ESPAÑA
[2-0] GEORGIA
La venganza de Maracaná está servida
La selección certifica su presencia en el Mundial, su décimo consecutivo, después de un ejercicio eficiente en el que cuajó una gran primera mitad y no dejó resquicios al derrape
Sin resquicios para el funambulismo, tras una notable primera parte y suficientemente concentrado para no dar vuelo alguno a la menor Georgia, España consiguió una plácida victoria que certificó su presencia en la Copa del Mundo del verano que viene, donde defenderá el título conseguido hace tres años en Johanesburgo. Negredo, que fue de los mejores, abrió el marcador en los cuarenta y cinco minutos iniciales y Mata solventó cualquier tipo de inquietud al poco de iniciarse el segundo acto. Sin excesivo brillo, con ciertos problemas de cara al gol y con dudas en el principio y el final, España cerró en Albacete una ronda de clasificación de una complejidad inesperada a priori.
Se presentó España resuelta a erradicar los vicios adquiridos durante toda la fase de clasificación y magnificados el viernes ante Bielorrusia,
y lo consiguió en una primera parte en la que modificó por completo el
paisaje de la mayoría de la secuencia de partidos que finalmente han
llevado al equipo al Mundial. Optó Del Bosque por Juanfran y Alberto
Moreno, los laterales más ofensivos de los que disponía, fijó a Navas en la derecha y desató a Negredo en la punta del ataque.
La
amalgama de estos futbolistas de proyección vertical arrojó un equipo
que mostró un dinamismo que se observaba extraviado. Muchas de las
variaciones respecto a la versión más inmediata las impulsó Navas, un
puñal en la derecha. En todas las acciones en las que intervino el
jugador del Manchester City ofreció soluciones a España. Mezcló con
éxito similar el eslalon, el centro y el disparo. Precisamente en esta
suerte, el ensayo desde la frontal, abundó más una selección que en
ocasiones se pierde en la retórica en los metros finales. En la primera
media hora, Busquets, Pedro y Xavi, además de Navas, probaron los
reflejos del portero georgiano.
Desplegado por los costados, pudo
terminar por dentro con más filo que cuando se empecina por los
carriles interiores. Pocos jugadores salen tan reforzados de esta
concentración como Negredo, goleador en los dos partidos y un auténtico
coloso anoche. Le dio al equipo todo lo que se espera en un delantero
centro. Terminó casi todas las jugadas, se inventó otras, como una
preciosa chilena desde la frontal del área que el portero salvó a la
altura del larguero, descargó de espaldas para los jugadores de segunda
línea y vacunó a los georgianos remachando una preciosa jugada conducida
por Iniesta. El manchego se asoció con Pedro en una pared elevada que
sorteó a la defensa y dejó el balón para que Negredo lo empujara.
El vodevil en el que Del Bosque ha convertido la portería llevó a Casillas
de nuevo a la alineación titular. El arquero del Real Madrid solo tuvo
que intervenir inmediatamente después del tanto de Negredo, cuando
Georgia sorprendió con dos disparos secos bien repelidos. No fue este
tampoco partido para medir al portero. No obstante, el Mundial 2014
amenaza con echarse encima sin que el seleccionador sea capaz de
desembrollar un sainete que él mismo, con inexplicables dosis de
indefinición, ha fomentado.
Sin el fulgor de la puesta en escena,
y con un marchamo más propio ya de un amistoso, España cerró un
encuentro que no reservaba ningún sobresalto. Dio tiempo para que Mata,
nada más entrar, cerrara el partido con un tanto de oportunista, para
que Koke probara el disparo desde la frontal y para que el Carlos
Belmonse rindiera a Andrés Iniesta un homenaje sobrecogedor. Se retiró
entre una ovación atronadora el héroe de Sudáfrica 2010 cuando España ya
mira a Brasil 2014, su décimo Mundial consecutivo. Cómo pasa el tiempo.
España: Casillas; Juanfran, Piqué, Ramos, Alberto Moreno; Busquets, Iniesta (Isco, 82’), Xavi (Koke, 66’); Navas, Pedro (Mata, 58’) y Negredo.
Georgia: Loria; Lobjanidze, Khubutia, Kashia,
Khidesheli, Kirkvelia; S. Grigalashvili (Ebralidze, 69’), Kobakhidze,
Grigalashvili (Khmaladze, 75’); Dzaria; Gelashvil (Mobebadze, 88’).
Goles: 1-0 M: 26: Negredo. 2-0 M. 60: Mata.
Árbitro: Florian Meyer (Alemania). Mostró tarjeta amarilla a Khubutia (55’).
Incidencias: Último encuentro de clasificación al Mundial 2014, disputado en el
estadio Carlos Belmonte de Albacete, con 16.400 espectadores en sus gradas.
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