FC BARCELONA (100 puntos)
El Barcelona de Tito Vilanova demostró que hay vida después de
Guardiola. Una vida bastante buena a la vista de lo conseguido esta
temporada. El equipo catalán sólo ha tardado un año en devolverle al
Real Madrid el golpe en el torneo doméstico. Y además, lo ha hecho
profanando el récord de puntos que los merengues habían conseguido la
temporada pasada. El Barça no sólo iguala los 100 puntos del Madrid de los
récords si no que gana el campeonato liguero con una ventaja sobre el
segundo mucho más abultada que la de los blancos. Sólo le faltó el
récord de goles a un Barcelona que ganó la Liga antes de acabar 2012. Su
excelente arranque de temporada sirvió para romper brecha ante un Real
Madrid sorprendentemente irregular. Un pecado capital cuando se trata de
competir contra este Barcelona.
REAL MADRID (85 puntos)
El Real Madrid se olvidó de la Liga en los primeros meses de campeonato y fue incapaz de disputar el título a un Barcelona que tomó ventaja desde el comienzo. Los de Mourinho se jugaron la temporada a la Liga de Campeones y a la Copa del Rey y lo terminaron pagando. Las disputas en el vestuario entre el entrenador portugués y los jugadores más veteranos fueron protagonistas en una campaña que terminó en una auténtica decepción. Sólo los goles de Cristiano Ronaldo, que volvió a ser el mejor de los blancos un año más, y las buenas intervenciones de Diego López dejaron buenas sensaciones en el Santiago Bernabéu.
ATLÉTICO DE MADRID (76 puntos)
El Atlético ha llegado hasta donde podía llegar. No se le puede ni se le debe exigir más, ya que las diferencias con los dos trasatlánticos de la Liga todavía son abismales. Los del Cholo mantuvieron el cara a cara con el Barcelona hasta el mes de febrero y pasaron gran parte de la temporada por encima incluso del Real Madrid, con lo que la campaña es de sobresaliente. Además, sellaron su objetivo con firmeza y margen suficiente como para preparar la final de Copa, que no ha hecho sino poner el broche de oro a la mejor temporada del Atlético desde el Doblete. En definitiva, el campeón de 'la otra Liga'.
REAL SOCIEDAD (66 puntos)
La Real Sociedad volverá a la Liga de Campeones tras una temporada histórica. Gracias a una segunda vuelta casi perfecta, los de Montanier han hecho realidad el sueño de una afición totalmente entregada. Un fútbol vistoso y una plantilla plagada de futbolistas formados en Zubieta han sido las claves del éxito. Tras empezar una Liga con el objetivo de salvar la categoría y soñar en cotas mayores, ni el más optimista de Donosti pensó en la posibilidad de que el himno de la Champions League podría volver a sonar en Anoeta. Basado en la fortaleza del equipo, ha sido el campeonato de jóvenes como Iñigo Martínez e Illarramendi y del goleador Agirretxe.
VALENCIA CF (65 puntos)
El Valencia partió la temporada en dos. Durante la etapa Pellegrino, el equipo no terminó de arrancar. Hizo buenos partidos, pero le faltaba identidad y los resultados lo iban alejando cada vez más del objetivo de la tercera o cuarta plaza. Con Valverde cambió la imagen y los resultados. El equipo ganó en confianza y empezó a ganar partidos. La remontada del equipo ha sido menos vistosa porque la Real Sociedad no ha aflojado tampoco en todo este tiempo. El Valencia ha terminado la Liga con una personalidad y un estilo reconocibles y con una suma de puntos más que aceptable.
MÁLAGA CF (57 puntos)
Ha sido una temporada de sentimientos encontrados. Inolvidable e histórica por su brillante participación en Champions y por lograr clasificarse por segunda temporada consecutiva para Europa por vez primera. Pero de amargo epílogo por las despedidas y el cambio de ciclo. Con la salida de Manuel Pellegrini y las estrellas del equipo arrancará otro Málaga. Un Málaga que ha competido de forma sensacional en tres competiciones. En Liga ha rayado el sobresaliente y sólo tras el varapalo de Dortmund comenzaron a fallar las piernas y la mente. Es más que notable que el Málaga se haya mantenido durante 37 de las 38 jornadas disputadas en puestos europeos.
