domingo, 22 de enero de 2012

ANÁLISIS DE LA JORNADA 1 DE LA LIGA BBVA (Aplazada por la huelga de AFE)


Goleada de ensayo para la Copa

 

Los de Mauricio Pochettino fueron superiores y vencieron con garantías a un Granada de Fabri que se hunde poco a poco.

 

 

El Espanyol se impuso 3-0 al Granada en Cornellà. Baena, Verdú, de penalty (el primero a favor en toda la temporada para el Espanyol) y Rui Fonte fueron los goleadores en un partido no especialmente brillante de los de Pochettino ante un débil e inofensivo Granada.

La noticia al inicio del partido fue el once de Pochettino. A falta de Sergio García y Álvaro, Pochettino se decantó por formar un tribote con Forlín, Baena y Romaric dejando a Verdú, Weiss y Thievy arriba. La idea era tener control en medio campo y verticalidad arriba. Por momentos Verdú se situó como uno más del centro del campo dejando a solo dos hombre en punta. El granada salió a presionar arriba en busca de un fallo o un robo para poder crear peligro. Pero fue el Espanyol quien se adelantó en el marcador. Gran jugada de estrategia. Verdú saca el cornér al primer palo, Thievy la peina y Baena remata solo en el segundo palo. Primer gol de la temporada para el andaluz.

Pese al gol el Espanyol no lograba crear excesivo peligro en la portería granadina. Pero entonces llegó la segunda noticia del día. Penalty a favor del Espanyol, el primero que le pitan a favor al equipo blanquiazul. Verdú anotó y con el segundo se llegó al descanso.

Tras la pausa el partido bajó mucho en cuanto a intensidad. El Granada dio un paso adelante en busca del empate pero en las pocas ocasiones que tubo Kiko Casilla se mostró impecable. El Espanyol, consciente de su ventaja en el marcador, decidió dar una paso atrás y centrarse en defender el resultado. Con el paso de los minutos el Granada se volcó definitivamente en ataque dejando muchos espacios atrás. Los de Pochettino cerraron definitivamente el partido con el tercero obra de Rui Fonte (que había entrado por Thievy) en un rechace tras un gran lanzamiento de falta de Romaric. Partido sentenciado y ahora a pensar en la Copa.



RCD Espanyol: Kiko Casilla; Galán, Raúl Rodríguez, Héctor Moreno, Dídac; Forlín, Baena; Weiss (Christian Alfonso, min.87), Romaric, Verdú (Cristian Gómez, min.77) y Thievy (Rui Fonte, min.65).

Granada CF: Julio César; Nyom (Franco Jara, min.76), B. Gómez, Mainz, Siqueira; Fran Rico, Mikel Rico; Uche (Ighalo, min.76), Abel (Jaime, min.54), Dani Benítez y Geijo.

Goles: 1-0, min.26: Baena; 2-0, min.45: Verdú; 3-0, min.80: Rui Fonte.

Árbitro: Del Cerro Grande (Comité Madrileño). Amonestó a Nyom (min.45), Baena (min.76), Franco Jara (min.82) y Jaime (min.84).

Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada de la Liga BBVA, celebrada por la huelga de futbolistas al inicio de la temporada, en el estadio Cornellá-El Prat ante 26.023 espectadores.


El Getafe acaba con la imbatibilidad del triunvirato

Los azulones logran un triunfo muy importante para ubicarse en la zona media de la tabla. Stuani adelantó a los locales pero Gavilán y Miku remontaron el choque.

 

 

El Real Racing buscaba su tercera victoria consecutiva en Liga. Con la necesidad de lograr afianzar la tranquilidad, comenzaba en Santander un partido con dos equipos en alza y con algo más de media entrada en El Sardinero.  El gran ausente en los locales era Pedro Munitis, pero fue Arana quien salió en su lugar. Juan José González apostó por el 4-2-3-1. Con Diop y Colsa por delante de la zaga y con el uruguayo Stuani en la punta de ataque.Mientras, Luis García Plaza salió con la dupla ofensiva formada por Miku y Güiza. En los primeros minutos, el Getafe fue agresivo y valiente. Llevó el ritmo de juego mientras los cántabros esperaban agazapados en defensa, en plena guardia ante la salida fulgurante de los visitantes. Casquero avisó a los ocho minutos con un disparo desde fuera del área que salió cerca del palo de la portería de Toño. A los cántabros les rebosaban las dudas al traspasar el centro del campo, pero un fallo defensivo en el área azulona -tras un intento fallido de Rafa de ceder la pelota a Cata Díaz- propició que Adrián robara el esférico y se lo cediese a Stuani para que marcara su quinto gol en la Liga.

Era un jarro de agua fría para un Getafe ambicioso pero que pagaba muy caro un despiste defensivo. Con el gol, los madrileños parecían aturdidos, colapsados por esa desventaja en el marcador. A los diecisiete minutos, Lopo entraba por el lesionado Rafa. Pronto, el conjunto de Luis García Plaza empezó a espabilar y a retomar las riendas. En el diecinueve, Toño tuvo que arrebatarle el gol a Güiza en un mano a mano. Poco después, Gavilán con la pierna izquierda sellaba el empate -en el minuto veinticinco- tras un mal despeje de Colsa en el área pequeña. Con la igualdad, el Real Racing era ahora el debilitado y al que le dominaba la incertidumbre.

Los visitantes recuperaron confianza, aunque las idas y venidas se seguían sucediendo. Había más goles que fútbol cuando se cumplía la media hora de juego. En el treinta dos, los santanderinos pidieron penalti tras una mano dudosa de Lopo dentro del área. González González no vio nada. El encuentro entró en una fase donde el juego se acumulaba en el centro del campo, pero donde los locales conseguían poner cerco a la portería de Moyá. Incluso el uruguayo Stuani pudo adelantar a los cántabros en el cuarenta tras ganarle la posición a Cata Díaz, pero su remate se marchó arriba. Tres más tarde y antes de llegar al descanso, Barrada mandó el balón al lateral de la portería de Toño tras una asistencia de Masilela. 


