viernes, 18 de enero de 2013

ANÁLISIS DE LOS CUARTOS DE FINAL DE LA COPA DEL REY (Partidos de ida)


La trilogía arranca con polémica

El equipo blanco se encontró con dos goles aislados cuando más atacaba el Valencia, que acabó muy disgustado con el árbitro. Guaita evitó que Ronaldo sentenciara la eliminatoria

 

 

El Real Madrid se recupera en la competición a la que puede agarrarse con una victoria clara por 2-0. Tan clara en el electrónico como discutible por lo visto sobre el césped. Y es que el Valencia fue mejor que los blancos durante buena parte del partido, pero falló en las más importantes de las suertes en el fútbol: encajó más y marcó menos. Jonás tuvo dos buenísimas oportunidades, y justo después de cada una de ellas, los pupilos de Mourinho se encontraron con sendos goles. Primero uno de Benzema en un contraataque en el minuto 35, y después uno de Guardado en propia puerta en una subida aislada al minuto 75. Bien pudo haber sentenciado la eliminatoria al final Ronaldo, eso sí. Pero el dios fútbol quiso impartir algo de justicia deportiva erigiendo a Guaita en el salvador final. Y es que además de no encontrarse fino en las porterías, al Valencia tampoco le benefició en nada la actuación de Muñiz Fernández con tres fueras de juego que no parecían y dos posibles penaltis reclamados y no concedidos. La guinda a un partido que tuvo de todo.

 

Se esperaba que Madrid y Valencia cumplieran con la tradición y que brindaran una eliminatoria de quilates, de alto voltaje. Y desde luego que desde el principio ambos dejaron su impronta con tal propósito, en un partido jugado de poder a poder. Aunque eso sí, fue el Real Madrid el que primero golpeó al minuto 35. Llevaba algunos minutos el Valencia controlando el balón, encerrando al Real Madrid en su área. Soldado se hubiera plantado frente a Iker si Muñiz Fernández no hubiera decretado un fuera de juego que no era tal. Y apenas un minuto antes, solo desde los once metros Jonás había rematado al cuerpo de Iker una buena cesión de Guardado por banda.

Sin embargo, fue el Real Madrid el que atizó primero. Essien recupera en su propia área una mala entrega de Parejo, sube el balón ante la pasividad che, y cede a Khedira, que al primer toque asiste a Benzema para que resuelva el mano a mano. Como le gusta al Madrid de Mourinho. Haciendo del contraataque un arte. Asequible, incluso.

Cambió algo el partido en la segunda parte. Seguro no intencionadamente, pero lo cierto es que el intercambio de acercamientos tornó en un mediocampismo atropellado, con continuas pérdidas y faltas alrededor de la galleta. Muñiz Fernández bien pudo haber desquiciado al Valencia con un posible penalti de Carvalho a Jonas no pitado, y otros dos fueras de juego de Soldado que no lo parecían cuando se quedaba solo. Sin embargo, si bien otros años el equipo che se dejaba llevar sabedor de que ya tenía en el trencilla de turno la justificación para el tropiezo, esta vez siguió remando y remando mientras pudo, dominando incluso al Madrid.


No obstante, mediada la segunda parte, Jonás tuvo la ocasión del partido, y quién sabe si de la eliminatoria. Ever se marcó un chotis en el centro del campo con el balón, pegado a los pies, hasta que encontró a Soldado en profundidad. El ariete ex madridista golpeó cruzado con toda su furia, y Casillas sólo pudo mal despejarla al centro del área, justo donde se encontraba el atacante che, al que se le apagó la luz. Con toda la portería vacía la mandó inexplicablemente fuera. Y seguro que se acordará de ello, pues como ya sucediera en la primera mitad, cuando más achuchaba el Valencia fue cuando llegó un nuevo gol, esta vez con la firma de Guardado. Él no quería, pero se introdujo el balón en su propia puerta después de un buen centro atrás de Coentrao cuando Higuaín llegaba como un toro desde atrás. Seguramente lo hubiera marcado el Pipita, será el consuelo oficial para el mexicano.

Y ahí ya sí que se decantó la balanza definitivamente. Pues pudo haber rematado la eliminatoria el Real Madrid. No lo pudo hacer. Guaita evitó el gol por dos ocasiones en sendas clarísimas ocasiones frente al mismísimo Ronaldo. Tenía toda la portería para él, pero el cancerbero se hizo gigante frente al '7' blanco en lo que fue la guinda final a un completísimo partido que tanto el Valencia como el Real Madrid lo tuvieron en su mano. Serían eso sí los blancos los que se encontrarían con medio pie en las semifinales. Le hacía falta.