REAL BETIS BALOMPIÉ (56 puntos)
Poco más se le puede pedir al Betis esta temporada. Ni el aficionado más optimista hubiese apostado el pasado verano porque el regreso del EuroBetis estaba a la vuelta de la esquina. Y no ha sido fruto de carambolas o de un golpe de fortuna. El equipo, gestado para conseguir una permanencia tranquila, se instaló pronto en la zona noble y no la ha abandonado prácticamente en toda la campaña. Más de 30 jornadas en puestos europeos… ahí es nada. Su capacidad para levantarse tras los golpes más duros ha sido su mejor aval. Tanto que ha abierto a golpe de goles y más oficio que en la 11/12 la puerta de Europa ocho años después. Este Betis no sólo se basa en la verticalidad y el acierto de sus delanteros sino que también ha aprendido a nadar y guardar la ropa. Un equipo unido, con mucha hambre y repleto de jóvenes y no tan jóvenes ansiosos por hacerse un nombre en Primera, ha logrado lo que hace bien poco apuntaba a milagro. A la cabeza, un entrenador que no ha dudado en adaptar el estilo de juego a las características de sus jugadores. Y por detrás de todos ellos, una dirección deportiva muy criticada pero que, a tenor de los resultados, supo buscar refuerzos de verdad con un presupuesto que le impedía a todas luces pelear en el mercado con los equipos llamados a luchar por Europa.
RAYO VALLECANO (53 puntos)
Ni se le puede pedir más ni se había visto un equipo mejor en
Vallecas en la historia del club. El actual Rayo ha roto todos los
pronósticos y ha completado una temporada fantástica en la que se ha
ganado, al menos sobre el campo, el derecho a participar en Europa. Pese
a que partía con el presupuesto más bajo, y con diferencia, de toda la
categoría, no sólo ha sellado su permanencia en Primera con dos meses de
antelación, sino que ha luchado por la zona noble hasta el último
partido. La gesta del Rayo cobra mayor grandeza por el modo en el que la ha
alcanzado, pues ha desplegado un juego de toque, creativo y atrevido,
inusual en un equipo humilde. De hecho, ha sido uno de los conjuntos más
vistosos para el espectador y, sin ninguna duda, la revelación de la
Liga.
SEVILLA
FC (50 puntos)
Otra temporada para olvidar del conjunto nervionense, que se quedó fuera de los puestos europeos por segunda campaña consecutiva. Especialmente nefasta fue su temporada lejos del Ramón Sánchez Pizjuán, donde sólo fue capaz de sumar un triunfo. El comienzo fue prometedor, pero la cosa se torció tras la polémica derrota frente al Barça en la jornada 6 y luego ni Míchel ni Emery supieron voltear la situación. La plantilla, corta e irregular, no dio la talla en muchos momentos, entre otras cosas porque hubo bastante diferencia entre los titulares y los teóricos suplentes. Especialmente sangrante fue la ausencia de un delantero que diera la réplica a Negredo, pues Babá demostró ser un cero a la izquierda en el apartado goleador. El futuro se presente incierto, porque el Sevilla deberá vender a varias de sus estrellas para cuadrar cuentas. Toca pues reiventarse, un reto para dos hombres, Del Nido y Monchi, con el crédito casi agotado.
GETAFE CF (47 puntos)
El Getafe se ha ganado el derecho a jugar en Primera por décimo año
consecutivo y ése es un logro impensable cuando en 2004 logró el
ascenso. Pero los de Luis García han dejado un regusto negativo por su
pésimo final de temporada, que les ha condenado a quedarse fuera de
Europa cuando lo tenían todo en su mano tras un gran arranque en 2013 en
el que mostraron lo mejor de su fútbol. La falta de un goleador y las dudas de los mediocentros han lastrado
el rendimiento de un equipo al que le ha faltado ambición tras lograr la
permanencia virtual con dos meses de antelación. Deja la sensación de
que podía haber acabado más arriba en la tabla.