La primera parte había sido empalagosa, poco vistosa. Más por inercia que por brillantez, Real Racing y Getafe estaban ofreciendo un reto de intenciones, pero bastante irregular. Con la reanudación, Tziolis sustituía a Colsa. El partido estaba muy abierto. El Getafe pudo adelantarse, pero Toño volvió a realizar dos excepcionales intervenciones. Primero a Gavilán y después a Güiza tras una agraciada asistencia de Miku. Justo después de que los madrileños dieran el primer aviso, Jairo entraba por el goleador Stuani. El Getafe atacaba con decencia y buscaba con insistencia el gol. Mientras, los cántabros salían a la contra con mordiente y llevaban el peligro en las jugadas a balón parada. Fue el Cata Díaz quien salvó a su equipo cuando un disparo de Álvaro golpeó en el cuerpo del defensa.

En el sesenta y uno, Pedro León tomaba el relevo de Gavilán. El ex del Real Madrid aportó velocidad. Los visitantes apretaban el acelerador y Valera estuvo a punto de marcar tras un saque de esquina. Los locales se arrinconaban en defensa y el Getafe aprovechaba para llevar las riendas y poner en peligro la portería santanderina. Con la entrada de Kennedy y la salida de Arana, el Real Racing trataba de dar un lavado de cara a su ataque, pero no encontraba el equilibrio ni con la pelota ni sin ella. Mientras, los de Luis García Plaza continuaban incomodando a un equipo cántabro desconcertado y con muchas imprecisiones.

En el setenta y uno, Adrián tuvo una de las ocasiones más claras de la segunda mitad pero no acertó ante la portería de Toño. Tres más tarde, Miku se volvió a topar con el portero racinguista. A quince minutos para llegar a los noventas, el Real Racing empezó a espabilar y a llegar tímidamente sobre la meta de Moyá. Muestra de esa leve mejoría fue la clara ocasión que tuvo Acosta para marcar, pero el disparo del delantero argentino fue interceptado por el portero del Getafe. Casi de milagro el empate seguía vigente en el marcador. El encuentro era eléctrico, vertiginoso. Tanto que en el ochenta y tres Miku lograba el gol (1-2). Era el premio ante la insistencia de los visitantes.

Con el agua al cuello, los locales trataron de evitar una derrota que se convertía en un gran problema, en un paso atrás en sus aspiraciones. Pelotazo arriba y a buscar un rematador. Podía en el Real Racing más el ímpetu que la finura. Tziolis tuvo el empate en el ochenta y nueve, pero Moyá evitó el tanto del griego. A la desesperada, los locales no lograron igualar el encuentro y tres puntos vitales que consigue el Getafe fuera de casa. 

 


Racing de Santander: Toño; Álvaro, Torrejón, Bernardo, Cisma; Colsa (Tziolis, min 45), Diop, Arana (Kennedy, min 65) y Acosta; Adrián y Stuani (Jairo, min 52).

Getafe CF: Moyá; Valera, Cata Díaz, Rafa (Lopo, min 16), Masilela; Barrada (Diego Castro, min 78), Míchel, Casquero, Gavilán (Pedro León, min 60); Miku y Güiza.

Goles: 1-0, min 13. Stuani. 1-1, min 26. Gavilán. 1-2, min 83. Miku.

Árbitro: José Luis González González (Colegio Castellano-leonés). Mostró cartulinas amarillas a Michel y Pedro León por el Getafe, y a Torrejón por el Racing.

Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada, aplazada, de la Liga de Primera División, disputado en los Campos de Sport de El Sardinero ante unos 10.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en homenaje a Juan Carlos Pérez, quien fuera capitán del Racing a finales de la década de los 70, asimismo exjugador del FC Barcelona.


Falcao ya es el líder del Proyecto Simeone

Falcao consiguió tres de los cuatro goles de su equipo en la goleada ante la Real. El milagro del Cholo Simeone continua. 

 

 

El Atlético de Madrid sigue de dulce y Simeone sin conocer la derrota después de conseguir su segunda victoria consecutiva, esta vez ante la Real Sociedad (0-4), en un partido donde Falcao volvió a dejar su huella con un ‘hat-trick’.

El encuentro no pudo comenzar mejor para los rojiblancos ya que, en el minuto dos, Muñiz Fernández decidió decretar un claro penalti por unas manos de Demidov. Sin apenas dars  cuenta el conjunto de Simeone tenía la oportunidad de ponerse mandando en el marcador, por lo que el colombiano Falcao no falló y puso el 1-0 que suponía un jarro de agua fría para la afición donostiarra.

El conjunto de Montanier tardó mucho en reaccionar y solo en el minuto 20 Agirretxe remató fuera del área pero su disparo no creó ningún peligro sobre la meta de Courtois. El Atlético jugaba a placer e incluso pudo hacer el segundo en la primera mitad con una buena ocasión de Adrián, que no acertó a rematar un buen centro desde la banda derecha. Con el 0-1 se marcharon los 22 futbolistas al túnel de vestuarios.

El inicio de la segunda parte pareció un ‘deja vu’ para el equipo vasco ya que, en el primer minuto tras la reanudación, Adrián no falló y convirtió el segundo gol, tras un buen centro de Juanfran en una jugada donde se apoyó de Falcao para hacer una bonita pared. Un golazo que dejaba prácticamente tocado a los ‘txuri-urdin’.

Montanier decidió dar entrada a Xabi Prieto, Ifrán y Joseba Llorente, buscando llegar con más peligro sobre la meta colchonera. Sin embargo, era el Atlético el que triangulaba con más sentido, aprovechando las contras para crear peligro. En una de esas contras llegaría el majestuoso tercer gol del Atlético. En el minuto 83 Juanfran se marchó de hasta tres contrarios en el lateral derecho e inició una jugada en la que Adrián asistió a Falcao que, sin pensárselo dos veces, batió a Bravo con una sublime vaselina.

