COPA AMÉRICA 2011 Jornada 2 Cuartos de Final

BRASIL [0-0] PARAGUAY

Brasil sufrió la pena máxima

Justo Villar se convirtió en el héroe de Paraguay. El ex del Valladolid impidió la victoria brasileña y detuvo uno de los penaltis de la tanda, que metió a los hombres de Martino en la semifinal de la Copa América.Brasil lo intentó, pero no pudo con el orden y la disciplina de Paraguay. Falló muchas ocasiones durante el partido y fue incapaz de marcar en la tanda. Elano, Thiago Silva, André Santos y Fred erraron sus penaltis.

 

Brasil y Paraguay protagonizaban otro cruce pesado de cuartos de final. Los de Gerardo Martino ya sabían cómo complicarlos a los de Mano Menezes, producto de aquel choque de grupo donde el 2-2 cayó sobre el cierre y evitó la caída del invicto de la verdeamarelha. Pero ahora la historia iba a ser otra...

La buena imagen mostrada ante Ecuador hacía preveer que Brasil estaba calentando motores en esta Copa América y fiel a su estilo copero, la motivación iría acrecentándose en los jugadores a medida que eliminaban etapas. Por lo tanto, Paraguay se encontraría con otro Brasil.

Avisado de esto Martino, le sacó atrevimiento a su once. No desde los nombres sino desde la estrategia. Los cuatro volantes armaron un cuadrado para destruir juego, sin pensar en qué hacer con el balón en caso de recuperarlo. Por eso los guaraníes no tuvieron la sorpresa ni la frescura del 2-2 de la primera fase.

Fue un monólogo de Brasil de principio a final. En los 45 iniciales Neymar arrancó por el centro del ataque para no estar tan lejos de Maicon, quien ante Ecuador había hecho brillar al jóven maravilla. Ganso dejó que Robinho tuviera más la pelota y eso confunde al equipo de Menezes porque entra en el apuro del ex Real Madrid. Algo similar a lo que ocurría con Argentina cuando Tévez estaba de titular.

De todas formas y a pesar de no tener claridad, Brasil llegó con buenas oportunidades en dos ocasiones a través de Neymar tirando cerca del poste derecho de Villar y mediante la subida de André Santos, uno que se nombra poco, pero que luce desde el silencio.

Paraguay trabajó el partido, no lo jugó. Y mientras tuvo piernas y aire en los pulmones, dio lucha en el medio. Arriba ni Barrios ni Valdéz la agarraban para darle respiro a los del fondo. Nunca los delanteros paraguayos lograron imponerse a sus marcadores, entonces el balón volvía de inmediato a terreno paraguayo. Así no fue complicado que la cancha se inclinara hacia Justo Villar.

Ya para la reanudación el cuadrado táctico de Paraguay de deformó y varió en una línea de cinco con Víctór Cáceres muy retrazado. Vera amonestado, ya no daba seguridad en la marca y Estigarribía no era el indicado para detener a Maicon. Martino tuvo que cambiar fichas en las que Barreto fue la solución más adecuada.

Dedicarse a evitar que el otro juegue y no proponer nada más que eso, puede tener dos consecuencias. Una es que caiga un gol por un error y el partido termine en goleada porque ya no hay plan B para remonatarlo y la otra, la que esperaba Martino, es que tu rival se desmoralice de tanto ir y no concretar.

Esto último fue lo que sucedió. Brasil lo intentó por todos lados. Se creció Neymar y con él todos. Pato encontraba las diagonales y Maicon era un extremo más. Las ocasiones de gol se repetían cada minuto, pero la figura de Justo Villar se hizo enorme bajo los tras palos. El ya veterano arquero fue figura indiscutida del partido para que Paraguay llegara con chances de dar la sorpresa en los penalties. Si los penalties, porque a otra cosa no jugó el equipo de Martino, que se vio superado siempre y aceptó su inferioridad rezando que la suerte de los penalties les de una mano.