Real Madrid: Casillas; Essien, Raúl Albiol, Carvalho, Marcelo (Coentrao, m.46); Khedira, Xabi Alonso; Özil, Modric (Di María, m.62), Cristiano Ronaldo; y Benzema (Higuaín, m.69).

Valencia CF: Guaita, Joao Pereira, Ramí, Víctor Ruiz, Guardado, Tino Costa (Gago, m.79), Ever Banega (Valdéz, m.84), Dani Parejo, Piatti, Jonás y Soldado.

Goles: 1-0, m.37: Benzema. 2-0, m.73: Guardado en propia puerta.

Árbitro: Muñiz Fernández (Comité Asturiano). Amonestó a Raúl Albiol (70) y Xabi Alonso (75) y Khedira (90) por el Real Madrid; Tino Costa (47), Víctor Ruiz (68) y Soldado (74) por el Valencia. Expulsó al técnico Ernesto Valverde por protestar en el minuto 74.

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de Copa del Rey, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante la presencia de 68.000 espectadores.


La emoción se aplaza una semana

Maños y sevillistas firmaron un partido con mucho fútbol en el centro del campo y poco acierto de cara a portería que les condena a un decisivo encuentro de vuelta

 

 

No pudo debutar con victoria Unai Emery en el banquillo sevillista, aunque al menos frenó la sangría de derrotas del Sevilla como visitante. El empate a cero, en un partido muy táctico y físico, deja todo por decidir para la vuelta de dentro de una semana en Nervión.

Introdujo muy pocos cambios en el once el técnico debutante, lo más destacable fue la inclusión de Palop, que seguirá siendo el portero de la Copa, Maduro que sustituyó al lesionado Kondogbia y Coke en lugar del brasileño Cicinho. El que sí que rotó fue Jiménez, que recuperó a Movilla y a Álvaro e introdujo como novedades a Javi Álamo y Wilchez. 

La primera mitad estuvo muy trabada, demasiadas faltas y poco fútbol, con las salvedades de Rakitic y Movilla que intentaron dar algo de creatividad a los equipos. Si algo pudo mejorar Emery fue la defensa sevillista, muy férrea en el día de hoy, que no permitió ni una sola incursión de los “blanquillos”, que solo lo intentaron  con tiros lejanos. Las ocasiones más claras en el primer acto fueron para los visitantes, que la tuvieron en las botas de Negredo y con un cabezazo de Hedwiges Maduro que salió rozando el palo. 

Con la igualdad, tanto en el marcador como en el juego se llegaría al descanso. En la segunda parte, ambas escuadras dejaron un poco atrás el conservadurismo inicial y estiraron líneas. Javi Álamo le creó bastantes problemas a Navarro por la banda izquierda, aunque sin duda el que pudo adelantar a los maños fue Helder Postiga, que fusiló a Palop desde fuera del área en dos ocasiones, que el valenciano contestó con dos paradones. El entrenador zaragocista puso toda la carne en el asador sacando a Montañés y Oriol.

El Sevilla lo intentaba a la contra con alguna infructuosa incursión de Navas que no encontraron rematadores. Los blanquirojos seguían totalmente negados de cara a puerta como en la recién finalizada era Míchel. Las más claras la tuvieron Negredo con un disparo a la media vuelta que atajó Leo Franco y un lanzamiento lateral de Navas que se fue alto. 

Emery agotaría los cambios con la entrada del bosnio Stevanovic en lugar de Rakitic, que fue de lo mejor de este nuevo Sevilla, y tendría que apuntalar la defensa dando entrada a Botía para sustituir al lesionado Spahic. Por su parte, Jiménez prefirió amarrar el empate dando entrada a Loovens en lugar de Paredes, para aportar frescura a su extenuada defensa.

En los últimos minutos no se movería el marcador, ya que  volvieron los miedos a perder y ambos equipos dieron por bueno el empate a cero que deja todo por decidir para la vuelta. Buen debut de de Emery en el Sevilla y gran planteamiento de Jiménez al que un empate en el Pizjuán le vale para estar en semifinales.



