lunes, 14 de marzo de 2016

ANÁLISIS DE LA JORNADA 29 DE LA LIGA BBVA


Juanpi instala la tranquilidad en Martinicos

Un golazo del delantero venezolano en la primera mitad fue suficiente para otorgar una victoria importante al cuadro andaluz y hunde al Sporting en la zona de descenso

 


Hoy el duelo de banquillos lo protagonizaron los segundos entrenadores. Fue el técnico del Málaga quien se alzó con la victoria con un gran despliegue de su equipo. Con un solitario tanto de Juanpi en la primera parte, los puntos se quedaron en La Rosaleda. El cuadro gijonés tuvo oportunidades claras, pero se estrelló con un gran Ochoa en su debut en la meta malacitana. Hubo un penalti no pitado de Fornals por mano en el 92.

Necesitados de los tres puntos, tanto Sporting como Málaga veían primordial salir a morder y lograr la victoria. El cuadro asturiano parecía tener los dientes más afilados al inicio del encuentro. Sanabria tuvo la primera oportunidad a los pocos segundos de empezar, pero Ochoa –debut en la meta malacitana- evitó un gol demasiado temprano. Los segundos pasaban y el juego se pausaba. El equilibrio y la igualdad resultaban en un encuentro digno del olvido.

Fue en el minuto 25 cuando apareció Juanpi para abrir la lata con maestría. Recibió en la frontal del área un balón de Charles para recortar con la zurda demostrando gran habilidad y poner el balón casi a la escuadra con la pierna izquierda. Cuéllar se lanzó, pero no pudo hacer nada para evitar que subiera el tanto al marcador. El Sporting se desinfló tras el gol en contra y apenas puso en apuros al meta mexicano. El Málaga tenía un ligero dominio, pero el descanso llegó con el 1-0 en el luminoso.

No parecía que el partido fuera a cambiar en los segundos 45 minutos. La intensidad en la segunda mitad era la misma que en la primera. El Málaga parecía salir con más ganas, pero hasta el minuto 62 no vimos la primera ocasión clara. Tuvo Sanabria el empate de cabeza tras un centro de Lora desde la derecha, pero Ochoa se lanzó abajo para evitarlo. Gran parada del meta. Dos minutos más tarde sería Weligton quien pudo sentenciar ante una mala salida de Cuéllar, pero el remate con la testa del central tras una falta se marcha rozando el poste.

Los minutos pasaban y la igualada se le escapaba al Sporting. El cuadro gijonés gozó de ocasiones muy claras para poner el 1-1 en el marcador. La más clara del partido llegó en una doble oportunidad en el minuto 74. Primero Pablo Pérez, que había entrado al terreno de juego hacía pocos instantes, remató a bocajarro en el área pequeña un centro desde la izquierda, pero Ochoa vuelve a salvar los muebles al conjunto andaluz. Sin embargo el rechace llegó a Carlos Castro, pero disparó demasiado cruzado y golpeó en la madera con el meta mexicano ya vencido.

Seguía corriendo el cronómetro para los dos equipos, que lucharon hasta el final por sus objetivos. Sin embargo fue el Málaga quien se llevó el premio, a pesar de una mano no pitada de Fornals en su área en el descuento. El gran encuentro táctico desplegado por el equipo andaluz desembocó en la victoria y en los tres puntos que le permite poner camino a la permanencia en Primera División. No así le ocurre al Sporting que, de seguir así, solo un milagro podrá salvarlo del descenso.

 

 
 

Málaga CF: Ochoa; Rosales, Albentosa, Weligton, Torres; Juanpi (Atsu, m. 85), Fornals, Recio, 'Chory' Castro (Duda, m. 71); Uche (Juan Carlos, m. 64) y Charles.
 

Sporting de Gijón: Cuellar; Lora, Luis Hernández, Meré, Ismael López; Carmona (Pablo Pérez, m. 71), Mascarell, Sergio Álvarez, Jony; Ndi (Carlos Castro, m. 46) y Sanabria (Halilovic, m. 62).

Goles: 1-0, M. 25: Juanpi.

Árbitro: De Burgos Bengoetxea (Comité Vasco). Mostró tarjeta amarilla a los malaguistas Juanpi (m. 25) y Rosales (m. 69), y a los jugadores del Sporting Ismael López (m. 17), Sergio Álvarez (m. 35), Pablo Pérez (m. 80) y Halilovic (m. 82).

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de Liga de Primera División disputado en el estadio de La Rosaleda de Málaga ante unos 24.000 espectadores.

 


Messi y Neymar engrasan la apisonadora culé

Messi dio tres asistencias de gol en un partido de liga por primera vez en su historia. Ha marcado siete goles en sus últimos siete partidos en la competición ante los azulones

 


Por segunda temporada consecutiva el Barcelona cerró con goleada su partido ante el Getafe en el Camp Nou. Con un poco de fortuna los de Luis Enrique abrieron el marcador con un tanto de Juan Rodríguez en propia puerta. Munir, que marcado en los tres últimos partidos de liga que ha jugado, hizo el segundo y Neymar el tercero.

Antes del descanso Messi ponía el 4-0 en el marcador. Ya en la segunda mitad el brasileño hacía su segundo gol de la tarde, de nuevo asistido por Leo Messi, y Turan convertía con una chilena. El Barça se hizo con la posesión del balón desde el inicio del choque y empezó a llegar cada vez con más peligro a la meta defendida por Guaita. El tanto no tardó en llegar en una desafortunada jugada, en el minuto 8, en la que Jordi Alba centro desde la izquierda y Juan Rodríguez, tratando de despejar el esférico, lo introdujo en su propia portería.

Con el marcador a favor el cuadro blaugrana se lanzó en busca del segundo que pudo llegar poco después cuando Neymar fue objeto de penalti. Messi tomó el testigo y lanzó la pena máxima pero su disparo muy centrado lo despejó Guaita. Era el cuarto penalti fallado por el argentino de los siete lanzados en esta liga.

El segundo tanto de los de Luis Enrique llegó a los 20 minutos, en una asistencia con el interior del pie de Messi que remató de cabeza, prácticamente a bocajarro, Munir. El de El Escorial marcaba por primera vez en tres partidos de liga consecutivos después de haber dado además una asistencia en la pasada jornada.

