lunes, 12 de enero de 2015

ANÁLISIS DE LA JORNADA 18 DE LA LIGA BBVA


Atenazados por el miedo a perder

Granotas y coruñeses empataron a nada en un encuentro donde ambos contendientes necesitaban ganar para despegarse del la linde del descenso donde se hallan situados

 

 

Levante y Deportivo de La Coruña continúan jugando con fuego. Su empate a cero no fue otra cosa que el reflejo de los dos equipos, dos entrenadores, que no quisieron cometer error alguno que le ajusticiase en la tarde de ayer. Aquel 0-4 donde hace dos años José Javier Barkero acusaba a sus compañeros de dejarse perder en la tarde que Juan Carlos Valerón se despedía del gol en Primera División tuvo más historia que lo contemplado en Orriols esta noche.

En el ambiente, la noción que quien marcara primero sería el ganador. Como en el colegio, quien metiera ganara. No ocurrió ni lo uno ni lo otro. Justificando que a los gallegos no se le dan sus visitas a Orriols, pero a los que se le resiste una segunda victoria segunda, a la vez que los levantinos no pierden en casa como Lucas Alcaraz como técnico, el empate era lo más lógico. Y así fue.

El partido se quería reservar para la segunda mitad. En la primera predominó la pizarra y el esquema táctico. Ninguno de los 22 jugadores se salían del guión, se limitaban a colocarse bien sobre el terreno de juego y destinaban sus balones largos a carreras imposibles o a múltiples centros al área que eran despejados por los defensas rivales. En este atasco el único que brilló fue Iván Cavaleiro que se obstinaba en enganchar, sobre todo con José Rodríguez, para crear alguna ocasión para el Deportivo de La Coruña. El lisboeta protagonizó tres remates (el que más) en los primeros 45 minutos, pero más allá de ellos fue el que contribuyó a generar las contras que los coruñeses realizaban siempre en jugadas a balón parado favorables al Levante.

A los puntos fue mejor el Depor, al que se le anuló correctamente un gol a Lopo y al que no se le concedió ninguna de las dos manos de Nikos reclamadas, pero la mayor ocasión fue para los granotas en un cabezazo picado en el primer minuto de Barral que no finiquitó bien su buen desmarque en el primer corner del choque. Y es que si la primera oportunidad de la primera parte fue local, las primeras en la segunda fueron visitantes. Toché tiraría el muñeco tras una buena acción por alto de José Rodríguez que Iván Cavaleiro no engancharía de primeras aunque su toque facilitaría el desmarque del murciano. Y poco después, un gran pase entre líneas de Juan Domínguez habilitaría a Sidnei cuyo remate se estamparía en el cuerpo de Diego Mariño.

El partido ganó en verticalidad y vistosidad, pero no en lucidez. Mientras Oriol Riera, querido por el Levante, debutaba con el Deportivo de La Coruña, David Barral era sustituido. Solo Cheryshev en este liga contra el Elche (5) remató más veces sin encontrar los tres palos que el gaditano en el día de hoy (4). Sus remates desviados fueron la única baza de un Levante reservón que no llegó a tirar a puerta. Los valencianos son el equipo de la liga que más partidos suma (4) sin rematar entre los tres palos. Por lo demás, solo las acciones individuales y egoístas de Isaac Cuenca se alternarían con la movilidad de Iván Cavaleiro por reseñar alguna acción de peligro digna de mención en un partido que no pasará a los anales del fútbol.


 

Levante UD: Mariño, Iván López (El Zhar, m.68), David Navarro, Vyntra, Nikos, Simao, Sissoko, Morales, Víctor Casadesús, Ivanschitz (Xumetra, m.80) y Barral (Rubén, m.68).

RC Deportivo: Fabricio, Juanfran, Lopo, Sidnei, Lusinho, Álex Bergantiños, Juan Domínguez, José Rodríguez (Laure, m.86), Cavaleiro, Toché (Oriol Riera, m.58) y Cuenca (Mendunjanin, m.80).

Árbitro: Pérez Montero (Colegio Andaluz). Amonestó por el Levante a Víctor Casadesús, Barral y David Navarro y por el Deportivo a Álex Bergantiños, Lopo y Sidnei.

Incidencias: Partido disputado en el estadio Ciutat de València ante unos 10.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por las víctimas de la masacre 'Charlie Hebdo' que ha causado muertos en Francia desde el miércoles hasta hoy.

 


Hala niño, fin al bache y a pensar en la remontada

El conjunto blanco golea con facilidad al espanyolista con goles de James Rodríguez, Gareth Bale y Nacho y adquiere confianza de cara a recibir al Atlético en Copa

 

 

Dicen los que saben de esto que todo equipo que haya coqueteado con la historia refleja muy bien la personalidad de su entrenador. El Milan y Arrigo Sacchi, el Barcelona y Pep Guardiola o el Manchester United y sir Alex Ferguson. Elijan el binomio que quieran. Pero todo equipo histórico es directamente proporcional a las enseñanzas de su entrenador. Y este Real Madrid no iba a ser menos. Tras el apogeo de las 22 victorias consecutivas y la minicrisis de las últimas dos derrotas, el Real Madrid vuelve ante el Espanyol a la senda de la victoria con la misma parsimonia y creatividad con la que Carlo Ancelotti ha forjado este inolvidable equipo. Sin prisas pero sin pausas. Con confianza y, sobre todo, evitando pretéritos alarmismos –véase Can Barça para ver lo contrario–.

Así, el Real Madrid comenzó el partido ante el correoso Espanyol de Sergio González con la tranquilidad de saber que su superioridad terminaría imponiéndose sí o sí. Quizá demasiado tranquilo. Y es que el conjunto perico pudo dar algún que otro susto pues disfrutó de dos aproximaciones peligrosas en los primeros cinco minutos del encuentro, protagonizadas por sus dos pilares en ataque, Felipe Caicedo y Sergio García. Pero sus disparos solo fueron un simple espejismo. El Real Madrid inició su maquinaria gracias al buen hacer en el centro del campo de Toni Kroos y la obra maestra de Ancelotti, un Isco Alarcón que se agiganta a cada partido, y fue metiendo el miedo en el cuerpo a una muy buen plantada zaga espanyolista.

