Los locales adolecieron de pegada y volvieron a
finalizar, como en el Insular, con uno menos por la expulsión Rubén
Martínez en el minuto 68.
Rayo Vallecano y Las Palmas se medían en
Vallecas con la renta conseguida por el conjunto canario en la ida,
derrotando por un gol a cero al cuadro de Jémez. El Rayo, principal
favorito, no supo doblegar a la defensa amarilla y el 0-0 acabó con la
sorpresa, añadiendo la del Córdoba, de los dieciseisavos de la Copa.
Salió dominante el Rayo. La idea de
remontada estaba clara en los hombres de Jémez que saltaron al césped de
Vallecas con un plantel poco habitual. Pronto, Labaka tuvo en sus botas
el gol, pero su disparo fue bloqueado, con una posible mano, por un
defensor canario.
Se defendió el cuadro amarillo como gato panza arriba ante los
nerviosos atacantes franjirrojos. De esa forma, Las Palmas se fue al
descanso con ventaja en la eliminatoria. Movió ficha Jémez tras el descanso dando entrada a Trashorras por
Abu y Leo por Labaka. Más incisivo el cuadro local, pero la solidez
amarilla supo aguantar en todo momento las embestidas rayistas.
Subió de revoluciones el partido con la expulsión del guardameta,
Rubén, en una acción clara de gol de Chrisantus. Con uno menos el Rayo
apeló la heróica pero no pudo con un equipo bien armado en defensa. Las
Palmas se verá las caras con el Betis en octavos de final.
Rayo Vallecano: Rubén; Sueliton, Labaka (Leo
Baptistao, m.62), Gálvez, Casado; Lass, Adrián González, Abu
(Trashorras, m.54), Arana; Delibasic y Nicki Bille (Cobeño, m.70).
UD Las Palmas: Barbosa; Pignol, David García, Daivid,
Corrales; Nauzet Alemán (Pedro Vega, m.91), Vicente Gomez, Hernán, Momo
(Sergio Suárez, m.79); Thievy y Javi Guerrero (Chrisantus, m.68).
Árbitro: Pérez Lasa (Comité Vasco). Amonestó a
Sueliton y Delibasic, del Rayo Vallecano; y a Nauzet, Momo, Hernán y
Corrales, de la UD Las Palmas. Expulsó con roja directa al portero del
Rayo Rubén Martínez (m.69).
Incidencias: Encuentro correspondiente a la vuelta
de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, disputado en el
Estadio de Vallecas (Madrid), ante 6.300 espectadores.
Remontada express en el Reyno
Los rojillos fueron como un martillo pilón desde el inicio intentando conseguir el gol, y la insistencia tuvo su premio en cinco minutos donde dieron la vuelta a la eliminatoria
Empezó el partido con más ímpetu el Osasuna como era de esperar, pues jugaba en casa y era quién debía remontar la eliminatoria. Y en este intenso inicio tuvo la primera ocasión el conjunto rojillo, que a punto estuvo de marcar por medio de Lamah tras una falta bien sacada por Roberto Torres en la que falla Cuéllar, pero el balón lo sacó Gregory de debajo de la portería.
La primera oportunidad del Sporting tuvo que
esperar hasta el minuto 20 de partido, cuando Hugo Vieira hacía una
buena jugada por banda izquierda y su disparo tras un gran recorte, se
marchaba fuera por poco.
Pero seguía dominando el partido el
conjunto local. Tenía más la pelota, pero no conseguía enlazar bien ni
darle profundidad a su juego, por lo que tampoco generaba demasiado
peligro. El Sporting, si bien estaba dejando demasiado espacio, se veía
cómodo a la contra.
Sobre la media hora del partido, llegaron las
mejores oportunidades de la primera parte para Osasuna de la mano de
Manu Onwu. La primera, al rematar una falta sacada por Roberto Torres,
en la que se encontró con las manos de Cuéllar. Y la segunda, la mejor
oportunidad, tras un buen pase en profundidad de Timor y una gran jugada
individual en la que conseguía irse de Gregory en el uno contra uno y
sacar con la zurda un disparo cruzado que se estrellaba cerca de la
cruceta. El rechace lo mandó fuera Lamah.
Y de esta manera, con
el Osasuna dominando y buscando el gol y el Sporting defendiendo quizás
demasiado atrás, se terminó la primera parte. Al Sporting, le valía el
resultado.
En la segunda parte, comenzó Osasuna con más
intensidad que en la primera si cabe, y en los primeros minutos, ya
avisó el Osasuna con una gran jugada de Roberto Torres, que hizo un caño
y sacó un disparo colocado desde el borde del área, que se topó con las
manos de Cuéllar.
Pocos minutos después, era de nuevo Torres
quién probaba suerte con un potente disparo desde dentro del área, pero
se encontraba una vez más con las manos de un Pichu Cuéllar muy
acertado.
Tras unos inicios muy intensos, se intentó sacudir el
Sporting con dos buenas oportunidades, ambas con Hugo Viera como
protagonista. La primera, un centro raso de Trejo que estaba preparado
para empujar cuando sacó la defensa, y la segunda una gran internada en
el área, que tras zafarse de dos defensas, terminó con un remate
demasiado alto.
Y cuando parecía que el Sporting se estaba
sacudiendo del acoso de Osasuna, llegó el gol. Buena jugada entre la
pareja de delanteros rojillos, es Onwu quién conectaba con Llorente y le
asistía para que este con pierna derecha batiera a Cuéllar y pusiese el
1-0 en el marcador, igualando la eliminatoria.
Arriesgó Osasuna y
casi sin darse cuenta dio la vuelta a la eliminatoria marcando el
segundo gol en una jugada a balón parado. Pelota a la olla, no es capaz
de despejar con acierto Gregory y el balón suelto lo recogía Rubén para
empujarlo al fondo de la portería y poner el 2-0 en el marcador.
Y
ahí mató el partido y la eliminatoria el Osasuna. Pues el Sporting se
vio incapaz de reaccionar e incluso fue el conjunto local quién pudo
ampliar su ventaja en el marcador en un par de ocasiones de Nano y
Timor, a pesar de que un gol clasificaba a los visitantes.
Así
las cosas, Osasuna sigue adelante en la Copa del Rey y esperará a su
rival en los octavos de final, que saldrá del partido de mañana entre
Valencia y Llagostera, con ventaja para los valencianistas, que ganaron
0-2 en la ida.
Atlético Osasuna: Riesgo; Marc Bertrán (Sisi, m. 70), Lolo,
Rubén, Echaide, Timor, Annan. Roberto Torres, Lamah (Armenteros m. 63),
Manuel y Llorente (Nano, m. 81).
Sporting de Gijón: Cuéllar, Pedro Orfila, Gregory, Borja,
Álex Menéndez (Luis H, m.45). Álex Barrera (Jara, m.78), Ricardo, Muñiz,
De las Cuevas (Trejo, m. 54), Sangoy y Hugo Vieira.
Goles: 1-0, m.69: Llorente. 2-0 Rubén (m.75).
Árbitro: Teixeira Vitienes (Comité Cántabro). Mostró
tarjeta amarilla a los locales Annan (m.65), Llorente (m.76) y Torres
(m. 91), y a los visitantes Luis H. (m. 74) y Trejo (m. 75).
Incidencias: Partido de la Copa del Rey
correspondiente a los dieciseisavos de final, vuelta, disputado en el
estadio "Reyno de Navarra" ante 11.109 espectadores.
Premio gordo para el Córdoba
Los locales dominaron, pero el Córdoba anotó en
dos ocasiones (Kiko y Dubarbier). Por la Real marcaron Griezmann, en
fuera de juego, y Agirretxe. Espera el Barça en octavos
La Real Sociedad volvió a caer a las primeras de cambio de la Copa
del Rey, esta vez ante un Córdoba que ya ganó 2-0 en la ida y que en la
vuelta arrancó un empate 2-2 en Anoeta.