Dio un nuevo aviso poco después Piqué con un disparo que tocó Guaita antes de que se estrellara en el larguero. Y en el minuto 32 llegaba el tercero de los blaugranas en una buena jugada de Sergi Roberto que se la dejó a Messi y éste dio la asistencia a Neymar. Era el segundo encuentro en esta liga en el que el argentino daba dos asistencias tras hacerlo hace apenas un mes ante el Celta de Vigo. En el minuto 39 los locales tuvieron una nueva oportunidad en un centro de Messi que remató Neymar al larguero, aunque estaba en posición de fuera de juego.

No se conformó el equipo de Luis Enrique que hizo un cuarto tanto antes del descanso, un 4-0 en la primera mitad que no firmaba desde la pasada temporada también ante el Getafe. En el minuto 41 Messi se encargó de hacer subir al marcador el 4-0 con un disparo desde fuera del área. Con ese resultado y la clara superioridad blaugrana se llegaba al final de la primera mitad.

Nada más arrancar la segunda mitad los blaugranas hicieron el quinto, en un balón que puso Messi por un pasillo y recibió Neymar. Por primera vez en liga el jugador argentino conseguía dar tres asistencias de gol en un mismo partido. Y en el minuto 58 Piqué tocaba ligeramente un balón dentro del área para que Arda Turan hiciera el sexto con una chilena. Se repetía ya el resultado de la temporada pasada.

El choque bajó en intensidad en su tramo final. El Barça levantó el pie del acelerador y eso lo aprovechó el Getafe para disponer de un par de ocasiones, ambas en las botas de Moi Gómez. Primero con un disparo centrado que atajó el meta sin problemas y después con un balón cruzado que se marchó fuera por poco.

 

 

FC Barcelona: Bravo; Aleix Vidal, Piqué (Bartra, min.68), Mathieu (Vermaelen, min.60), Alba; S.Roberto, Arda, Iniesta (Samper, min.60); Messi, Munir y Neymar.
 

Getafe CF: Guaita; Emi, Velázquez, Vergini, Pereira; Juan Rodríguez, Medrán; Pedro León (Moi Gómez, min.54), Wanderson, Yoda; y Scepovic (Víctor Rodríguez, min.54).

Goles: 1-0, min.8: Juan Rodríguez (p.p). 2-0, min.20: Munir. 3-0, min.32: Neymar. 4-0, min.41: Messi. 5-0, min.53: Neymar. 6-0, min.56: Arda.
 

Árbitro: Pedro Jesús Pérez Montero (Comité Andaluz). Amonestó a Velázquez (min.9), Medrán (min.42) del Getafe.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA disputado en el Camp Nou ante 87.533 espectadores.

 


La conexión Nolito-Aspas conduce a Europa

Un gran pase del gaditano para el vigués acaba en el único gol del partido. Los de Berizzo sueñan con entrar entre los primeros cinco y se alejan de los donostiarras

 


Balaídos acogía el duelo de aspirantes a Europa rodeado de un ambiente enrarecido entorno a la Real Sociedad. Tras una semana apartado del equipo, Carlos Vela volvía a la convocatoria donostiarra con el indulto de Eusebio y sus compañeros. El Celta sabía de la importancia del partido, pues los gallegos quieren certificar la Europa League cuanto antes, pues el aliento del Sevilla está cada vez más cerca. Con esta mentalidad salió el equipo, y a los 15 minutos ya se encontraban por delante en el marcador. La conexión Nolito-Iago Aspas volvió a funcionar.

El Celta dominó en el primer tiempo al equipo de Eusebio Sacristán. Los jugadores de Berizzo tuvieron la paciencia que había demandado el técnico argentino para superar a un rival muy bien plantado sobre el campo, demostrando que la goleada recibida en el Santiago Bernabéu ya estaba superada. Su aplastante dominio, no obstante, no se tradujo en ocasiones de gol. La Real Sociedad, con las líneas muy juntas, cerró los espacios en la zona de creación, evitando que Wass, Nolito e Iago Aspas pudieran entrar en juego.

Pero sobrepasado el primer cuarto de hora Nolito se inventó un gran pase para Iago Aspas y éste, en dos toques, mostró su tremenda calidad, primero con un control imposible y después con una espectacular vaselina que hizo inútil la estirada de Rulli. Con ese resultado se llegó al descanso. El Celta pareció aprender la lección de partidos anteriores y jugó más práctico; y la Real Sociedad pareció reservarse para la segunda parte, pues tras el paso por los vestuarios se desmelenó, exhibiendo la ambición que le había faltado en los primeros 45 minutos.

El conjunto donostiarra dio un paso al frente y logró quitarle el balón al Celta. Por ahí empezó a ganarle la partida táctica, pues, casi sin darse cuenta, los jugadores celestes retrocedieron varios metros hacia su portería. Poco a poco, la Real Sociedad empezó a pisar el área gallega. Xabi Prieto avisó con un cabezazo; y el "indultado" Carlos Vela, que acababa de entrar en el campo, rozó el empate en el minuto 66 con un disparo cruzado que se marchó córner después de que Hugo Mallo metiese su bota para desviar la trayectoria del esférico. Con el Celta ya defendiendo el resultado, la Real Sociedad se volcó y las ocasiones se sucedieron. Jonathas, Bruma e Illarra, en los últimos minutos con dos lanzamientos lejanos, rozaron el empate pero no impidieron el triunfo gallego. 

 

 

RC Celta de Vigo: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Jonny; Marcelo Díaz, Radoja, Wass (Señé, min.73); Nolito, Iago Aspas (Bongonda, min.77) y Guidetti (Beauvue, min.61).

Real Sociedad: Rulli; Zaldua (Carlos Vela, min.55), Elustondo, Íñigo, Yuri (Héctor, min.82); Xabi Prieto (Bruma, min.76), Reyes, Illara, Oyarzabal; Rubén Pardo y Jonathas.

Goles: 1-0, m.15: Iago Aspas.

Árbitro: Martínez Munuera (Colegio Valenciano). Mostró tarjeta amarilla a Cabral y Radoja por parte del Celta, y a Yuri por parte de la Real Sociedad.
 

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio municipal de Balaídos ante 17.767 espectadores, según anunció el club gallego.