La conexión Adrián-Falcao seguía siendo letal, con el asturiano asistiendo y el colombiano volviendo a ser el ‘killer’ de principio de temporada. Con el 3-0 se acabaron los pocos argumentos que le quedaban al conjunto donostiarra, que solo pudo esperar a que pasaran los minutos y rezar para que no llegara otro gol. Sin embargo, sí que llegó ya que Falcao completaría su actuación con un ‘hat-trick’ en el minuto 91 tras batir a Bravo de tiro cruzado tras una buena asistencia de Koke.

Con esta nueva victoria, el Atlético suma 26 puntos y su segundo triunfo consecutivo y su séptimo punto, de los últimos nueve posibles, desde que llegó el Cholo Simeone. Por su parte, la Real Sociedad se queda con los 21 puntos y tendrá que seguir luchando para evitar el descenso.

 


Real Sociedad: Bravo; Estrada (Diego Ifrán, min. 73), Demidov, Mikel González, Cadamuro (Xabi Prieto, min. 59); Elustondo,Aranburu, Zurutuza, Griezmann, Vela; Agirretxe (Llorente, min. 82).

Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Godín, Miranda, Filipe Luis; Gabi, Mario Suárez (Perea, m.68); Arda Turán (Assunçao,m.87), Diego (Koke, m.79), Adrián; Falcao

Goles: 0-1, min. 2: Falcao de penalti. 0-2, min. 47: Adrián. 0-3, min. 82: Falcao. 0-4, min. 90: Falcao.

Árbitro: Muñiz Fernández (Comité Asturiano). Amonestaciones a Aranburu, Demidov, Zubikarai, por protestar desde el banquillo, y Mikel González. POr el Atlético a Mario Suárez, Filipe Luis, Juanfran, Gabi, Diego y Miranda.

Incidencias: 24.640 espectadores en el estadio de Anoeta. Lluvia constante durante el partido.


Betis y Sevilla firman tablas tras mil días de espera

Choque intenso y emocionante entre dos rivales eternos que ofrecieron un espectáculo digno de las expectativas. Negredo y Beñat fueron los goleadores.

 

 

Llegó por fin el espectáculo de un derbi sevillano al Benito Villamarín. Tras tres años de ausencia, uno de los encuentros más emblemáticos de la Liga BBVA recuperó su sitio en el calendario para regresar por la puerta grande con un choque de alto voltaje entre dos equipos que necesitaban los puntos.

El encuentro comenzó con un Sevilla mejor plantado sobre el césped que generó las mejores ocasiones en casa del eterno rival. Los rojiblancos se hicieron con la manija del encuentro y pusieron en serios apuros a un Betis que no encontraba su ritmo habitual de juego.


Los de Pepe Mel, acostumbrados a obtener un porcentaje elevado de la posesión, vieron cómo sus defensas flaqueaban ante el talento de Jesús Navas y Reyes, que se asociaron en la banda para buscar un filón por el carril diestro rumbo hacia la portería verdiblanca. La sociedad entre el hijo pródigo y el internacional español generó buenas oportunidades de cara a puerta a lo largo de la primera parte.

Sin embargo, el Sevilla no encontraba el premio del gol gracias en gran parte a un inspiradísimo Casto, que consiguió desbaratar algunos remates claros de Negredo, Luna o Fazio, tras un saque de esquina. El guardameta tuvo que emplearse a fondo para mantener vivo a su equipo.

Sin embargo, cuando más dominio ejercía el Sevilla, Beñat se sacó un magistral lanzamiento de falta desde más de veinte metros con rosca para inaugurar el marcador y desatar el delirio de la afición bética, que por fin veía cómo su equipo se ponía por delante tras sufrir durante muchos minutos.

El Sevilla seguía atacando pese al gol encajado, aunque quizá los de Marcelino García Toral lo hicieron con un punto menos de orden y concierto, necesitados quizá por la urgencia de empatar el choque antes del descanso para mantener sus posibilidades de victoria intactas. Los de Nervión obtuvieron la recompensa a su empeño, y Negredo fue capaz de anotar de cabeza tras una buena jugada, otra vez por el perfil diestro, entre Reyes y Navas.

El descanso puso el broche a una primera parte de emociones e intensidad en el Benito Villamarín. Era el momento de la charla en el vestuario y de reponer líquidos. Fuera del túnel, la fiesta seguía siendo total entre dos aficiones que a pesar de su enfrentamiento deportivo eterno se habían echado de menos.

La segunda parte comenzó con un guión muy parecido: el Sevilla intentaba llevar la iniciativa pero fue Rubén Castro el primero que se colocó delante de Javi Varas para intentar batirle con un disparo cruzado, aunque el guardameta del cuadro de Nervión contestó de forma inmejorable.

 

Los locales, por momentos, lograron generar momentos de agobio para el Sevilla, que salió de vestuarios con un punto menos de intensidad. Mel hizo algunos cambios para optimizar la velocidad en la zona de ataque y los verdiblancos fueron creciendo en el partido y también en la creación de juego.

La presión por parte del Sevilla sin entrar tanto en contacto con el balón empezó a pasar factura al conjunto de Nervión y Fazio pagó la dinámica del partido con una controvertida expulsión que dejó a su equipo con un jugador menos por sexta vez en lo que va de temporada.

El Betis fue superior a partir de ese momento, e incluso Beñat pudo lograr el segundo con un buen disparo que tropezó en la zaga visitante, pero los de Mel no encontraron el camino del gol. Hizo lo propio el Sevilla, que replegó sus líneas y se dedicó a sufrir en los instantes finales hipotecando sus opciones a una contra milagrosa que nunca llegó.

Con este resultado, ambos equipos quedan separados en tabla por tres puntos de diferencia: el Sevilla se coloca con 26 puntos, los mismos que Athletic y Atlético, mientras que el Betis se queda con 23 puntos en el puesto duodécimo, a la espera de lo que ocurra en el resto de la jornada.

 


Real Betis Balompié: Casto, Isidoro, Dorado, Cañas, Nacho; Iriney, Beñat (Jorge Molina, m.83); Juanma (Salva Sevilla, m.69), Rubén Castro, Jefferson Montero (Pozuelo, m.58), y Santa Cruz.

