viernes, 14 de diciembre de 2012

ANÁLISIS DE LOS OCTAVOS DE FINAL DE LA COPA DEL REY (Partidos de ida)


El guión se repite tres días después

 

El Valencia de Valverde encarrila su pase a cuartos de final con una victoria por 0-2 en el Reyno de Navarra, la segunda en tres días a Osasuna. Parejo y Soldado anotaron para dejar la eliminatoria prácticamente sentenciada

 

 

Se enfrentaban Osasuna y Valencia por segunda vez en cuatro días en El Sadar. Esta vez, con motivo de los octavos de final de la Copa del Rey. Mismos equipos, distintas alineaciones y un partido muy parecido.

Metía Valverde con cuatro cambios en su once inicial, mientras que Mendilibar, como viene siendo habitual en la Copa del Rey, revolucionaba completamente su equipo, con diez hombres diferentes. Tan sólo repetía Echaide.

 

Muchos cambios en los equipos, pero el partido resultó muy parecido, como ver una repetición de lo visto hace tres días, sobre todo en la primera parte. Una partido con muy poco fútbol el que nos ofrecieron ambos equipos. Muy bien plantados en el campo, se dejaban muy pocos espacios para poder combinar y se creaban muy pocas ocasiones de gol.

De esta manera, asistimos a una primera parte muy pobre de fútbol y en la que sólo hubo dos jugadas destacadas, una para cada equipo.

La primera, sobre el minuto 30, un posible penalty por mano de Ricardo Costa ante un buen giro de Roberto Torres dentro del área, que se quedaba en clara posición de remate, si no llega a ser por el corte del central portugués.

La segunda, siete minutos después, la más clara. Un gran pase de Banega desde el centro del campo, dejaba a Jonás sólo para enfilar la portería. El disparo cruzado, buscando la base del palo, lo sacó Riesgo con una gran estirada.

Sin ocasiones y sin fútbol, se llegó al descanso. El trabajo, la presión y el posicionamiento de Osasuna, estaba consiguiendo igualar las fuerzas con la calidad del Valencia.

Pero fue precisamente esta calidad superior del Valencia la que marcaría la diferencia a la vuelta de vestuarios. Y es que en el segundo minuto de la segunda parte, una falta desde la frontal del área la convertiría de manera magistral Dani Parejo en el gol 0-1.

Tras el gol, un periodo de claro dominio valencianista. El propio Parejo, junto con un buen Banega también, se hacían con el control del centro del campo y conseguían imponer su calidad. Pero estando abajo en el marcador y jugando en casa, no podía permitir esto durante mucho tiempo Osasuna, y la reacción no se hizo esperar demasiado.

Pero el ímpetu y las ganas, sin fútbol y sin pegada, no suelen servir de nada. Y esto es lo que le paso a Osasuna. Lo intentó, por momentos apretó y metió al Valencia en su campo, pero no consiguió acertar en ninguna de sus ocasiones.

Quién si lo hizo, fue Soldado, al que 13 minutos en el campo le bastaron para no fallar a su cita con el gol. Con el Osasuna ya volcado en el ataque, buscando el gol del empate, pilló una contra el Valencia y un disparo de Bernat, que rechazaba bien Riesgo, terminaba en gol gracias a la pillería de Soldado, que estaba donde había que estar una vez más, para poner el definitivo 0-2 y sentenciar la eliminatoria.

Finalmente, se repitió la misma historia de hace tres días y esta vez en dos jugadas puntuales, gracias a la calidad, el Valencia se volvió a llevar el partido. En este caso no son tres puntos, si no una ventaja que será muy difícil voltear para Osasuna, que se ve obligado ahora a ganar en Mestalla para estar en los cuartos de final.

  



Atlético Osasuna: Riesgo, Marc Bertrán, Lolo, Rubén, Echaide (Damiá m.60). Timor, Annan, Nano (Nino m. 68), Torres, Cejudo y Manuel Onwu (Lamah m. 76).

Valencia CF: Diego Alves, Barragán, Rami, Ricardo Costa, Cissokho. Albelda, Dani Parejo. Feghouli (Guardado m. 83), Banega, Jonathan Viera (Bernat m.64) y Jonás (Soldado m. 76).

Goles 0-1, m.46: Dani Parejo. 0-2, m.93: Soldado.