 


A tope hasta el final

Los goles de Saúl, Griezmann y Correa sentenciaron un partido donde fueron superiores ante un Dépor que suma nueve partidos ligueros consecutivos sin vencer en el Calderón

 


Victoria por 3-0 del Atlético de Madrid frente al Deportivo. Ni el trascendental choque del próximo martes ante el PSV en la Champions League iba a permitir que los hombres de Diego Simeone se relajasen hoy ante los herculinos. Los rojiblancos mantienen las esperanzas en el título liguero a pesar de que el líder continua intratable. Buen partido de los rojiblancos que dominaron durante los 90 minutos. Abrió el marcador Saúl en la primera parte y sentenciaron Griezmann y Correa en la segunda. Con esta derrota el Deportivo de La Coruña suma 14 partidos consecutivos sin ganar, el último triunfo fue ante el Eibar (2-0, el 19 de diciembre).

El primer tramo de encuentro se desarrolló en el área gallega. No dejaba el Atlético de Madrid de pisar el área rival, especialmente con jugadas por el costado izquierdo por mediación de Carrasco -que volvía hoy a la titularidad- y Filipe Luis. El Deportivo que logró tener más el balón en último tramo del primer acto, tan solo intimidó al conjunto local con un pase en largo de Fajr que buscaba a Jona pero la salida de Oblak del área evitó males mayores. El cuadro gallego echó en falta a su máximo goleador, Lucas Pérez -que se ausentaba por problemas musculares- ausencia que se sumaba a las de Juanfran, Luisinho, Moreno y Sidnei.

El Atlético de Madrid metía el miedo a su rival cada vez que se acercaba al área. Giménez tuvo la oportunidad de abrir el marcador con un remate de cabeza que salió por encima del travesaño. Insistió el equipo rojiblanco hasta que en el minuto 18, un espectacular testarazo de Saúl Ñíguez que llegaba desde atrás para enganchar el centro de Filipe Luis desde la izquierda, acabó en entre los tres palos. Tras el gol, los madrileños continuaban dominando pero el segundo se le resistió tanto a Carrasco- al que Lux le detuvo el disparo dentro del área-, como a Griezmann. Fallo clamoroso del delantero francés al borde del descanso que hizo un esprint para medirse ante Lux pero su definición no fue la mejor.  Entre los lamentos del “7” rojiblanco finalizó una primera parte en la que lo mejor para el Deportivo fue el resultado.

Los hombres de Simeone salieron con la misma intensidad que comenzaron el partido. Yannick Carrasco levantó al Calderón con un impresionante disparo desde la frontal del área que golpeó en el travesaño. Se le resistió el gol al belga pero dejó muestras de su calidad durante el encuentro, apunta muy alto. En el minuto 60 fue Griezmann el que marcó el gol de la tranquilidad. Un córner en corto provocó que Koke filtrase un balón para Griezmann desde la frontal del área y que el delantero solo tuvo que empujar al fondo de la portería. Con las posibilidades de victoria ya agotadas, el Deportivo buscó recortar distancias que les diese alguna opción para alcanzar un milagroso empate. Saúl evitó el gol de los gallegos en la mejor ocasión de todo el encuentro. Jugada de Laure por la derecha que centra desde la línea de fondo superando a Oblak y Fede Cartabia remató un balón que pegó en Saúl que estaba bajo palos.


Con el 2-0 en el marcador, Simeone se permitió dar descanso a jugadores como Vietto, Griezmann y Carrasco ante el compromiso europeo de esta semana. Entre los que se incorporaron a los últimos instantes de partido se encontraba Ángel Correa que dejó su sello con el tercer tanto para los suyos tras beneficiarse de un pase en largo de Gabi. Y así fue como el Atlético de Madrid mató el partido. Victoria y tres puntos que le hacen conservar la segunda plaza. Ya pueden pensar en el duelo del martes frente al PSV donde se juegan su futuro en Europa.

 

 
 

Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Giménez, Godín, Filipe; Koke, Gabi, Saúl, Carrasco (Óliver, m. 78); Griezmann (Kranevitter, m. 64) y Vietto (Correa, m. 57).

RC Deportivo: Lux; Laure, Lopo, Arribas, Manuel Pablo (Róber, m. 57); Mosquera; Fede Cartabia (Oriol Riera, m. 72), Borges, Álex Bergantiños (Luis Alberto, m. 58), Fayçal Fajr; y Jona.

Goles: 1-0, m. 17: Saúl Ñíguez, de cabeza a centro de Filipe. 2-0, m. 59: Griezmann, a la media vuelta, en una jugada ensayada de saque de esquina. 3-0, m. 82: Correa supera a Lux en el uno contra uno.

Árbitro: Melero López (Colegio Andaluz). Amonestó al local Carrasco (m. 40)

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 50.000 espectadores.

 


Un punto que no vale en Vallecas

Uno llevaba cinco partidos sin ganar, el otro cuatro. El esperado empate llegó tras adelantarse los rayistas en el marcador con el gol de Zé Castro y equilibrarlo Escalante en el bando armero.

 


El Rayo Vallecano recibía en Vallecas al Eibar con la intención de conseguir una victoria que le hiciera seguir fuera de los puestos de descenso después de dos partidos consecutivos sin lograrla ante su público (en los que además encajó hasta siete goles). El conjunto armero no llegaba mejor, ya que el pasado fin de semana ante el Barça sumó su cuarta derrota consecutiva por lo que los fantasmas del año pasado cuando fuera la revelación de la primera vuelta de la liga, como en ésta, ya sobrevolaban sobre la cabeza de sus futbolistas.

Jémez volvió a hacer una revelación en su once buscando que las piezas encajaran e introdujo a Ozbiliz y Piti en el mismo. Su homólogo en el banquillo rival, Mendilibar, ponía en liza hasta cuatro centrocampistas relegando a Enrich al banquillo (cuando en las tres últimas jornadas ni siquiera había hecho gol). Ya en el juego, todo se desarrollaba en la medular, donde había un atasco enorme de jugadores que aprovechaban los hombres rápidos de ambos equipos (Bebé e Inui) para tirar desmarques en profundidad.

Tenía que ser en una jugada a balón parado donde llegara la primera ocasión del encuentro, que finalizó a las mallas Zé Castro en el primer palo completamente sólo. Una nueva asistencia de Trashorras, esta vez al defensa portugués que había sido señalado las dos últimas jornadas por su entrenador ni siquiera entrando en la convocatoria. El equipo rayista se creció tras ponerse por delante en el marcador y en el siguiente acercamiento Miku casi hizo el segundo, pero Riesgo estuvo muy atento achicando el disparo del venezolano.