Los donostiarras salieron
volcados en busca de la remontada y, aunque no empezaron muy finos, en
el minuto 20 Antoine Griezmann, el mejor jugador realista, marcó el
primer tanto en una acción reclamada como posible fuera de juego.
El
Córdoba no se amilanó y sin llegar a tener claras ocasiones sí dio
algunos sustos ayudado por los nervios defensivos que terminaron por
contagiar a Zubikarai.
En el tramo final de la primera parte Saízar desvió con muchos apuros un remate de Chory Castro que casi va a gol. Salió
fuerte el equipo andaluz en la segunda parte y Dubarbier elevó la
tensión de la grada en un buen disparo que casi bate a Zubikarai.
Los
donostiarras tuvieron el 2-0 en un remate de Xabi Prieto pero fue Kiko
el que estableció en el minuto 65 el empate a uno y Dubarbier, con un
gran zurdazo, el 1-2 que hundió a los guipuzcoanos. En el tramo final y para la estadística Agirretxe marcó el gol del empate a pase de su compañero Estrada.
De tal manera, la Real se queda fuera de los
octavos de final, dando su pase al Córdoba, que se enfrentará al ganador
de la eliminatoria Alavés - Barcelona.
Real Sociedad: Zubikarai; Estrada, Mikel González,
IñigoMartínez, José Ángel; Illarramendi (Ifrán, min. 68), Rubén
Pardo,Zurutuza (Xabi Prieto, min. 49); Griezmann (Vela, min. 77),
ChoryCastro y Agirretxe
Córdoba CF: Saizar; Fuentes, Gaspar, Fernández, Kiko;
LópezGaray, Caballero (Alberto, min. 75); Dubarbier; López
Silva(Cristian, min. 68), Patiño (Vico, min. 80) y Abel.
Goles: 1-0, min. 20: Griezmann. 1-1, min. 65: Kiko.
1-2, min. 72:Dubarbier. 2-2, min. 84: Agirretxe.
Árbitro: Ayza Gámez
(Comité Valenciano). Tarjeta amarilla José Ángel,Fernández y a Caballero.
Incidencias: Partido de vuelta de dieciseisavos de final de la Copa del Rey con la presencia de 17.000 aficionados en una noche de lluvia constante en Anoeta
El retorno de Vadillo encabeza la remontada bética
13 meses
después, el canterano regresó y le dio el pase al Betis. El Valladolid
apenas pudo defenderse. Las Palmas, rival verdiblanco en octavos de
final.
Un estelar Beñat y un excelente Vadillo
dan alas al Real Betis para continuar con vida en la Copa del Rey. Su
víctima, el Real Valladolid, es eliminado por los verdiblancos por
tercera vez, a pesar de contar con el 1-0 de la ida, que parecía
decantar la balanza del lado de los de Djukic.
Ambos equipos acusaron sensibles bajas en sus filas. El Betis comenzó
con falta de intensidad y colapso en la zona de creación, y el
Valladolid no se aprovechó de ello, ya que el juego de los pucelanos fue
bastante pobre.
El equipo de Pepe Mel no alcanzó su máximo
nivel hasta la entrada de Beñat y Vadillo, que desatascaron el fútbol
de los sevillanos y llevaron en volandas a jugadores y aficionados del
Betis.
Amaya adelantó a los béticos en el minuto 26 de la primera parte.
Tras el gol, el Betis continuó con su confusión de ideas, y no fue hasta
la segunda parte cuando los de Pepe Mel sentenciaron el partido,
gracias a una increíble jugada de Álvaro Vadillo nada más salir al
terreno de juego, tras zafarse de tres jugadores rivales y poner el
balón a Rubén Castro que fusiló la porteria de Jaime, poniendo el 2-0 en
el marcador.
Jorge Molina pudo sentenciar en el minuto 79, pero no fue hasta el 86
cuando Jesús Rueda envió un disparo de Vadillo hacia su propia
porteria, que terminaba de Castigar al Real Valladolid, y acababa con
las ilusiones de todos los pucelanos presentes en el Benito Villamarín.
Real Betis Balompié: Casto; Chica, Dorado, Amaya, Nacho; Rubén Pérez,Nosa (Beñat, m.46); Agra (Vadillo, m.61), Rubén Castro, J.Campbell(Nono, m.76) y Jorge Molina.
Real Valladolid: Jaime; Sastre, Jesús Rueda, Peña (Marc Valienge,m.86), Balenziaga, Baraja, Víctor Pérez, Rubén Peña (Lolo, m.69);Neira (Omar, m,62); Bueno y Javi Guerra.
Goles: 1-0: m.28, Amaya. 2-0. m.62: Ruben Castro. 3-0, m.84: Jesús Rueda(pp).
Arbitro: Alfonso J. Álvarez Izquierdo (Comité Catalán). Mostró tarjeta amarilla a Sastre (m.28), Jorge Molina (m.38) y Amaya (m.59).
Incidencias: Partido disputado en el estadio Benito Villamarín ante 27.789 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.Antes del partido se guardó un minuto de silencio por la muerte de Manuel Cala, exjugador bético en la década de los 40.
Aparente tranquilidad y buenos goles
El equipo blanco batió al Segunda B con cuatro canteranos titulares y sin ningún esfuerzo. Albiol se lesionó a los 30 segundos. Di María y Callejón, goleadores. Mourinho, pitado
El Real Madrid está ya en los octavos de final de la Copa del Rey después de, como estaba previsto, deshacerse del Alcoyano y hacer valer el 1-4 de la ida con un 2-0 en el Santiago Bernabéu con cierto toque de insulso. Y es que a los blancos no les hizo falta meter la cuarta marcha siquiera para sumar la victoria en un partido sin ninguna historia a excepción del desempeño de los cuatro canteranos que puso Mourinho de inicio. Y sin embargo, el primer gol llegó con la firma de los titularísimos Di María y Benzema, que salieron tras el descanso. Callejón maquilló el resultado con dos goles en las postrimerías del encuentro. Las de arena para el madridismo en una noche supuestamente para el disfrute llegaron con la lesión de Albiol, y los pitos que buena parte del Bernabéu dedicó a los aficionados que coreaban el nombre de José Mourinho. Inequívocos y reiterados, en un momento delicado en las relaciones del técnico con el club.
El
partido no pudo empezar peor para el Real Madrid además, y es que con
un 1-4 de renta de la ida, el fantasma de las lesiones no tardó en
aparecer. Nunca son bienvenidas las lesiones, pero menos en un partido
de este calado. Y tardó en hacer acto de presencia apenas treinta
segundos, el tiempo que tardó David Torres en entrar por detrás a ras
del suelo a un Albiol que estrenaba capitanía y que tuvo que abandonar
el terreno de juego de inmediato. No está teniendo muchos minutos el
central merengue esta temporada, y además de su propio técnico, parece
que el dios del balompié también le ha dado también la espalda. Coentrao
entró en su lugar, y Adán recogió el brazalete de capitán.
Eso
sí, si bien el partido comenzó con el sobresalto de la lesión, poco
tardó en retornar la calma. No una calma tensa, sino una calma total y
absoluta, consecuencia lógica del resultado de la ida, que condicionó
por completo el desarrollo de un partido donde los mayores focos los
concentraron los canteranos a los que dio salida José Mourinho. Un Nacho
muy solvente atrás y que incluso llevó peligro las veces que se
incorporó al ataque. Un Morata al que le hicieron dos posibles penalties
que Iglesias Villanueva no entendió como tales. Un Denis voluntarioso,
pero que no anduvo afortunado de cara a puerta, errando incluso un mano a
mano. Y un José Rodríguez que, como mediocentro, demostró una calma y
un saber estar impropio de un chico que ni ha llegado a la mayoría de
edad.