Árbitro: Pérez Lasa (Comité Vasco). Mostró tarjeta amarilla al local Timor (m.5) y a los visitantes Jonás (m.30) y Barragán (m. 89).

Incidencias. Encuentro correspondiente a los octavos de final de la Copa del Rey, partido de ida, disputado en el estadio Reyno de Navarra ante 10.885 espectadores.


Manotazo de Michel a Caparrós

 

Sin apenas esfuerzo, los sevillistas se aseguran su continuidad en la Copa del Rey aprovechando los enormes errores de la zaga local

 

 

Con muchos cambios en el once titular afrontó Joaquín Caparrós la eliminatoria y más conservador fue Michel González, quien puso en liza a la mayoría de titulares, no siendo así en los casos de Reyes y Cicinho.

Ambos técnicos plantearon un claro 4-2-3-1 y tras una gran oportunidad fallida de Javi Arizmendi que no supo batir a Andrés Palop, llegó el festival andaluz, consiguiendo perforar hasta en tres ocasiones la meta muy mal defendida por la zaga balear, gracias a Álvaro Negredo en el 12 y el 17 y Gary Medel en el 25.

 

Así y todo, tuvieron una buena oportunidad para tratar de meterse de nuevo en el partido cuando Federico Fazio cometió penalti sobre Javi Arizmendi. Corría el minuto 44 y Andrés Palop se encargó de confirmar aquello de que a perro flaco todo son pulgas porque detuvo la pena máxima lanzada por Gio dos Santos.

Difícil era afrontar la segunda mitad para los de Joaquín Caparrós, que había dado entrada a Pedro Bigas y Carlos Cristeto en sustitución de un desafortunadísimo y totalmente desubicado Anderson Conceiçao y como todo lo que va mal es susceptible de ir peor llegó el cuarto de los rojiblancos, José Antonio Reyes, que había sustituido a Álvaro Negredo, lanzaba una falta desde la derecha, ningún defensor conseguía despejar el balón y Alberto Botía, en difícil postura, batía de nuevo a un desesperado Dudú Aouate. Era el minuto 47 y hasta fue extraño no ver desfilar a los 4.330 espectadores asistentes en una desapacible noche que se había convertido en muy triste para la parroquia local.

Trataron de llevarlo con dignidad los bermellones que continuaron mostrando una calidad muy por debajo de la que realmente tienen pero o este equipo da un cambio radical o se va irremisiblemente a jugar la Liga Adelante. Para finalizar, y bajo una intensa lluvia, llegó el quinto de la noche, también de los andaluces; minuto 84 y el centro de Jesús Navas no lo desvía ninguno de los tres defensas ni llega a él Dudú Aouate de lo que se aprovecha Antonio Luna para poner la puntilla final.
 

 


RCD Mallorca: Aouate; Nsue, Geromel, Conceiçao (Bigas, min. 46),Kevin; Marc (Cristeto, min. 46), Martí, Fontás, Alfaro (Brandon,min. 75); Giovani y Arizmendi.

Sevilla FC: Palop; Koke, Botía, Fazio, Fernando Navarro; Navas, Rakitic (Luna, min. 50), Medel, Del Moral; Kondogbia (Hervás, min. 65), Negredo. (Reyes, min. 46).

Goles: 0-1, min. 13: Negredo; 0-2, min. 18: Negredo; 0-3, min. 25: Medel; 0-4, min. 47: Botía; 0-5: min. 85: Luna.

Árbitro: Clos Gómez (Comité Aragonés). Amonestó a Manu del Moral, Fazio, Kevin.

Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey disputado en el Iberostar Estadio ante unos 4.000 espectadores.

 

El califa Messi extendió su reino

 

Los de Tito Vilanova sacaron una difícil victoria en el Arcángel ante un Córdoba que jugó como los grandes aunque Messi los hizo rendirse

 

 

El partido de ida de los octavos de final se jugó en el Nuevo Arcángel con un meritorio Córdoba que comenzó apretando a los culés hasta encerrarlos en su área. Tito Vilanova ya conocía lo difíciles que podían resultar los andaluces y apostó por un cuadro estelar con Messi, Villa y Pedro en el ataque.  

 

Pero no fue de extrañar que los azulgranas respondieran de manera rápida sacando el balón de su área para hacer daño a la escuadra de Rafa Berges. El recién recuperado Thiago Alcántara pudo ver a Villa por la banda izquierda y desde la frontal envió el esférico al asturiano para que éste asistiera a Messi quien remató y aunque estuvo a punto de fallar, el balón pegó en el larguero pero entró.