El plantel armero estaba completamente perdido sobre el césped vallecano y tan sólo Inui lo intentaba con su calidad partiendo desde la banda derecha. Cuando se cumplía el primer cuarto de hora de partido de nuevo pudieron poner tierra de por medio los locales, pero Miku le quitó a Bebé el tanto después de una maniobra de crack de Piti en banda derecha. Mientras, en los visitantes el peligro seguía viniendo por Inui, que dio un pase que parecía medio gol pero no llegaron al mismo tanto Borja Bastón como Adrián. En el ecuador de estos 45 minutos se empezaba a hacer palpable el dominio eibarrés y la igualada no se produjo de milagro, ya que Escalante mandó arriba un cabezazo prácticamente a bocajarro.

Bebé seguía ganando la espalda a un extremo reconvertido a lateral esta temporada como es Capa y de esas jugadas llegaban dos centros del portugués que no encontraron a Miku por el buen hacer de la defensa armera. Con Piti como receptor de esos pases del exfutbolista del Manchester United llegó un posible penalti que Álvarez Izquierdo no consideró como tal tras el leve agarrón de Juncà sobre el hijo pródigo de Vallecas. En un balón que caía con nieve de Juncá que parecía más un despeje que un centro llegaron las tablas. Ahora Escalante no falló con la testa ante Yoel silenciando la parroquia rayista en el enésimo error defensivo en este curso de la defensa del equipo que más tantos recibe en la competición.

Restaban todavía diez minutos de esta primera mitad y todo estaba como al principio. El Rayo, enfurecido por ver cómo había podido el Eibar contrarrestar su tanto inicial, quería irse con ventaja al descanso pero Riesgo no sufría con las tentativas de los atacantes rayistas. Sin embargo, antes de enfilar el camino a vestuarios los de Mendilibar pudieron dar la vuelta al luminoso con un centro envenenado de Juncá y una falta mal botada de Ramis en la que en apenas 60 segundos habían visto las amarillas Diego Llorente y Miku, para seguir a Ozbiliz en esta estadística y hacer que Vallecas dedicara una sonora pitada al trencilla del encuentro.

En la reanudación Jémez no parecía estar contento con lo que estaba viendo por lo que hizo un doble cambio, dando entrada a Quini y Embarba por Nacho y Ozbiliz. Sin embargo, el equipo eibarrés casi da la vuelta al marcador con una doble oportunidad de Borja Bastón e Inui que no acabó en gol de milagro. Los minutos pasaban y el punto parecía ser bueno para ambos por lo que disponían sobre el terreno de juego. La calidad de Piti aparecía de nuevo para filtrar un pase entre líneas a Embarba, que a su vez le puso un balón prácticamente en la boca de gol a Miku, que lo mandó arriba ante la desesperación de toda Vallecas.

Respondía Inui a renglón seguido, pero su disparo con la derecha no encontraba puerta y se marchaba el esférico prácticamente a saque de banda. Jémez entonces agotaba los cambios dando entrada a un revulsivo como Manucho, retirando al mediapunta Piti, por lo que se la jugaba en ataque con más de 20 minutos por delante. Mendilibar mientras no movía el banquillo ya superado el segundo tercio del partido con los mismos once jugadores que empezaron. Iba a ser Enrich el primero en entrar. El autor del gol eibarrés, Escalante, era el sustituido con lo que las intenciones del técnico vizcaíno eran claras.

Este cambio iba acompañado con los problemas musculares de Zé Castro, que hacía dejar al Rayo casi con diez jugadores porque el portugués se arrastraba con signos de dolor. Pero era el Eibar el que se iba a quedar en inferioridad numérica por un codazo de Radosevic sobre Embarba, que significaba su segunda amarilla con cinco minutos más el añadido todavía por jugarse. Mendilibar tenía que cambiar de planes y metió a dos jugadores defensivos por sus cracks (Borja Bastón y Enrich) tras la expulsión del croata. El acoso y derribo rayista contrarrestaba al muro eibarrés en el descuento y primero un supuesto penalti de Juncá sobre Manucho para luego en el córner posterior salvar Riesgo el valioso punto después de un cabezazo de Llorente que se marchaba dentro.

 

 

Rayo Vallecano: Yoel Rodríguez; Tito, Llorente, Zé Castro, Nacho (Quini, m.46); Iturra, Trashorras; Bebé, Piti (Manucho, m.69), Aras Ozbiliz (Embarba, m.46); y Miku.

SD Eibar: Riesgo; Capa, Dos Santos, Ramis, David Juncà; Escalante (Sergi Enrich, m.77), Dani García; Radosevic, Adrián González, Inui (Barrenetxea, m.83); y Borja Bastón (Ansotegi, m.84).

Goles: 1-0, M.7: Zé Castro; 1-1, M.35: Escalante.

Árbitro: Álvarez Izquierdo (Comité Catalán). Amonestó a Ozbiliz (m.33), Llorente (44), Miku (45), Piti (56) y Embarba (76), del Rayo Vallecano; y a Radosevic (66) y Ramis (81), del Eibar. Expulsó por doble amarilla a Radosevic (m.85), del Eibar.
 

Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio de Vallecas (Madrid), ante unos 12.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el padre de Saúl Berjón, jugador del Eibar; Jorge Garzón, abonado 983 del Rayo y todas las víctimas del racismo.

 

 

Rossi enciende la falla en Mestalla

Victoria muy importante para los granotas que se acercan a la salvación frente a un conjunto che en plena depresión de juego y que es incapaz de ganar en Valencia

 


Triunfo por la mínima del Levante al Valencia gracias a un tanto de pillo de Giuseppe Rossi que se aprovechó de un saque de banda en largo de Juanfran para adelantarse a la débil defensa del Valencia y cruzar con la puntita ante Diego Alves. Esta acción a la hora de juego provocará que las Fallas sepan mejor para los levantinistas que para los valencianistas. Los primeros se agarran con este resultado al milagro de la permanencia, situado ahora a tres puntos. Mientras que para los segundos puede finalizar su temporada el próximo jueves si lo logra levantar el 1- 0 que arrastra ante el Athletic en el torneo de la Europa League.

El valenciano no fue un derbi al uso. Sobre todo porque el empate no les valía a ninguno de los dos contendientes. Fue entretenido de cara al espectador. Las aproximaciones proliferaron en una y otra área, y el marcador debía haberse movido antes de tiempo. Si la primera parte fue un cúmulo de ocasiones y no hubo gol, en la segunda las echamos en falta a cambio de encontrar el tanto de la victoria. La cuarta consecutiva del Levante sobre el Valencia en casa, su mejor racha en la historia de los derbis. La necesidad y las ansias del Levante impidieron que el partido tuviera una lógica táctica. La participación de sus cuatro hombres más adelantados: Deyverson, Rossi, Morales y, a cuentagotas, Joan Verdú, suponía un quebradero para un Valencia con muchas dificultades para defender y constantemente intranquilo a la hora de sacar el balón jugado.

