ANÁLISIS DE LOS CUARTOS DE FINAL DE LA COPA DEL REY (Partidos de ida)

El Atlético deja los deberes coperos para casa

El Atlético aguantó ante un Celta que fue mejor casi todo el partido. Gabi salvó el gol vigués en la línea y el Celta pidió un penalti de Thomas en el último instante.

 

La primera de las batallas entre Celta y Atlético finalizó con el 0-0 en el marcador. En Vigo continúan con el orgullo herido y quisieron tomarse la revancha en el mismo escenario del  0-2 ante los rojiblancos en Liga. Fue hace dos jornadas pero el enfrentamiento en Copa les ha hecho revivir aquel partido. La idea con la que partía el cuadro de Berizzo para el primer asalto era no encajar goles y llegar al Calderón con posibilidades. Salir con la portería a cero de Balaídos era una cuestión difícil si enfrente tienes a un rival como el Atlético de Madrid pero alcanzaron su primer objetivo.

Inicio de partido trepidante. Mucho dio qué hablar el once con el que saldría a jugar Simeone en Balaídos. El técnico argentino apostó por una alineación plagada de titulares donde destacaba la presencia de Jackson Martínez. El colombiano tenía hoy una gran oportunidad para demostrar su valía como delantero. Eduardo Berizzo también hizo lo propio y apostó por “un once de gala” para plantar cara a su rival. Y así fue.

El partido comenzó de forma trepidante, con varias ocasiones de mucho peligro para los dos conjuntos.  Casi de forma consecutiva fueron las dos primeras llegadas del Atlético. Gabi y Jackson Martínez enviaron los dos primeros avisos a la portería de Rubén. El Celta de Vigo no tardó en responder con una doble ocasión. Remató Iago Aspas dentro del área pero el rechace de Moyá provocó que Guidetti también llegase al golpeo de balón que se acabó estrellando en el cuerpo de Aspas. El equipo vigués con el paso de los minutos se fue creciendo, las jugadas de ataque se sucedían una y otra vez. La oportunidad más clara para abrir el marcador llegó en una gran jugada colectiva. Orellana conectó con Jonny, que llegaba a toda velocidad por el costado derecho. El defensa colgó un centro al área aunque falló Pablo Hernández en el remate. El argentino desperdició la más clara para los suyos que se pudieron marchar a los vestuarios con ventaja en el marcador.

El arranque de la segunda parte fue semejante al del primer acto. Salió mejor el Atlético de Madrid que se mostraba ligeramente superior a su rival. Aún así Diego Simeone no veía claro el partido y acabó por dar entrada a dos delanteros como Ángel Correa y Vietto para sustituir a Jackson Martínez y Carrasco. Ni lo cambios hicieron posible que el Atlético estrenase el marcador. Tampoco lo hizo el Celta que a punto estuvo de lograr el milagroso gol.

En el minuto 83 pudo llegar el tanto del Celta. La falta de entendimiento en defensa entre Augusto y Moyá provocó que un balón largo de Guidetti casi cruzase la línea de gol. Gabi fue el salvador y sacó el esférico bajo los tres palos. Hubo más y en los instantes finales del choque una jugada pudo decidir el partido a favor del cuadro celeste. Una mano de Thomas dentro del área fue la acción que más reclamaron los jugadores locales. El colegiado, Estrada Fernández consideró que la mano del ghanés fue involuntario y obvió dictaminar la pena máxima.

Entre las protestas y el alivio de los rojiblancos, tras las dos últimas jugadas que les pudieron costar muy caro, el choque finalizaba. El 0-0 deja la eliminatoria abierta para la vuelta que se disputará la semana que viene en el Calderón. La batalla por alcanzar la semifinal continuará.

 

 

RC Celta de Vigo: Rubén Blanco; Jonny, Sergi Gómez, Cabral, Planas (Hugo Mallo, min. 87); Wass (Borja Fernández, min. 92), Hernández, Radoja; Orellana, Aspas (Beauvue, min. 73) y Guidetti.

Atlético de Madrid: Moyá; Gámez, Savic, Godín, Filipe; Gabi, Augusto, Koke, Carrasco (Vietto, min. 65); Griezmann (Thomas, min. 79) y Jackson Martínez (Correa, min. 59).

Árbitro: Estrada Fernández (Comité Catalán). Amonestó al jugador local Orellana y al visitante Jackson Martínez.