Sevilla FC: Varas; Coke, Spahic, Fazio, Fernando Navarro; Medel; Jesús Navas, Trochowski (Rakitic, m.59), Luna (Martin Cáceres, m.71); Reyes y Negredo (Hiroshi, m.82)

Goles: 1-0: m.25, Beñat. 1-1: m.41, Negredo

Arbitro: Carlos Velasco Carballo (Comité Madrileño). Expulsó, por doble amarilla a Fazio (m.24 y m.68), además mostró tarjeta amarilla Iriney (m.18), Isidoro (m.58), Beñat (m.70), Nacho (m.77), y Rubén
Castro (m.89)

Incidencias: Partido disputado en el Benito Villamarín ante unos 40.000 espectadores, de ellos unos cinco mil seguidores del Sevilla. Terreno de juego en buenas condiciones. Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de Rafael Lluch, director de Deportes de la Junta de Andalucía, y de otras tres personas con vinculación al club. Antes del comienzo un aficionado fue retenido en el césped.


El Valencia vuelve a caer en la maldición del descuento

El árbitro dejó sin pitar dos penaltis a favor del cuadro rojillo, que se desesperó con la actuación del colegiado. Soldado y Lolo marcaron los goles en los últimos cinco minutos.

 

 

Máxima igualdad la que se ha podido ver este domingo en el Reyno de Navarra entre Osasuna y Valencia. Cada uno con su estilo y armas, pero los dos con una meta común: no caer derrotados.

Mientras el equipo ché apostaba por tener el balón con gente como Banega y Tino Costa en la medular, el cuadro rojillo presionaba arriba y salía con velocidad al contragolpe, en un claro guiño a la filosofía de Mendilibar.

El partido fue intenso y bronco, con más polémica que fútbol y un Osasuna un punto por encima del Valencia, en cuanto a tensión competitiva y ocasiones se refieres. De hecho, si no llega a ser por el arbitraje y por Diego Alves, los de Emery habrían regresado a Mestalla con una nueva derrota a sus espaldas.


Y es que, el colegiado dejó sin señalar dos penaltis muy claros en el área visitante. El primero, tras una caída de Raúl García, que fue derribado claramente por Barragán. El segundo, tras una mano clamorosa de Dealbert dentro del área. Todo el mundo vio ambas penas máximas... menos el colegiado.

El Reyno de Navarra llegó a pedir un tercer penalti por caída de Lekic dentro del área en un forcejeo con Diego Alves, pero ahí sí acertó el árbitro al no señalar nada.

Ya en la segunda mitad, el ritmo bajó y Osasuna notó el desgaste físico, algo que aprovechó el Valencia para dominar y, además, adelantarse en el marcador a falta de cinco minutos gracias a un gol de Soldado.

La victoria parecía sellada, pero Albelda, horrible durante todo el partido, fue expulsado. En la jugada siguiente, la última del encuentro, Lolo hizo justicia poniendo el 1-1 en el marcador.

 


Atlético Osasuna: Andrés Fernández; Marc Bertrán, Sergio, Miguel Flaño, Satrústegui (Timor, m.87); Puñal, Nekounam (Lolo, m.79); Cejudo, Raúl García, Lamah (Nino, m.67); y Lekic.

Valencia CF: Diego Alves; Barragán, Rami, Dealbert, Jordi Alba; Albelda, Banega (Aduriz, m.57), Tino Costa; Feghouli (Bruno, m.88), Jonas (Bernat, m.57) y Soldado.

Goles: 0-1, m.85: Soldado. 1-1, m.92: Lolo.

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes (Comité Cántabro). Expulsó con roja directa al jugador del Valencia Albelda (m.91). Amonestó a Marc Bertrán (m.18), Cejudo (m.30) y Nekounam (m.55), de Osasuna, y a Jordi Alba (m.55), Feghouli (m.58) y Barragán (m.83), del Valencia.

Incidencias: Partido de la primera jornada de Liga, aplazado en agosto por la huelga de futbolistas, disputado en el estadio Reyno de Navarra ante 17.359 espectadores.

 
Un poco de Ramis basta

Los de Caparrós alcanzan en puntuación a los madrileños gracias a un gol del central mallorquín tras el descanso. 

 

 

Hora de sobremesa, café y siesta para partido de fútbol en Vallecas. Además, partido de los claves entre dos currantes de la categoría que saben que pelearán hasta el final por evitar el descenso. Por lo tanto puntos más que importantes los que se jugaban en este partido y que se fueron al archipiélago balear para igualar en puntos en la tabla a ambos equipos.

Caparrós vio el partido desde la grada, primero de la sanción de dos partidos tras ser expulsado la pasada jornada ante Real Madrid. Jordi Figueras, por su parte, lo vio desde Brujas, localidad del equipo a donde el central se ha marchado durante esta semana. Cabreo en directiva, secretaría técnica y afición. No lo entendieron igual los administradores concursales de la entidad, que vieron con buenos ojos el ingreso de casi un millón de euros a las arcas del club de la Albufera.

En lo deportivo, el Mallorca que empezó mejor, con ligero dominio en la zona ofensiva. Acometidas de Chori Castro y Pereira por bandas e intentos de gol por parte de Nunes de cabeza a la salida de un córner y del argentino Tissone, nada más comenzar, con un disparo desviado. Dani, por su parte, seguro en la meta, sin problemas ni demasiadas complicaciones a pesar de las acometidas bermellonas.

También estuvo atento el israelí Aouate cuando el Rayo despertó, sacudiéndose el dominio inicial del Mallorca. Ataques precisos a base de robos en el centro del campo. Anotar ocasiones para el equipo madrileño del asturiano Michu, que hasta en tres ocasiones – con la cabeza y el pie – no acertó a introducir el balón en la red, una más de Piti con un disparo lejano y dos incorporaciones de Casado, una que se perdió en la red y otra que se marchó a la cruceta.