Entonces, es cuando surge la figura de James Rodríguez, un artista que trabaja para el equipo como el que más, para abrir el marcador en la primera llegada seria del conjunto madridista. Gol al más puro estilo voleivolístico. Balón en largo de Bale hacia Cristiano Ronaldo y el portugués la deja de cara para la mágica aparición del internacional colombiano, que bate a Kiko Casilla con un sutil zurdazo raso. Tres toques y los tres con tremendo sentido ofensivo. Auténtico fútbol de salón en el que el trío de centrocampistas utilizados por Ancelotti hasta que regrese al equipo Modric se postulan como auténticos pilares del fútbol neorromántico que desea desarrollar Carlo Ancelotti.

El gol, a los once minutos, lejos de alentar la reacción espanyolista, legitimó la propuesta del Real Madrid de realizar un fútbol manso en cuanto a intensidad pero lo más efectivo posible. Así llega el segundo tanto del choque en el minuto 27. Una falta desde unos 35 metros que se pide Gareth Bale y que ejecuta con su típico golpeo a lo ‘folha seca’ para goce de los aficionados madridistas. El galés, criticado por su fallo en Mestalla, se reivindica de esta manera como un perfecto competidor de Cristiano Ronaldo como lanzador de faltas del Real Madrid –ambos jugadores ya han marcado los mismos goles de falta directa desde que juegan en el conjunto blanco (tres cada uno, los mismos que Lionel Messi)–.

Si tranquila fue la primera parte en cuento a intensidad competitiva, mucho más plácido fue el segundo acto. Y eso que se produjo una de esas jugadas que pudo cambiar el sino del encuentro. Una de las novedades de Ancelotti en este encuentro, la inclusión de Fábio Coentrão como lateral izquierdo, tuvo que dejar el campo antes de tiempo por una dura entrada castigada con expulsión. Tras la tarjeta roja, Carlo Ancelotti inauguró un carrusel de cambios en pro de asegurar la victoria y, de paso, reservar algunos de sus futbolistas más importantes como Benzema, Toni Kroos o James Rodríguez. Precisamente Nacho, el sustituto del colombiano, se erigió como el jugador que cerraría el partido con el tercer tanto. Una bonita volea desde dentro del área tras una certera asistencia de un Álvaro Arbeloa desde la parte izquierda. Victoria final del Real Madrid, que se da una alegría de cara a la visita copera del Atlético.



Real Madrid: Casillas; Arbeloa, Varane, Pepe, Coentrao; Kroos (Khedira, m.81), Isco, James (Nacho, m.54); Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema (Illarramendi, m.64).

RCD Espanyol: Kiko Casilla; Arbilla, Álvaro, Colotto, Fuentes; Víctor Sánchez (Luque, m.63), Cañas, Joan Jordán (Stuani, m.68), Montañés; Sergio García (Abraham, m.81) y Caicedo.

Goles: 1-0, m.12: James. 2-0, m.28: Bale. 3-0, m.76: Nacho.

Árbitro: Fernández Borbalán (Colegio Andaluz). Amonestó a Cristiano Ronaldo (53) por el Real Madrid; y a Fuentes (27), Víctor Sánchez (58), Arbilla (70) por el Espanyol. Expulsó con roja directa a Coentrao a los 53 minutos por una dura entrada.

Incidencias: Encuentro de la jornada 18 de la Liga BBVA disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 74.896 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por las víctimas en París de los atentados terroristas islamistas y la plantilla del Real Madrid ofreció la Copa del Mundial de Clubes a sus aficionados.

 


Málaga y Villarreal igualan en goles y en sensaciones

Un gol de Amrabat consigue neutralizar el tanto de Jonathan Dos Santos y permite a los suyos mantener la sexta plaza. Unos minutos ante el colegiado anuló un gol legal de Darder

 


La Rosaleda se preparaba para acoger un choque con aroma a Europa entre dos conjuntos que están completando una notable primera vuelta. Especialmente los andaluces que, con un equipo recién formado, están sorprendiendo a todos con su gran rendimiento en esta primera vuelta. Duelo directo entre el sexto y el séptimo clasificado. El partido empezó con claro color blanquiazul. Los locales saltaron más enchufados en busca de la meta de Asenjo. La primeras ocasiones llegaban del lado andaluz. Probaba fortuna Amrabat con un zapatazo lejano al que respondió Asenjo para mandar el balón a córner. A la salida del mismo pudo marcar Samu Castillejo pero Rukavina estuvo muy rápido para tapar el remate.

El Villarreal se veía superado por el buen hacer de los malacitanos, que buscaban el gol con mayor insistencia. El primer aviso de los de Marcelino llegó tras un cabezazo de Cheryshev que se marchó ligeramente alto tras un buen centro de Uche. Los amarillos recuperaban una mayor posesión del balón pero la buena presión de los andaluces incomodaba en exceso la elaboración del juego de los castellonenses. Sin embargo, seguía siendo el Málaga quien llegaba con mayor peligro a la portería contraria como en un zurdazo lejano de Antunes ante el que tuvo que sacar una buena mano Asenjo para evitar el primero de la tarde.

El Málaga no cesaba en su búsqueda del gol, llevando el mayor peligro por el costado derecho aunque sin encontrar espacios en una defensa amarilla muy junta y bien replegada. Sin embargo, fue el Villarreal quien pudo marcar en una clarísima ocasión de Uche que desbarato con el pie Kameni. El nigeriano estaba en fuera de juego pero el colegiado no lo apreció. Cuanto todo hacía indicar que se llegaría al descanso con el 0-0 llegó el mazazo para los andaluces tras ver como los de Marcelino se adelantaban en la última acción de la primera mitad. Un centro desde la izquierda de Cheryshev no lo despeja con contundencia Antunes y Jonathan dos Santos empala una volea que sorprende a Kameni. Jarro de agua fría para un conjunto malacitano que fue superior.