La entrada de Fred por la lesión de Neymar le dio más área a los brasileños, pero Barreto en la línea y una mala decisión a bocajarro, estiraron el dramatismo hasta el innecesario suplementario. Fueron 30 minutos de más con Brasil sin fuerzas para ganarlo y Paraguay mirando la hora.

Desde los 11 metros Brasil quedó en evidencia ya que ni Elano, ni Thiago Silva, ni Andre Santos, ni por último Fred lograron anotar un tanto. No osbtante, Estigarribia y Riveros no fallaron sus penas máximas y Paraguay mandó a Brasil al hotel a hacer las maletas para volver a casa.

Brasil: Julio César; Maicon, Lucio, Thiago Silva, André Santos; Lucas Leiva, Ramires, Ganso (m.99, Lucas Moura); Robinho, Pato (m. 110, Elano) y Neymar (m. 79, Fred).

Paraguay: Villar; Verón, Da Silva, Alcaraz, Torres (m. 70, Marecos); Vera (m.62, Barreto), Cáceres, Riveros, Estigarribia; Valdez y Barrios (m. 82, Pérez).

Tanda de penaltis: 0-0: Elano, fuera. 0-0: Barreto, fuera. 0-0: Thiago Silva, para Villar. 0-1: Estigarribia, gol. 0-1: André Santos, fuera. 0-2: Riveros, gol. 0-2: Fred, fuera.

Árbitro: Sergio Pezzotta (Argentina). Expulsó a Lucas Leiva y Alcaraz (m.102). Amonestó a André Santos (m.56), Maicon (m.58) por Brasil; Vera (m.20), Barreto (m.64), Marecos (m.71), Estigarribia (m.110) por Paraguay.

Incidencias: Partido de cuartos de final de la Copa América jugado en el estadio Ciudad de La Plata, ante 36.000 espectadores.

 

CHILE [1-2] VENEZUELA

Venezuela sorprende y hace historia en la Copa América

La selección Vinotinto ganó contra todo pronóstico a Chile gracias a los goles de Vizcarrondo y Cichero. Chupete Suazo empató en el segundo tiempo pero Venezuela remontó en el tramo final.

 

En el último encuentro de los cuartos de final de la Copa América, Venezuela y Chile buscaban lograr meterse entre los cuatro mejores del torneo. Ambos venían de realizar una buena primera fase en la que no tuvieron inconvenientes para asegurarse su boleto a la segunda ronda. Los dirigidos por Claudio Borghi lograron terminar líderes del grupo C con siete puntos mientras que los de César Farías llegaban como una de las sorpresas del certamen habiendo pasado como segundo por detrás de Brasil y por encima de Paraguay. Si hablamos de presiones y deberes, sin ninguna duda que las exigencias de imponerse en el duelo recaían por el lado de los trasandinos, quienes a priori se colocaban como los favoritos a llevarse el duelo, por historia y por presente. 

Por el lado de la Vinotinto, si bien el sueño de acceder por primera vez a la semifinales era algo tentador y en la cabeza de todos los futbolistas, no tenían la presión de demostrar como la Roja. Al haber pasado de fase se podría decir que les bastaba como para considerar su partipación de positiva cumpliendo el objetivo planeado.

De todas formas, a los venezolanos poco les pesó e importó la historia. Desde el minuto cero, el planteo de Farías fue inteligente y acertó con la presión ejercida por sus delanteros sobre el fondo chileno, al cual incomodó durante toda la jornada. El mote de llegar como la cenicienta de los cuartos de final pareció haberle encajado a la perfección a Farías y sus dirigidos, los que luego de complicar a Brasil, Paraguay y Ecuador se pusieron en la cabeza aguarle las esperanzas de seguir su camino para lograr su primera Copa América.