No acertó el Rayo a meterse por delante al descanso y pagó su precio en el comienzo de la segunda mitad, a la que el Mallorca salió más entonado. A los diez minutos de empezar, el central Ramis se imponía con poderío a la zaga vallecana en un despiste de esta y enviaba a la red un testarazo que antes de entrar pegó en el larguero.

El Rayo no esperó para reaccionar, tampoco José Ramón Sandoval, que introdujo a Rayco, a Delibasic y a un nuevo canterano debutante, el descarado Alberto Perea, para ponerle más mordiente al ataque. El montenegrino lo intentó de cabeza pero no encontró puerta, hizo lo propio Tamudo pero Iturralde no picó y no señaló el penalti en un choque del delantero catalán con un defensor. Por su parte, Nunes tuvo la sentencia y Ramis volvió a volar en el área franjirroja, aunque esta vez el balón se marchó a las manos de Dani.

A pesar de los cambios y el tímido espabile del conjunto local, que no encontró su sitio en ninguna fase de la segunda mitad, esta vez no los cambios no funcionaron y el Rayo volvió a dejar escapar tres puntos – y esta vez muy importantes – de su estadio. Los de Caparrós consiguen su segunda victoria fuera y alcanzan en la clasificación al conjunto madrileño, dando un salto para volver a alejarse de las posiciones de descenso.


Rayo Vallecano: Dani Giménez; Tito, Arribas, Labaka (Perea, m.79), Casado; Movilla (Delibasic, m.65), Javi Fuego; Trashorras, Michu, Piti (Rayco, m.71); y Tamudo.

RCD Mallorca: Aouate; Chico, Nunes, Ramis, Cáceres; Pereira, Tissone, Martí (Pina, m.53), Chory Castro (Nsue, m.80); Víctor y Ogunjimi (Alfaro, m.65).

Goles: 0-1: M.56 Ramis.

Árbitro: Iturralde González (Comité Vasco). Amonestó a Trashorras del Rayo Vallecano, y a Martí, Tissone, Chico y Pereira del Mallorca.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera jornada de la Liga BBVA, celebrada hoy por la huelga de futbolistas del mes de agosto, disputado en el Estadio de Vallecas ante 9.033 espectadores. Joaquín Caparrós, técnico del Mallorca, vio el partido desde la grada al cumplir un partido de sanción.

 
Messi despierta la pereza del Barça a domicilio

Messi, con tres goles, ejerció de maestro de ceremonias en un partido muy completo de los de Guardiola, que logra una victoria clara antes del Clásico.

 

 

Exhibición de Leo Messi en La Rosaleda y cómodo triunfo del Barcelona (1-4), algo habitual en las visitas del cuadro azulgrana a Málaga en los últimos años. Fue la tarde-noche del argentino que anotó tres goles y pudo hacer otros tres si no lo evitan el palo y Willy Caballero. El Málaga partía con la baja por tarjetas de Toulalan (y se notó) y sus problemas para hacer goles (idem de idem hoy). ¿Cómo jugarle entonces al Barça? A base de un rigor táctico en defensa, no perder balones y aprovechar las ocasiones de gol. Nada de eso pasó en el campo.

Guardiola dio descanso a Xavi, Cesc Fábregas y Puyol pensando en la vuelta copera. Pellegrini colocó el dúo Camacho-Maresca para hacer de Toulalan. Dos jugadores con mínima presencia en toda la temporada, lo que acusaron claramente en la segunda mitad. Pese a todo el Málaga en la primera media hora aguantó bien y dio la cara. De hecho presionó, dominó el balón y hasta tuvo ocasiones de marcar a cargo de Isco que salvó el meta Valdés.

Un chutazo a la escuadra en el minuto 14 y una doble ocasión en la siguiente jugada del internacional sub 21 pusieron a prueba al portero azulgrana para evitar el 1-0 y quién sabe si cambiar la dinámica del choque. Pero no fue así y con el paso de los minutos el Barça fue dominando el balón y a Messi se le veía con un tremendo protagonismo en el césped. Asistiendo y rematando. De este modo llegó el 0-1 a los 32 minutos tras un centro de Adriano que el argentino cabeceó perfectamente a la red. Un bonito gol que decantaba el partido y demostraba que para ganar hay que marcar goles, la gran asignatura pendiente de este Málaga 2011-2012.

Y tras el descanso, en apenas tres minutos (48 al 51) dejó resuelto el Barcelona la contienda. A los 48 minutos un disparo de Thiago, tras jugada de Iniesta, que remata Alexis Sánchez adentro. Muy lenta la defensa blanquiazul en la acción. Y tres minutos después el golpe definitivo. Messi robó un balón en la línea media local, se lleva a toda la defensa y cruza el balón ante Willy Caballero. 0-3 y todo el "pescado" vendido. Incluso se escucharon pitos y protestas de los aficionados ante la parsimonia de su equipo. De ahí al final los azulgranas reservaron esfuerzos y los malaguistas pusieron más voluntad que acierto. Los pases interiores hacían daño a la zaga del Málaga y Leo Messi seguía en plan estrella. Lanzó una falta al travesaño a los 73´y en el 81 hizo el 0-4 en otra galopada individual para un hat-trick que pudo aumentar con dos ocasiones en el 89 y 92. Entre media el venezolano Rondón rompía su sequía goleadora para firmar el gol del honor costasoleño.

En resumen, el Barcelona ganó sin demasiado desgaste con la exhibición de Messi (ya suma 22 goles en la Liga) y hasta con comodidad. En el Málaga se notó la ausencia de Toulalan y los problemas para marcar goles. Los 28.000 espectadores que llenaron La Rosaleda así lo entendieron. Lo de hoy no es la guerra del Málaga, que el domingo próximo ante el Sevilla, en casa otra vez, tendrá muchas cosas en juego.

 


Málaga CF: Caballero; Gámez, Demichelis, Mathijsen, Monreal;Cazorla (Recio, m. 78), Maresca (Rondón, m. 60), Camacho, Eliseu; Isco y Van Nistelrooy (Sebastián Fernández, m. 60).

FC Barcelona: Valdés; Alves, Mascherano, Piqué, Abidal;Thiago Alcántara, Busquets, Adriano (Dos Santos, m. 67), Iniesta (Pedro, m. 73); Messi y Alexis Sánchez (Cuenca, m. 64).