El segundo acto arrancó con los mismos veintidós protagonistas y con el Málaga obligado a adelantar sus líneas para buscar cuanto antes el gol del empate. Amrabat era el jugador que más peligro llevaba por parte de los andaluces, que veían como el colegiado les anulaba el gol del empate en una jugada que va a traer cola. Marcó Darder tras un rechace de Asenjo. Lo celebraron los jugadores blanquiazules pero en ese instante el asistente indicó al colegiado que la posición del jugador del Málaga era incorrecta y anuló el tanto. En la repetición se apreció que no era así.

Lejos de hundir a los de Javi Gracia, la respuesta no pudo ser mejor por parte de los de Javi Gracia y apenas tres minutos después, en el minuto 60, sí que subía al marcador el 1-1 tras aprovechar Amrabat un balón a la espalda de la defensa para supera con un toque sutil la salida apresurada de Sergio Asenjo. El Málaga volvía a marcar por décimo segunda jornada consecutiva. Con el empate en el marcador comenzó a llegar el cambio de cromos en uno y otro equipo y el partido fue perdiendo algo de ritmo.

Los dos equipos eran conscientes de que un gol en este tramo era irrecuperable y no querían arriesgar en exceso. Quien más lo intentaba era el Málaga aunque el partido estaba roto y el Villarreal también se acercaba con peligro. El esfuerzo empezaba a hacer mella en los dos conjuntos y las oportunidades no terminaron de producirse. El empate es un resultado que deja a uno y otro como estaban pero que les aleja de los puestos de Champions.


Málaga CF: Kameni; Rosales, Angeleri, Torres, Antunes; Samu García (Juanmi, m. 58), Recio, Darder, Castillejo (Horta, m. 69); Duda (Luis Alberto, m. 77) y Amrabat.

Villarreal CF: Asenjo; Mario, Gabriel, Víctor Ruiz, Rukavina; Cheryshev (Moi Gómez, m. 73), Trigueros (Pina, m. 77), Bruno, Jonathan Dos Santos; Uche y Vietto (Giovani Dos Santos, m. 65).

Goles: 0-1, M.45: Jonathan. 1-1, M. 59: Amrabat.

Árbitro: Jaime Latre (Comité Aragonés). Mostró tarjeta amarilla a los malaguistas Samuel García (m. 50), Angeleri (m. 55), Duda (m. 58) y Torres (m. 70), y a los jugadores del Villarreal Cheryshev (m. 9), Víctor Ruiz (m. 29), Trigueros (m. 36) y Gabriel (m. 84).

Incidencias: Partido correspondiente a la décimoctava jornada de Liga de Primera División disputado en el estadio de La Rosaleda de Málaga ante unos 28.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en homenaje a las víctimas del atentado de París.

 


Orellana recuerda a Balaídos como saben los goles

Un tanto del chileno, que antes falló un penalti, acaba con la racha de los de Nuno y termina con 727 minutos sin ver puerta. Los gallegos merecieron algo más

 

 

El Valencia de Nuno ponía a prueba la grave crisis de resultados del Celta tras encadenar siete jornadas sin ganar, las seis últimas con derrota, y la siete sin hacer un solo tanto. Dos caras opuestas de la moneda se medían en Baláidos. Contra todo pronóstico el Celta comenzó el partido mejor asentado, con posesiones largas de balón que impedían a los de Nuno llevar la iniciativa y sentirse cómodos. La sensaciones era buenas por parte de los de Berizzo que sin embargo volvieron a demostrar sus problemas con el gol en una clarísima ocasión de Orellana que remató muy centrado y permitió a Diego Alves evitar el tanto. Perdonaba el Celta a un Valencia desdibujado. 

Poco a poco el Valencia comenzó a recuperar las buenas sensaciones y las fuerzas se igualaron. En esas llegó la primera ocasión peligrosa de los che tras un cabezazo ajustado de Alcácer ante el que respondió de forma espléndida Sergio Álvarez para desviar el esférico. El partido estaba muy igualado cuando Otamendi llegó tarde a un balón y acabó cometiendo penalti sobre Charles. El Celta parecía que acabaría con su maldición de cara a puerta pero bajo palos estaba el 'parapenaltis' Diego Alves que adivinó el lanzamiento de Orellana para desesperación de la afición Celtiña.

El chileno volvía a perdonar la vida a los de Nuno y alargaba un poco más la mala racha de cara a puerta. El Valencia estaba jugando con fuego y seguía vivo gracias a la actuación del Diego Alves. El dominio era mayor por parte de los gallegos pero las ocasiones no terminaban de producirse por ningún lado. El 0-0 parecía el resultado más justo antes del descanso pero entonces Rodrigo tiró una diagonal desde la derecha hacia el centro y sacó un zurdazo muy centrado que se coló por debajo de los brazos de Sergio Álvarez. El Celta daba vida al Valencia con sus errores.

Tras el descanso Berizzo dio entraba a Nolito para voltear la situación y evitar que su equipo igualará la peor racha de partidos sin marcar en la historia de la Liga (ocho, cosechadas por el CE Sabadell en la 87/88 y el Castellón en la 90/91). Los gallegos manejaban la posesión del balón pero eran incapaces de poner en aprietos a Diego Alves. El juego de los de Berizzo es muy previsible y no consigue causar ningún efecto sorpresa en el rival. El Valencia sentía muy cómodo en esa tesitura con las líneas muy juntas y bien replegado atrás.