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio de Balaídos con una asistencia de 18.000 espectadores

 

Neymar se basta para domar a los Leones

Un gol de Aritz Aduriz rescata una eliminatoria que parecía resuelta. Los culés se conformaron en la segunda parte y acabaron pagándolo

 

Aritz Aduriz resucitó en el 88 una eliminatoria que durante toda la segunda parte parecía casi resuelta. Hasta sus diez minutos finales, la intensidad de juego de la segunda mitad fue tan baja que parecía que no quedaban 90 minutos de vuelta en el Camp Nou o que el marcador era muchísimo más abultado.

Mostró mucha impotencia el Athletic en la segunda parte, desmoralizado con dos goles del Barcelona en tras unos 20 primeros minutos en los que mereció mucho más. Pero el Barçá pecó de mucho conformismo, a penas visitó el área de un Athletic casi subyugado, y desperdició la oportunidad de matar la eliminatoria que aunque le queda de cara tiene aún cosas que contar.

Salió el Athletic con veneno en el comillo, enrabietado tras la cornada del pasado domingo en el partido de Liga. Sus primeros 20 minutos fueron casi impecables: anuló al Barça, dominó el partido, llegó con frecuencia…pero tuvo muy poco acierto en los metros finales. Todo lo contrario que el Barça, que tras pasar muy malos momentos tuvo la pegada para anotar en sus pocas llegadas y desesperar a los leones.

Corría el minuto 18 cuando una contra bien llevada por Arda encontró a Rakitc en la derecha para que el croata pusiera un centro a lo Beckham desde la banda derecha, un regalazo que Munir supo aprovechar en el corazón del área poniendo el 0-1 en el marcador. Los de Valverde veían desesperados que el saldo de sus 20 grandes primeros minutos era un 0-1 en contra.

El gol minó bastante la moral de los leones, que con el ánimo tocado rebajaron la presión sobre la salida del Barça. Y sin presión, los culés se hicieron dueños y señores primero del esférico y a través de él del partido. Ya dominaban el choque cuando además la fortuna se puso de su parte. Sergi Roberto buscó en largo a Neymar y el Athletic encadenó una serie de errores para que ese balón de peligro relativo acabara en el 0-2 culé. Etxeita estuvo blando y no llegó al despeje, Herrerín se marcó una salida suicida que dejó la portería totalmente descubierta y Laporte se resbaló en el peor momento posible. Demasiadas facilidades para Neymar que, ante la insistencia rival, puso el 0-2 en el marcador y un clavo casi definitivo en la eliminatoria.

La segunda parte fue la nada futbolística hasta su recta final El Barcelona ya había sacado todo lo que necesitaba en la primera y se limitó a domir el partido y defenderse con solvencia ante los arreones de los leones. Unos arreones bastante inocentes, todo sea dicho. Pudo matar la eliminatoria el Barça al comienzo de la segunda mitad en una jugada en la que Munir, cuando lo tenía todo de cara para plantarse en el área solo con Herrerín, se tiró una inexplicable vaselina que atrapó sin problemas el meta.

La primera seria del Athletic define su impotencia en la segunda parte ya que no llegaría hasta el minuto 80, donde un cabezazo de Sabin fue sacado espectacularmente a bocajarro por Ter Stegen. Entre medias de estas dos acciones se vió un segundo periodo soso que se fue enfangando según los de Valverde se iban calentando con el paso de los minutos, cosa que derivó en un carrusel de tarjetas amarillas, por momentos, lo único que pasaba en el partido. A raíz del cabezazo de Sabin el Athletic comenzó a apretar, con más fe que fútbol y cuando parecía que los leones no iban a hacer un gol ni jugando 200 minutos, un error infantil de Alves en salida dejó el balón franco a San José para que asistiera Adúriz que en el área mató, poniendo la emoción en el partido y la vidilla en la eliminatoria. Pudo hasta empatar, pero de nuevo Sabin, con un pie dentro del área a tiro de Aduriz, se topó con un espectacular Ter Stegen que acabó salvándole la cara a los suyos. Al Athletic le faltaron minutos y el marcador no volvió a moverse, 1-2 que probablemente no deje satisfecho a ninguno y que deja la eliminatoria abierta para el Camp Nou. 

 

 

Athletic de Bilbao: Iago Herrerín; De Marcos, Etxeita, Laporte, Lekue; Iturraspe, Beñat (San José, m.68); Williams, Eraso (Sabin Merino, m.61), Susaeta (Muniain, m.56); y Aduriz.

FC Barcelona: Ter Stegen; Alves, Piqué, Mascherano, Sergi Roberto (Adriano, m.73); Busquets, Iniesta, Rakitic; Arda (Aleix Vidal, m.66), Munir (Sandro, m.80) y Neymar.