Real Zaragoza: Leo Franco; Sapunaru, Álvaro, Paredes (Loovens, min.88), Abraham; Javi Álamo, Movilla, Apoño, Wílchez (Edu Oriol, min.57); Víctor Rodríguez (Montañés, min.69) y Postiga.

Sevilla: Palop; Coke, Spahic (Botía, min.83), Fazio, Navarro; Navas, Maduro, Medel, Reyes (Manu del Moral, min.71); Rakitic (Stevanovic, min.88) y Negredo.

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro). Amonestó con cartulina amarilla por el Real Zaragoza a Álvaro y Paredes y por el Sevilla a Navas y Maduro.

Incidencias: Partido correspondiente a la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio de La Romareda ante unos 15.000 espectadores, que se incrementaron algo con el paso de los minutos, en tarde fresca y terreno de juego en buen estado. Se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento por el que fuera delegado de campo del Real Zaragoza Arturo Casamayor.

 

El Barça es humano, que se lo pregunten al Málaga

El Málaga empató ante el Barcelona en un encuentro un tanto desangelado en el que los culés sufrieron al final a pesar de haber dominado en la mayoría del partido

 

 

Se jugó en el Camp Nou el partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, con la suplencia de Piqué, Cesc, Xavi, Busquets, Pedro y Jordi Alba. Aunque se apostaba que Tito Vilanova jugaría con un cuadro estelar después de la experiencia del pasado domingo en La Rosaleda, el técnico azulgrana decidió dar descanso a varias de sus piezas importantes.

Después del gran partido que ambos equipos ofrecieron el pasado domingo en La Rosaleda, las expectativas para este encuentro no podían ser otras más que un encuentro con la presión en ataque desde los primeros minutos.


Thiago Alcántara fue el primero en llegar a la portería de Kameni y un gol casi cantado se quedó en un balón perdido en el área malagueña. La segunda oportunidad fue para Alexis Sánchez, quien jugaba por la banda derecha en lugar de Pedro. Sin embargo, el chileno falló en el intento y se llevó una tarjeta amarilla por el piscinazo realizado.

Lionel Messi también falló un disparo y el esférico se fue por encima del larguero hasta llegar a la grada. Después llegó el tan ansiado gol al minuto 18. Carles Puyol era el encargado de estrenar el marcador, aunque era anulado por un claro fuera de lugar del capitán azulgrana.

El gol llegó y no fue para el Barcelona sino para los andaluces en el '25, cuando Pinto despejó el balón hacia los pies de un Thiago Alcántara que, confiado, lo recibió pero no vio que era Iturra quien en sus espaldas se acercaba velozmente para robar el cuero y de paso rematar en la portería de Pinto, también desprevenido por la rapidez de la jugada.

Los blanquiazules festejaron en grande pero la alegría les duró poco. Fue Leo Messi quien apenas tres minutos después del gol recibido, puso el empate. El rosarino robó el balón desde la banda derecha y con su ya particular regate se quitó de encima a Eliseu, que intentaba cortarle el paso. Con un remate cruzado en el área, el 10 puso el empate para abrir la lata goleadora.

Pasaron 60 segundos del gol del empate y fue Puyol quien adelantó a los culés. Un córner de los azulgranas hizo que el balón llegara al capitán, quien en la búsqueda del balón remató a éste de espaldas, marcando un buen gol. Primero pegó en el palo izquierdo del cancerbero malaguista, para luego estamparse en el fondo de la red.

Al inicio de la segunda parte, la intensidad seguía su curso, el Barça continuaba dominando y fue en el minuto 57 cuando Lionel Messi volvió a intentarlo, con un disparo potente que Kameni rechazó de manera algo curiosa y cayendo al suelo para quedar con los pies viendo al cielo. Andrés Iniesta continuó con sus cátedras de fútbol como ya lo hiciera el domingo pasado ante el mismo equipo.

Los de Manuel Pellegrini doblegados por el equipo de Tito Vilanova, llegaron a tener alguna oportunidad, pero José Manuel Pinto fue el salvador de la escuadra catalana que por descuido podría haber dejado que el sediendo rival le anotara, sobre todo con un Iturra que fue el más destacable del conjunto andaluz.

Vilanova decidió hacer cambios, Pedro y Cesc Fàbregas entraron en refresco de Cristian Tello y Alexis Sánchez, este último se ganó algunos silbidos de la afición que sigue viendo cómo desperdicia buenas oportunidades sin hacer gol. Sólo entrar al terreno de juego, Pedro, quien corría desde el centro del campo hacia Kameni, fue derribado por Monreal que se llevó la tarjeta roja en manos del colegiado José Luis González González.