Cuando todo hacía indicar que el Celta sumaría una nueva derrota y una nueva jornada sin ver puerta un córner botado desde la esquina por Krohn-Dehli y peinado en el primer palo lo voleaba a la red con la zurda Orellana para poner fin a más de siete partido y medio sin un gol celtiña y de paso redimirse tras el penalti fallado. Con el empate en el luminoso el Celta se quitó un peso de encima y comenzó a creer en su posibilidades. Los gallegos llegaron más fuertes al tramo final y pudieron llevarse la victoria en la ocasión más clara del tramo final. Nolito centró desde la izquierda, Orellana la puso y Charles no llegó al balón por centímetros. El 1-1 final no sirve de mucho a ninguno pero sirve a los de Berizzo para recuperar algo de moral. El Valencia ve frenada su racha de tres victorias consecutivas.


 

RC Celta de Vigo: Sergio Álvarez: Hugo Mallo (Nolito, min.46), Radoja, Sergi Gómez, Fontás, Jonny; Augusto (Borja Fernández, min.79), Krohn-Dehli, Hernández; Orellana y Charles.

Valencia CF: Diego Alves; Barragán, Mustafi, Otamendi, Orban; Rodrigo (Cancelo, min.90), Enzo Pérez, André Gomes, Parejo (Javi Fuego, min.80); Negredo (De Paul, min.64) y Paco Alcácer.

Goles: 0-1 Rodrigo, min.42; 1-1 Orellana, min.60 

Árbitro: González González (Colegio Castellano-leonés). Amonestó a Charles, Jonny y Hernández por parte del Celta de Vigo, y a Rodrigo por parte del Valencia.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la decimoctava jornada de liga BBVA disputado en el estadio municipal de Balaídos ante 19.218 espectadores, según anunció el club gallego.

 


Y en Ipurua siguen frotandose los ojos

El ex-jugador azulón Manu del Moral no tuvo piedad de su antiguo equipo al materializar el primer gol. Los madrileños llevan ocho jornadas consecutivas sin ganar

 

 

Fría noche en Ipurúa para ver un interesante partido entre dos equipos que querían sumar puntos para conseguir acercarse al objetivo final de la permanencia. Los armeros salieron al césped con más intención de hacer daño al rival y avisaron con un intento de remate de Manu Del Moral en el minuto 6. El Getafe de Quique Sánchez-Flores, que se estrenaba como entrenador en liga, planteó un 4-2-3-1 con Aléxis como medio centro como principal novedad. El técnico también dio la titularidad a Pedro León, que se encargó de llevar el peligro de los madrileños en los primeros minutos, botando todas las jugadas a balón parado sin demasiada suerte.

Ninguno de los dos equipos creaba oportunidades claras de gol, pero con el paso de los minutos, el Eibar encajonó al Getafe en su campo. Los madrileños esperaban su oportunidad en alguna contra, mientras que los locales centraban balones al área y merodeaban el área contraria en busca del primer tanto. En el minuto 33 la insistencia de los guipuzcoanos tuvo recompensa con una gran gol de Manu Del Moral. La pizarra de Garitano engañó a la defensa rival con un inesperado centro de Dani García por encima de la barrera, que remató con una complicada volea con pierna izquierda el delantero armero.

El Getafe no reaccionó tras el gol encajado, y a pesar de estar por detrás en el marcador, apenas creó peligro sobre la meta de Irureta antes del descanso. Un centro cerrado de Hinestroza y un remate lejano de Juan Rodríguez fueron los únicos acercamientos de los getafenses a la meta contraria.

En el inicio de la segunda parte, el Eibar siguió dominando el choque. Los locales trataban de encauzar la victoria y lo consiguieron con un tempranero tanto de Capa a los 50 minutos. El gol llegó tras un peligroso centro al área de Piovaccari que no despejó bien Velázquez y que aprovechó el extremo armero para colocar el esférico en el segundo palo, lejos de los guantes de Codina.

Tras encajar el segundo gol, el Getafe adelantó líneas y dio entrada a Sarabia y Diego Castro. Los de Quique trataban de recortar distancias pero solo consiguieron poner en aprietos a Irureta tras una gran combinación en el borde del área que finalizó Pedro León con un derechazo ajustado al palo (min 64). El paso de los minutos y el cansancio acumulado hizo que el Eibar bajase el pistón en el último cuarto de hora. Los visitantes aprovecharon la coyuntura y con un buen disoparo de Diego Castro en el minuto 80 consiguieron recortar distancias y poner emoción a los últimos minutos.

Los visitantes lo intentaron sin suerte en los últimos minutos y el Eibar se aseguró 3 nuevos puntos que le acercan a la permanencia. El Getafe, en cambio, alarga su mala racha de resultados y acumula ocho jornadas sin conocer la victoria en liga.



SD Eibar: Irureta, Boveda, Raúl Navas, Albentosa, Lillo, Dani Garcia, Errasti, Capa, Saúl Berjón (Javi Lara, min.86), Manu del Moral (Arruabarrena, min.69) y Piovaccari (Abraham, min.74).

Getafe CF: Codina; Valera (Sarabia, min.58), Naldo, Velázquez, Alexis (Yoda, min.90), Roberto Lago; Juan Rodríguez, Sammir; Pedro León, Hinestroza (Diego Castro, min.70) y Álvaro Vázquez.

Goles: 1-0, Manu del Moral (min.33), 2-0, Capa (min.51); 2-1, Diego Castro (min.80).

Árbitro: Clos Gómez (Comité Aragonés). Amonestó a Bóveda (min.47), Juan Rodríguez (min.53), Capa (min.85). 

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 18 de la Liga BBVA disputado en el estadio de Ipurua ante 4.100 espectadores.


Emery sigue inmaculado ante su pasado

Los de Emery mostraron su superioridad en la primera parte y ganaron con suficiencia el encuentro con los goles de Iborra y Coke, regresando a puestos Champions

 

 

El Sevilla es el único equipo que ha vencido en cinco ocasiones en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo. El equipo de Unai Emery supo esperar a su momento, y tras una primera mitad en la que los locales se prodigaron más en ataque, los dos golpes definitivos los asestó en la recta final de la segunda mitad, en la que Reyes y Bacca se asociaron pasar mover al equipo con su calidad, e Iborra y Coke pusieron los goles en dos grandes disparos.  

