuando Iturraspe marcaba en propia parte el 1-0 para los locales. Poco de merecimientos hasta entonces, pero desde la apertura del marcador los de Mendilibar crecieron en juego y ocasiones. Casi todas, a balón parado. Las jugadas de estrategia, especialidad del Athletic, serían paradójicamente las que más lastimaron a los de Bielsa.

De hecho el segundo gol del Osasuna llegó con esa fórmula. Como en el primero, Puñal la puso genial en el área para que Raúl García –desde la misma posición que Iturraspe había marcado el autogol- cabeceara a la red y batiera a Iraizoz. El 2-0 confirmó lo que se presumía visto lo visto en la primera parte: habría cambios rápidos en la segunda mitad. Así fue que Bielsa sacó a Llorente y Ander Herrera para los últimos cuarenta y cinco minutos, y esas modificaciones dieron resultado de inmediato. Tardó diez minutos Ander en habilitar a Llorente, que fusiló a Fernández con un potente disparo de derecha.

El Athletic fue sin demasiadas ideas y sin el toque del que presumió en anteriores partidos como ante el Manchester United, pero lo intentó. Dejando espacios para los contragolpes del Osasuna, tenía que arriesgar. Los rojillos no acertaban ninguno y daban vida a un conjunto rojiblanco imperecto. El equipo de Mendilibar no sufrió hasta que el árbitro mostró los minutos de compensación. Allí los visitantes se mostraron desesperados y tuvieron en tres minutos las tres ocasiones más claras del complemento. No empataron de milagro, aunque el mérito es para las buenas paradas de Fernández. Sin tiempo para más, el Reyno de Navarra celebró el triunfo por todo lo alto.


Atlético Osasuna: Andrés Fernández; Marc Bertrán, Sergio, Miguel Flaño, Damià; Puñal, Nekounam; Cejudo (Raoul Loé, m.83), Raúl García, Lamah (Annunziata, m.89); y Nino (Manu Omwu, m.67).

Athletic de Bilbao: Iraizoz; Iraola, San José, Amorebieta, Aurtenetxe (Ander Herrera, m.46); Iturraspe (Llorente, m.46); Susaeta, De Marcos, Íñigo Pérez, Muniain; y Toquero (Ibai Gómez, m.61).

Goles: 1-0, m.9: Iturraspe, en propia puerta. 2-0, m.31: Raúl García. 2-1, m.55: Llorente.

Árbitro: Álvarez Izquierdo (Comité Catalán). Amonestó a Lamah (m.16) y Miguel Flaño (m.60), de Osasuna, y a Toquero (m.2), Iturraspe (m.42), San José (m.44), Amorebieta (m.59), Ibai Gómez (m.72), Ander Herrera (m.74) y De Marcos (m.82), del Athletic.

Incidencias: Partido de la vigésima séptima jornada de Liga disputado en el estadio Reyno de Navarra ante 16.718 espectadores.


El Submarino Amarillo regresa a aguas turbulentas

Los madrileños llevaban cinco jornadas sin conocer la victoria. En el Submarino siguen mirando de reojo al descenso tras caer en el Madrigal.

 

 

El Getafe logró una importante victoria en el compromiso que midió al conjunto azulón y al Villarreal en El Madrigal. Los de Luis García no tuvieron errores y se aprovecharon de los nervios de su rival para llevarse los tres puntos frente a uno de los equipos llamados a luchar por la salvación hasta la última jornada.

Los madrileños lograron muy pronto adelantarse en el marcador gracias a Diego Castro: tras un despiste grave de la zaga amarilla, Abdel Barrada combinó con Miku para que fuera el venezolano el encargado de dar el pase de definitivo al jugador de Pontevedra, que anotó un gran tanto.

A partir de ese momento, el Villarreal se vio obligado a responder y poco a poco fue despertando en un partido al que había llegado tarde. Sin la conexión entre los hombres de calidad, los de Molina se encomendaban a una acción brillante de alguno de sus futbolistas.