La respuesta de los andaluces fue rápida y aunque los blanquiverdes festejaban el gol del empate, el linier anuló acertadamente la anotación por un fuera de juego de Rennella. Leo dio muestra de su elegancia para manejar el balón y con maestría hacer jugadas individuales que sólo él sabe hacer, desde su área hasta el área rival, driblando a cuanto rival se le interpuso en el camino.

El Córdoba llegaba a presionar hasta con seis jugadores desde los tres cuartos de campo, mientras que Piqué y Javier Mascherano sin descanso tenían que frenar a Pedro y a un Fede Vico que dio un gran partido dándose el lujo de disparar a puerta de Pinto, que con gran destreza impidió los esféricos dentro de su arco.

David Villa y Pedro tuvieron dificultades para controlar los esféricos que les eran enviados y ambos también tuvieron oportunidades de oro, pero sus remates no eran del todo certeros y un gran Saizar también hizo gala de sus buenos reflejos. El 'Guaje' dio el susto tras un fuerte golpe en la pierna izquierda con un rival aunque no pasó a mayores y cuando llegaron los cambios del Barça fue Pedro el que salió y en su lugar entró el chileno Alexis Sánchez.

A pesar de que los blaugranas llevaban la ventaja en el marcador, los cordobeces firmaban un gran encuentro. Con valentía encararon el partido y pusieron en aprietos a los azulgranas presionándoles sobre la defensa y saliendo rápidamente por las bandas. Los de Berges, con experiencia enfrentando al Barça B, hicieron el mismo estilo de juego que le hacen al equipo filial.

Y después de varios intentos y de un gran Saizar que ya había frenado a Leo, llegó el segundo gol del encuentro, otra vez por autoría de Messi después de una asistencia precisa de Alexis Sánchez. 88 goles son los que suma el rosarino en este año y aún le restan dos encuentros para cerrar el año y alargar su marca personal.

Con el 0-2 en las manos, Tito Vilanova decidió hacer un segundo cambio y dio descanso a Dani Alves para ser reemplazado por Martín Montoya y Tello entraba por un cansado Villa. La batalla en el área de los andaluces continuó y estos lucharon como pocos equipos de Primera División lo hacen, que bien podrían haber encajado cuatro o cinco tantos.

El partido se cerró con la victoria de los azulgranas con una justa victoria aunque el rival podría haber merecido más por el valor con el que se encararon. Los cordobeses orgullosos salieron con la frente en alto del Arcángel y aún tendrán el encuentro de vuelta en enero del 2013 para hacer sufrir a un Barcelona que hizo mérito de superar la presión contraria. 

 


Córdoba CF: Saizar; Fernández, Gaspar (Damián Petkoff, min. 81), Alberto Aguilar, Fuentes; López Garai; Pedro, Caballero, Dubarbier; Fede (Ayina, min. 87) y Rennella (Patiño, min. 62).

FC Barcelona: Pinto, Alves (Montoya, min. 77), Mascherano, Piqué, Alba; Song, Thiago, Xavi; Pedro (Alexis, min. 66), Villa (Tello, min. 83) y Messi.

Goles: 0-1, min. 10: Messi; 0-2, min. 74: Messi

Árbitro: Del Cerro Grande (Colegio Madrileño). Amonestó a los locales Dubarbier y Fede Vico.

Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey disputado en El Arcángel ante unos 20.000 espectadores (casi lleno).


Diego Costa se disfraza de tigre por una noche

 

Los de Simeone encarrilan una eliminatoria en la que Diego Costa marcó dos goles y pudo hacer alguno más

 

 

Se presentó de blanco impecable y con ganas de morder el Getafe en la Ribera del Manzanares. Los de Luis García dejaron claro que este no iba a ser el cómodo partido con el que el Atlético se encontró en liga (2-0) y en el que apenas tuvo oposición. Eso sí, los azulones se llevaron en este el mismo premio que en el anterior partido, una derrota demasiado abultada que se acentuó en la recta final del choque. Botín de lujo para una eliminatoria muy encauzada.