El Almería llegaba al encuentro después de haber vencido los dos encuentros que Juan Ignacio Martínez había dirigido a su nuevo equipo. Enfrente tenía a un Sevilla que no quería perder la oportunidad de hacerse con la cuarta posición, aprovechando así el pinchazo del Valencia ante el Celta. No dejaron escapar los visitantes su oportunidad en un choque en el que el cuadro hispalense mostró sobriedad y seguridad en sus ideas.

En el primer acto el equipo local buscaba imprimir velocidad por las bandas, dando por perdido un choque por el centro del campo en el que, a priori, el Sevilla tenía más papeletas para ganar. A base de trabajo, los locales se acercaron principalmente con un Edgar que pareció tomarle bien la medida en los primeros compases a Fernando Navarro. Pudo el Almería haberse ido por delante, pero también el Sevilla empezó a dar muestras de que con prácticamente medio balón interior a la espalda de la zaga visitante podía hacer daño.

En el comienzo de la segunda mitad cambió por completo el guión. El equipo visitante imprimió el ritmo que quiso y Reyes se propuso hacer jugar a su equipo. Con sencillez y por derribo. Así, Aleix Vidal, que regresaba a su casa, hacía daño desde segunda línea, y en una combinación doble entre éste, el propio Reyes y un Bacca que con sus desmarques traía loco a la defensa local el cuero acabó en las botas del reconvertido lateral, que miró atrás y puso un balón que, con algo de fortuna, llegó a los dominios de Iborra, que con un gran disparo pegado al palo ponía por delante a su equipo.

Emery había ganado la batalla porque a partir de ese momento la convicción del equipo local continuó siendo la misma, pero perdieron prestaciones y sumaron nerviosismo y precipitación. Además de metros para correr al tener que arriesgar el equipo almeriense. Así, poco después, Coke, que entró al campo en el descanso sustituyendo a Pareja –que se había cargado con una amarilla tras una falta innecesaria-, llegó desde atrás para colocar en la escuadra desde la frontal el segundo tras hacerse con el balón que rebotó de un mano a mano entre Bacca y Julián en el que el colombiano no llegó a rematar.

Con 0-2, el equipo hispalense buscó echar el cierre al telón de un partido en el que el Almería, pese a la dificultad, aún quería decir su última palabra. Los de JIM eran conscientes de que habían completado un buen encuentro, con mucho ritmo principalmente en la primera mitad, y por ello no iban a irse del choque sin un mínimo de protagonismo. Lo intentaron Espinosa, que debutaba con el equipo, y Hemed, pero Beto, pese a su estilo grandilocuente y a veces excesivo, demostró una vez más su saber estar para mantener su portería a cero.

 

UD Almería: Julián Cuesta; Fran Vélez, Trujillo, Mauro dos Santos, Dubarbier; Verza, Thomas (Fernando Soriano, m.63); Édgar (Teerasil, m.80), Corona, Wellington Silva (Espinosa, m.72); y Hemed.

Sevilla FC: Beto; Aleix Vidal, Arribas, Nico Pareja (Coke, m.46), Fernando Navarro; Iborra, Carriço; Reyes, Éver Banega, Vitolo (Deulofeu, m.80); Bacca (Gameiro, m.74).

Goles: 0-1, M.57: Iborra. 0-2, M.63: Coke.

Árbitro: Eduardo Prieto Iglesias (Comité Navarro). Amonestó al local Thomas (m.19) y a los visitantes Aleix Vidal (m.15) y Nico Pareja (m.40).

Incidencias: Partido correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga BBVA disputado en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, con 12.703 espectadores. Césped en buen estado. Se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados en París, así como de José López Méndez, abonado del Almería.


La mejor medicina para los colistas se llama San Mamés

Mal partido de los de Ernesto Valverde, que solo apretaron en los últimos minutos, tras el gol de San José. Primera victoria ilicitana fuera de casa

 

 

El Elche consigue tres puntos de oro tras vencer 1-2 al Athletic de Bilbao en San Mamés. El conjunto ilicitano, que no ganaba en liga desde el pasado 2 de noviembre, logra la primera victoria tras 21 visitas en la máxima categoría al feudo bilbaíno. Respira el conjunto ilicitano a costa de profundizar en la crisis del cuadro vizcaíno. Son ya cinco las jornadas consecutivas sin conocer la victoria (1E 4D). Los leones ya han perdido más partidos esta temporada (9) que en toda la 2013-2014 y supera sus derrotas en San Mamés de todo el curso pasado (4, por 2 en el pasado curso).

Los leones salieron sobre el césped de San Mamés con mucha intensidad, tratando de resolver rápidamente el partido. Mikel Rico tuvo una gran oportunidad cuando apenas se había disputado el primer minuto. No obstante, un Elche que se jugaba la vida, trató de emerger y el resultado fue un primer tramo del partido de bastante intensidad.

Parecía que los rojiblancos estaban más cerca de gol. Si bien no disponían de claras opciones, los acercamientos sobre los dominios de Tyton eran más frecuentes. No obstante, fue el conjunto ilicitano el que sorprendió adelantándose en el marcador. Fue en una pared a trompicones entre Jonathas y Víctor Rodríguez. El balón le quedó en franca posición al interior barcelonés para superar la salida de Iraizoz y alojar el balón en el fondo de las mallas. Los futbolistas locales reclamaron enérgicamente la jugada por entender que Víctor Rodríguez se ayudó de la mano a la hora de controlar el balón.

A los bilbaínos les costó mucho reaccionar. Excesivas imprecisiones en la zona de tres cuartos y la imposibilidad de conectar con un Aduriz que se encontraba frecuentemente aislado, rodeado de defensores franjiverdes. El ariete donostiarra dispuso, sin embargo, de una buena ocasión tras recibir un buen pase en profundidad de Iraola. El portero del Elche salió, tapando mucha portería y el lanzamiento del delantero local se marchó lamiendo el palo.