Xavi Hernández entró por Thiago ya en la recta final del encuentro cuando el partido se iba desinflando poco a poco. El gol sorpresivo llegó en manos de Camacho quien tomó desprevenido a Pinto y a la defensa azulgrana. En un cobro de falta el balón llegó al centro del área, donde cayó Adriano y fue el peligroso Camacho quien remató en la portería de Pinto.

Los últimos minutos del partido fueron intensos, el Barça lo intento hasta el final, pero no logró sacar la victoria ante un buen Málaga que supo complicarle la existencia a los culés que no tuvieron la mejor de sus noches.



FC Barcelona: Pinto; Montoya, Mascherano, Puyol, Adriano, Song, Thiago (Xavi, min.78), Iniesta, Alexis (Cesc, min.74) , Messi y Tello (Pedro, min.74)

Málaga CF: Kameni; Gámez, Sergio Sánchez, Welington, Eliseu, Iturra, Camacho, Buonanotte (Duda, min.68), Portillo (Monreal, min.46), Seba Fernández y Saviola (Santa Cruz, min.65).

Goles: 0-1: Iturra, min.25. 1-1: Messi, min,29. 2-1: Puyol, min.30. 2-2: Camacho, min.89.

Árbitro: González González (Comité castellano-leonés). Mostró tarjeta amarilla a Alexis (min.10), Messi (min.33), Eliseu (min.38) y expulsó con roja directa a Monreal (min.75).

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el Camp Nou ante 55.151 espectadores. Antes del encuentro, el delantero argentino Lionel Messi ofreció a la afición su cuarto Balón de Oro consecutivo. Los jugadores del Málaga lucieron brazalete negro por el fallecimiento de Antonio Pérez-Gascón, presidente del Málaga en la década de los ochenta.


La pegada y Courtois encarrilan el pase a semis

Los colchoneros fueron superiores en la primera parte y se relajaron en la segunda, donde el meta belga fue el héroe

 

 

El Atlético de Madrid venció por dos goles a cero al Betis en el Vicente Calderón, en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey.

Los de Simeone empezaron el choque con mucha intensidad y con un Diego Costa espectacular. De las botas del brasileño nació el primero de Radamel Falcao, en el minuto 11. La jugada fue preciosa. Gabi recuperó un balón en campo enemigo antes de pasar a Diego Costa, que tras darse un lujito ante Perquis, cedió a Raúl García, cuyo centro perfecto lo cabeceó Falcao sin que su marcador descubriese por dónde le había sobrepasado.

Los locales siguieron apretando y tras una larga jugada, Filipe Luis ponía el segundo en el 23, otra vez tras asistencia de Diego Costa. El Betis tuvo su oportunidad en una múltiple ocasión que Courtois y la defensa se encargaron de rechazar hasta cuatro veces.

En la renaudación, el Betis tomó el control del partido. Jorge Molina tuvo el gol pero otra vez el portero belga salvó a los locales. El Betis siguió dominando ante un Atlético desconocido, jugando al pelotazo y despejando todas las jugadas sin control.

Finalmente, la buena defensa local permitió acabar el partido con 2-0, un gran resultado para la vuelta en el Benito Villamarín.

 


Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran (Cata Díaz, m. 69), Miranda, Godín, Filipe; Raúl García, Gabi, Mario Suárez, Arda Turan (Cristian Rodríguez, m. 82); Diego Costa (Koke, m. 72) y Falcao.

Real Betis Balompié: Casto; Chica, Paulao, Perquis (Dorado, m. 29), Nacho; Beñat, Rubén Pérez (Nono, m. 78); Campbell, Vilarchao (Cañas, m. 63), Rubén Castro; y Jorge Molina.

Goles: 1-0, m. 10: Falcao cabecea un centro de Raúl García, tras una jugada individual de Diego Costa. 2-0, m. 23: Filipe Luis, de disparo potente y raso desde dentro del área tras un rechace.

Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Amonestó a los locales Diego Costa (m. 7), Raúl García (m. 42) y Arda Turan (m. 80) y al visitante Paulao (m. 57).

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 40.000 espectadores. Vicente del Bosque, seleccionador español, presenció el partido desde el palco.

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