REPUBLICA CHECA [0-2] ESPAÑA
España se gusta sin pisar el acelerador
La selección obtuvo un triunfo muy cómodo en Praga y continúa persiguiendo la puntuación perfecta. Marcaron Mata y Xabi Alonso, que se retiró por precaución.
Llegaba España al Generali Arena de Praga con su pase a la Eurocopa sellado
y con la puerta abierta a las segundas oportunidades. Ni las
declaraciones de David Silva, que alzó la voz ante su rol secundario en
el equipo, ni el complicado momento de Fernando Torres, que se quedó
fuera de la convocatoria ante Liechtenstein, impidieron que Del Bosque
constase con ambos en el once ante la República Checa.
El círculo cerrado de confianza del seleccionador se medía ante un rival que llegaba con Petr Cech como la principal estrella
y un once en el que la calidad de Rosicky y la pegada arriba de Milan
Baros se antojaban como la mayor fuente de peligro de un conjunto
obligado a vencer para seguir soñando con viajar a Polonia y Ucrania
para disputar la Eurocopa.
Pese a la intrascendencia del partido,
España comenzó eléctrico el choque, asumiendo el control del balón de
forma absoluta y buscando la jugada que le permitiera inaugurar el
marcador lo antes posible: no tardó mucho Xavi Hernández en encontrar el pasillo,
aquél que casi nadie ve, para colocar una pelota medida a Mata, que
sigue tocado por la varita tras su fichaje por el Chelsea, para que el
ex valencianista templase sus nervios y llevase su remate sutil y
cruzado al fondo de las mallas.
Poco le duró la tranquilidad a Cech, que vio cómo su compañero en Stamford Bridge no tenía piedad ante su primera ocasión. El checo comprobaba cómo España seguía moviendo la pelota con cierta libertad
mientras su selección esperaba agazapada en su campo y con una presión
tibia que no ponía en apuros a la medular colocada sobre el césped por
Del Bosque.
No tardaría España en volver a encontrar la senda del gol gracias
a una superioridad manifiesta: inició la jugada en la banda derecha
Fernando Torres que luchó por un balón, y Silva, omnipresente, se dejó
caer por la línea de cal para meterse hasta la cocina. El canario, con
ganas de reivindicarse, levantó la cabeza para meter un centro atrás
hacia Xabi Alonso que remató a placer desde segunda línea para poner el
segundo en el luminoso.
Tras el gol, España fue relajándose paulatinamente ante un rival
que no había mostrado la intensidad necesaria cuando un equipo se juega
la vida, y tuvo un susto antes de enfilar los vestuarios. Rosicky, que
intentaba trenzar todo el fútbol que ofrecía el conjunto local, inició
una jugada por la banda zurda regalando un balón a Pudil, que buscó a un
Baros que entraba libre de marca frente a Iker: sin embargo, el
delantero del Galatasaray turco se olvidó de rematar y permitió que la
ocasión más clara de su selección de diluyese para dejar el balance
ofensivo checo en cero remates entre los tres palos de Casillas.
Tras
el descanso, Del Bosque hizo gala de su particular gestión de confianza
y ofreció minutos a Puyol, que regresaba a la Selección Española tras
varios meses complicados alejado de los terrenos de juego por lesión.
Mientras, los locales intentaban buscar un despiste de la Roja, que
seguía apostando por el toque y la posesión como marca de clase, aunque quizá con exceso de adornos de cara a la galería.
Se retiró Torres, en el enésimo partido gris del "Niño"
nacido en Fuenlabrada, que sigue sin encontrar su sitio. El partido, de
carácter limpio y sin entradas feas, seguía su curso hasta que
Hubschman tuvo un ataque de locura transitoria haciendo una entrada
asesina a Xabi Alonso. El centrocampista del Shakhtar se dio pronto
cuenta de su fatal error y solo pudo pedir disculpas mientras veía la cartulina roja.
Las alarmas se dispararon en España, que vieron cómo la brújula
donostiarra se marchaba cojeando camino al túnel de vestuarios.
Desde
ese momento, y como si la República Checa aceptase que había perdido la
legitimidad para seguir atacando ante la escalofriante falta de
Hubschman, España otorgó un monólogo ofensivo más por cadencia natural
que por interés, gracias a una vaselina de Villa y dos oportunidades
clarísimas de Javi Martínez, que Petr Cech se encargó de desbaratar correctamente.
Con esta nueva victoria, España sigue camino de su puntuación perfecta
sumando siete victorias de siete posibles y buscará cerrar la Fase de
Clasificación en su territorio para lograr 24 puntos y dar un nuevo
golpe encima de la mesa con sensaciones muy positivas.
El que tendrá que esperar para tener su oportunidad con la selección será Jordi Alba: el defensa del Valencia que había sido convocado
por primera vez con Del Bosque fue uno de los descartados que vieron el
encuentro desde la grada del Generali Arena y tendrá que esperar al
duelo ante Escocia para tener una nueva oportunidad de vestir la Roja
por primera vez en el lateral izquierdo.
República Checa: Cech; Gebre Selassie,
Hubník, Sivok, Kadlec, Pudil; Tomas Hubschman, Kolar (Vacek, m.77),
Jirácek, Rosický; y Milan Baros (Pekhart, m.63).
España: Casillas; Sergio Ramos (Puyol, m.46), Raúl Albiol,
Piqué, Arbeloa; Busquets, Xabi Alonso (Javi Martínez, m.71), Xavi;
Silva, Mata y Fernando Torres (Villa, m.61).
Goles: 0-1, m.6: Mata. 0-2, m.23: Xabi Alonso.
Árbitro: Paolo Tagliavento (Italia). Expulsó a Hubschman por roja directa en el minuto 70.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la penúltima jornada
de la fase de clasificación a la Eurocopa 2012 disputado en el estadio
Letna ante 17.873 espectadores.
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