LEVANTE UD (46 puntos)
Cuando parecía que el Levante estaba en el camino de repetir el éxito
de la temporada anterior, la salida de Martins mermó la capacidad
goleadora del conjunto granota. El nigeriano dejó en el Ciutat de
Valencia siete tantos y la falta de un referente en la punta de ataque
que no pudo evitar la llegada de Acquafresca en el mercado de invierno. Salvado una temporada más sin ningún tipo de problema, objetivo
principal del equipo, la campaña se manchó por las acusaciones dentro de
la propia plantilla sobre posibles amaños de partidos. La unión
mostrada en anteriores épocas se echó de menos para dar el salto de
calidad que le habría permitido luchar por estar en puestos europeos.
ATHLETIC DE BILBAO (45 puntos)
El Athletic de las dos finales ha dado paso en sólo un año a otro Athletic desconocido. Los rojiblancos han hecho una Liga para olvidar que ya se torció en pretemporada cuando el presidente Josu Urrutia desautorizó a su técnico, Marcelo Bielsa, por la bronca surgida tras el retraso en las obras de Lezama. El novato presidente bilbaíno tampoco supo gestionar las salidas de Javi Martínez y Fernando Llorente, sobre todo la de este último, tirando más de orgullo que de racionalidad. Todo esto provocó un caos en el vestuario que se notó sobre el terreno de juego. Ocho derrotas en San Mamés en la temporada de la despedida del centenario estadio dejan claro que las cosas no se han hecho bien. El bajón físico de jugadores que despuntaron la temporada pasada como Iraola, Aurtenetxe, Iturraspe, De Marcos, Susaeta o Muniain también ha influido para que el equipo no haya dado la talla y cayera eliminado muy pronto tanto en la Copa del Rey como en la Europa League. El guardameta Gorka Iraizoz, que llegó a perder la titularidad, tampoco se libra y su irregularidad se ha visto reflejada en que el equipo sea de los más goleados de la categoría.
RCD ESPANYOL (44 puntos)
El Espanyol ha vivido una temporada de sensaciones y resultados encontrados. El inicio de Liga no pudo ser más frustrante. Mauricio Pochettino, el que estaba llamado a ser el Alex Ferguson del Espanyol, dejó la entidad a finales de noviembre por los malos resultados. Hubo acuerdo para rescindir el vínculo que unía a las dos partes. Los catalanes estaban firmando el peor arranque de su historia y eran colistas de Primera sin visos de reacción. En 13 jornadas, solo habían sumado nueve puntos. La llegada de Aguirre revolucionó el bloque. Sin apenas retoques, en el mercado de invierno solo firmaron a Petrov, el técnico mexicano levantó a un equipo desahuciado y hundido moralmente. El Vasco sacó a la revitalizada plantilla de la zona baja y lo salvó en tiempo récord gracias a unas cifras de Champions de League. En la recta final, el equipo se ilusionó con Europa, pero otro bajón destacado de rendimiento en los últimos partidos, un mal ya endémico en los blanquiazules, condenó sus esperanzas y provocó la decepción de su afición.
REAL VALLADOLID (43 puntos)
El Valladolid demostró que un recién ascendido puede conseguir la
salvación apostando por un fútbol vistoso. Los hombres de Djukic se
convirtieron en una de las revelaciones de la Liga gracias a su juego de
equipo y de toque. Ebert y Óscar fueron dos grandes culpables de que el
José Zorrilla disfrutara con sus jugadores, ya que uno fue la gran
sorpresa y el otro revivió una segunda juventud.E l buen trabajo de la secretaría técnica se reflejó sobre el terreno
de juego y con fichajes muy económicos, se han convertido en uno de los
equipos que más espectáculo ha dado. Omar Ramos, Sastre, o Rukavina
completaron con éxito el plantel del ascenso.
GRANADA CF (42 puntos)
El proyecto de Quique Pina en Granada se consolida. El equipo sufrió hasta la penúltima jornada para mantener la categoría. Objetivo cumplido por una plantilla, un cuerpo técnico y una directiva que tenía claros sus límites. La fiebre por el fútbol se mantiene intacta en una ciudad que ansiaba vivir en Primera. Ahora toca elevar el listón poco a poco. La evaluación final del Granada presenta unas calificaciones casi idénticas a las de la temporada anterior. Se han conseguido casi las mismas victorias, empates, derrotas, goles a favor, goles en contra y puntos. Todo se ha conseguido merced a la apuesta decidida por reforzar el plantel a mitad de temporada. Resultó clave porque se encontraban pocos argumentos para que la salvación de la categoría se viese como un mérito y no como un acto de fe.