Los canteranos fueron de lo más llamativo en una primera
parte sin historia, con un Alcoyano dejándose el alma, en ocasiones de
forma desmedida en defensa incluso, y un Madrid que, al ralentí, no le
costaba tener el partido controlado. José Mourinho dijo querer
justificar cada céntimo que hubiera pagado cada aficionado, pero lo
cierto es que el espectáculo no terminaba de colmar las expectativas del
respetable. Y es que no terminaban de llegar los goles. Callejón tuvo
un tiro lejano desde la banda con el portero batido, pero al igual que
los penalties de Morata, y el mano a mano de Denis, la ocasión se fue al
limbo.
En el comienzo de la segunda parte, el guión fue calcado.
José Mourinho fue dosificando la entrada al campo de los Di María y
Benzema, y fue entonces cuando el Real Madrid fue ganando poco a poco
algo más de vértigo. No era difícil tampoco. Así las cosas, en el minuto
setenta llegó por fin el primer gol del partido, y no fue casualidad
que llegara con la firma de Di María y Benzema. Callejón guió un
contraataque, cedió al francés, que a su vez asistió al argentino para
que batiera a Adrián Murcia con un certero tiro cruzado.
Un gol
el del Fideo que sirvió para animar algo la fría noche, aprovechando
también la expulsión de Javi Selvas por reclamarle al árbitro fuera de
juego en la jugada del tanto. Y es que en los veinte minutos finales,
Benzema tuvo oportunidad de marcar un gol más, y Callejón firmaría un
doblete para maquillar el resultado y la goleada. Ambos batiendo al
portero en el mano a mano. El primero, a pase de Ozil, y el segundo,
tras una magnífica jugada individual de Di María. El colorete final a un
partido grisáceo que además dejó la zozobra de los múltiples y
constantes pitos de buena parte del Bernabéu a los que coreaban el
nombre de José Mourinho.
Real Madrid: Adán; Raúl Albiol (Coentrao, m.7), Varane, Carvalho, Nacho; José Rodríguez, Modric; Callejón, Özil, Cheryshev (Di María, m.61); y Morata (Benzema, m.70).
CD Alcoyano: Adrián Murcia; Arkaitz, Javi Selvas, Óscar López, Devesa; Tortosa (Julio de Dios, m.63), Pereira, Javi Lara, Dani (Fran Piera, m.40); Omar y David Torres (Edu Silva, m.78).
Goles: 1-0, m.72: Di María. 2-0, m.89: Callejón. 3-0, m.92: Callejón.
Árbitro: Iglesias Villanueva (Comité Gallego). Amonestó a Carvalho (47), José Rodríguez (49), Özil (52) y a Di María (85) por el Real Madrid, y a Arkaitz (42) por el Alcoyano. Expulsó a Javi Selvas (45 y 72).
Incidencias: Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de Copa del Rey disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 35.000 espectadores.
A las puertas de la proeza
El equipo visitante ganó por la mínima diferencia y dio todo para lograr el pase. Fue un baño a los suplentes malaguistas pero no le bastó para dar la gran sorpresa
A punto estuvo el Cacereño de dar la gran
sorpresa y dejar fuera de la Copa del Rey al Málaga. Ganó 0-1 y valió el
3-4 de la ida, pero los extremeños dieron todo un baño a los suplentes
malaguistas.
Dispusieron de las mejores ocasiones de gol, especialmente en el
último cuarto de hora del partido y pusieron al borde de un ataque de
nervios a los algo más de 9.000 espectadores que acudieron a La Rosaleda
en una noche fría.
Pellegrini tiró de las rotaciones y solo
sacó a dos titulares( Jesús Gámez y Weligton) en el once titular. Aunque
a los 7´ minutos pudo marcar el Málaga con un despeje de Ferrer a su
propio travesaño el Cacereño poco a poco se fue envalentonando y puso en
marcha un sistema férreo de marcaje a los mediocampistas locales, que
no podían conectar con sus homnbre de ataque. A los 37´ tras una falta
frontal Chapi hizo el 0-1 y llenó de dudas a los seguidores
blanquiazules.
Tras el descanso, donde entró Demichelis por Weligton, el Málaga
atacó más y parecía llegar la reacción. Pero fue ficticio. El Cacereño
volvió a controlar la situación y dispuso de las mejores ocasiones de
gol. Demichelis salvó con el pie un disparo que se colaba y dos buenas intervencionesde Kameni evitaron el segundo de un
Cacereño que se fue para adelante en búsqueda de la eliminatoria. Al
final el Málaga enfrió el partido y aguantó el balón con la entrada de
Camacho para asegurar el pase. Fue lo mejor de una noche para olvidar.
Málaga CF: Kameni; Gámez, Onyewu, Weligton (Demichelis, m.46), Alex Portillo; Sebastián Fernández, Recio (Juanmi, m. 65),Iturra, Duda (Camacho, m. 83); Buonanotte y Santa Cruz.
CP Cacereño: Fuentes; Palero, Juli Ferrer, Carrizosa, Toni;Santi Amaro, Checa (Elías, m. 82), Gaspar, Chapi; Valverde (Rivera,m. 61) y Esteve (Matías Saad, m. 73).
Gol: 0-1, M. 37: Chapi.
Arbitro: Del Cerro Grande (Colegio Madrileño). Mostró tarjetas amarillas a los futbolistas del Cacereño Palero (m. 70), Checa (m.79), Toni (m. 84) y Elías (m. 88).
Incidencias: Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio de La Rosaleda ante 10.000 espectadores.
A octavos con el gol del año como regalo de la casa
Ramí consiguió un auténtico golazo desde el centro del campo para abrir el marcador y superar a un Llagostera que dió la cara en Mestalla.
Ocurrió lo esperado en Mestalla, y el Valencia solventó prácticamente sin apuros el partido de vuelta de los dieciseisavos de final de Copa ante el Llagostera. Los gerundenses por su parte, se pueden ir muy contentos con la imagen ofrecida en la eliminatoria, pues han tenido minutos de buen fútbol en ambos partidos.
Pellegrino disponía un once lleno de
suplentes, a excepción de Rami y Jonas, que vienen siendo titulares en
el Campeonato de liga. Guaita ocupó la portería, por lo que parece claro
que el valenciano ocupará finalmente el marco en los partidos de Copa y
de Champions, mientras que Alves lo hará en liga. De esta forma "el
flaco" emula a su predecesor Unai Emery, y deja atrás la costumbre de
poner al portero que mejor se encuentre en cada momento.
El
partido comenzaba frío, como la noche, pero con dominio y posesión casi
total del Valencia. La falta de ritmo era patente en ambos equipos, algo
que sorprendía por parte del Llagostera, pues no disputarán muchos
partidos como este.
El aburrimiento se acabó en el minuto 14,
cuando Rami le pegaba a puerta desde su propio campo, y el balón se
colaba en la portería de Mondragón. Quizá el portero pudo hacer algo
más, pero el francés marcó un auténtico golazo. La única ocasión del
Llagostera llegaría en el minuto 36 en un saque de esquina que remató
Segarra, y que Guaita despejó con apuros. Con el 1-0 se llegaría al
descanso.
Tras la reanudación el Llagostera tuvo que cambiar a su
portero Mondragón por un choque en la primera mitad con Piatti, saldría
en su lugar Wilfred. En el minuto 56 una mala salida en un córner del
propio Wilfred facilitaría a Valdez el remate, y de esta forma conseguir
el segundo gol.
La pelota era del Valencia, y el Llagostera
empezaba a acusar el cansancio. Los últimos 20 minutos se le hicieron
bastante largos a los gerundenses, aunque finalmente tendrían su premio.
