viernes, 29 de enero de 2016

ANÁLISIS DE LOS CUARTOS DE FINAL DE LA COPA DEL REY (Partidos de vuelta)


Orgía celeste en el Calderón

Dos goles de Pablo Hernández y uno de Guidetti sacan a los rojiblancos de la Copa del Rey. El Atlético lo intentó con dos tantos, pero el Calderón y Simeone quedaron enmudecidos ante la sorpresa.

 


Victoria y clasificación para las semifinales del Celta de Vigo (2-3) ante el Atlético de Madrid. La primera parte se marchó al descanso con el empate a uno. Pablo Hernández abrió el marcador y Griezmann logró la igualada. Ya en el segundo acto, los goles de Guidetti y Pablo Hernández sentenciaron la eliminatoria. El Atlético de Madrid recortó distancias con el tanto de Ángel Correa, un gol que ya no tenía validez.

Como si de una final se tratase. El partido de vuelta de los cuartos de final entre el Atlético y el Celta había adquirido aires de final. Los 90 minutos disputados en Balaídos dejaron la eliminatoria totalmente abierta (0-0). Eduardo Berizzo tiró por la borda el partido liguero frente al Rayo (perdió 3-0) como consecuencia de las rotaciones. Quería llegar con todo a este encuentro, reservando a casi todos sus titulares aunque esta circunstancia viniese acompañada de una derrota. Le funcionó y el Celta ya está en las semifinales de la competición copera.

Gran inicio del Atlético de Madrid que salió a por todas. La presión de los madrileños propició que el Celta fuese incapaz de retener el balón. Dominaban los atléticos, Koke y Griezmann fueron los primeros en animarse a probar suerte. Los pupilos de Simeone querían abrir cuanto antes el marcador y Saúl tuvo las dos mejores ocasiones, además de forma consecutiva. Dos jugadas individuales del alicantino en el área que logró resolver Rubén Blanco a favor de su equipo.

Estaba llegando más y con mucho peligro el conjunto rojiblanco pero inesperadamente y contra todo pronóstico se adelantaron los visitantes. Jugada a balón parado, un córner que dejó frío al Calderon. Sacó Wass en corto para Orellana, centro al área del chileno y Pablo Hernández remató de cabeza un balón que acabó en el fondo de la red. Inesperado el tanto del Celta al que la eliminatoria se le ponía muy de cara, sin apenas ocasiones, sin demostrar superioridad en el juego. El Atlético de Madrid veía como se le escapaba el partido y por consiguiente la clasificación para la siguiente ronda pero supo esperar. En siete minutos, Griezmann acortó distancias. Un disparo de Yannick Carrasco hacia la portería de Rubén Blanco provocó que el rechace realizado por el cancerbero acabase en las botas del delantero francés. Griezmann remató con la derecha y el balón se acabó colando junto al palo izquierdo. Tras el empate en el marcador, el partido se marchó al descanso con más igualdad, más equilibrado pero la balanza continuaba a favor de los rojiblancos que generaban más ocasiones de peligro que su rival.

Con la reanudación, el Celta tuvo otro contratiempo. En la primera parte, un choque de Vietto con Rubén Blanco dejó al cancerbero algo tocado. No pudo continuar y Segio Álvarez salió para disputar la segunda mitad. Los sobresaltos se continuaron y en el minuto 55 el Celta vio como era anulado un gol. La decisión arbitral fue acertada ya que el centro de Guidetti había cruzado la línea de fondo. Los jugadores vigueses protestaron pero apenas tuvieron tiempo para pensar en lo sucedido. Un minuto después Guidetti, otra vez fue protagonista, ejecutando un espectacular disparo desde fuera del área que entró por toda la escuadra. El gol llegó tras una pérdida de balón de los rojiblancos. El 1-2 a favor del cuadro Celeste complicaba la clasificación de los atléticos que tuvieron en las botas de Ángel Correa el empate. El disparo del argentino golpeó en la madera y con ello, toda esperanza.

En el minuto 65 Pablo Hernández sentenció la eliminatoria. El argentino que hizo doblete en el partido, volvió a marcar de cabeza en el interior del área, gracias al centro de Hugo Mallo. La efectividad del equipo de Berizzo fue infalible y pese a que Ángel Correa logró recortar distancias, ya no había minutos para más (2-3).El Celta se clasifica así para las semifinales de la Copa del Rey, eliminando a uno de los equipos más en forma de La Liga.

 

 

Atlético de Madrid: Moyá; Juanfran, Giménez, Godín, Filipe; Saúl (Óliver, m. 62), Gabi, Koke; Griezmann, Vietto y Carrasco (Correa, m. 58).

