Francia es campeona del Mundo. El cuadro galo bordará la segunda estrella en su camiseta, después de haber derrotado con suficiencia a Croacia en la final de la Copa del Mundo disputada en Rusia. El equipo entrenado por Didier Deschamps ha dominado con puño de hierro el torneo, siendo líder de su grupo y sin necesidad de una sola prórroga en las eliminatorias. Espíritu colectivo y varios nombres a gran nivel han sido la explicación de este rotundo éxito. Estas han sido las claves
JUVENTUD
La de este domingo en Luzhniki es la graduación, casi de doctorado, de los chicos franceses que tomaron las banderas de los campeones mundiales de 1998. Era una prueba de máxima exigencia contra un equipo croata que llegaba con la moral por las nubes, que amenazaba con su mezcla de coraje y talento y que tenía ventaja en términos de experiencia. Y se hicieron grandes en 90 minutos y fueron con personalidad a cada cierre, esperaron con paciencia a que se abrieran los espacios, confiaron en ellos y se soltaron a jugar sin miedos. Mbappé no había nacido el día que Zidane y los suyos levantaban la Copa en París y en Moscú se apuntó un golazo como los del 10. El examen se aprobó con lujo y el nuevo ídolo nacional tiene cara de niño, 19 añitos, un futuro más que prometedor y una gambeta que aún el mundo no le acaba de reconocer con suficiente justicia
Cierto es que a veces la ausencia del talento se compensa con sacrificio. Pero no se llega a la cumbre del fútbol mundial sin él y la prueba es Francia. Hoy se habla de Varane, Umtiti, Pavard, Lucas Hernández, Kanté, Lemar, Dembelé, Tolisso, Thauvin, Sidibé, Mendy y por supuesto Mbappé, todos nacidos después de los 90, y se juntan con Griezmann y Pogba y Matuidi y Lloris y da envidia ver cómo en cada puesto tienen a un crack o a uno en camino de serlo. ¡Y no les hizo falta Rabiot! ¡Y nadie se acuerda ya de Benzema!. La experiencia de la última Eurocopa obligó a jubilar a unos y apostar por otros y estos últimos son hoy los mejores del mundo
Francia apostó con absoluta claridad desde el día del debut contra Australia (2-1) y hasta el día de la final contra Croacia (4-2) no necesitaba tener la pelota todo el partido porque con un par de ocasiones le bastaba. Habrá sufrido contra Perú (1-0) y contra Dinamarca (0-0) pero frente a Argentina el triunfo por 4-3 fue de antología y confirmó la táctica frente a la peligrosa Bélgica (1-0). Renunciar al balón para que, una vez se recupera, se use con proyección, velocidad, ubicación, talento y punch es la pauta futbolística que deja como legado el nuevo Rey
Muchos miraban a Inglaterra y se preguntaban si no había llegado demasiado lejos después de no haber ganado los duelos definitivos. Pero nadie dudó ni un segundo de Francia, que sólo dejó dos puntos en el camino contra Dinamarca, en primera ronda. A todos los superó, a todos los castigó, a todos les hizo sentir el peso de su talento. A Argentina, por ejemplo, le dio una cátedra de la mano de Mbappé que todavía está en proceso de duelo. A Bélgica le cobró una vez y lo aguantó con hombría por 89 minutos. A todos los que había que superar los dejó en el camino con fútbol, sin duda un sello especial para el título indiscutible que logró en Moscú