Goles: 0-1, M. 32: Messi. 0-2, M. 47: Alexis Sánchez. 0-3, M. 50: Messi. 0-4, M. 81: Messi. 1-4; M. 85: Rondón.

Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Mostró tarjeta amarilla al malaguista Camacho (m. 62).

Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada de Liga de Primera División diputado en el estadio de La Rosaleda ante 30.000 espectadores.


A unos les sabe bien y a otros no tanto

El Levante acusó las bajas y el Zaragoza dejó pasar otra oportunidad de iniciar el camino de la salvación. Poco juego y pocas ocasiones en un partido aburrido.

 

 

La lógica haría pensar que el 4º clasificado ganaría con solvencia al último clasificado pero la primera mitad no dio para mucho por parte de los dos equipos y con más decepción por parte del Levante que no mando en el partido. Quizás la cantidad de bajas que tenía JIM fuese la explicación pero tampoco hubo una superioridad por parte del Zaragoza que salía con dos de sus nuevas incorporaciones: Apoño y Dujmovic. 

 

 El respeto ganó al fútbol y los dos equipos apenas crearon oportunidades siempre más atentos de cubrir contraataques que de atacar. El Levante salió con 3 en el mediocampo y con Kone como punta de lanza acompañado de no habituales como Suarez y El Zhar. El equipo de JIM recuperaba bien en su campo pero salía rápido con mucho camino por recorrer donde se erigió como protagonista Koné que aguantaba la salida, esperaba y creaba peligro con sus zancadas. El Zaragoza con Lafita y Postiga en el ataque tuvo muy poca paciencia en el manejo del esférico y encontraba en Lafita y la izquierda sus únicas opciones de ataque. Manolo Jimenez comentaba que su equipo adolecía mucho de posesión con goles y así quedaba demostrado con poca participación de sus centrocampistas más preocupados por defender.

La segunda mitad apenas cambió y las jugadas de mayor peligro se producían en salidas rápidas y a balón parado. El Levante notaba mucho en falta la presencia de Barkero como de Valdo en el extremo mientras que en el Zaragoza el morbo estaba en la vuelta de Aranda al Ciutat de Valencia. El partido entró en decadencia a medida que pasaban los minutos y el Zaragoza exponía todas sus carencias en un parte que tuvo como protagonistas a Kone y a Postiga que tuvieron las mejores ocasiones para sus equipos.

Empate que deja sabor agridulce para los locales que tras la derrota en copa suman otro punto para mantenerse en puestos de Champions. El Zaragoza se va con mal sabor ya que pudo haber hecho mucho más para llevarse el partido. Quiso pero no pudo.


Levante UD: Munúa; Javi Venta, Cabral, Nano, Del Horno; Farinós, Xavi Torres (Rafa Jordá, m.76), Iborra; El Zhar, Koné (Roger, m.82) y Rubén (Higón, m.62).

Real Zaragoza: Roberto; Lanzaro, Da Silva, Paredes, Obradovic; Luis García, Dujmovic (Aranda, m.65), Apoño, Micael (Zuculini, m.85); Postiga y Lafita (Juan Carlos, m.76).

Árbitro: Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Sin tarjetas.

Incidencias: Partido de la primera jornada de Liga de Primera División, aplazada a finales de agosto por la huelga de futbolistas, disputado en el estadio Ciutat de València ante cerca de 12.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.


Una goleada siempre es buena para silenciar rumores

Los merengues remontaron el tanto inicial de Llorente con dos penaltis que convirtió Cristiano Ronaldo, y un gran segundo tiempo. Brilló Kaká y Josemi Callejón volvió a anotar.

 

 

El Real Madrid salva los muebles en la Liga después del fiasco copero ante el Barcelona, y después de comenzar perdiendo ante el Athletic de Bilbao por un tempranero gol de Llorente que encendió las alarmas del Santiago Bernabéu. Una afición que aun con la victoria en el bolsillo tuvo pitos para los que jaleaban a José Mourinho.

Los pupilos de Marcelo Bielsa fueron junto al Barcelona el equipo que más difícil le puso las cosas al Real Madrid desde que llegara Mourinho a Concha Espina. Y más allá de eso, la generación de los Muniain, Iturraspe, Javi Martínez, Llorente, San José o Ander demostró ser mucho más de lo que han exhibido hasta ahora. Pues exprimieron a los jugadores merengues hasta obligarles a redondear un partido serio, de casta, y de oficio además del talento que se les presupone para mantener los cinco puntos de ventaja en el liderato.

Y todos los de blanco respondieron además, pese a atravesar momentos críticos durante los noventa minutos: desde el supuestamente desentrenado Esteban Granero, el novel Varane, los desaparecidos Özil y Kaká, el castigado Marcelo, el contestón Ramos, y hasta el ansioso Cristiano Ronaldo. Que con su doblete desde los once metros, unido al gol de Marcelo y Callejón, dio una victoria a los blancos que es un auténtico balón de oxígeno tal y como se venía dando el domingo.

Este partido ante el Athletic llevaba marcado en el calendario madridista desde hacía tiempo. Y no sólo porque la primera jornada se haya pospuesto hasta el final de la primera vuelta, sino porque el Athletic era uno de los rivales a priori más complicados. Pero conforme iban pasando las jornadas y los leones iban creciendo de la mano del ideólogo Bielsa, el respeto se hacía mayor y mayor.

Llegado el pasado miércoles con la derrota en el Clásico, las informaciones de conflictos en el vestuario merengue, y la victoria del Barcelona en Málaga, el respeto pasó a mayores. Pasó a ser una auténtica prueba de fuego. Y apenas hicieron falta unos minutos para comprobar que el encuentro sería uno de esos partidos para hombres.