Goles: 0-1, m.18: Munir. 0-2, m.24: Neymar. 1-2, min.89: Aduriz

Árbitro: González González (Comité Castellano-leonés). Mostró tarjeta amarilla a los locales Laporte (54'), De Marcos (65), Etxeita (67), Iturraspe (77) y San José (92) y a los visitantes Iniesta (38), Mascherano (78) y Alves (89).

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, disputado en un San Mamés cerca del lleno con unos 50.000 espectadores.

 

 

La depresión se instala en la Copa

El equipo de Neville empató ante Las Palmas después de empezar perdiendo con un gol en propia puerta de Zahibo. Alcácer marcó en la segunda parte.

 

Las Palmas sale con vida de Mestalla. Y qué vida. El Valencia le puso más ganas al partido, pero no creó excesivos problemas a los canarios. Un gol de Zahibo en su propia meta en la primera mitad puso por delante a los visitantes cuando menos lo merecían y más fallos cometían. Paco Alcácer anotó el gol del empate en la segunda parte, pero no lograron cuajar la remontada.

El partido parecía que iba a ser un paseo para el conjunto che. Los de Quique Setién se encontraban visiblemente nerviosos. Se pudo comprobar en la primera acción  clara del partido, en el minuto 6, con un error de Culio ante la presión de Rodrigo. Se la robó el jugador valenciano y se la deja a Alcácer aprovechando el espacio en la defensa canaria. Sin embargo el delantero falla ante Lizoain, que le gana el mano a mano sacando el balón con el pie. El mal partido que estaba realizando Las Palmas continuaría con la lesión de Vicente tras cumplido el primer cuarto de hora. Se dolía de su brazo después de una mala caída.

El Valencia apretaba y se acercaba al área de los canarios, pero no conseguía poner en aprietos la meta. Alcácer volvió a tener la ocasión de adelantar al equipo che, pero su remate de cabeza lo sacó, una vez más, Lizoain con una buena mano. Muy en contra de lo ocurrido en el guión de los primeros 45 minutos, el tanto que subiría al marcador sería a favor de Las Palmas. Un centro de Momo desde la derecha al segundo palo hacia Aythami lo cabecea Zahibo hacia su propia meta en el minuto 39. Ryan no pudo llegar a evitar el gol en propia puerta. Abdennour tuvo en su testa la ocasión de empatar en el descuento, pero su remate se marchó por encima de la portería.

Los de Gary Neville salieron a por todas en la segunda mitad. La derrota y el empate no podían entrar en sus planes si querían viajar al archipiélago canario con ventaja suficiente. Apretó y llegaba con claridad al área. Alcácer, de tanta insistencia, encontraría su premio en el minuto 61. Completamente solo en la frontal ante un pase de Parejo, el delantero del Valencia armó el disparo para batir por bajo a un descolocado Lizoain ante la mirada de la defensa de Las Palmas. Los de Quique Setién no ponían apenas en apuros ahora a los locales. Wakaso, con un disparo lejano, fue la única respuesta al tanto valenciano, pero se marchó por encima del travesaño.

Al conjunto canario le servía el empate. Con un gol en campo visitante partía con ventaja para la vuelta en Gran Canaria. Se dedicaron a jugar con calma, manteniendo el balón y esperando al Valencia. Se hacía largo el final del partido para los canarios, pero los valencianos no conseguían llegar a la meta de Lizoain con claridad ni peligro. Los de Gary Neville siguen con su nivel regular, además de jugarse la clasificación a las semifinales de Copa en el campo de la UD Las Palmas. Oportunidad de oro para los de Quique Setién, sin duda

 

 

Valencia CF: Ryan, Barragán, Mustafi, Abdennour, Gayà, Parejo, Zahibo (Negredo, m.79), Danilo, Rodrigo (Cancelo, m.68), Piatti (De Paul, m.63) y Paco Alcácer.

UD Las Palmas: Raul Lizoaín, Nili, David García, Aythami (Dani Castellano, m.82), David Simón, Vicente Gómez (Roque Mesa, m.21), Culio, Momo (Nauzet Alemán, m.77), Valerón, Wakaso y Araujo.

Goles: 0-1, m.39: Zahibo en propia puerta. 1-1, m.61: Alcácer.

Árbitro: Del Cerro Grande (Colegio Madrileño). Amonestó por el Valencia a Danilo, Zahibo y Gayà y por Las Palmas a Araujo, Wakaso, Culio y Nauzet Alemán.

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el campo de Mestalla ante 10.000 espectadores.