En el minuto 77, Banega, que acababa de ingresar en el campo, se
sacaría un gran pase en profundidad que dejaría solo a Bernat ante
Wilfred para que el extremo hiciese el tercero del Valencia.
El
Llagostera había tenido minutos de buen fútbol durante la eliminatoria, y
tuvo su premio en forma de gol, obra de Nico en el minuto 82 de
partido.
Lo mejor para el Valencia sería el partido del debutante
Salva Ruiz, que cuajó un buen partido en el lateral izquierdo. En
octavos espera Osasuna, en la que será sin duda, una eliminatoria muy
dura. Por su parte el Llagostera afrontaba la eliminatoria como un
premio, y como dijimos antes, se puede ir muy orgulloso de su
participación.
Valencia CF: Guaita, Barragán, Rami, Víctor Ruiz, Salva Ruiz, Albelda, Parejo, Piatti (Banega, m.71), Jonas (Bernat, m.58), Jonathan Viera y Valdez (Soldado, m.60).
UE Llagostera: Moragón (Kevin, m.46), Blanchart, Canal, Segarra, Javi González, Masó, Artabe, Pitu (Álex Granell, m.46), Joaquín (Aumatexll, m.60), Nico y Álex Moreno.
Goles: 1-0, m.15: Rami. 2-0, m.57: Valdez. 3-0, m.77: Bernat. 3-1, m.83: Nico.
Árbitro: Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro). Amonestó por el Valencia a Parejo, y por el Llagostera a Pitu.
Incidencias: Partido disputado en el campo de Mestalla ante 8.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.
Se cumplió el trámite y ahora se puede hablar de...¡¡Derbi!!
Los de Simeone sellan su pase a octavos ante un Jaén superado en todo momento. Los colchoneros se medirán en octavos al Getafe
No tuvo mayor historia el aprtido que jugaron Atlético y Jaén en la ribera del Manzanares para decidir algo que ya estaba más que decidido: el acceso del conjunto colchonero a los octavos de una competición que, tras ver la fase jugada, no es que no se haya quedado en nada, ni que apenas tenga emoción, sino que simple y llanamente, no es nada atractiva.
Más o menos vistoso - por lo superior - fue
el juego de un Atlético de Madrid al que un posible susto apenas duró
cuarto de hora. Fue Raúl García desde la frontal y gracias a un enorme
latigazo al que no acertó a llegar el portero Manu. En los quincfe
minutos anteriores, Adrián tuvo la suya para el gol, al igual que el
Jaén - ahí vino el susto - protagonizada por un inocente disparo de Fran
Machado.
Y es que, a pesar de los pesares, el partido no quedó
ahí, sólo lo hizo la eliminatoria porque aunque las ocasiones
colchoneras fueron multitud, actores principales Raúl García, Emre y
Adrián, al que se le espera y necesita. El Jaén siguió luchando. Quedó
patente con el disparo que se fue por encima del larguero del incisivo
Israel Jerez y el empate no llegó de milagro tras un extraño disparo del
diestro Gaitán. Opciones andaluzas, por tanto, a pesar de la
inferioridad manifiesta. Buena participación jienense.
En el
bando local, buenas noticias canteranas. La de cal la puso Javi
Manquillo, que partió de titular, dejando detalles o, al menos, trabajo,
que tiene más valor. Palabras positivas de Simeone en rueda de prensa
para él. También protagonismo para Óliver Torres, el centrocampista de
Navalmoral que este sí, dejó detalles. Tendrá que trabajar más. Saúl
salió demasiado al final, fue testimonial.
Por su parte, la de
arena la dejó Cebolla Rodríguez. Se marchó lesionado con un problema
muscular y hay que esperar para conocer el alcance de la lesión. Por
tanto, victoria colchonera y pase a la siguiente fase en la que el viaje
será corto, ya que será hasta Getafe.
Atlético de Madrid: Asenjo; Silvio, Cata Díaz, Pulido, Cisma; Tiago, Emre; Manquillo (Oliver Torres, m. 63), Raúl García, Cristian Rodríguez (Saúl Ñíguez, m. 86); y Adrián.
Real Jaén: Manu; Raúl Gaitán, Nino, Servando (Pedro Bolaños, m. 63), Adri; Óscar Quesada; Israel Jerez, Juanma (Vidal, m. 82), Fran Machado (Mariano, m. 77), Mario Martos; y Gascón.
Gol: 1-0, m. 16: Raúl García, de disparo desde fuera del área.
Árbitro: Muñiz Fernández (Comité Asturiano). Mostró tarjeta amarilla a Emre.
Incidencias: Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 7.000 espectadores.
El Levante evita un drama copero a base de épica
Mal partido de los de JIM que a pesar de ello lograron dar la vuelta a la eliminatoria y clasificarse para los octavos de final
Después de la última derrota encajada en liga, el Levante se presentaba este miércoles en la vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey frente al Melilla. Y el club granota tenía la obligación de recuperar la fortaleza como local, perdida en los dos últimos partidos jugados en el Ciutat de Valencia. El 1-0 favorecía al Melilla y los de JIM tenían la obligación de remontar ese resultado adverso para no caer a las primeras de cambio.
Sin embargo, el equipo local no parecía tener prisa por acometer la remontada y el Melilla apenas pasaba apuros en los minutos iniciales del partido. Sólo necesitaba remontar un gol y sus jugadores entendieron que no había que volverse loco para conseguirlo, pero su puesta en escena descubrió una sorprendente falta de tensión. A pesar de ello, una acción a balón parado ponía al Levante por delante en el marcador a los 25 minutos de partido. Pero la alegría granota por el gol de Karabelas duró poco, pues a los 2 minutos el exlevantinista Chota ponía el empate en el marcador y dejaba la eliminatoria muy cuesta arriba para los de JIM.
El Levante intentó reaccionar para dar la vuelta a la eliminatoria, pero se llegó al descanso con el 1-1 y los granotas tenían la obligación de conseguir dos goles con los que meterse en octavos. El paso por vestuarios no pareció cambiar el rumbo del partido, con un Melilla bien plantado sobre el césped que comenzaba a soñar con eliminar a un rival de Primera División.
Quedaban 15 minutos para terminar el encuentro y por primera vez en el partido el Melilla estaba obligado a atacar si quería clasificarse. Y tuvo sus oportunidades para lograr la sorpresa, pero al echarse para arriba, el Levante encontró espacios y con ello sentenció el partido. En una contra, Roger ganó en velocidad a la defensa rival y provocó el penalti y la expulsión de Andrés Sánchez. Desde los 11 metros Iborra no perdonó y puso el definitivo 4-1 para meter a su equipo en octavos a la espera de rival, que saldrá de la eliminatoria entre Granada y Zaragoza.
Levante UD: Navas, Pedro López, Volta, Héctor Rodas (Iborra, m.56), Nikos; Pallardó, Míchel, Serrano (Roger, m.60), Pedro Ríos (El Zhar, m.14); Rubén y Ángel.
UD Melilla: Dorronsoro, Mahanan, Dani Fragoso, Sergio, Sánchez; Fausto Tienza, Quique (Nacho Aznar, m.77), Jairo, César Díaz (Domenech, m.70); Velasco (Amarito, m.66) y Chota.
Goles: 1-0, m.25: Nikos. 1-1, m.26: Chota. 2-1, m.62: Roger. 3-1, m.75: Míchel. 4-1, m.85: Iborra, de penalti.
Árbitro: González González (Colegio Castellano-Leonés). Amonestó por el Levante a Míchel y Roger, y por el Melilla a Dorronsoro, Sánchez, Sergio y Fausto Tienza. Expulsó al local Míchel, por doble amonestación (m.87) y al visitante Sánchez, con roja directa (m.84).
Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de los dieciseisavos final de la Copa del Rey, disputado en estadio ''Ciutat de Valencia'' ante 11.197 espectadores.
Trámite gélido en el Coliseum
El Getafe hace valer la renta cosechada en el partido de ida y empata a 0 con la Ponferradina en un partido soso
Puro trámite el partido de vuelta de los dieciseisavos de final entre el Getafe y la Ponferradina en el Coliseum Alfonso Pérez. Tras la renta cosechada por los hombres de Luis García en tierras leonesas (0-4), se antojaba poco menos que milagroso que el equipo berciano pudiera darle la vuelta a la eliminatoria.
El técnico azulón daba entrada en el equipo titular a hombres poco habituales en la competición liguera como Codina, Adrián Colunga o Pablo Sarabia, dando descanso a así a Abdel Barrada, Álvaro Vázquez o Juan Rodríguez entre otros. Claudio Barragán, por su parte, también alineaba a jugadores poco habituales teniendo en cuenta la dificultad de revertir la eliminatoria y pensando más en la liga.
Los primeros compases del juego comenzaban con dominio del Getafe, que a pesar de la ventaja, no quería sorpresas. Gavilán y Diego Castro por bandas generaban las ocasiones más peligrosas para el equipo madrileño.
La primera polémica arbitral del encuentro llegaba en el minuto 11 de juego. Gol anulado a Michel tras remachar en línea de gol un balón cabeceado por su compañero Sarabia.
El mismo Michel gozaría pocos minutos después de otra ocasión clarísima para adelantar a su equipo, pero su cabezazo no creó mayor peligro sobre la portería de Orlando.
Partido cómodo para los de Luis García. La Ponferradina apenas generaba peligro alguno sobre la portería de Codina.
El primer acercamiento del equipo berciano llegaba a balón en el minuto 28 de juego. Falta botada por Iván Moreno. Su lanzamiento se marchaba por encima de la portería azulona.
Sarabia, muy activo la primera parte del encuentro e Isaías, a balón parado, gozaban de sendas ocasiones para adelantar antes del descanso a sus respectivos equipos. Con este 0-0 se llegaba al final de los primeros 45 minutos en el Coliseum.
Partido más abierto tras la reanudación del encuentro. Urko Vera tenía en el 52´ la primera ocasión los blanquiazules –hoy de verde- . Gavilán y David Abraham, poco después, perdonaban el que hubiese sido el primer gol local.
El Getafe dominaba el encuentro pero la Ponferradina, a la contra, generaba peligro sobre la portería de Codina.
La ocasión más clara para el equipo de Claudio Barragán llegaba en el minuto 76 de juego. Iván Moreno estrellaba el balón en el palo. Los bercianos no se querían marchar del Coliseum sin al menos marcar un gol.
Arreón final del Getafe, que gozó de varias ocasiones para llevarse el partido en las botas de Sarabia y Alcácer, pero ninguno acertó a batir la portería de Orlando. Con 0-0, se llegaba al final del encuentro en el Coliseum Alfonso Pérez.
La renta cosechada en El Toralín bastó al Getafe para pasar a los octavos de final de la Copa del Rey. El Atlético de Madrid, que se deshizo del Real Jaén, será su rival en la siguiente eliminatoria copera.
Getafe CF: Codina; Hugo (Lafita, min.72) Borja, Miguel Torres,Mané (Abraham, min. 45); Lacen, Michel; Diego Castro, Sarabia,Gavilán (Paco Alcacer, min. 62); Colunga.
SD Ponferradina: Orlando; Baró (Adán, min. 63) Samuel, Robusté,Sergio; Isaías, Jonathan Ruiz. 63) (Rosario, min. 63); IvánMoreno,Dídac (Mateo, min. 72), Ander; Urko Vera.
Árbitro: Pérez Montero (Comité Andaluz). Mostró cartulina amarilla a Hugo por parte del Getafe (min. 55) y a Sergio (min. 85)por parte de la Ponferradina.
Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de losdieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el Coliseum Alfonso Pérez ante cerca de 2.000 espectadores.
El oficio de Villa es ejemplar
Un doblete de David Villa y un gol en solitario de Adriano le dieron la victoria a los azulgranas ante un Alavés que supo luchar hasta el final
Una noche fría se vivió en el Camp Nou aunque rápidamente los azulgranas empezaron a apretar el encuentro y a ocasionar jugadas de peligro, protagonizadas por Cristian Tello en el extremo derecho, Sergi Roberto de 9 y David Villa desde la punta izquierda.
El técnico del Alavés, Natxo González, tuvo que hacer uso del portero del filial Sergio Herrera tras la lesión de su portero titular Miguel y del suplente que tuvo que ser descartado a última hora. Por esta razón, el estratega se decantó por un 5-4-1, aunque en realidad su barrera defensiva no parecía impenetrable por la habilidad de los azulgranas.
Al minuto 13 los vascos tuvieron tu primera oportunidad, en una jugada a balón parado y en el cobro quien logró salvar la jugada fue el portero José Manuel Pinto, quien logró escuchar su nombre coreado en el Camp Nou. Pero el gusto le duró poco a los azulgranas que vieron cómo el equipo visitante abría el marcador apenas al minuto 16 cuando un mal control de balón de Jonathan dos Santos que intentaba salvar una saque de banda, hizo que el esférico cayer en pies de los babazorros para que Borja Viguera rematara en la puerta de Pinto y el marcador se pusiera 0-1.
Adriano lo intentó desde fuera del área al minuto 29, pero el esférico fue bien repelido por los reflejos del cancerbero Sergio Herrera y en el rebote, David Villa la mandó muy por encima del travesaño perdiéndose una buena oportunidad de gol para el asturiano que en varias ocasiones de la primera parte del encuentro llegó a la línea de fondo pero no tuvo espacio para rematar.
Llegó el bienventurado empate al minuto 34 gracias a Adriano quien arrancó desde la línea frontal para introducirse en el área y anotar con un puntapié el balón que no puso mayor resistencia al portero vasco que no esperaba la jugada, el encuentro se ponía 1-1 y todo indicaba que ya en racha, los culés comenzarían el ataque despiadado.
Tras el descanso, la segunda parte comenzó con la misma intensidad de los azulgranas, David Villa en los primeros 5 minutos tuvo dos oportunidades de oro, pero al 'Guaje' le está costando trabajo marcar ese gol 300 de su carrera que tanto lleva buscando. pero el premio al asturiano no tardó en llegar y es que tras una falta sobre Tello en la línea del área, fue Villa quien en el cobro encajó el baló en el fondo de la malla del equipo visitante.
Tan sólo unos instantes después, los visitantes empataron el encuentro, pero el linier señaló fuera de juego por lo que se anuló la jugada y lo que pudo haber sido el empate a dos tantos. Villa no se conformó con su gol número 300 y se decidió por el 301 tras una asistencia de Tello y ante la celebración de todos sus compañeros.
Llegó el primer cambio para los de Tito Vilanova y Jonathan dos Santos salió del terreno de juego sustituido por Gerard Deulofeu quien sólo pisar el césped recibió aplausos, sin duda uno de los jugadores más esperados para este encuentro. También entró al terreno de juego Carles Planas defensa del filial B que hoy hizo su debut con el primer equipo sustituyendo a Adriano, mientras que Cesc Fàbregas reemplazó al capitán Carles Puyol.
Tras la entrada de Deulofeu, el joven canterano tuvo varias oportunidades pra hacer su gol y denostrarle a Tito Vilanova que sabe hacer más de dos jugadas buenas en un partido, cada vez que Deulofeu tocaba el esférico la gente exclamaba, esperando que la joven perla azulgrana hiciera su tanto y deleitar a todos con sus goles que tanto han llamado la atención de propios y ajenos.