El Athletic saltó al campo con la cabeza bien alta, el corazón por delante y el orgullo por las nubes. Con las ideas muy claras y las pilas a tope, no sólo se atrevió a mirarle a la cara al Real Madrid, sino que por momentos fue claro dominador del encuentro, provocando incluso varias pitadas generalizadas del coliseo merengue a su equipo, además de una de las mayores pájaras ante un equipo que no fuera el Barcelona desde que Mourinho llegara a Concha Espina. Todo merced al gol inicial de Llorente al cuarto de hora, que fusiló sin oposición a Casillas tras un magnífico centro de Javi Martínez culminando un contraataque. Justo el mejor arma de los blancos, cazadores cazados esta vez.

Fue entonces cuando el Real Madrid dio claros síntomas de agotamiento, inoperancia e incluso de desesperación, quizás superado por la derrota del Clásico, las críticas, la planta del rival y su propia ansiedad. De Marcos tuvo incluso el segundo en sus botas, pero no acertó con el rechace a un buen disparo de Muniain de nuevo en un contraataque. Y paradójicamente, cuando más cuesta arriba parecía el camino, el Real Madrid respondió. 


Dice la historia que el Real Madrid nunca le pierde la cara a los partidos, que nunca va perdiendo sino que siempre está cerca de remontar. Y en este caso, al contrario del pasado miércoles, sí que dio la de cal.

No quería faltar a la cita del gran partido que se estaba viendo, y fue Marcelo el que marcó tras una deliciosa triangulación con Ronaldo y Benzema. Se plantó frente a Iraizoz solo y le batió con la tranquilidad y el talento del mejor delantero centro. Quizás no lo merecieran los blancos por lo que se veía en el campo, pero las tablas subieron al marcador y la tranquilidad llegó a los corazones de todo el madridismo.

Aunque eso sí, el dominio hasta el descanso lo siguió teniendo este estiloso Athletic, que con Javi Martínez, San José, Iturraspe y Ander Herrera al mando, y con un centro del campo en perpetuo movimiento, jugando para los huecos y no para el balón, fueron capaces de salir una y otra vez de la presión merengue. Así, De Marcos, y sobre todo, Llorente a punto estuvieron de poner por delante a los leones.

Mientras tanto, el Real Madrid acechaba a Iraizoz a base de chispazos puntuales, más con el corazón y la rabia que con la cabeza. Y bien pudo haberse adelantado con esta primitiva táctica si Mateu Lahoz hubiera pitado penalti en una acción en la que Javi Martínez derribó al hoy voluntarioso Kaká cuando enfilaba al cancerbero visitante al filo del descanso. Esta vez, el permisivo Mateu Lahoz pudo excederse de laxo incluso.

Sea como fuere, la desazón no duró más de lo que duró el descanso, pues nada más reanudarse el partido, Mateu compensó al señalizar, esta vez sí, otra clara falta sobre Kaká dentro del área. Fue Iturraspe el que agarró al brasileño, y Ronaldo el que materializó la pena máxima. Kaká y Ronaldo para relanzar al Madrid. El sueño de Florentino, pero que por muchos meses no pasó de ser La extraña pareja.

 

A la hora de partido, Bielsa tiró de manual para intentar dal la vuelta al marcador. Estaba dando muy buena imagen, sin perder la cara al partido ni con el marcador en contra, pero quería más y dibujó un 4-1-4-1 para intentar asfixiar un poco más si cabe al Madrid. Maniobra que tuvo el efecto contrario, pues a los cinco minutos, el Real Madrid puso más tierra de por medio gracias a un contraataque. Cuando Özil encaraba a Gorka, se sacó de la chistera un quiebro con el tacón que terminó con De Marcos derribándole. La jugada terminó en gol de Benzema, pero Mateu lo invalidó para así decretar la pena máxima y expulsar consecuentemente a De Marcos. Ronaldo marcaría el tanto desde los once metros engañanado a Gorka por el mismo lado, y encaramándose así de nuevo a lo más alto de la clasificación de goleadores de la Liga.

Higuaín pudo haber marcado el cuarto si no llega a ser porque su disparo se estrelló en el palo. Lo hizo Callejón en un contraataque con el partido ya casi finalizado. Pero lo cierto es que el tercer gol ya desconectó por completo el cuarto de hora final con lo que había sido la tónica general del partido. El Athletic, con diez, no tenía la misma llegada ni las mismas fuerzas, y el Real Madrid, como no podía ser de otra manera, daba ya por bueno el 3-1 que campeaba en el marcador, sabedor de que mantenía los cinco puntos de ventaja respecto al Barcelona a buen recaudo. Un botín muy valioso dado el frágil momento por el que atravesaba el club, y que quién sabe si retomará el próximo miércoles por la noche.

 


Real Madrid: Casillas; Arbeloa, Ramos, Varane, Marcelo; Granero (Lass, m.73), Xabi Alonso, Özil; Kaká (Callejón, m.78), Cristiano y Benzema (Higuaín, m.67).

Athletic de Bilbao: Iraizoz; Iraola, Javi Martinez, San Jose, Amorebieta (Ibai, m.61); Iturraspe, Herrera, De Marcos; Susaeta (Iñigo Pérez, m.67), Llorente (Toquero, m.61) y Muniain.

Goles: 0-1, m.13: Llorente; 1-1, m.25: Marcelo. 2-1, m.47: Cristiano, de penalti. 3-1, m.67: Cristiano, de penalti. 4-1, m.85: Callejón.

Árbitro: Antonio Miguel Mateu Lahoz, del Comité Valenciano. Expulsó a De Marcos (m.67), a Ronaldo (m.29), a Sergio Ramos (m.56).

Incidencias: Encuentro de la primera jornada, aplazada en su día, de la Liga BBVA, disputado en el estadio Santiago Bernabeu ante 75.000 espectadores.


El Submarino Amarillo vuelve a emerger

El equipo amarillo no necesitó demasiado para encontrarse con tres goles que resolvieron el partido en el segundo tiempo.

 

 

El Villarreal fue mejor y lo demostró al golear al Sporting de Gijón por tres goles a cero en el partido que puso el cierre a la primera jornada de Liga.

Con esta victoria el equipo castellonense logró salir de los puestos de descenso y deja al Sporting y Granada en los mismos.