Fueron los granotas los que buscaron insistentemente la puerta contraria. Tanto es así que completaron once remates en la primera mitad, su mejor registro en los primeros 45 minutos en esta liga. Curiosamente, los de Orriols son, junto al Getafe, los que menos goles han marcado en el primer tiempo en esta competición esta temporada. Merecieron más, sobre todo por su cantidad de llegadas, entre las que se incluyen un poste de Giuseppe Rossi, el incordio de los remates de corner y las paradas de Diego Alves, que volvió por sus fueros. Primero al hacer la estatua en un buen robo de cartera a Abdennour por parte de Deyverson que terminó rematando escorado. Después, en un alarde de reflejos en un cabezazo a bocajarro de Feddal, y sobre todo, en una palomita espectacular evitando un golazo. Pase de pecho de Joan Verdú y Deyverson, botando, empalmaba desde fuera del área sin éxito. Gary Neville intentaba, por su parte, que el Valencia mantuviera el rigor.

Académicos pero espesos en la creación, los che sí gozaron de sus oportunidades para adelantarse. Su hombre fue Sofiane Feghouli que aglutinó todos los remates che hasta el minuto 82. Cuatro en total (no sumaba tantos en un partido de liga desde hace dos temporadas precisamente ante el Levante). Dos de ellas fueron manifiestas. La primera de todas, incluso del partido, fue un mano a mano ante Diego Mariño donde el meta gallego estuvo listo adivinando la intención del argelino. Y la segunda, tras una cabalgada por la derecha en el que optó por cambiarse de pierna para sorprender y que no encontró los tres palos por muy poco. Con el gol en contra, Gary Neville enloqueció. Pasó del 4-5-1 con dos extremos muy abiertos, al 4-2-3-1, con una zona de volantes gracias a la presencia de Rodrigo. Algo que duró muy poco porque las urgencias obligaron a utilizar, como no, a Álvaro Negredo y, por tanto, una doble presencia en la delantera (4-4-2). El resultado fueron dos confusiones dentro del área levantinista como mayor bagaje ofensivo de los che hasta el final del partido. Todo ello mientras Deyverson, harto de forzar amarillas a los zagueros rivales, salía a hombros de un coso granota indignado permanentemente con la actuación de Del Cerro Grande, cuyo silbido final fue el preludio de las Fiestas Mayores en Valencias, esas que estarán condicionadas por el tanto de Giuseppe Rossi.

 

 

Levante UD: Mariño, Lerma, Medjani, Feddal, Juanfran, Simao (Pedro López, m.73), Verza, Morales, Verdú, Rossi (Víctor Casadesús, m.76) y Deyverson (Camarasa, m.85).

Valencia CF: Diego Alves, Joao Cancelo (Barragán, m.18), Mustafi, Abdennour, Siqueira, Javi Fuego, Parejo, André Gomes (Rodrigo, m.61), Feghouli, Paco Alcácer y Piatti (Negredo, m.70).

Gol: 1-0, m.65: Rossi.

Árbitro: Del Cerro Grande (Comité Madrileño). Amonestó por el Levante a Simao y por el Valencia a Parejo, Abdennour, Javi Fuego y Mustafi.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Ciutat de València ante 18.000 espectadores.

 


El Sevilla presenta su candidatura Champions con espectáculo

Un misil de Yevhen Konoplyanka desde unos 40 metros decanta el triunfo a favor del conjunto sevillista, que ya está a tan solo cinco puntos de los amarillos

 


Amarillo y alegría, un binomio que resume a la perfección lo que es el Villarreal. O lo que era. Porque este Villarreal es diferente. Es un submarino militar. Con solo 19 goles encajados en la Liga 15/16 y 14 partidos imbatido antes de su visita al Pizjuán, el conjunto de Marcelino García Toral es un ejemplo de solidaridad grupal y trabajo defensivo, una reinvención que le ha catapultado a los siempre puestos aristocráticos de Liga de Campeones, justo lo que estaba en juego en un soleado Nervión.

Porque el Sevilla quiere la Champions. Tras su breve y algo decepcionante paso de este año, los de Unai Emery quieren regresar a la máxima competición continental. Es posible. Solo ocho puntos separaban al conjunto hispalense de los de Marcelino, por lo que este duelo en el Sánchez-Pizjuán se antojaba como una final por la lucha por la cuarta plaza que da acceso a la previa de la Liga de Campeones. Y como cualquier otra final, no se juega. Se gana. Y esta final la ha ganado el Sevilla.

El conjunto hispalense comenzó bien. Calmado y confiado, Unai Emery quiso hacer daño al Villarreal por las bandas –Marcelino optó por Eric Bailly como lateral izquierdo y Antonio Rukavina como falso interior derecho, un auténtico submarino atrevesado, vamos– y acertó, sobre todo por la parte izquierda, donde la conexión Trémoulinas-Konoplyanka fue su máxima proyección. Justo estos dos jugadores provocaron la primera acción de peligro del partido, en el minuto siete, con un centro al área del ucranio que Gameiro no acertó a enviar a gol con su testarazo a bocajarro.

Pero Kevin Gameiro es más que un delantero. Acorde a su ADN francés, es un agitador de partidos, ya sea saliendo desde el banquillo como tan bien hizo temporadas pasadas o desde el inicio, asumiendo el rol que le ha tocado esta campaña. Con una cabalgada que hubiese firmado el mismísimo Jesús Navas se deshizo en el minuto 22 de un Víctor Ruiz que quedó retratado por su lentitud y terminó sirviendo en bandeja a Vicente Iborra para que el valenciano remachara a portería vacía.

Pero el Villarreal es un equipo con carácter y supo rehacerse al primer gol encajado. Sin dominar pero con mucha presencia en ataque. Cinco minutos después del gol sevillista, Cédric Bakambu, que solo sabe marcar goles a pares –seis dobletes suma ya el internacional congoleño nacido en Francia–, se aprovechaba de un balón suelto dentro del área hispalense para poner las tablas en el marcador.

