Amistoso Internacional LA ROJA EN LEÓN

ESPAÑA [2-1] COSTA RICA

De vacaciones nada, aquí se viene a disfutar

 

La selección de Vicente del Bosque volteó un tanto inicial costarricense gracias a los dos tantos marcados en la primera mitad de Paco Alcácer y Cesc Fàbregas

 

 

España venció por 2-1 a Costa Rica y sigue su buena onda ante equipos de la CONCACAF contra los que solo ha caído derrotado en aquellas semifinales de Copa Confederaciones en 2009 cuando perdió por 2-0 frente a Estados Unidos. Ocho partidos ante combinados de esta Confederación en la piel de toro y ninguna derrota: seis victorias y dos empates. La de hoy cuajada en la primera mitad después de intentar, con jugadores de otra índole, afrontar el encuentro de otra manera para terminarlo de otra. Todo ello con el morbo de los porteros del Real Madrid y los pitos a Gerard Piqué como telón de fondo.

Resulta muy complicado quitarte el sambenito cuando durante seis años de gloria te has caracterizado por un estilo que ha dado la vuelta al mundo entero y que se ha llevado de paso tres títulos de postín. Los rivales, desde el más pequeño hasta el más grande, te tienen "calado", y da igual cual sea su filosofía, que siempre se van a amoldar al planteamiento táctico que más perjudica a España, que es la de encerrarse atrás. No es el caso de Costa Rica, ni mucho menos. Se sabía que la flamante cuartofinalista del Mundial llegaba a León a plantar un sistema con cinco defensas. Intentó no encerrarse atrás a pesar de que cedió sin remilgos el balón desde el minuto 1.

Y da igual que en España estuviesen jugando hombres como David Silva, Cazorla, Isco, Thiago Alcántara o Iniesta más propios del Tiki Taka. O futbolistas como Koke, Nolito, Alcácer, Fábregas o el debutante Aleix Vidal, evidenciando un cambio de idea que se asemeja a un fútbol más directo. Da lo mismo. La tarea es la misma. Abrir la lata. Y no solo eso sino que además se presenta el deber de darle la vuelta al marcador cuando, en el minuto 5, Venegas ponía en entredicho una vez más esa posición de stopper de Mikel San José para llegar desde atrás y fusilar a David De Gea. Todo ello después de una gran jugada de tiralíneas, defensa - ataque de Costa Rica.

Afortunadamente, España supo sobreponerse y contestar de inmediato. Y lo hizo como parece que pretende Del Bosque. De la forma más directa posible. A tres toques. Sergio Ramos lanzaba, Fábregas tocaba, Gamboa colaboraba evitando el fuera de juego de Paco Alcácer que definió a las mil maravillas la salida de Keylor Navas. Podía haber sido generoso y ceder a Aleix Vidal que empezara con el mejor pie posible su andadura por la selección, pero decidió el de Torrent marcar su cuarto tanto en cuatro partidos de titular con La Roja.

De ver todos los fantasmas se pasó a una bocanada de moral que se convirtió en confianza, y éste en juego. Mikel San José perdonaba a la salida de un corner y Koke lo intentaba desde la frontal para finiquitar un cuarto de hora de infarto. Un ritmo vivo que se tomó una tregua. Un descanso hasta que Aleix Vidal, vaya portento físico, avisó con un remate que terminó bloqueado lo que llegaría a continuación. Buena jugada entrelazada de España. Combinación por la derecha de Carvajal sobre el flamante fichaje del Barcelona que levantó la cabeza. Su centro era rematado en semifallo por Nolito y empujado a la red por Fabregas, que con libertad de movimientos, ya había sumado a su cuenta particular un gol y una asistencia.

Vuelta al mismo guión. España, tras el gol, se vino arriba y el debutante Aleix Vidal se erigió en un inusitado protagonista al participar en todas las jugadas de ataque y al llevarse todas las tarascadas ticas. Costa Rica se abrió pero La Roja se tomó un descanso que duró hasta el asueto. Fruto de esa dureza, el tarraconense se quedó en los vestuarios siendo relevado por su compañero de temporada Vitolo. Una segunda parte que comenzó igual que la primera. 

Costa Rica agazapada y a los cinco minutos, Campbell volvió a caer a banda, pero en esta ocasión le cerró bien Sergio Ramos. El de Camas, en fuera de juego, minutos antes había originado el paradón de la noche, obra de Keylor Navas a saque de esquina. Acción que se repetiría minutos después. Fue cuando el meta del Real Madrid empezó su recital de paradas. Fue cuando Vicente del Bosque empezó a sacar jugadores que se presumen titulares en Minsk. Fue cuando regresó la España del toque. Los David Silva, Santi Cazorla, Isco y Busquets al campo. Fue entonces cuando todo pudo pasar. España pudo encarrilar el encuentro varias veces pero Keylor Navas estuvo formidable ante Santi Cazorla o Carvajal, a la vez que Bartra fallaba lo infallable. Pero también Costa Rica pudo empatar. 

No creó excesivo peligro en los metros finales, pero llegó a encerrar a La Roja en su propio campo que, en los últimos instantes, apostó por salir a la contra. Mientras Campbell era el que lo intentaba desde lejos, Bryan Ruiz, inédito hasta entonces, empezó a asumir galones. Celso Borges se multiplicaba y el capitán, bien a través de un voleón espectacular con la zurda que resultó ser fuera de juego, bien con una falta al frontal del área en el último suspiro pudo empatar. Esa infracción fue fiel reflejo de los fallos en los que no debe caer esta nueva selección. Marc Bartra evitó males mayores en una contra en superioridad tica que estuvo a punto de finiquitar un encuentro que se curró España en la primera mitad y que, por darle más brillo en la segunda, no dilapidó de milagro.

España: De Gea; Carvajal, Bartra, Ramos (Piqué, min.59), Bernat; Fàbregas (Isco, min. 82), San José (Busquets, min. 74), Koke (Cazorla, min. 59); Vidal (Vitolo, min. 46), Alcácer, Nolito (Silva, min. 59).

Costa Rica: Keylor Navas; Gamboa, Umaña, González, Miller, Junior Díaz (Aguilar, min. 81); Bryan Ruiz, Borges (Saborío, min. 88), Guzmán (Cubero, min. 69), Venegas (Vega, min. 67); Campbell

Goles: 0-1. M. 5: Venegas; 1-1. M. 8: Paco Alcácer; 2-1. M. 30: Cesc Fábregas.

Árbitro: Domagoj Vučkov (Croacia). Amonestó a Gamboa (min. 58), Venegas (min. 66) y Borges (min. 75)

Incidencias: Partido amistoso internacional disputado en el estadio Reino de León con 13.500 espectadores en las gradas.