Las ocasiones empezaron a llegar para los locales y Borja Valero tuvo en el minuto 17 un penalti para lograr desnivelar la balanza, pero Moyá consiguió atajar su disparo. También Marcos Senna dio un gran aviso lanzando un balón que se estrelló en el larguero. El Getafe se preparaba ya para visitar vestuarios pero una falta de Cata Díaz en el área dio lugar a un penalti muy riguroso en contra de los madrileños.

No falló esta vez Nilmar, que puso la igualada y encauzó el camino de una segunda parte igualada en la que los visitantes buscaron sus opciones al contragolpe controlando el tempo del partido.

El Villarreal era el encargado de mantener la posesión del esférico, pero sus acciones no generaban demasiado peligro para la portería de Moyá. Todo lo contrario ocurría en el área de Diego López, que vio cómo en el minuto 72 Abdel ponía el tanto decisivo del encuentro tras una jugada por la banda derecha entre Diego Castro y Pedro León. El Getafe ponía la puntilla.

Lo intento más con coraje que intentando crear fútbol el Villarreal, que sigue mostrándose como un equipo con demasiadas dudas tanto en ataque como en defensa. Los de Molina suman ya tres derrotas en cuatro partidos y se encuentran a solo tres puntos de la zona de descenso. El Getafe, por su parte, se coloca en la decimotercera posición con 32 puntos.

 


Villarreal CF: Diego López; Ángel, Gonzalo (Marco Ruben Min. 61), Zapata, Jaume Costa; Senna, Bruno, Borja Valero; Cani, Camuñas (Castellani Min. 87), Nilmar (Joselu Min. 69).

Getafe CF: Moya, Valera, Cata Díaz, Alexis, Mané; Michel, Lacen; Pedro León (Casquero min. 73), Barrada (Miguel Torres min. 86), Diego Castro; Miku (Dani Güiza Min. 69).

Goles: 0-1, m.6. Diego Castro 1-1, m 45. Nilmar 1-2, m. 72 Barrada.

Árbitro: Pérez Montero (Comité Andaluz). Tarjetas amarillas para los locales Gonzalo Rodríguez, Jaume Costa y Bruno; y para los visitantes Míchel, Alexis y Cata Díaz,

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 27 del campeonato nacional de liga, disputado en el campo municipal de deportes del Madrigal, con la presencia de 18.000 espectadores y con un terreno de juego en muy buenas condiciones.

CLASIFICACIÓN PROVISIONAL DE LA LIGA BBVA

Posición
Equipo
Puntos
Jugados
Ganados
Empatados
Perdidos
GF
GC
1
REAL MADRID
70
26 23 1 2 88 23
2
FC BARCELONA
60
26 18 6 2 75 19
3
VALENCIA CF
44
26 12 8 6 40 31
4
MÁLAGA CF
40
26 12 4 10 37 37
5
LEVANTE UD
38
26 11 5 10 37 37
6
ATLÉTICO OSASUNA
38
26 9 11 6 31 40
7
ATHLETIC DE BILBAO
37
26 9 10 7 42 34
8
ATLÉTICO DE MADRID
36
26 9 9 8 36 31
9
RCD ESPANYOL
36
26 10 6 10 32 35
10
RAYO VALLECANO
34
26 10 4 12 37 43
11
REAL SOCIEDAD
33
26 9 6 11 30 36
12
SEVILLA FC
33
26 8 9 9 27 29
13
GETAFE CF
32
26 8 8 10 27 35
14
RCD MALLORCA
30
26 7 9 10 26 32
15
REAL BETIS BALOMPIÉ
30
26 9 3 14 31 38
16
GRANADA CF
28
26 8 4 14 22 37
17
VILLARREAL CF
27
26 6 9 11 27 40
18
RACING DE SANTANDER
24
26 4 12 10 21 37
19
SPORTING DE GIJÓN
24
26 6 6 14 24 48
20
REAL ZARAGOZA
18
26 4 6 16 21 49

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