Los locales merecieron el triunfo, por juego y ocasiones, ante un Sporting que intentó jugar con los nervios de su rival y que no supo generar peligro.

El Villarreal y el Sporting se jugaban en el Madrigal la opción de dejar la zona de descenso. Ambos equipos llegaban con la aspiración de hacerlo, pero con mucha más ansiedad en el equipo local que no está preparado para este tipo de sufrimientos.

El equipo local salió con la idea de controlar y de poner el partido de su lado desde el primer minuto, mientras que el Sporting empezó a la espera de lo que hacía su rival para intentar sorprenderlo al contragolpe.

Los locales se mostraron nerviosos y les costó hacerse con ese control, aunque su rival tampoco se acercaba al área de Diego López. Pasaron así veinte minutos de tanteo, en los que poca cosa se vio de fútbol y de ocasiones.

Llegó con ello la primera ocasión a los veinte minutos, cuando Musacchio cazó un balón en el área y su disparo salió junto al palo. Esta ocasión hizo despertar a ambos equipos y el partido entró en una dinámica de más intercambio de juego.

Barral contestó en el minuto 22 con un disparo, avisando que el Sporting también jugaba.

Llegó la polémica poco después cuando los asturianos reclamaron un penalti y los locales una expulsión. El colegiado decidió no pitar la posible pena sobre De las Cuevas y dejó en amarilla la agresión de Barral a Bruno.

La sensación de equilibrio duro diez minutos, ya que a partir de la media hora, el control y las ocasiones fueron locales. Tanto que los de Molina merecieron irse con ventaja al vestuario, pero unas veces la falta de acierto y otras Juan Pablo, lo impidieron.

Dos disparos de Cani, que atajó Juan Pablo. Un mano a mano de Valero con el portero, que no supo definir en los últimos metros, y un disparo en el descuento del mismo Valero, que se marchó desviado por muy poco fue lo que deparó los últimos minutos del primer período.

En los segundos cuarenta y cinco minutos, el Villarreal, debido a la presión, empezó más plano y más espeso. Ello propicio una segunda parte más abierta y con más llegadas para ambos equipos.

Pero en ese intercambio, el Sporting vio como lo que el Villarreal había perdonado en la primera parte, no lo hizo en la segunda.

Y es que en dos minutos el equipo de Molina vio puerta por dos veces y cambió el partido. El primero gol llegó gracias a la calidad y la perseverancia de Marco Ruben, que se fabricó en el área un hueco y ajustó la pelota lejos de Juan Pablo.

Un minuto después Borja Valero marcó un golazo, al lograrlo con un disparo a la escuadra desde treinta y cinco metros a los 58 minutos. Dos goles que cambiaron el panorama y que le pasaron los nervios y la presión al Sporting.

El Villarreal se dedicó a tocar la pelota con más tranquilidad y criterio, mientras que el Sporting buscaba igualar la contienda sacando todo su arsenal al campo y buscando el área a la desesperada.

De esta forma el Villarreal manejaba la pelota, e incluso llegaba a tener las mejores ocasiones. Sobre todo Marco Ruben, al que salvaron otro gol.

El equipo castellonense intentaba no sufrir, ante un inoperante Sporting. Fueron minutos en los que el gol parecía incluso más cercano para el Villarreal, que por primera vez se sentía cómodo y dominador del partido.

Y el partido acabó de la mejor manera posible para el Villarreal, con un golazo de Bruno que desde la frontal del área colocó el balón en la escuadra.

 


Villarreal CF: Diego López, Ángel, Musacchio, Gonzalo, Joan Oriol, Bruno, Senna (Marchena, min. 88), Borja Valero, Cani (Castellani, min. 69), Marco Ruben, Joselu (Camuñas, min. 77).

Sporting de Gijón: Juan Pablo; Lora, Botía, Gregory, Canella; Eguren (Trejo, min. 60), Nacho Cases; Nacho Novo (Ribera, min. 60), André Castro (Bilic, min. 67), De las Cuevas; y Barral.

Goles: 1-0. m.56. Marco Ruben; 2-0. m.58. Borja Valero: 3-0. m.90. Bruno.

Árbitro: Álvarez Izquierdo (Colegio Catalán). Mostró tarjeta amarilla a los locales Mateo Musacchio y a los visitantes Barral, Botía, Canella.

Incidencias: Partido de la primera jornada de Liga de Primera División, aplazada a finales de agosto por la huelga de futbolistas, disputado en el estadio de El Madrigal ante 15.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.

CLASIFICACIÓN PROVISIONAL DE LA LIGA BBVA

Posición
Equipo
Puntos
Jugados
Ganados
Empatados
Perdidos
GF
GC
1
REAL MADRID
49
19 16 1 2 67 18
2
FC BARCELONA
44
19 13 5 1 59 12
3
VALENCIA CF
35
19 10 5 4 29 20
4
LEVANTE UD
31
19 9 4 6 25 22
5
RCD ESPANYOL
28
19 8 4 7 21 21
6
ATLÉTICO OSASUNA
27
19 6 9 4 22 31
7
ATHLETIC DE BILBAO
26
19 6 8 5 27 23
8
ATLÉTICO DE MADRID
26
19 7 5 7 30 27
9
SEVILLA FC
26
19 6 8 5 20 20
10
MÁLAGA CF
25
19 7 4 8 22 28
11
GETAFE CF
24
19 6 6 7 20 25
12
REAL BETIS BALOMPIÉ
23
19 7 2 10 22 27
13
RAYO VALLECANO
22
19 6 4 9 21 28
14
RCD MALLORCA
22
19 5 7 7 17 24
15
REAL SOCIEDAD
21
19 5 6 8 17 27
16
RACING DE SANTANDER
20
19 4 8 7 15 23
17
VILLARREAL CF
19
19 4 7 8 18 28
18
GRANADA CF
19
19 5 4 10 12 26
19
SPORTING DE GIJÓN
18
19 5 3 11 18 33
20
REAL ZARAGOZA
12
19 2 6 11 14 33

No hay comentarios:

Publicar un comentario