Después de que el colegiado madrileño Carlos Velasco Carballo agregara dos minutos de descuento, dió el silbatazo final para certifical la victoria azulgrana que ahora deberá enfrentarse al Córdoba en la siguiente ronda de la Copa del Rey.
FC Barcelona: Pinto; Montoya, Mascherano, Puyol (Cesc, m.79), Adriano (Planas, m.72); Dos Santos (Deulofeu, m.68), Song, Sergi Roberto; Tello, Thiago y Villa.
Deportivo Alavés: Herrera; Óscar Rubio, Agustín, Luciano, Javi Hernández, Manu García; Jaume, Miki, Jonan (Llamas, m.79); Luismi (Barahona m.66) y Viguera (Guzmán, m.66)
Goles: 0-1, m.17: Viguera. 1-1, m.35: Adriano. 2-1, m.55 : Villa. 3-1, m.58: Villa.
Árbitro: Carlos Velasco Carballo (Colegio Madrileño). Amonestó por el Deportivo Alavés a Jaume (m.10) y a Manu (m.54).
Incidencias: Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de Copa del Rey disputado en el Camp Nou ante unos 57.655 espectadores.
Javier Aguirre tiene mucho por hacer
Un Espanyol con 10 por una expulsión injusta a Javi López cae en su casa contra un Sevilla que paso muy pocos apuros
El Sevilla llegaba hoy a Barcelona para confirmar el pase a octavos de final de la Copa del Rey gracias a una victoria en su casa por 3-1, y así fue. El Espanyol salió con mucha presión en el inicio de partido, pero poco a poco se fue apagando y el Sevilla no sufría nada en el campo para aguantar el empate, es más, en los primeros 45 minutos ya ganaba por 0-2.
La primera parte no tuvo mucha historia, el Espanyol salió fuerte para intentar marcar un gol tempranero y meterse en la eliminatoria, pero el Sevilla aguantó bien las primeras embestidas del equipo catalán y poco a poco se fueron haciendo con el balón. La posesión estaba muy igualada al principio y ningún equipo creaba ocasiones de peligro, hasta que Babá, en el minuto 25, provocaba un penalti que ni siquiera fue dentro del área ni hubo contacto suficiente, pero el árbitro no lo vio así y expulsó a Javi López. El penalti fue marcado por Perotti engañando a Kiko Casilla y sin hacer mucho el Sevilla se colocaba por delante en el marcador.
Con este gol, el Espanyol ya perdía toda opción de pasar y en el minuto 31 Wakaso, con amarilla desde el minuto 7, fue sustituido por Víctor Sánchez. El Sevilla cada vez estaba más asentado en el campo y Botía busco en el minuto 38 otro penalti, pero esta vez Clos Gómez no picó y saco tarjeta amarilla al ex del Sporting. Parecía que el resultado iba a quedar así al menos hasta el descanso, pero en el último minuto, en una contra rápida del Sevilla, Jesús Navas hizo un pase atrás y Rakitic batió a Kiko Casilla. Sin hacer nada especial el Sevilla sentenciaba la eliminatoria y se iba al descanso con un resultado a favor de 0-2.
La segunda parte fue un auténtico monólogo del equipo andaluz. Recién iniciada la segunda mitad, Babá metía el tercer gol de chilena después de un error defensivo de Héctor Moreno imperdonable. A partir del tercer gol, el Sevilla se dedicó a tener el control del balón e ir creando ocasiones, pero Kiko Casilla las sacaba como podía, la más clara un remate de Babá que se quedo solo ante un portero casi vendido pero que consiguió detener para evitar el cuarto gol.
Con los cambios en el centro del campo, el Sevilla dejó de atacar con tanta insistencia y fue dejando que los minutos pasaran. El Espanyol parecía que en algún momento buscaba marcar el gol del honor, pero la defensa del Sevilla estaba segura en el campo y ni Longo, ni Stuani, ni Verdú pudieron pasar por ahí. Hasta el final del partido, el Sevilla tuvo un par de ocasiones, pero ninguna clara. El partido finalmente acabó y el Sevilla aseguraba su pase a octavos con un partido más sencillo de lo esperado por el equipo sevillano.
RCD Espanyol: Kiko Casilla; Javi López, Raúl Rodríguez, Héctor Wakaso, Capdevila; Forlín, Wakaso (Víctor Sánchez, min.30); Albín (Christian, min.46), Verdú, Rui Fonte (Stuani, min.75) y Longo.
Sevilla FC: Diego López; Coke, Fazio, Botía (Cala, min.46), Fernando Navarro; Maduro, Medel; Navas, Rakitic (Kondogbia, min.56), Perotti (Javi Hervás, min.60) y Babá.
Goles: 0-1, min.25: Perotti; 0-2, min.45: Rakitic; 0-3, min.49: Babá.
Árbitro: Clos Gómez (Comité Aragonés). Expulsó a Javi López (min.25). Amonestó a Wakaso (min.8), Botía (min.38), Cala (min.81).
Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de dieciseisavos de la Copa del Rey disputado en el estadio de Cornellá-El Prat ante 7.463 espectadores. Es la peor asistencia en la historia del feudo blanquiazul.
Machada celeste y que tiemble el Madrid
Un primer tiempo vivo pero sin ocasiones fue respondido con un
segundo acto en el que los goles de Park y Lago llevaron la eliminatoria
a una prórroga donde De Lucas fue el héroe. Los celestes, frente al Madrid en octavos.
Un partido netamente copero ha necesitado de
la prórroga para decidir el pasaporte para octavos. El suculento premio
para el Celta, además de pasar de ronda, se trata de un doble
enfrentamiento en octavos ante el Real Madrid, con el atractivo
económico-deportivo que supone y con la inyección de moral con la que
van a llegar los olívicos.
La ventaja que traía el Almería del Estadio
de los Juegos Mediterráneos con un esperanzador 2-0 a favor (goles de
Jonathan y Abel Molinero) motivó que la responsabilidad y los riesgos
recayeran sobre el Celta, que además ejercía como club de Primera en una
tarde-noche fría y lluviosa en Vigo que ha terminado en fiesta para los
locales.
La declaración de intenciones de Paco Herrera con un 'once' ofensivo que dibujaba un 4-1-3-2 sobre el campo y la presencia en el conjunto almeriense del 'pichichi' de la Segunda división, el ariete argentino Leandro Ulloa, permitió que el arranque fuera abierto, eléctrico y tremendamente atractivo aunque con un color más rojiblanco que celeste.
A pesar de la propuesta valiente de los vigueses, las acciones peligrosas no se sucedían ni se pisaba el área con la fluidez deseada. Una situación que se desencadenó a los 19' cuando todo el frente de ataque céltico participó en la construcción de una jugada que la visión de Iago Aspas y la habilidad de Augusto Fernández estuvieron a punto de variar el marcador.
La Unión castigaba a los gallegos con la pausa impuesta por Verza y Casquero que manejaban el tempo del partido, un ritmo que se rompía con los disparos de Abel, la velocidad de Jonathan y las apariciones de Ulloa, suficientes argumentos para que el Almería amenazara con sentenciar la eliminatoria.
Otro soplo de fe para los locales llegaba a los 38'. un balón colgado por el danés Michael Krohn-Dehli acababa dibujando una trayectoria envenenada que atajaba el meta Diego García. El Celta se movía por chispazos que prosperaban por oleadas. El Almería estaba 45 minutos más cerca de su objetivo y cerraba el primer tiempo con la portería intacta y buenas sensaciones.
La segunda mitad arrancó con un cambio en el Celta y un nuevo esquema táctico generado con la entrada de Joan Tomás y la salida de Mario Bermejo. La misión era apuntalar el centro del campo para controlar mejor el juego. A los 54', los hombres de Paco Herrera encontraban el premio con el cabezazo de Park que contactaba un extraordinario servicio desde la derecha de Augusto Fernández. Los célticos se quedaban a un gol de igualar la eliminatoria.