El decorado del encuentro empeoró más si cabe para el conjunto vizcaíno tras el paso por los vestuarios. Los leones adelantaron líneas y el Elche encontró un filón jugando al contragolpe. En una de esas llegadas, Jonathas peleó un balón contra Balenziaga. Tuvo más fe y más fuerza el brasileño, la acabó poniendo atrás para que Fajr solo tuviera que empujar el balón al fondo de las mallas y ampliar la renta en el electrónico. Omnipresente el delantero brasileño en el ataque del Elche. Con siete goles y cinco asistencias, Jonathas ha participado directamente en 12 de los 17 goles del conjunto ilicitano en Liga en la presente temporada.

Valverde se jugó el todo por el todo y realizó rápidamente los tres cambios reglamentarios buscando una reacción que no acababa de llegar. El cuadro alicantino no se descompuso y no tuvo especiales dificultades para desbaratar las acometidas de un Athletic en el que no existía atisbo de imaginación ofensiva. No obstante, San José cazó un rechace en la frontal del área. Tremendo el zapatazo del defensor navarro haciendo inútil la estirada de Tyton. Los locales redujeron la renta ilicitana, creyeron en la remontada y pusieron la emoción en los últimos compases del partido.

El equipo de Fran Escribá aguantó bien las embestidas del Athletic en los minutos finales, mantuvo el marcador a favor y, con este resultado, abandona momentáneamente el último puesto en la tabla clasificatoria. Por su parte, los rojiblancos enlazan su tercera derrota consecutiva en San Mamés, algo que no sucedía desde noviembre de 2008. 

 

 

Athletic de Bilbao: Iraizoz; Iraola, Etxeita, Laporte, Balenziaga; Iturraspe (San José, min. 66), Rico; Susaeta, De Marcos (Viguera, min. 54), Muniain (Toquero, min. 66); Aduriz.

Elche CF: Tyton; Damián Suárez, Enzo Roco, Lombán, Cisma; Pašalić, Adrián; Víctor Rodríguez (Cristian Herrera, min. 84), Fayçal, Aarón (Coro, min. 69) y Jonathas (Pelegrín, min. 93).

Goles: 0-1, Min. 17, Victor Rodríguez; 0-2, min. 53 Fayçal; 1-2, min. 73, San José.

Árbitro: Iglesias Villanueva (Comité Gallego). Amonestó con amarilla a Balenziaga y Aduriz por parte del Athletic y a Lombán, Aarón, Damián, Víctor, Cisma y Adrián por el Elche.

Incidencias: Partido correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga BBVA disputado en San Mamés ante unos 45.000 espectadores, entre ellos unas decenas de seguidores ilicitanos.

 


Once metros que no cambian nada

Dos penaltis transformados por Carlos Vela y Fran Rico provocan un empate que no deja contentos a ninguno de los dos equipos

 

 

El Granada recibía a la Real Sociedad como colista de la Liga tras la victoria del Elche en San Mamés. Las 13 jornadas consecutivas sin ganar de lo nazaríes han condenado al equipo al farolillo rojo y a Caparrós le ha puesto en el ojo del huracán. Los donostiarras tampoco puede estar muy contentos con su rendimiento, especialmente lejos de su estadio donde son el único equipo que no ha ganada hasta la fecha. El Granada saltó al campo muy decidido a llevar el mando del partido. Monopolizaba la posesión del balón en los primeros minutos antes una Real Sociedad muy imprecisa pero no creaba grandes ocasiones de peligro. Poco a poco el conjunto de Moyes conseguí nivelar el choque.
 

No había pisado área rival el conjunto donostiarra pero en la primera que tuvo a punto estuvo de abrir el marcador. El balón a la espalda de la defensa para Canales, que se orienta el balón con un gran control con el muslo, y su remate al palo corto complica la vida a Oier. El cántabro se convertía en el hombre más peligroso de los visitantes. El Granada iba a tener su oportunidad a balón parado. El centro desde la esquina de Fran Rico lo tocó Mainz y Lass, con todo a favor, cabecea fuera por muy poco. No estaban los de Caparrós para perdonar ocasiones tan claras.

Respondía también a balón parado el conjunto de Moyes. Botó el córner Carlos Vela al corazón del área donde cabeceó libre de marca Iñigo Martínez pero se topa con un paradón de Oier para evitar el primer tanto del partido. Un tanto que sí llegaría en el minuto 36 al transformar Carlos Vela un penalti cometido por Babin sobre Canales. El mexicano lo transformó con muchas sangre fría. Se le ponía muy cuesta arriba el partido al Granada, que solo había ganado uno de sus últimos siete partidos contra la Real Sociedad en Liga (3E 3D).

La segunda mitad arrancó con la entrada de Riki en el Granada y con polémica por un posible agarrón de De la Bella dentro del área sobre Lass que pareció insuficiente. Comenzaron a llegar los primeros pitos, especialmente para El-Arabi, tras dos remate fallidos. No le perdonaba una la afición y menos cuando fue sustituido minutos más tarde. La Real permanecía muy atrás pero cuando llegaba lo hacía con mayor peligro.

El Granada intentaba llevar la iniciativa pero solo era capaz de crear sensación de peligro en acciones a balón parado. Especialmente con numerosos saques de esquina de los que no conseguía sacar ningún rédito. Quien más cerca estuvo de empatar fue Nyom con un zapatazo desde la frontal que se estrelló en el palo. El rechace le llegó a Sucess con Rulli en el suelo pero el nigeriano no se esperaba ese balón y no remató como le gustaría.

El Granada parecía abocado a una nueva derrota pero entonces se encontró con un inocente penalti de Rubén Pardo sobre Nyom que transformó Fran Rico con mucho sufrimiento. El '4' lo lanzó al medio y a punto estuvo Rulli de detenerlo con los pies. Ambos parecieron dar por bueno un empate que no deja contentos a ninguno. El Granada suma 14 jornadas sin ganar y los donostiarras siguen sin saber lo que es vencer lejos de Anoeta.