El gol noqueó al Sevilla, que no está acostumbrado a que le tosan en su estadio, y sufrió el segundo susto de la tarde pocos minutos después. Adrián López, ese jugador en estado de resurrección –ya ha logrado un gol y tres asistencias con el Villarreal en la Liga–, se inventó un pase a lo Riquelme para que, otra vez, Cédric Bakambu voleara con su pie izquierdo el balón al fondo de las mallas –único jugador que ha marcado un doblete al Sevilla en el Pizjuán esta temporada–.

Si la primera parte fue una pelea ajedrecística marcada por los movimientos tácticos, la segunda fue una guerra caótica en la que salió vencedor el conjunto sevillista. En ese caos, un jugador sobresalió por encima de todos, Yevhen Konoplyanka. El extremo ucranio, un diablo por banda izquierda, se sacó un zurriagazo nada más comenzar el segundo acto desde el vértice del área que se convirtió en el tanto del empate, eso sí, tras ser desviado por un desafortunado Víctor Ruiz.

Pero el partido guardaba lo mejor de la tarde. El misil de Konoplyanka, un jugador que parece que no está contando para Unai Emery. Pero que es un jugador decisivo en este equipo dirigido por Unai Emery. Parece que no está. Pero cuando se adueña del balón, ya sea mediante regates o asistencias, es un jugador providencial y que debe serlo aún más en este final de temporada para el Sevilla. Y por si quedara alguna duda, decantó el partido con un zambombazo desde su Kirovogrado natal que destrozó cualquier atisbo de puntuar en el Pizjuán.

Ya en el final del partido llegaron un par de sustos para la parroquia nervionense. Primero un testarazo de Leo Baptistao a bocajarro que tuvo que despejar Sergio Rico valientemente y el posterior rechazo Daniel Carriço de tijereta sobre la misma línea de gol. Y después la expulsión de Éver Banega, con una doble amarilla que le impedirá vestir la blanquirroja en en el Bernabéu. Pasados ambos sustos llegó el colofón. Enésimo engaño de Gameiro, en esta ocasión, sobre Bonera y su disparo, rechazado por un Aréola que encajaba cuatro goles en un partido por primera vez esta temporada, era enviado a la red por José Antonio Reyes. Reyes y Konoplyanka. Presente y futuro de un equipo que quiere estar en la próxima Champions.

 

 

Sevilla FC: Sergio Rico; Mariano, Rami, Carriço, Tremoulinas; N'Zonzi (Cristóforo, m.17), Iborra (Escudero, m.74); Krohn-Dehli, Éver Banega, Konoplyanka (Reyes, m.70); y Gameiro.

Villarreal CF: Areola; Mario, Bonera, Víctor Ruiz, Bailly (Samu Castillejo, m.46); Rukavina, Bruno, Pina, Denis Suárez; Adrián (Baptistao, m.70) y Bakambu.

Goles: 1-0, M.23: Iborra. 1-1, M.29: Bakambu. 1-2, M.37: Bakambu. 2-2, M.51: Víctor Ruiz, en propia meta. 3-2, M.65: Konoplyanka. 4-2, M.91: Reyes.

Árbitro: Carlos Velasco Carballo (Comité Madrileño). Expulsó al sevillista Éver Banega por doble amarilla (m.06 y 79). Además, amonestó al local Kronh-Dehli (m.73) y al visitante Bonera (m.24).

Incidencias: Partido de la vigésima novena jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante algo más de 35.000 espectadores. Terreno en buenas condiciones.

 


La locomotora rojiblanca sigue carburando al máximo

Los de Valverde se muestran muy superiores ante unos verdiblancos tremendamente inoperantes en ataque y encadenan su quinta victoria consecutiva entre Liga y Europa

 

 

El Athletic de Bilbao recibía en casa a un Betis sin frenos con seis jornadas sin conocer la derrota a las espaldas. Los rojiblancos, con hasta siete novedades en el once, dejaban a hombres como Aduriz y Beñat en el banco con la obligación de conseguir la victoria para no descolgarse de la pugna por los puestos europeos.

Los leones salieron a morder desde el inicio, con una presión altísima y un ritmo desmesurado asfixiaron a su rival que era incapaz de salir de su propio campo. Los de Merino no reaccionaron ante las fuertes marcas de los rojiblancos, y durante toda la primera mitad fueron un saco de boxeo que recibía los golpes de los jugadores del Athletic.

A pesar de la insistencia, le costó abrir el marcador a los hombres de Valverde. No fue hasta el minuto 34 cuando San José puso un balón en largo para Sabin, quien controló con el pecho y se acomodó para batir frente a frente a Adán con la derecha.

Quizás el primer gol llegó en el momento en el que el Betis comenzaba a despertar de su letargo, pero sin demasiado tiempo para asimilar lo ocurrido el Athletic hizo el segundo. Muniain remató de cabeza y el balón se estrelló en un defensa, cuando todos reclamaban el penalti, llegó Mikel Rico para enchufar el balón al primer palo con la izquierda. Visto y no visto. Adán solo pudo hincar la rodilla y recoger el balón del fondo de la red.

El Betis solo pudo respirar en el vestuario cuando el árbitro pitó el descanso. Pero la bocanada de aire fresco duro poco, pues nada comenzar el segundo acto Mikel Rico soltó una espectacular volea desde fuera del área a la que Adán respondió con una gran estirada, pero el rechacé cayó en las botas de Sabin que solo tuvo que empujar para logar su segundo tanto de la tarde.

Merino intentó revolucionar el equipo a base de cambios, pero la ambición del Athletic no decayó, incluso Aduriz saltó al campo con la consigna de seguir engordando el marcador de San Mamés. El Betis, logró el gol del honor demasiado tarde, sin tiempo de reacción para meter el miedo en el cuerpo a los leones. Rubén Castro remató totalmente solo en el segundo palo un saque de esquina, 15 goles en Liga y a seguir luchando por ser el máximo artillero nacional.

Con esta victoria el Athletic certifica una jornada más la plaza europea en una incesante lucha de varios equipos por dos plazas, mientras que el Betis vuelve a sembrar dudas en torno a su fútbol y corta una de las mejores rachas de esta temporada. 

 

 

Athletic de Bilbao: Iraizoz; Bóveda, Gurpegui, Laporte (Etxeita, m.80), Lekue; San José, Mikel Rico; Susaeta, Raúl García (Aduriz, m.63), Muniain (Elustondo, m.67); y Sabin Merino.

Real Betis Balompié: Adán; Molinero (Cejudo, m.80), Pezella, Bruno, Montoya; Joaquín, N'Diaye, Petros (Fabián, m.51), Musonda; Jorge Molina (Ceballos, m.51) y Rubén Castro.