RC Celta de Vigo: Rubén Blanco (Sergio Álvarez, m. 46); Hugo Mallo, Sergi Gómez, Cabral, Jonny; Radoja; Wass, Iago Aspas, Tucu Hernández, Orellana; y Guidetti (Beauvue, m. 80).

Goles: 0-1, m. 21: Pablo Hernández cabecea un centro de Orellana. 1-1, m. 28: Griezmann marca tras un rechace de Ruben Blanco. 1-2, m. 55: Guidetti, con un derechazo desde lejos. 1-3, m. 63: Pablo Hernández cabecea un centro desde la derecha de Hugo Mallo. 2-3, m. 81: Correa, de jugada individual.

Árbitro: Mateu Lahoz (Comité Valenciano). Amonestó a los locales Vietto (m. 15), Filipe (m. 67) y Koke (m. 79) y al visitante Guidetti (m. 34).

Incidencias: Partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 35.000 espectadores.

 


El campeón resiste a pesar de todo

Dos goles en la segunda mitad fulminan al conjunto de Valverde que no paró de dar la cara en toda la eliminatoria y compitió hasta el final

 


El FC Barcelona tenía todo a su favor después del resultado cosechado en San Mamés (1-2) pero el Athletic no quería dar la eliminatoria por perdida y salió con una presión muy alta que hizo a la defensa azulgrana dividir el balón. Las suplencias de Busquets e Iniesta, por fiebre, junto con la no convocatoria de Arda Turan dejaban la medular en cuadro. Luis Enrique optó por introducir a Mascherano en el centro del campo con el multiusos Sergi Roberto y Rakitic pero estos jugadores no se encontraban en estos primeros minutos.

En el primer acercamiento local el esférico acabó en las mallas pero Hernández Hernández, el colegiado del encuentro, decretó falta de Vermaelen sobre Mikel Rico en el salto, por lo que todo seguía igual. Dónde sí iba a cambiar el resultado era en la jugada siguiente, dónde Aduriz se vistió de asistente para ver la diagonal de Williams ante un errático Mathieu que perdió la marca y tras el regate del velocista de Lezama a Ter Stegen silenció el Camp Nou. Las dudas llegaban a la Ciudad Condal, más aún cuándo las siguientes ocasiones llegaban de las botas del propio Williams, Aduriz y Susaeta, lo que dejaba contra las cuerdas al equipo blaugrana.

La banda de Mathieu era una auténtica autopista para el primer goleador, lo que aprovecharon los hombres de Valverde para inclinar el juego por ahí. Mientras en el otro área, Herrerín era un mero espectador ya cumplido el ecuador de la primera mitad. El ritmo rojiblanco bajó pero seguía dominando el esférico ante un público azulgrana que se empezaba a desesperar y señalaba a un culpable por encima del resto: Mathieu.

En ataque apenas unos destellos de Neymar, que ponía en aprietos a un reconvertido Lekue, inquietaban a unos ‘leones’ muy concentrados en estos 45 minutos.Fue precisamente en el único fallo defensivo dónde vino el ‘dejavu’ de hace diez días. Balenziaga, siendo el último defensa, derribaba a Neymar pero el colegiado esta vez no le enseñó el camino a los vestuarios como sí hiciera con Iraizoz Mateu Lahoz. Las protestas desde el banquillo se sucedían porque veían ocasión manifiesta de gol, mientras que en los rojiblancos se excusaban que el balón no iba en la dirección de Herrerín. La MSN comenzaba a engranarse y antes del descanso Neymar y Messi, por partida doble, pudieron hacer el empate, que no llegó gracias a la zaga vasca más que pegajosa que hacía que su portero pasase prácticamente inadvertido.

En la reanudación, siguió el guión del último cuarto de hora anterior lo que aprovechó el Barça para dominar y quitarse esa presión que tanto daño le había hecho. Las tablas eran cuestión de tiempo y estas llegaron de las botas de un Luis Suárez que había estado bastante desaparecido hasta ese momento. Un pase genial filtrado por Sergi Roberto sobre Messi acabó con otro centro mejor con el rabillo del ojo de éste sobre el uruguayo, que no falló en su primer remate a portería (gracias también a los resbalones previos de Balenziaga y Rakitic).

Fue entonces cuándo Valverde decidió mover el banquillo en busca de oxígeno ya que el vendaval que se le venía encima era ya una realidad. Así dio entrada a Beñat y Sabin Merino por Mikel Rico y Susaeta, que se marcharon fundidos. Este doble cambio hizo efecto en los instantes siguientes ya que el Athletic dispuso de otra ocasión de ponerse por delante, precisamente de uno de los recién incorporados (Merino) y en el rechace, de Eraso. No fue más que un espejismo porque los de Luis Enrique decidieron dormir un poco el partido con un fútbol más de control, que terminaba de cansar a unos ‘leones’ fatigados.