 

 

Granada CF: Oier; Nyom, Babin, Mainz, Sissoko; Iturra, Javi Márquez (Piti, m.88), Fran Rico; Foulquier (Riki, m.46), Lass, El Arabi (Success, m.57).

Real Sociedad: Rulli; Carlos Martínez, Íñigo, Ansotegi, De la Bella; Xabi Prieto, Elustondo, Pardo, Chory Castro (Finnbogason, m.69); Canales (Yuri, m.90), Vela (Agirretxe, m.92).

Goles: 0-1, M.36: Vela, de penalti. 1-1, M.78: Fran Rico, de penalti.

Árbitro: Juan Martínez Munuera (Comité Valenciano). Vieron la cartulina amarilla los locales El Arabi y Babin, y los visitantes Vela e Íñigo.

Incidencias: Partido correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga BBVA disputado en el Estadio Nuevo Los Cármenes ante 15.000 espectadores. Terreno de juego en aceptables condiciones. Se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados terroristas ocurridos en Francia.

 


La MSN recupera crédito para Luis Enrique

Los de Luis Enrique vencen al Atlético con contundencia en el que marcaron los tres delanteros blaugranas, Neymar, Messi y Luis Suárez

 

 

La penúltima jornada de la primera vuelta nos dejaba un duelo espectacular entre Barcelona y Atlético de Madrid, una reedición del partido que decidió la última Liga en favor de los rojiblancos. El conjunto de Simeone quería hurgar en la herida del conjunto de Luis Enrique y de paso asaltar el segundo puesto de la Liga. Para ello debían superar a un Barça inmerso en un mar de dudas. El Atlético saltó de manera fulgurante y en la primera jugada del partido creó sensación de peligro sobre la meta de Bravo. Solo fue un espejismo porque inmediatamente el Barça tomó, como era de esperar, el control del juego. A los nueve minutos llegó la primera ocasión clara del choque en las botas de Leo Messi, que se marchó bien de Gámez, improvisado lateral izquierdo, pero no estuvo acertado en la definición con la derecha.

Avisaba el Barça, que empezaba a encerrar al Atleti en su área. Y en una de las siguientes acciones Messi en internó en el área y tras varios rechaces el balón le llegó a Neymar que abrió el marcador con la puntera. Simeone veía trastocados todos sus planes a los 12 minutos de juego. En la acción posterior los azulgrana pudieron hacer el segundo pero Moyá tapó tanto el remate de Jordi Alba con el posterior. Un Atlético desdibujado no era capaz de ofrecer réplica alguno. De hecho fueron los de Luis Enrique lo que pudieron poner tierra de por medio en el luminoso en un contra mortal entre su tridente ofensivo que acabó perdonando con la cebeza Neymar tras el centro medido de Luis Suárez.

 El Atlético intentaba reponerse del asedio culé pero apenas se acercaban a las proximidades de Bravo. Todo lo contrario que los catalanes, que tuvieron otra buena ocasión en las botas de Messi, que se topó con una buena mano de Moyá. Perdonaba demasiado el Barça que se encontraría con el segundo en una acción muy polémica. Messi controló el balón con el brazo. El colegiado no vio nada. La jugada continúo con una asistencia del argentino para Luis Suárez, que no perdonó ante Moyá. El Atlético fue un juguete roto en manos de los hombres de ataque de los de Luis Enrique.

Tras el descanso el Atlético saltó con algo más de intensidad y Godín estrello un cabezazo en la parte superior del larguero. Los de Simeone adelantaron sus líneas de presión para dificultar la salida del balón de los azulgrana pero no era el día de los madrileños, que únicamente eran capaces de frenar a los de Luis Enrique a base de faltas. Todo le salía al revés a los rojiblancos que, sin embargo, se metieron en el partido gracias a un penalti muy leve de Messi sobre Jesús Gámez que transformó Mandzukic con un disparo potente por el medio.

El partido se ponía más abierto que nunca y empezaban a entrar los primeros nervios al Camp Nou. Por si fuera poco la entrada de Torres al campo reprodujo los viejos fantasmas de la última derrota culé en el Camp Nou ante los rojiblancos. El de Fuenlabrada es el jugador de la Liga que más goles le ha marcado al Barcelona en la competición (7). El partido estaba más igualado aunque el Atlético solo daba sensación de peligro en las pocas acciones que generaba a balón parado.

El partido entraba en la recta final con la máxima tensión. El Atlético llegaba y enmudeció al Camp Nou en la enésima genialidad de Arda Turan para habilitar con caño incluido a Torres. El centro del '19' lo tocó lo justó Bravo con la fortuna de que el balón le quedó a Jordi Alba en lugar de a Mandzukic. Perdonó el Atlético su ocasión y sentenció Messi con algo de fortuna en una buena jugada de los culés que acabó con un mal rechace de Raúl García para que el argentino marcara a placer el tanto de la sentencia. Los culés se llevan un merecida victoria que permite respirar a Luis Enrique.



FC Barcelona: Bravo; Alves, Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Rakitic (Rafinha, min. 88), Iniesta; Messi, Suárez (Pedro, min. 90) y Neymar.

Atlético de Madrid: Moyá; Juanfran, Giménez, Godín, Gámez (Siqueira, min. 83); Tiago, Gabi (Torres, min.68); Arda, Koke, Griezmann (Raúl García, min.74); y Mandzukic.

Goles: 1-0, min.12: Neymar. 2-0, min.35: Luis Suárez. 2-1, min. 57: Mandzukic, de penalti. 3-1, min. 87: Messi.