Goles: 1-0, m.34: Sabin Merino. 2-0, m.43: Mikel Rico. 3-0, m.50: Sabin Merino. 3-1, m.85: Rubén Castro.

Árbitro: Jaime Latre (Comité Aragonés). Mostró tarjeta a amarilla al local Raúl García (m.20) y al visitante Rubén Castro (m.51).

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA, disputado en San Mamés ante 42.437 espectadores, según datos de la LFP. De ellos unos 500 animosos aficionados verdiblancos. Terreno de juego muy castigado por la acumulación de partidos y la gran cantidad de lluvia caída en las últimas semanas.

 


El Madrid encuentra su flor a balón parado

Keylor Navas y Casemiro evitan el desastre. Ramos adelantó a los blancos, pero fue expulsado en las postrimerias del choque. Gran encuentro de los canarios, pero sin premio

 

 

Las Palmas se plantó en el Estadio de Gran Canaria con un solo propósito: derrotar al Real Madrid. Gran despliegue físico y táctico del cuadro isleño, que llegó a ser mejor que los blancos en varios tramos del partido. Juan Carlos Valerón fue homenajeado antes del pitido inicial por sus 400 partidos en Primera División. Emilio Butragueño, por parte de los madrileños, le regaló una réplica del Santiago Bernabéu.

En la primera parte se pudo ver una gran superioridad por parte del equipo canario, principalmente mostrando sus armas a nivel de conjunto. Mucha circulación de pases y gran conectividad entre cada uno de los miembros que ponía en aprietos a los once jugadores de Zidane sobre el campo. Modric, presionado en el minuto 10, tuvo un error que pudo costar caro. Willian José lo aprovechó para quedarse solo ante Keylor Navas, pero el costarricense logra salvar el mano a mano. Un santo, el meta ‘Tico’, cuyas paradas han servido para ganar algunos puntos al Real Madrid.

La respuesta tardó en llegar, pero fue efectiva. Cristiano Ronaldo tuvo su particular bis a bis contra Javi Varas pero, una vez más, el portero volvió a ganar el mano a mano. Mal disparo del portugués, que llegó a disparar al guardameta y desaprovechó el tremendo pase en profundidad de Luka Modric. Sin embargo fue la acción que provocó el saque de esquina que desembocó en el gol de Sergio Ramos. Isco puso el cuero al primer palo y el de Camas lo peina hacia el segundo donde nadie puede impedir que entre a la red. 0-1 cuando el Real Madrid menos lo merecía.

A partir de ese momento, los jugadores del cuadro merengue pudieron equilibrar la balanza y el partido estuvo más igualado. Sin embargo la zaga madridista sufría en algunas acometidas de Las Palmas. Cristiano volvería a tener una ocasión en el minuto 29, pero se marcharía fuera tras blocar Lemos. Estaba en todas el defensa. El descanso llegó en un último cuarto de hora donde lo mejor fue un gran control de Zidane en la banda a un balón despejado.

La segunda mitad comenzó con sucesivos parones del cronómetro por diversos choques y golpes de los jugadores. Por suerte ninguno sufrió lesión alguna. El Real Madrid buscaba mantener el equilibrio e, incluso, ser superior a su rival. Sin embargo eso no pudo ocurrir y el conjunto canario aún tendría sus ocasiones. Es destacable el regular partido de Isco, que además se fue visiblemente molesto en su sustitución. La UD Las Palmas pudo haber tenido su primera ocasión peligrosa tras un error clamoroso de Pepe, quien se vio obligado a derribar a Willian José cuando ya encaraba puerta.

Fue en una doble ocasión en el minuto 65 cuando el cuadro canario pudo ponerse por delante, pero se chocó en ambas ocasiones con Keylor Navas. Nili protagonizó las dos oportunidades. En la primera buscó un control en el área tras quedarse solo, pero el Tico metió la mano tras anticiparse y sacar la pelota. En la siguiente jugada, tras un despiste defensivo de la zaga merengue, el guardameta se adelantó con gran agilidad para evitar que Nili pudiera disparar libre de marca desde el centro del área. Imperial el portero del Real Madrid.

Bale tuvo en su pierna izquierda el 0-2 desde fuera del área. Increíble lo rápido que arma el disparo el galés, pero se marchó rozando la madera. La única ocasión clara del cuadro merengue en la segunda mitad. La polémica llegaría pocos minutos después, en el 73. Arbeloa buscó robar una pelota a El Zhar y, tras golpear en el jugador canario, llega a Keylor y lo atrapa con las manos. El colegiado pitó cesión. Claramente equivocado el árbitro. El libre indirecto lo taponó Casemiro.

El momento culmen del encuentro llegaría en los últimos cinco minutos. Empataría Las Palmas, y de forma merecida, por medio de Willian José. Sucesión de errores que desembocaron en el tanto del delantero. Primero Kovacic se equivocó en sacar una falta. Momo, que recogió la pelota, se la dio al atacante ante la plácida mirada de Sergio Ramos que podría haber cortado el pase. Keylor no pudo hacer nada. Sin embargo, en la siguiente jugada, otra vez en un córner, Casemiro cabecea al segundo palo a placer para poner el 1-2. Minutos 86 y 88, respectivamente.

El partido no acabaría sin antes la expulsión de Sergio Ramos por doble amarilla. El Real Madrid afrontará el partido ante el Sevilla sin Pepe, por acumulación de cartulinas, ni el de Camas. Las Palmas perdió un partido en el que mereció sacar algo más. Los blancos salen vivos del Estadio de Gran Canaria… y de milagro.

 

 

UD Las Palmas: Javi Varas; David García (Araujo, min. 84), Lemos, Bigas, Garrido (Dani Castellano, min. 46); Roque; Nili (El Zhar, min. 72), Montoro, Jonathan Viera, Momo; y Willian José.

Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Arbeloa; Modric (Marcelo, min. 90), Casemiro, Isco (Kovacic, min. 60); Lucas Vázquez, Cristiano Ronaldo y Bale (Jesé, min. 79).

Goles: 0-1, min. 24: Sergio Ramos. 1-1, min. 87: Willian José. 1-2, min. 89: Casemiro.

Árbitro: David Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Expulsó por doble amonestación al jugador visitante Sergio Ramos (minutos 55 y 90). Además, fueron amonestados sus compañeros Casemiro (min. 16), Isco (min. 55) y Pepe (min. 61), y los jugadores locales Montoro (min. 38), Lemos (min. 55), Bigas (min. 60) y Jonathan Viera (min. 75).