Ulloa, en sendas ocasiones consecutivas, pudo terminar con la agonía con la que iba a convivir el Almería en la media hora final, especialmente por las bandas donde Mallo, Lago, Park y Augusto Fernández accedían con facilidad. Precisamente, en el 65' Hugo Mallo quiso asegurar con el interior y permitió que Diego García se luciera. Acto seguido, la réplica de Jonathan, en el contraataque del cuadro andaluz, avisaba al Celta de no descuidar la zaga.
El choque se volvía copero, vivo y anárquico. Iago Aspas colocaba el balón desde la izquierda para que un testarazo de Augusto Fernández supusiera otra gran intervención de Diego García. Los andaluces se sentían como el indalo de su escudo con el guardameta aguantando un chaparrón de oportunidades. La Unión sufría aunque contaba con los nervios de los vigueses como principal aliado.
Los disparos y ocasiones se fueron perdiendo entre la lluvia hasta que en el último minuto del encuentro llegaba el enésimo error aéreo de los andaluces que permitía a Roberto Lago cazar un balón suelto en el área que arremetía con violencia en la red. Objetivo cumplido, prórroga y nuevo partido en Balaídos.
El cansancio acumulado propiciaba espacios, era el escenario perfecto por donde Aspas y el incorporado Quique De Lucas podían asomarse en el tiempo extra. Precisamente, era el dorsal 22 del Celta el que driblaba a Diego García, tras un balón en profundidad, consumando la remontada en el 109'. A renglón seguido, Toni mandaba el esférico al palo. La fatiga no impedía que siguiera el diluvio de oportunidades con la Rianxeira como banda sonora y la lluvia como testigo. Era el turno de los rojiblancos que ya no tenían fuerzas para luchar en un combate que tenía como vencedor a los celestes en una remontada para enmarcar ante un buen rival que fue de más a menos.
La declaración de intenciones de Paco Herrera con un 'once' ofensivo que dibujaba un 4-1-3-2 sobre el campo y la presencia en el conjunto almeriense del 'pichichi' de la Segunda división, el ariete argentino Leandro Ulloa, permitió que el arranque fuera abierto, eléctrico y tremendamente atractivo aunque con un color más rojiblanco que celeste.
A pesar de la propuesta valiente de los vigueses, las acciones peligrosas no se sucedían ni se pisaba el área con la fluidez deseada. Una situación que se desencadenó a los 19' cuando todo el frente de ataque céltico participó en la construcción de una jugada que la visión de Iago Aspas y la habilidad de Augusto Fernández estuvieron a punto de variar el marcador.
La Unión castigaba a los gallegos con la pausa impuesta por Verza y Casquero que manejaban el tempo del partido, un ritmo que se rompía con los disparos de Abel, la velocidad de Jonathan y las apariciones de Ulloa, suficientes argumentos para que el Almería amenazara con sentenciar la eliminatoria.
Otro soplo de fe para los locales llegaba a los 38'. un balón colgado por el danés Michael Krohn-Dehli acababa dibujando una trayectoria envenenada que atajaba el meta Diego García. El Celta se movía por chispazos que prosperaban por oleadas. El Almería estaba 45 minutos más cerca de su objetivo y cerraba el primer tiempo con la portería intacta y buenas sensaciones.
La segunda mitad arrancó con un cambio en el Celta y un nuevo esquema táctico generado con la entrada de Joan Tomás y la salida de Mario Bermejo. La misión era apuntalar el centro del campo para controlar mejor el juego. A los 54', los hombres de Paco Herrera encontraban el premio con el cabezazo de Park que contactaba un extraordinario servicio desde la derecha de Augusto Fernández. Los célticos se quedaban a un gol de igualar la eliminatoria.
Ulloa, en sendas ocasiones consecutivas, pudo terminar con la agonía con la que iba a convivir el Almería en la media hora final, especialmente por las bandas donde Mallo, Lago, Park y Augusto Fernández accedían con facilidad. Precisamente, en el 65' Hugo Mallo quiso asegurar con el interior y permitió que Diego García se luciera. Acto seguido, la réplica de Jonathan, en el contraataque del cuadro andaluz, avisaba al Celta de no descuidar la zaga.
El choque se volvía copero, vivo y anárquico. Iago Aspas colocaba el balón desde la izquierda para que un testarazo de Augusto Fernández supusiera otra gran intervención de Diego García. Los andaluces se sentían como el indalo de su escudo con el guardameta aguantando un chaparrón de oportunidades. La Unión sufría aunque contaba con los nervios de los vigueses como principal aliado.
Los disparos y ocasiones se fueron perdiendo entre la lluvia hasta que en el último minuto del encuentro llegaba el enésimo error aéreo de los andaluces que permitía a Roberto Lago cazar un balón suelto en el área que arremetía con violencia en la red. Objetivo cumplido, prórroga y nuevo partido en Balaídos.
El cansancio acumulado propiciaba espacios, era el escenario perfecto por donde Aspas y el incorporado Quique De Lucas podían asomarse en el tiempo extra. Precisamente, era el dorsal 22 del Celta el que driblaba a Diego García, tras un balón en profundidad, consumando la remontada en el 109'. A renglón seguido, Toni mandaba el esférico al palo. La fatiga no impedía que siguiera el diluvio de oportunidades con la Rianxeira como banda sonora y la lluvia como testigo. Era el turno de los rojiblancos que ya no tenían fuerzas para luchar en un combate que tenía como vencedor a los celestes en una remontada para enmarcar ante un buen rival que fue de más a menos.
RC Celta de Vigo: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Túñez, Roberto Lago; Oubiña; Augusto Fernández (Quique de Lucas, min.85), Park, Mario Bermejo (Joan Tomás, min.46), Krohn Dehli (Toni, min.85); Iago Aspas.
UD Almería: Diego García; Gunino, Marcelo Silva, Trujillo, Raúl; Casquero, Verza; Abel Molinero (Alex Vidal, min.61), Jonathan, Aarón Ñíguez (Charles, min.87); Ulloa (Soriano, min.81).
Goles: 1-0 Park, min.54; 2-0 Roberto Lago, min.90; 3-0 Quique de Lucas, min.109
Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Expulsó al visitante Aarón Ñíguez (min.116) por doble amonestación. Además, mostró tarjeta amarilla a Casquero y Verza por parte del Almería.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio municipal de Balaídos ante 10.541 espectadores, según anunció el club vigués.
El Zaragoza obtiene su recompensa con uñas y dientes
El Zaragoza sufrió lo indecible para aguantar el resultado con 10 jugadores por la expulsión de Helder Postiga a media hora del final
En el partido disputado en el Estadio de Los Cármenes, en la ciudad de Granada, el equipo local y el Real Zaragoza se enfrentaban en la vuelta de los dieciseisavos de la Copa del Rey, tras haberse impuesto el cuadro maño en la ida por 1-0 en el partido disputado en La Romareda.
Como a muchos equipos de mitad de la tabla, y especialmente cuando los resultados en Liga no son óptimos (los dos equipos vienen de perder su último partido en la competición doméstica), la Copa del Rey se antoja como una competición que puede dotar de ilusiones tanto a los jugadores (incluso a los menos habituales) como a los aficionados.
Empezó el partido con la misma polémica con la que continuó. En los primeros minutos, Helder Postiga se tuvo que retirar del terreno de juego para ser atendido por su sangre tras recibir un golpe en la frente en una jugada en la que el luso pudo haber sido objeto de penalti.