Árbitro: Undiano Mallenco (Comité Navarro). Mostró cartulina amarilla a Gámez (min.21), Mandzukic (min.33), Juanfran (min.49), Luis Suárez (min. 59), Tiago (min. 66), Griezmann (min.69), Mascherano (min.74), Messi (min.81), Godín (min.83),

Incidencias: Asistieron al encuentro 81.658 espectadores en partido correspondiente a la decimoctava jornada de Primera División disputado en el Camp Nou. Antes del inicio del partido, ambos equipos se hicieron una foto conjunta con el lema #justiciaparaTopo en defensa del periodista argentino Jorge 'Topo' López, fallecido en Brasil durante el Mundial de Brasil y se guardó un minuto de silencio en memoria de los fallecidos en el atentado contra la revista 'Charlie Hebdo'. 


El Córdoba empieza a disfrutar

 

Los andaluces logran tres puntos valiosos aprovechando un gol en propia puerta del senegalés Abdoulaye Ba y salen por primera vez del descenso.

 


El Córdoba sale de puestos de descenso por primera vez esta temporada después de cosechar la victoria en el estadio de Vallecas. Los verdiblancos encadenan dos triunfos consecutivos y logran sumar diez de los quince últimos posibles. Impusieron orden y rigor táctico ante un Rayo Vallecano que atacó sin descanso, pero sin acierto goleador. El partido se resolvió con un gol en propia puerta del defensor local Abdoulaye Ba en el tramo final del primer periodo.

Los pupilos de Paco Jémez volvieron a naufragar en casa. Encadena su tercera derrota consecutiva en el estadio de Vallecas, escenario en el que solo han logrado un triunfo en los seis últimos encuentros ligueros (5D). El equipo franjirrojo llevó el peso del encuentro a lo largo de los noventa minutos. No obstante, fue un partido deslavazado, sin demasiada concreción por parte de ninguno de los contendientes y costaba bastante ver jugadas elaboradas en la medular del terreno de juego. Lo más destacable de los primeros minutos fue un gol anulado a Alberto Bueno por un fuera de juego dudoso cuanto menos.

Los madrileños contaban con mayor presencia ofensiva. Kakuta y Alex Moreno se internaban bien por ambas bandas, pero faltaba el último pase y el remate, hasta el punto que cumplida la media hora de juego aún no se había contabilizado ningún remate entre los tres palos del arco califal. Fue Bebé, en cambio, el que puso el miedo en el cuerpo de la afición local con una doble ocasión que estuvo muy cerca de convertirse en el primer tanto del encuentro.

En el tramo final del primer periodo, el conjunto de Djukic se puso por delante en el marcador, merced a una desafortunada jugada para el equipo rayista. En una rápida contra de los verdiblancos, Abdoulaye Ba acabó por introducir el balón en su propia portería. De este modo, el Córdoba, que apenas se había prodigado en ataque, se marchó a los vestuarios con ventaja. El equipo madrileño volvió a mostrarse tremendamente vulnerable en casa y solo ha conseguido dejar su portería a cero en uno de sus últimos siete choques de Liga como local.

No cambió el decorado del partido tras el periodo de descanso. En la reanudación, la posesión siguió siendo del Rayo, pero se mostraban cada vez más incapaces de encontrar huecos en el entramado defensivo planteado por un cuadro andaluz que imponía orden y rigor táctico. Jémez echó mano de Manucho buscando un revulsivo en ataque, pero los minutos pasaban sin que el guardameta califal apenas tuviera que intervenir.

Fue el lateral Quini el que dispuso de la ocasión más clara del partido para el cuadro vallecano, tras estrellar un lanzamiento con mucha intención en la escuadra de la meta de Juan Carlos. Bien es cierto que poco después Bebé dispuso de una gran opción para poner tierra de por medio en el electrónico. Le robó el portugués la cartera a Tito, se plantó solo ante Toño, pero falló en el disparo y su remate se marchó muy desviado.

Al final, el cuadro andaluz pudo mantener hasta el final el resultado a favor y el Rayo no encontró el premio del gol después de atacar durante todo el partido y de sus 21 remates sobre la portería cordobesa.



Rayo Vallecano: Toño; Tito, Abdoulaye, Quini; Raúl Baena (Pozuelo, m.65); Kakuta, Trashorras, Jozabed, Alex Moreno (Aquino, m.70); Bueno; y Licá (Manucho, m.54).

Córdoba CF: Juan Carlos; Campabadal, Pantic, Crespo, Edimar; Deivid, Rossi, Abel Gómez (Borja García, m.67); Bebé, Florin Andone (Xisco, m.87) y Fede Cartabia (Fede Vico, m.80).

Goles: 0-1: M.38 Abdoulaye, en propia puerta.

Árbitro: Estrada Fernández (Colegio Catalán). Amonestó a Abdoulaye (26), Tito (52) y Quini (70), del Rayo; y a Bebé (6) y Campabadal (58), del Córdoba.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga BBVA disputado en el Estadio de Vallecas ante 10.620 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados terroristas de la pasada semana en París. 

CLASIFICACIÓN PROVISIONAL DE LA LIGA BBVA

Posición
Equipo
Puntos
Jugados
Ganados
Empatados
Perdidos
GF
GC
1
REAL MADRID
42
1714035915
2
FC BARCELONA
41
181323449
3
ATLÉTICO DE MADRID
38
1812243518
4
SEVILLA FC
36
1711332817
5
VALENCIA CF
35
1810533215
6
VILLARREAL CF
32
189543017
7
MÁLAGA CF
31
189452218
8
SD EIBAR
26
187562324
9
RC CELTA DE VIGO
21
185671820
10
RCD ESPANYOL
20
185582129
11
RAYO VALLECANO
20
1862101933
12
REAL SOCIEDAD
19
184771923
13
ATHLETIC DE BILBAO
19
185491523
14
GETAFE CF
17
184591424
15
CÓRDOBA CF
17
183871427
16
RC DEPORTIVO
17
184591427
17
UD ALMERÍA
16
1844101527
18
LEVANTE UD
16
183781333
19
ELCHE CF
14
1835101735
20
GRANADA CF
14
182881129

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