 

Los de Cholo Simeone no se gustaron como en otras ocasiones pero trabajaron precisamente como no se suelen trabajar los partidos. Se comieron la eliminatoria poco a poco y quizá le endosaron al Getafe un resultado más incómodo de lo merecido y lo demostrado. Dos goles, uno de Costa mediado el primer tiempo y otro de Filipe Luis cuando el partido agonizaba dejaron la eliminatoria prácticamente sentenciada ante un Calderón vacío... pero que muy vacío. Aunque esto ya no sabemos si es por los horarios, por el formato o por qué. Pero el caso es que la entrada en el Calderón no convenció del todo.

Se adelantaron los colchoneros gracias a un Diego Costa que volvió a reivindicarse después de las cosas que hace a veces. Esas que no gustan. Nadie duda en que Diego Costa es un rara avis, tanto que ayer volvió a mojar hasta en dos ocasiones, sustituyendo a un Falcao ausente. La primera de penalti cometido sobre él mismo. No dudó para batir a Moyá tras una pena máxima justa. El segundo para redondear resultado, a la contra. Tuvo hasta un tercero, pero esta vez el fuera de juego dejó presencia.

En la parte visitante, no por ello menos madrileña, las mejores ocasiones se contaron para Abraham, pero Courtois respondió bien y para Miguel Torres, a lo que también respondió con firmeza el meta belga. La verdad es que el meta hizo un gran partido ya que cualquier acción con final en la red hubiese complicado partido y eliminatoria, pero el meta estuvo esta vez inconmensurable.

Al final, los cambios ofensivos del Getafe, para el que ingresaron Álvaro y Gavilán, le salieron a García por la culata. Al parecer, el Atlético de Madrid se vino algo más arriba e intentó matar el partido y prácticamente, lo que hubiese sido la eliminatoria. Hasta el final, Mateu Lahoz tampoco concedió un posible penalti tras centro de Filipe Luis desde la zurda y precisamente el lateral brasileño hizo un gol tras rechace a disparo de Arda.
 

 


Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Koke, Mario Suárez, Gabi, Arda (Tiago, m. 89); Adrián (Raúl García, m. 16); y Diego Costa (Manquillo, m. 90).

Getafe CF: Moya; Valera, Abraham, Alexis, Miguel Torres; Lacen (Xavi Torres, m. 76), Juan Rodríguez; Pedro León, Barrada (Álvaro Vázquez, m. 65), Diego Castro (Gavilán, m. 79); y Lafita.

Goles: 1-0, m. 18: Diego Costa, de penalti. 2-0, m. 79: Filipe Luis, tras un rechace en el poste a un disparo de Arda Turan. 3-0, m. 86: Diego Costa bate a Moyá en el uno contra uno.

Árbitro: Mateu Lahoz (Comité Valenciano). Amonestó a los locales Juanfran (m. 27) y Raúl García (m. 28) y a los visitantes Diego Castro (m. 14), Alexis (m. 17), Valera (m. 63) y Álvaro Vázquez (m. 71).

Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 7.000 espectadores.

 

Cristiano minimiza el naufragio blanco en Balaídos

 

El Real Madrid firmó su peor partido del curso, empeorando lo que ya era difícil de empeorar. El Celta llegó a ir 2-0, y sólo Ronaldo maquilló algo la machada en el minuto 86

 

 

El Real Madrid navega a la deriva, sin rumbo fijo, y con el timón dando tumbos sin parar. En Vigo volvió a caer derrotado ante un digno Celta exhibiendo una imagen muy gris, una caricatura de lo que fue este equipo apenas unos meses atrás, con hasta cuatro jugadores jugando fuera de su sitio, y habiendo tenido apenas un puñado de ocasiones claras ante un equipo recién ascendido. Los goles de Bermejo y Bustos llegaron a poner 2-0 a los celestes, y sólo un gol de Ronaldo a cuatro minutos del final permitió maquillar de alguna manera el descalabro. La eliminatoria puede seguir abierta de cara al partido de vuelta, pero la imagen que viene dejando este Madrid a cada partido que pasa ya no es restituible. El alarmante bajón ya no es camuflable con declaraciones altisonantes, o polémicas arbitrales. Van seis derrotas, y serán muchísimas más con partidos como los que cuajó el equipo blanco este miércoles en tierras gallegas.