Mientras, Vermaelen dejaba su sitio a un Busquets al que añoraron mucho sobre todo en la primera mitad y Muniain salía por Eraso en el nuevo carrusel de cambios. Ironías del destino, el conjunto azulgrana volvió a perder el control de balón lo que supuso la reacción final de unos jugadores rojiblancos que ya empezaban a dar síntomas de fatiga sobre el terreno de juego.

Ya empezaba a intervenir Herrerín, que salvaba todas las llegadas rivales con paradas de mucho mérito. Ante lo que nada pudo hacer el guardameta rojiblanco fue con el cabezazo a bocajarro de Piqué que cerraba el pase a semifinales para los suyos. Sin embargo Aduriz no quería darse por vencido y en una indecisión de Mascherano, a punto estuvo de regalarle el empate en el luminoso el pichichi rojiblanco a Sabin Merino, que se durmió con un Dani Alves que llegaba como una moto para salvar el gol.

En las postrimerías del encuentro, Neymar se llevó el premio en forma de gol a su extraordinaria labor con un zurdazo que se alojó en la escuadra. Así, a pesar de todo, los ‘leones’ murieron con las botas puestas en su competición favorita ya que en algún momento sobrevoló el K.O de su equipo en el Camp Nou.

 

 

FC Barcelona: Ter Stegen; Alves, Piqué, Vermaelen (Busquets, min.69), Mathieu; Mascherano, S.Roberto, Rakitic; Neymar, Suárez y Messi.

Athletic de Bilbao: Herrerín; Lekue, Laporte, Bóveda, Balenziaga; San José, Mikel Riko (Sabin Merino, min.57); Susaeta (Beñat, min.57), Eraso (Muniain, min.73), Williams; y Aduriz.

Goles: 0-1, min.12: Williams. 1-1, min.53: Suárez. 2-1, min.81: Piqué. 3-1, min.91: Neymar.

Árbitro: Hernández Hernández (Comité Canario). Mostró cartulina amarilla a Mikel Rico (min.19), Balenziaga (min.39), Lekue (min.52) y Luis Suárez (min.70).

Incidencias: Asistieron 63.405 espectadores al partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el Camp Nou

 

 

El Sevilla silencia Anduva y hace del infierno un balneario

El conjunto hispalense acaba con el sueño copero del Mirandés. Los de Emery se clasifican con un 5-0 en el global de la eliminatoria

 


Si hay un estadio donde está permitido soñar es Anduva, y si hay un equipo que quería ganarse el derecho a seguir haciéndolo en Copa es el Mirandés. Los burgaleses recibían en su particular infierno al Sevilla, quien tomó ventaja en el partido de ida gracias a los goles de N´Zonzi y Vitolo. Emery no se fiaba del resultado del primer enfrentamiento y tampoco de su rival, por lo que decidió apostar por muchos de sus titulares y reforzar el medio con un tridente en el once inicial.

El Mirandés salió con mucha fuerza y con el objetivo de abrir lo más pronto posible el marcador. Sin embargo, fue el Sevilla el primero en adelantarse gracias a un penalti bastante discutible señalado por el colegiado. Ion Vélez metió el pie en el momento en el que Cristóforo preparaba el disparo, y el colegiado interpretó que el sevillista fue derribado. Iborra no falló desde los once metros y ponía muy de cara la eliminatoria. El tanto de los andaluces supuso una verdadera avalancha sobre la portería del Mirandés que no lograba salir de su campo ante un Sevilla desatado en ataque.

Carlos Terrazas buscó la revolución con un triple cambio en el descanso, pero la realidad es que los locales lo intentaban con más corazón que cabeza ante un Sevilla que de haber pisado un poco más el acelerador  podía haber hecho mucho daño. A punto estuvo, de hecho, de hacerlo Vitolo, cuyo mano a mano ante Raúl se marchó fuera por poco. Llorente falló el 0-2 por partida doble, pero finalmente Juan Muñoz encontró puerta tras una buena jugada de Vitolo por el costado izquierdo.

Coke hizo el definitivo 0-3 con un remate de cabeza en el primer palo que puso punto y final al recorrido del Mirandés en Copa del Rey. Final del sueño para uno y comienzo para otros, los andaluces se plantan en semifinales de una competición donde están imbatidos y que se convierte en el gran sueño de los seguidores sevillistas esta temporada.

 

 

CD Mirandés: Raúl; Galán (Provencio, min.46), Gaffoor, Javi Cantero; Moreno, Lázaro, Ion Vélez (Néstor Salinas, min.46), Kijera; Carnicer, Abdón Prats y Oyarzun (Álex García, min.46).