Durante la primera mitad, los chilenos se vieron sorprendidos por el asedio venezolano y no pudieron hacer funcionar su clásico engranaje ofensivo en forma correcta. En los 45 minutos iniciales el partido se jugó lejos del arco de Renny Vega y los venezolanos dieron la nota abriendo el marcador a los 34 minutos gracias a un cabezazo de Oswaldo Vizcarrondo que conectó un centro exquisito de Juan Arango. El desconcierto de Chile era total y el gran golpe comenzaba a producirse.

En el descanso, el Bichi lavó cabezas y el ingreso de Jorge Valdivia hizo cambiar drásticamente el funcionamiento del equipo. La Roja salió a buscar el empate siendo lo agresiva y profunda que no había podido ser en la etapa inicial. La tromba chilena comenzó a acechar el arco venezolano y el trámite del partido comenzó a cambiar. Vega comenzó a tener trabajo y a través de Suazo, Valdivia y Sánchez y la alarma se empezó a encender. Luego de dos palos salvadores que le dijeron no, el empate se haría esperar pero llegaría para impartir justicia en el marcador. Fue a los 25 de la reanudación, cuando en una avivada de los chilenos sacaron rápido un lateral para que luego Chupete recibió la asistencia de Alexis, quedó sólo en el área y estampó el 1-1 cortando además su sequía de goles con la selección.

Sin embargo, tras el empate el juego volvió a equilibrarse y Venezuela volvería a dar una nueva sorpresa en la noche de San Juan. Un tiro libre del Maestrico González complicó a Claudio Bravo, quien con una muy floja respuesta le sirvió el gol a Gabriel Cichero, quien sólo la tuvo y poner el 1-2 cuando corrían 35 minutos de la segunda parte. Como si fuera poco, la noche terminó de venírsele encima cuando se quedó con uno menos por una nueva expulsión del temperamentel Gary Medel. Dicha expresión se volvería literal cuando a falta de cinco para el final se tuvo que detener el juego por falta de luz debido a la falla del sistema lumínico del estadio.

Con la reanudación no habría tiempo para mucho más que un nuevo mamarracho del árbitro paraguayo Carlos Vera quien anuló un ataque neto de los chilenos por un fuera de juego inexistente. En la primera mitad también había errado para el lado de los venezolanos y debió haberle mostrado la segunda amarilla a Pablo Contreras por una durísima entrada en la que apenas sancionó falta. Luego tendría tiempo para además expulsar a Rincón, un pilar clave que no podrá estar ante Paraguay.

La copa de las sorpresas sigue sumando capítulos y Venezuela dio un verdadero batacazo metiéndose por primera vez en su historia entre los cuatro mejores del torneo y también logrando su primer triunfo ante Chile en el certamen. La Vinotinto de César Farías dejó en claro que la época de las sorpresas parece estar caducando, acercándonos rápidamente a la de las realidades. Venezuela es realidad. El fruto del trabajo está floreciendo y hoy lo sufrió Chile. Creáse o no pero está dentro de los cuatro mejores de Latinoamérica.

Chile: Bravo; Contreras, Ponce, Jara (m.61 Paredes); Isla, Medel, Vidal, Jiménez (m.82 Muñoz), Carmona (m.46 Valdivia); Sánchez y Suazo.

Venezuela: Vega, Rosales, Perozo, Vizcarrondo, Cichero; Lucena, Rincón, César González (m.89 Moreno), Arango, Maldonado (m.65 Seijas) y Fedor (m.60 Rondón).

Goles: 0-1, m.34: Vizcarrondo. 1-1, m.70: Suazo. 1-2, m.80: Cichero.

Árbitro: Juan Carlos Vera (Ecuador) que mostró tarjetas rojas al chileno Medel y al venezolano Rincón, y amarillas a los también chilenos Isla, Contreras y Vidal y a los venezolanos González y Lucerna.

Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final de la Copa América, disputado en el estadio San Juan del Bicentenario frente a unos 23.000 espectadores (casi lleno completo). A falta de cinco minutos para el final el encuentro estuvo interrumpido por cuatro minutos tras una caída de tensión en la red lumínica.