 

Y eso que llegaba el Real Madrid a Vigo con la satisfacción de la última victoria ante el Valladolid, y también con la necesidad de finiquitar este año 2012 con un golpe en la mesa, con tres últimas victorias que hicieran olvidar un arranque de temporada más que dubitativo. Pero sin embargo, fue todo lo contrario. No en vano, en la primera parte en Balaídos exhibió una de las peores versiones de la presente campaña, que ya es mucho decir. Con el balón, y seguramente influenciados negativamente por la mucha lluvia que caía en tierras gallegas, el Real Madrid se mostró inoperante, lento, impotente, hasta desganado.

De Di María nada se supo, Modric lo intentaba desde la medular pero sin mucho éxito, la dupla Essien-Xabi ni canalizó fútbol alguno ni impuso la personalidad que debiera, los laterales Varane y Arbeloa no alcanzaban el campo contrario, Pepe debía multiplicarse haciendo su trabajo y el de Carvalho, y por si fuera poco, Benzema se torció el tobillo a la media hora de partido, teniendo que dejar su lugar a Callejón, que en apenas cuatro días pasó de lateral izquierdo a delantero. Sólo Cristiano Ronaldo parecía tirar del carro, pero sin tampoco acierto ninguno. Un par de tiros lejanos, y poco más. De Ronaldo, y por ende, del Real Madrid, que no se acercó más a las inmediaciones de Sergio Álvarez.

Tan mal lo estaba haciendo el Real Madrid que, sin hacer tampoco un partido perfecto como se supone que debía hacer ante uno de los dos gigantes del fútbol español, el Celta puso en aprietos al equipo merengue. Lo hizo Park con una volea en el segundo palo y con un cabezazo al saque de un córner que se marcharon lamiendo el poste. Como también lo hizo el testarazo de Bermejo al saque de otro córner. Y tanto estaba jugueteando el equipo blanco con la machada, que al final llegó.

Fue Bermejo, a los diez minutos de la reanudación tras el descanso, quien firmó el gol celeste. Ronaldo pateó a Mallo en lo que podía haber sido perfectamente su segunda tarjeta amarilla, y mientras todos se preguntaban qué haría Álvarez Izquierdo, Krohn-Dehli aprovechó para llevar el balón hasta el borde del área merengue, y fue desde ahí desde donde rompió la cintura a Varane y metió un centro a la espalda de Arbeloa. Casualidad que fueran los dos laterales que estaban cambiados de sitio, no lo parece. Sea como fuere, en posición muy justa de fuera de juego, Bermejo le ganó muy bien el sitio a un ingenuo Arbeloa para luego fusilar a Adán sin casi ángulo desde dentro del área, llevando el éxtasis a las gradas del estadio vigués.
 

 

Para entonces, y con la soga ya al cuello, Mourinho ya había sacado en el descanso a Ozil por un Di María que es la caricatura de lo que fue. Y diez minutos después del gol local también dio entrada a Kaká por Essien. Tocaba llamar a la épica y al corazón, no le quedaba otra al equipo blanco, lo cual es respetable y loable, pero también un poco triste para un equipo de ese calado recurrir a ello con tantísima regularidad.

Entonces, Cabral pudo hacer un penalti a Callejón que no entendió como tal Alvarez Izquierdo. Modric llegó a volear desde dentro del área un rechace a un centro lateral, y Ronaldo también tuvo su oportunidad con un lanzamiento lejano que a Sergio Álvarez le costó atajar. Y sin embargo fue el Celta el que aprovechó su única oportunidad, mientras el Real Madrid estaba volcado, tirando de pegada, como si fuera el equipo grande. Bustos, que acababa de salir al campo, le rebañó un balón a Xabi Alonso al defectuoso saque de banda de Pepe, y con un tomahawk desde 30 metros coló el balón en la escuadra contraria de la portería de Adán.

El colapso en el Real Madrid era total entonces, con 2-0 en el marcador, en lo que era su sexta derrota en cuatro meses, una más que en toda la temporada pasada, y las mismas que en el primer año de Mourinho. Y sólo quedó maquillado de alguna manera por un gol de Ronaldo en las postrimerías del encuentro, a cuatro minutos del final. Con la defensa local en estático, Xabi Alonso pasó el balón por encima de la zaga celeste, y Ronaldo aprovechó que Cabral tiró mal el fuera de juego para fusilar solo desde el punto de penalti a Sergio Álvarez. Era la ocasión más clara de todo el partido, y el ‘7’ blanco respondió para darle un poco de oxígeno al Real Madrid. El suficiente para que la eliminatoria quedara algo más abierta, pero ni mucho menos suficiente para eclipsar lo que es otro gran fiasco de este equipo en lo que va de temporada. Demasiados ya.
 