Incidencias: Encuentro disputado este domingo en el Estadio de Gran Canaria ante 25.846 espectadores. Antes del comienzo ambos clubes homenajearon al futbolista local Juan Carlos Valerón por sus 400 partidos cumplidos en Primera, y realizó el saque de honor Ismael Iess, campeón de Europa de vela en la clase Láser Radial sub'21. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Yoyo de la Torre, jugador de Las Palmas en los años 50. 

 

 

La fortuna se vistió de blanquiazul

Los andaluces remaron para llevarse la victoria pese a la tempranera expulsión de Barral pero un gol en propia meta de Miguel Lopes dio el empate a los catalanes

 


Empate en Los Cármenes que deja contentos tanto a Granada como al Espanyol. El partido se le complicó a los nazaríes con la expulsión de Barral en el minuto 4 pero lograron abrir el marcador antes del descanso con el gol de Rochina. El Espanyol hizo méritos suficientes para empatar en la segunda parte donde los locales se centraron más en defender el resultado. Finalmente, un gol en propia de Miguel Lopes puso la igualada en el marcador.

Para el Granada esta podría ser su semana más decisiva en su lucha por salir de los puestos de descenso, prácticamente dos finales ante Espanyol y Rayo Vallecano. Para los periquitos ganar en Los Cármenes suponía  casi asegurar la permanencia en Primera, partido complicado sin un Caicedo con problemas musculares y Diop y Víctor Sánchez sancionados aunque reconfortaba que el contrario tampoco pudiese contar con la presencia de Peñaranda en la delantera.

La primera media hora de encuentro estuvo marcada por las imprecisiones de uno y otro equipo que no conseguían hilar buenas jugadas. Numerosos errores en las entregas que no dejaban ver demasiada fluidez en el juego a lo que se sumaba la escasez de ideas a nivel ofensivo aunque lo cierto es que el conjunto catalán se plantaba con más facilidad en el área rival.

El Granada se mostraba incómodo, tanto es así que cometió algunas faltas infantiles en el primer tramo de choque. David Barral que había sido amonestado durante los primeros minutos tras golpear en el rostro a Álvaro acabó viendo la segunda amarilla por una acción muy similar a la primera, esta vez con Marco Asensio como protagonista. El colegiado González González no dudó en expulsarle y en el estadio de Los Cármenes ya se temían lo peor con uno menos sobre el terreno de juego.

En el Espanyol ya se frotaban las manos con la situación en la que había quedado su rival pero contra todo pronóstico, Rochina adelantó a los suyos en el minuto 40. Jugada de Success por la izquierda que se beneficiaba de una pérdida de balón de Javi López, el nigeriano llegó y encaró en el área pero el cuero rebotó en Óscar Duarte que habilitaba a Rochina que con la zurda pudo batir a Pau López. 

Tras el descanso, el Granada no dio la impresión de sufrir con un jugador menos en el campo. Todo lo contario que el Espanyol que ya no dominaba en ataque tal y como lo hizo durante el primer acto, además hombres tan importantes como Marco Asensio y Burgui no tuvieron demasiada participación circunstancia que se hizo notar en el juego del equipo de Galca.

Los andaluces resistían con un marcador corto pero a favor pero con el trascurso de los minutos su defensa se tambaleaba ante los sucesivos ataques de su rival quien puso el empeño suficiente poner la igualada en el luminoso. Álvaro rozó el empate tras un córner pero su testarazo salió por el lado izquierdo de la meta de Andrés Fernández. A continuación, llegó el ansiado empate en una jugada que salió de las botas de Hernán Pérez, sin duda el jugador más desequilibrante en el Espanyol.  Centro al área del paraguayo que intentó despejar Miguel Lopes con tan mala fortuna que lo acabó colando en la portería de Andrés Fernández.

El pitido final confirmó el reparto de puntos en Granada, muy válido para ambos conjuntos. El Espanyol se aleja más del descenso y el equipo nazarí los abandona metiendo al Getafe. Pero no todo está dicho. El próximo sábado recibe al Rayo en un duelo directo por la salvación.

 

 

Granada CF: Andrés Fernández; Miguel Lopes, Lombán, Ricardo Costa, Biraghi; Rochina (Krhin, m.91), Rubén Pérez, Dux, Success (Edgar, m.75); Barral y El Arabi.

RCD Espanyol: Pau López; Javi López, Álvaro, Enzo Roco, Rubén Duarte; Óscar Duarte; Abraham, Hernán Pérez, Marco Asensio (Salva Sevilla, m.83), Burgui (Mamadou, m.69); y Gerard Moreno.

Árbitro: González González (Colegio Castellano-leonés). Expulsó por doble cartulina amarilla al local Barral (m.27). También amonestó a los locales Biraghi, Lombán, Rochina, Andrés Fernández y Rubén Pérez, y a los visitantes Óscar Duarte, Rubén Duarte y Hernán Pérez.

Goles: 1-0, m.40: Rochina. 1-1, m.82: Miguel Lopes, en propia meta.

Incidencias: Partido de la vigésima novena jornada de la Liga BBVA disputado en el Estadio Nuevo Los Cármenes ante 16.500 espectadores

 

CLASIFICACIÓN PROVISIONAL DE LA LIGA BBVA

Posición
Equipo
Puntos
Jugados
Ganados
Empatados
Perdidos
GF
GC
1
FC BARCELONA
75
2924328422
2
ATLÉTICO DE MADRID
67
2921444512
3
REAL MADRID
63
2919648328
4
VILLARREAL CF
53
2915863523
5
SEVILLA FC
48
2913974331
6
ATHLETIC DE BILBAO
47
29145104737
7
RC CELTA DE VIGO
45
29136104151
8
SD EIBAR
37
29107124141
9
MÁLAGA CF
36
2999112828
10
REAL SOCIEDAD
35
2998123740
11
REAL BETIS BALOMPIÉ
34
29810112739
12
VALENCIA CF
34
29810113334
13
RC DEPORTIVO
33
2961583742
14
RCD ESPANYOL
32
2995152955
15
UD LAS PALMAS
30
2986153142
16
RAYO VALLECANO
27
2969143961
17
GRANADA CF
27
2976163054
18
GETAFE CF
27
2976162751
19
SPORTING DE GIJÓN
24
2966173051
20
LEVANTE UD
24
2966172752

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