 

Vitolo derriba el muro burgalés sobre la bocina

Raúl Fernández, con paradas de mucho mérito, se había encargado anteriormente de que el gol de N’Zonzi fuera el único que campeara en el marcador. Por momentos, los rojillos pusieron en dificultades a los de Emery

 

Sin nada que perder y mucho que ganar llegaba una vez más la revelación de la actual edición de la Copa a otro estadio de primerísimo nivel. El Mirandés, que ya conquistara Riazor y de qué forma hace apenas una semana, salió con el mismo propósito al Sánchez Pizjúan ante un Sevilla que se vio sorprendido de inicio.

La presión arriba de los burgaleses hacía mucho daño a la salida de balón hispalense, que no conseguía traducirse en ocasiones. Mientras, el equipo sevillista creaba peligro con la estrategia en jugadas a balón parado.

Precisamente en una de ellas llegó el primer tanto del encuentro. Reyes sacó rápido una falta y después de una ‘melé’ dentro del área visitante, el balón llegó a un N’Zonzi que andaba por ahí despistado y en posible posición de fuera de juego. Sin embargo, el francés no falló y allanó el camino a las semifinales.

La ‘Cenicienta’ del torneo del K.O no bajó los brazos y reaccionó de la mejor forma posible. Fran Carnicer, que ya había demostrado en minutos anteriores su habilidad con el balón, emuló al mismísimo Iniesta  y desde línea de fondo se fue quitando a los rivales que le salieron al paso. Sangalli, que esperaba el correspondiente pase de la muerte, pudo hacerse con éste pero su remate acabó en el palo ante el lamento de los 200 valientes que se habían desplazado desde Miranda de Ebro hasta la capital andaluza.

En el último cuarto de hora de la primera mitad las idas y venidas de un área a otra se sucedieron, lo que pudo acabar en la sentencia hispalense en la jugada previa al descanso. Reyes, que hasta el momento estaba siendo el mejor de los suyos, puso en bandeja a Gameiro una de esas que no suele fallar pero esta vez lo hizo ante un Raúl Fernández que realizó una parada de mérito. En el rechace sin portero Krohn-Delhi también pudo poner tierra de por medio pero mandó el esférico fuera ante el lamentó del danés cuándo se dirigían a vestuarios.

En la reanudación, los coloquialmente conocidos como ‘jabatos’, hicieron honor a su nombre y siguieron buscando la igualada pero enfrente tenían a un Reyes extra-motivado que se bastaba él sólo para crear peligro. Fue entonces cuando comenzó el festival de cambios que frenó un poco el ritmo del partido pero no el guión del mismo.

Por los locales, la magia de su capitán seguía apareciendo aunque lo que no encontraba era su premio individual en forma de gol, en parte gracias a un Raúl Fernández que estaba soberbio en la meta rival. Mientras, las sustituciones rojillas ya se habían asentado en el campo y creaban peligro sobre todo con Álex García por la izquierda después de la marcha de Carnicer.

En los minutos finales, el Mirandés apretaba a un Sevilla que se defendía como gato panza arriba y en el que empezaba a destacar David Soria en la portería. Esto enfadaba a la afición del Sánchez Pizjúan, que veía un marcador corto para la vuelta en Anduva.

Así la reacción llegó de las botas de Krohn-Delhi y Gameiro, por partida doble, que una vez más se encontraban ante el muro forjado por Raúl Fernández que demostraba sus dotes de reflejos.

Ya cuándo De Burgos Bengoetxea miraba su reloj para cerrar el encuentro llegó el mazazo para los burgaleses, en forma de tanto. Vitolo remató a la red un ejercicio de fe de Krohn-Delhi por llegar al centro de Mariano y esto dejó todo más a su favor para dentro de una semana.

 

 

Sevilla FC: David Soria; Mariano, Carriço, Kolodziejczak, Escudero; N’Zonzi, Iborra (Krychowiak, m.82); Reyes (Vitolo, m.72), Krohn-Dehli, Konoplyanka (Éver Banega, m.60); y Gameiro.

CD Mirandés: Raúl; Galán, Gafford, Kijera (Eguaras, m.52); Rúper, Fran Carnicer (Álex García, m.66); Carlos Moreno, Provencio (Néstor Salinas, m.57); Sangalli, Abdón y Javier Cantero.
Goles: 1-0, M.20: N’Zonzi. 2-0, M.93: Vitolo.

Árbitro: Ricardo de Burgos Bengoetxea (Comité Vasco). Amonestó a los visitantes Kijera (m.19), Abdón (m.44) y Gaffoor (m.87) y a los locales Kolodziejczak (m.24) y Escudero (m.85).

Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante algo más de 25.000 espectadores, entre ellos varios centenares de aficionados del Mirandés. Terreno de juego en buenas condiciones