 


RC Celta de Vigo: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Túñez, Roberto Lago; Augusto Fernández, Oubiña, Bermejo; Krohn Dehli; Iago Aspas (Bustos, min.74) y Park (Quique de Lucas, min.63).

Real Madrid: Adán; Varane, Pepe, Carvalho, Arbeloa; Xabi Alonso; Di María (Özil, min.46), Modriç, Essien (Kaká, min.64), Cristiano Ronaldo; Benzema (Callejón, min.32).

Goles: 1-0. m.55: Bermejo; 2-0. m.78: Bustos; 2-1. m.85: Cristiano Ronaldo.

Árbitro: Álvarez Izquierdo (Colegio Catalán). Mostró tarjeta amarilla a Krohn Dehli, Bermejo y Augusto por parte del Celta de Vigo, y a Cristiano Ronaldo por parte del Real Madrid.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la ida de los octavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio municipal de Balaídos ante unos 30.000 espectadores. Antes del encuentro se guardó un minuto de silencio en recuerdo de Nannete Norma di Stefano, hija del ex futbolista del Real Madrid Alfredo di Stefano, quien falleció a los sesenta años.


Aranda deja lo mejor para el final

 

El Ciutat de Valencia presenció un partido muy poco atractivo, pero con un gol en el descuento que deja a los maños con ventaja en la eliminatoria

 

 

Zaragoza y Levante se enfrentaron en el primer partido de la serie a tres que entre Copa y Liga van a disputar ambos equipos en apenas un mes. El encuentro era el último del Levante en casa de este 2012 y además de querer despedirse de sus aficionados dando una buena imagen, tenían la intención de encarrilar su pase a cuartos de final. Sin embargo el partido resultó un duro espectáculo para la afición granota, que vio un partido de lo más aburrido y el único gol lo metió el rival en el tiempo de descuento.

 

Ambos equipos saltaron al césped con las segundas unidades al mando, tanto JIM como Jiménez tenían claro que la liga es prioritaria y por eso tiraron de rotaciones. Los titulares se quedaron en casa o en el banquillo y con esa disposición comenzó un partido al que le faltaba ritmo. Durante la primera parte no hubo un dominador sobre el césped, y aunque el Zaragoza contó con más posesión de balón no la tradujo en un claro control del juego.

La falta de ritmo provocaba poca fluidez en el juego, que se tornaba en cansino y aburrido durante muchas fases del mismo. Sin embargo, los protagonistas sobre el césped conseguían despertar el interés de cuando en cuando con alguna llegada esporádica al área rival. Así, tanto Zaragoza como Levante pudieron adelantarse en el marcador, pero ni Ángel ni Aranda supieron anotar.

Con el 0-0 se llegó al descanso y dando la sensación de que el partido necesitaba una marcha más para poder ver algo de emoción en la segunda parte. Pero el guión apenas cambió y los dos equipos siguieron con los papeles establecidos desde el pitido inicial. Los maños tenían algo más el balón pero no creaban peligro y los granotas intentaban salir a al contra, pero no encontraban apenas oportunidades.

Ni siquiera la entrada de Martins pareció cambiar el signo del encuentro. Todo parecía abocado al empate a cero y a dejar todo para la vuelta de la eliminatoria. Pero en el descuento se iba a presenciar el único detalle de calidad en todo el partido. En un mal balance defensivo del Levante, los delanteros maños salieron a la contra y Aranda con una sutil vaselina superaba a Keylor Navas y ponía por delante a su equipo en el partido y en una eliminatoria en la que tiene todas las papeletas para ganar.


Levante UD: Keylor Navas, Iván (Juanfran, m.61), Héctor Rodas, Volta, Nikos; Pallardó, Iborra, El Zhar (Rubén, m.61), Juanlu; Roger (Martins, m.74) y Ángel.

Real Zaragoza: Leo Franco, Sapunaru, Loovens, Pinter, Paredes; Javi Álamo (Stefan, m.77), Edu Oriol, Movilla, Jose Mari (Apoño, m.50), Wilchez (Montañés, m.74) y Aranda.

Gol: 0-1, m.92: Aranda.

Árbitro: Pérez Montero (Colegio Andaluz). Amonestó por el Levante a El Zhar y por el Zaragoza a Jose Mari y Movilla.

Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio Ciutat de Valencia ante 10.862 espectadores.

 

Las Palmas quiere seguir dando guerra en la Copa

 

Rubén Castro adelantó al cuadro andaluz y Chrisantus empató para los locales; todo queda para la definición en el Villamarín

 

 

Empate entre Las Palmas y Betis en el Estadio de Gran Canaria por 1-1 en el partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey, en un partido en el que los verdiblancos pudieron salir con una mayor renta de cara a la vuelta, pero los canarios se aferraron a la eliminatoria y han conseguido provocar que el Villamarín dicte sentencia.

 

Primera parte sin mucho control y con idas y venidas por parte de ambos equipos que no llegaban a mucho, o las que llegaban no terminaban de encontrar el buen fin. Ataque más claro el del Betis, que salió hoy con un once renovado respecto al partido del pasado domingo ante el Barcelona. Sin mucha claridad en el centro del campo ni por parte de Las Palmas ni por parte de los verdiblancos, fueron los jugadores de tres-cuartos en adelante los que más protagonismo cobraron. Si uno se mereció irse ganando al descanso fue el Betis, que gozó de una clarísima oportunidad nacida en una jugada individual de Pozuelo tras la que dio el pase de la muerte a Molina, cuyo disparo chocó en la defensa.

Tras el descanso se vio un Betis más intenso y que si dominó, generando mayor número de ocasiones. Aunque entre tanta superioridad pudieron adelantarse los locales tras tres ocasiones seguidas en las que Casto actuó como héroe, con tres sendos paradones. Pepe Mel tiró de titulares sacando a Rubén Castro y Beñat, con ganó en criterio y peligro. Con ese interior tan preciso que tiene el delantero canario en su derecha sí consiguió el Betis ponerse 0-1. Pozuel, otra vez, se la dio a Molina en la frontal y este al primer toque la dejó para Rubén, que la colocó dentro de las mallas.

Las Palmas sufrió ahí un bajón, y el Betis siguió a lo suyo, intercalando el aguantar el resultado con aumentar la renta, y eso pudo lograrlo si no llega a encontrarse con Barbosa, que le sacó una clarísima a Rubén Castro. También hubo un gol anulado a Nosa por posible fuera de juego, bastante riguroso. Pero el equipo de las islas supo redimirse y salir adelante, gracias a un intenso Thievy, que generó peligro y se mostró durante todo el partido. De las botas del francés llegó en el minuto 85 de partido el gol del empate, al partir el jugador cedido por el Espanyol a Casto, y dejársela a Chrisantus para que sólo tuviese que empujarla pasando por en medio de los dos centrales.

El Betis prácticamente tuvo a merced a Las Palmas durante casi toda la segunda parte, pero fue un rival correoso que no se dejó vencer tan fácilmente despertando antes de acabar, para dejar la eliminatoria abierta para la vuelta en el Villamarín, donde tendrá que ganar o empatar por más goles de 1-1 para poder pasar a los cuartos de final de esta Copa del Rey. El equipo canario continua de esta forma con su gran racha y ya suma 12 partidos consecutivos sin perder. Los verdiblancos, por su parte, siguen con la línea que traía, aunque no pudo ganar ni sacar la pegada felina de este año.


UD Las Palmas: Barbosa; Pignol, David García, Murillo, Corrales; Momo (Pedro Vega, min. 85), Javi Castellano, Nauzet Alemán (Vicente Gómez, min. 61), Vitolo; Javi Guerrero (Chrisantus, min. 46) y Thievy.

Real Betis Balompié: Casto; Ángel, Mario (Amaya, min. 68), Paulao, Nacho; Rubén Pérez, Nosa; Agra (Beñat, min. 60), Pozuelo, Campbell (Rubén Castro, min. 55); y Jorge Molina.

Goles: 0-1, min. 67: Rubén Castro. 1-1, min. 84: Chrisantus.

Árbitro: Carlos Delgado Ferreiro (Comité Vasco). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Murillo (min. 11), Corrales (min. 16) y Nauzet Alemán (min. 58); y a los visitantes Nosa (min. 8), Mario (min. 35) y Rubén Pérez (min. 57).

Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey de fútbol disputado esta noche en el Estadio de Gran Canaria con la presencia de 14.640 espectadores, menos de medio aforo. 

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