Iriney con los pases largos y Torje desde la derecha llevaban el mayor peligro de los andaluces, que consiguieron empatar la eliminatoria en el minuto 27 por medio de Ighalo, al cual la fortuna decidió echar una mano, ya que Loovens golpeó en el balón que el nigeriano había disparado, dejando totalmente descolocado al portero visitante, hoy Leo Franco, en detrimento de Roberto.
A falta de 45 minutos, Zaragoza y Granada veían cómo se encaminaba su partido a la prórroga, algo que evitó José Mari con una magistral volea que daba alas a los zaragocistas. Pero no todo el partido iba a ser color de rosas: un 'piscinazo' en el área granadina de Helder Postiga propició que el árbitro le mostrase, por querer engañarle, su segunda amarilla, lo que dejaba al cuadro aragonés con diez jugadores.
Por si faltaba tensión en el encuentro, un gol de Mainz a la salida de un córner a falta de 24 minutos para el pitido final ponía las cosas en Los Cármenes con la tensión que todo partido de Copa debería de tener. Para colmo, Leo Franco se erigía héroe del partido tras un par de intervenciones salvadoras, con mucho mérito al haber sido suplente durante toda la temporada.
Con todo el Granada volcado en ataque buscando el gol que diera el pase a la siguiente ronda, el Zaragoza dispuso, en las botas de Sapunaru y Montañés, de dos ocasiones clamorosas: el primero cabeceó fuera estando sólo dentro del área y el extremo dio al palo.
Sin tiempo para más (salvo una amarilla para Leo Franco por perder precisamente eso, tiempo) y un paradón del portero suplente tras haberla sacado Loovens bajo palos, se consumó la defensa numantina del equipo maño y la imposibilidad del Granada de marcar otro gol contra diez jugadores. Helder Postiga puede respirar tranquilo, sus triquiñuelas no pesarían en el resultado del encuentro y el equipo hizo bueno el 1-0 de la ida.
Así, el Zaragoza se enfrentará al Levante en octavos de final. El equipo granota se impuso al Melilla por un resultado global de 4-2: perdió 1-0 en territorio africano pero un contundente 4-1 en el Ciudad de Valencia sentenció la eliminatoria.
Granada CF: Roberto; Juanma Ortiz, Bryan Angulo (Siqueira, m.62), Mainz, Íñigo López (Machís, m.88); Iriney (Orellana, m.80), Mikel Rico, Torje, Dani Benítez; Ighalo y Floro Flores.
Real Zaragoza: Leo Franco; Abraham, Sapunaru, Loovens, Álvaro; Movilla, Romaric (Montañés, m.58), Zuculini (Aranda, m.77), Víctor (Paredes, m.67); José Mari y Postiga.
Goles: 1-0, M.27: Ighalo. 1-1, M.55: José Mari. 2-1, M.66: Mainz.
Árbitro: Gil Manzano (Colegio Extremeño). Expulsó al visitante Postiga (m.59) por doble tarjeta amarilla. También amonestó a los locales Torje, Iriney y Dani Benítez, y a los visitantes Romaric, Paredes, Sapunaru, Aranda y Leo Franco.
Incidencias: Partido de vuelta de dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en Los Cármenes ante 21.000 espectadores.
El Mallorca defiende con lo justo su preciado tesoro de Riazor
El equipo de Joaquín Caparrós se mete en los octavos de final al empatar sin goles en casa frente al Deportivo en un partido sin mordiente.
Asistencia de público, 5.270 espectadores, propia de los tiempos que corren, del interés que suscita la Copa del Rey, del respetable frío y del intempestivo horario, máxime cuando podía sufrirse una prórroga.
Vuelta de José Carlos Nunes y Javi Márquez en el once titular anfitrión y nueva oportunidad para Evaldo Santos en el equipo que dirige José Luis Oltra. Los baleares salieron con un 4-4-2 en el que el hombre más adelantado era Javier Arizmendi a lo que los gallegos oponían un claro 4-2-3-1 con en eterno Rodolfo Bodipo en punta.
Más motivados parecían de comienzo los bermellones que presionaban por todo el campo y que cada vez se acercaban con más peligro a la meta deportivista.
Pero lo que son las cosas, la primera jugada real de peligro la protagonizaron los herculinos, quienes tras un rápido contraataque y un despiste de José Carlos Nunes, consiguieron que Juan Domínguez se plantara solo ante Dudú Aouate, marrando el mano a mano pues el excancerbero del Dépor tocó lo justo para desviar a córner cuando la escasa parroquia local se temía lo peor.
No se amilanaría el Mallorca, que realizaba un juego directo por las bandas y sin contemporizar pero de nuevo tuvo que ser Dudú Aouate quien desviara un peligrosísimo disparo cruzado de Luis Miguel Pizzi, que se había cambiado a la banda derecha el posterior saque de esquina lo remataría con facilidad pero muy mal Evaldo Santos.
De nuevo apretó tímidamente el conjunto mallorquín pero la ocasión fue de los deportivistas (Luis Miguel Pizzi de frustrada vaselina)tras nuevo error de la zaga local. Sólo en el tiempo de descuento, un buen centro de Javi Márquez estuvo a punto de aprovecharlo Javier Arizmendi.
Finalmente poco había pasado en los primeros 45 minutos y el Dépor tenía que empezar a arriesgar porque le era imperioso lograr un gol.
Transcurrido un anodino cuarto de hora de la reanudación, con el Mallorca dominando y el Dépor disparando, todo hacía entrever que José Luis Oltra no tardaría en jugársela pero bien al contrario fue Joaquín Caparrós el primero en mover ficha retirando a Giovani dos Santos y Marc Fernández para dar entrada a Víctor Casadesús y hacer debutar a Carlos Cristeto de sólo 18 años. Hacía poco minutos que me había dado la impresión de que el equipo coruñés no tenía intención alguna de seguir disputando esta competición… llegué a observar un ataque blanquiazul con hasta 5 defensas para un solo hombre bermellón adelantado. Y lo que faltaba, en el 70’ se retiraba el único deportivista que había creado peligro, Luis Miguel Pizzi, a quien sustituía Bruno Gama quien, bien es cierto, había conseguido el gol coruñés en el reciento duelo liguero.
Poco después serían primero Emilio Nsue quien sustituiría a Pep Lluis Martí y Juan Carlos Valerón, con pasado bermellón y por ello ovacionado, por André Santos; mientras tanto, habían despertado los gallegos y en dos ocasiones habían puesto en serios apuros a la defensa y el portero insular.
Pero no había sido más que un nuevo espejismo, el equipo coruñés tenía claro que no le interesaba continuar en el torneo del KO y sólo se ocupó en no conseguir ningún gol, a pesar de las ayudas del colegiado catalán Javier Estrada Fernández, a quien pareció entrarle un extraño virus en el último cuarto de partido.
"Justo" pase del equipo de Joaquín Caparrós y partido de vuelta que no hace más que confirmar los malos augurios ligueros para ambos conjuntos aunque, eso sí, un atisbo de esperanza dejaron vislumbrar los anfitriones.
RCD Mallorca: Aouate, Ximo, Nunes, Fontás, Kevin; Marc Fernández (Cris, min. 55), Martí (Nsue, min. 73), Javi Márquez, Alfaro, Giovani (Víctor, min. 55) y Arizmendi.
RC Deportivo: Germán Lux; Manuel Pablo, Aythami, Pablo Inzúa, Evaldo do Santos; Pizzi (Bruno Gama, min. 63), Jesús Vázquez, André Santos (Valerón, min. 80) Juan Domínguez (Thiago Pinto, min. 88); Camuñas y Bodipo.
Árbitro: Estrada Fernández (Comité Catalán). Amonestó a Arizmendi, Dos Santos y Javi Márquez.
Incidencias: Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el Iberostar Estadio de Palma ante unos 5.270 aficionados. El Mallorca disputará los octavos de final de la competición frente al Sevilla.
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