Sevilla FC: David Soria; Coke, Rami, Carriço (Kolodziejczak, min.80), Escudero; Cristóforo, N'Zonzi (Llorente, min.60); Vitolo, Iborra, Konoplyanka (Kakuta, min.70); Juan Muñoz.

Goles: 0-1, min.8: Iborra (p); 0-2, min.71: Juan Muñoz; 0-3, min.92: Coke.

Árbitro: Vicandi Garrido (Colegio Vasco). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Lázaro y Kijera y a los visitantes Carriço, N'Zonzi y Cristóforo.

Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio municipal de Anduva ante 4.426 espectadores. Noche fría y con lluvia en Miranda de Ebro.

 


Una alegría entre tanto sufrimiento siempre es bienvenida

Rodrigo marcó el único gol del partido en el minuto 20 de la primera parte e hizo bueno el empate de Mestalla. Las Palmas tuvo su mejor ocasión en el descuento.

 


Primer examen a vida o muerte al que se presentaba Gary Neville como entrenador del Valencia. Rodrigo, con un gol en el minuto 20 de la primera mitad, hizo que el técnico ché aprobara con un suficiente. Las Palmas partía con ventaja debido al resultado de la ida y, a pesar de haber dominado parte del encuentro con clara superioridad ante los valencianos, no logró cuajar una sorpresa que habría resultado histórica para los canarios.

No encontró el conjunto pío-pío su lugar en el terreno de juego. El Valencia comenzó el partido buscando el dominio completo, y sin duda lo halló. Mantenían la pelota ante un equipo suave a pesar de jugar en casa. El resultado a favor de la ida les daba una ventaja que querían aprovechar. Craso error. En una primera parte donde los disparos entre los tres palos escaseaban, fue en el minuto 20 cuando Rodrigo abrió la lata. André Gomes, adelantándose a la entrada de Garrido por bajo, se marchó por banda derecha para poner un pase por bajo al centro del área donde encontró al atacante español que, con la punta de su pierna izquierda, introduce el esférico en la portería.

No conseguía el equipo de Quique Setién rehacerse y apenas puso en aprietos la meta defendida por Matt Ryan. Los chés partían con ventaja ahora en el global, lo que supuso una calma en el modo de juego. Esperando al conjunto canario, buscaban huecos en la línea de defensa, pero los primeros 45 minutos llegaron a su fin sin ninguna ocasión clara de gol más. Sin embargo, aún no podía respirar tranquilo Gary Neville ante su primera prueba de fuego. Una eliminación de copa ante Las Palmas podría significar una derrota demasiado dura.

La segunda parte continuaría la esencia del Valencia. Control del balón e impedir que Las Palmas que pudiera empatar el partido. Comenzaban a sufrir ante Las Palmas, sin nada que perder, que iba cada vez a más. En varias ocasiones amenazó la portería de Ryan. La más clara la tuvo Willian José, cuyo remate de primeras al segundo palo obliga al meta australiano a sacar una mano salvadora para evitar el empate en el primer cuarto de hora.

Los de Gary Neville comenzaban a perder el control y parecía que las dudas asediaban las cabezas de los jugadores del Valencia. Se hacía eterno el final del partido. La UD Las Palmas mantenía el esférico durante la mayoría del tiempo y lograba llegar al área ché, pero la defensa lograba sacar, a duras penas, el cuero del área. Sin embargo, los de Quique Setién no pudieron marcar el empate y el Valencia evitó una sorpresa que, viendo el nivel del equipo ché, no habría sido muy descabellada. A semifinales con un susto.

 

 

UD Las Palmas: Raúl Lizoain; Nili, David García, Aythami, Garrido (Dani Castellano, min. 62); Roque (Montoro, min. 82), Culio; Momo (Wakaso, min. 78), Tana, Jonathan Viera; y Willian José.

Valencia CF: Ryan; Barragán, Mustafi, Abdennour, Gayà; Enzo Pérez (Danilo, min. 72), Parejo; Rodrigo, André Gomes, Piatti (Feghouli, min. 63); y Negredo.

Gol: 0-1, min. 20: Rodrigo.

Árbitro: David Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Jonathan Viera (min. 40), Roque (min. 44), Culio -una vez concluida la primera parte, por protestar- y Aythami (min. 53), así como a los visitantes Piatti (min. 34), Barragán (min. 39), André Gomes (min. 71), Rodrigo (min. 87) y Mustafi (min. 89).

Incidencias: Partido de vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey disputado hoy en el Estadio de Gran Canaria ante 18.206 espectadores. El Valencia se clasifica para semifinales por un resultado global de 2-1. Antes del encuentro el capitán local David García fue homenajeado con una camiseta conmemorativa de sus 400 partidos oficiales con Las Palmas, cumplidos el pasado lunes ante el Levante.

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