ATLÉTICO OSASUNA (39 puntos)
La temporada de Osasuna ha sido una campaña con bastantes altibajos en la tabla clasificatoria. Después de un inicio muy malo donde estuvieron en puestos de descenso durante las primeras 13 jornadas, el equipo rojillo remontó el vuelo a mitad de Liga, merced a la ayuda de los fichajes de invierno. La segunda vuelta fue donde tiraron de casta y gracias a los puntos conseguidos en su estadio pudieron firmar la permanencia en la penúltima jornada. Un año agridulce ya que se consiguió el objetivo, pero quedó claro, una temporada más, que el problema del gol es una de las grandes asignaturas pendientes de un equipo que se está acostumbrando a jugar con fuego.Y, además de la salvación, lo mejor de la temporada fue volver a ver a una de las aficiones más entregadas de Primera y que llevó en volandas a los rojillos hasta el final. Por eso y por su historia, Osasuna merece seguir en la máxima categoría, y ya van 14 años seguidos consiguiéndolo igualando su mejor racha histórica.
RC CELTA DE VIGO (37 puntos)
Sufriendo hasta el último suspiro consiguió la salvación el Celta de
Vigo. Su temporada fue un sube y baja en la tabla de clasificación que
tuvo final feliz gracias entre otras cosas al goleador Iago Aspas y a un
joven portero de 17 años llamado Rubén Blanco. Tras la destitución de
Paco Herrera, Abel Resino logró lo que pocos esperaban. Practicar uno de los juegos más vistosos de la Liga no fue sinónimo
de una posición cómoda en el campeonato y por ello, después de que Paco
Herrera consiguiera el ascenso y llevara a cabo un perfecto proyecto con
la cantera, fue destituido. Finalmente, tras imponerse a la sanción de
Iago Aspas y al hecho de no depender de sí mismos, la Rianxeira volvió a
sonar en Balaídos.
RCD MALLORCA (36 puntos)
El Real Mallorca cerró el que ha sido su peor curso en Primera División en los últimos 16 años. Los mallorquines, de la mano de Joaquín Caparrós, iniciaron la temporada como una bala llegando a situarse en posiciones de Liga de Campeones. Sin embargo, el cúmulo de lesiones al que tuvo que hacer frente el equipo, unido a un bajón en su rendimiento, le hizo caer a la zona de descenso. Metidos de lleno en el barro de la lucha por evitar la pérdida de categoría, el club balear no tuvo más remedio que destituir a Joaquín Caparrós para, sorpresivamente, recuperar a Gregorio Manzano. El jienense aceptó el reto de intentar salvar la categoría aun sabiendo que estaba complicado. El año que viene al Mallorca le tocará regresar o, al menos intentarlo, a la Primera División.
RC DEPORTIVO (35 puntos)
Después de moverse durante toda la temporada por los puestos
peligrosos de la clasificación, el Deportivo terminó regresando a la
Liga Adelante una temporada después de abandonarla. Los gallegos pagaron
demasiado caro los pobres números conseguidos con Oltra y Domingos
Paciencia. La llegada de Fernando Vázquez cambió la cara de un equipo que se
comprometió por la permanencia, volvió a la vida tras ocupar el pozo de
la tabla pero su trabajo no fue suficiente. La temporada no sirvió sólo
como despedida de la máxima categoría del fútbol nacional, también dijo
adiós del Dépor un histórico como Valerón. El club blanquiazul no será
lo mismo sin él.
REAL ZARAGOZA (34
puntos)
La temporada del Zaragoza se resumen en dos partes muy diferentes. El conjunto de Jiménez firmó una primera vuelta bastante correcta con 22 puntos, pero se derrumbó en la segunda sumando sólo 12 y encadenando la peor racha de la historia del club con 15 jornadas sin ganar. Al final ha terminado como colista después de perder los tres últimos partidos de liga, dejando una imagen muy pobre. Jugadores que estaban llamados a ser importantes como Romaric unido a las lesiones de gravedad de Obradovic y Zuculini pudieron ser claves. También algunos errores arbitrales, pero el cuadro aragonés se cavó su propia tumba al no aprovechar las oportunidades que le fue dando la competición para salvarse. La temporada ha sido un fracaso.
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