REAL MADRID [5-2] APOEL DE NICOSIA
Antes de Munich, una manita para calentar
El cuadro blanco vuelve a golear a los chipriotas en un partido insulso, sólo animado al final. El Madrid jugueteó con el APOEL, y sólo le apuntilló cuando temió una machada.
El Real Madrid estará en semifinales de la Champions por segundo año consecutivo. Un fin ya conocido, y logrado a través de un partido insulso que sólo se animó al final. El Real Madrid jugueteó con un débil APOEL durante más de una hora mientras campeaba un tranquilo 2-0 en el marcador. Manduca marcaría sorpresivamente, y obligó a los pupilos de Mourinho a apretar el acelerador para lavarle la cara a la gris noche. En los últimos quince minutos se marcaron cuatro goles hasta el 5-2 final que deja al APOEL contento por haber marcado en el Bernabéu y no salir goleado, y al cuadro blanco más contento aún por verse entre los cuatro mejores equipos del continente de nuevo pese a las raras circunstancias que envolvieron el choque.
Y es que era una noche extraña en Madrid.
Mitad de Semana Santa, con mucho papel sin vender, frío y lluvia durante
toda la jornada. Quizás por eso, José Mourinho quiso premiar a los
valientes aficionados que se acercaron a un Santiago Bernabéu que sólo
se desperezó para homenajear a Juanito, empequeñecido en ocasiones por
los estruendosos cánticos de los chipriotas. Mitad titulares y mitad
suplentes dispuso el técnico merengue, pero con los deseados Varane,
Granero, y Sahin de inicio, más Ronaldo, Kaká e Higuaín.
Una
declaración de intenciones para dibujar un digno espectáculo de unos
cuartos de final de Champions League. Pero que sólo fue logrado en el
tramo final del partido, cuando llegó la lluvia de goles. El APOEL
volvió a exponer poco sobre el césped, cerrado atrás intentando evitar
el bochorno, y quizás contagiara a un Madrid que durante gran parte del
partido no supo transformar su infinita superioridad sobre el campo en
flashes, aplausos y ovaciones. De ahí que resultara un partido tan
tedioso como se podía imaginar en la previa, con la única excepción del
último cuarto de hora.
Y eso pese a que el Real Madrid pronto
marcaría su primer e irremediable gol. En el minuto veinticinco, después
de tres claras ocasiones marradas, Ronaldo remachó a puerta vacía un
centro de Marcelo que se venía paseando por el área pequeña. Entonces el
gol 48 del luso en esta temporada, entonces el séptimo en esta
Champions para encaramarse al tercer cajón del podio de máximos
goleadores, y el que era el número 100 del trío Ronaldo-Higuaín-Benzema
que servía para igualar al mítico tridente blaugrana Etoo-Henry-Messi,
como la mejor marca de la historia del fútbol español.
El segundo tanto llegó con la firma de Kaká
diez minutos después. El brasileño trazó una parábola perfecta desde la
esquina del área hacia la escuadra del palo contrario que fue de lo poco
que hizo que el Bernabéu se levantara en la primera mitad. El brasileño
sigue sumando con la intención de ser importante en este Madrid.
Aunque lo tendrá difícil visto que Di María ya está listo. Y es que el Fideo
tuvo media hora ante el APOEL y se le vio en plena forma, dando una
asistencia y marcando un gol. Antes había salido Callejón por Marcelo, y
casi a la vez, saldría Albiol por Granero para formar un inédito doble
pivote Sahin-Albiol en una segunda parte aún más descafeinada que la
primera. Hasta los últimos minutos, claro.
El APOEL tuvo su
premio con un gol que era el 2-1 momentáneo. Manduca, que no estuvo en
la ida por sanción, no desaprovechó un mano a mano con Casillas para
sumar un gol que era histórico para el cuadro chipriota y que hizo
levantarse a toda la hinchada visitante pese al 5-1 momentáneo en la
eliminatoria. Y un gol que agitó a los jugadores madridistas, que
conscientes del pobre espectáculo que estaban ofreciendo se vinieron
arriba para firmar un último tramo de locos.
Primero marcaría Ronaldo de falta el 3-1 con un soberbio tomahawk
desde la esquina del área que se colaría por la escuadra contraria.
Poco después, Callejón, que reaparecía quince días después de
lesionarse, marcó el cuarto de la noche tras una jugada personal. El ex
UD Almería Esteban Solari aprovecharía el penalti tonto de Altintop para
recortar distancias en el marcador y animar de nuevo a sus aficionados.
Y lejos de quedarse ahí la cosa, Ángel Di María firmaría otro
espectacular golazo de vaselina cuando el partido ya expiraba.
Todo
para lavarle la cara a un soso partido que abre al Real Madrid las
puertas de las semifinales de la Champions de par en par. Espera el
Bayern. Y eso ya será otra historia.
Real Madrid: Casillas, Sergio Ramos,
Varane, Pepe, Marcelo (Callejón, m.46); Sahin, Granero (Albiol, m.65),
Altintop; Cristiano Ronaldo, Kaká e Higuaín (Di María, m.53).
APOEL de Nicosia: Urko Pardo; Poursaitides, Kaká (Satsias, m.78), Paulo
Jorge, Boaventura; Nuno Morais, Helio Pinto, Charalambides, Marcinho,
Manduca (Adorno, m.67); y Ailton (Solari, m.70).
Goles: 1-0, m.26: Cristiano Ronaldo. 2-0, m.37: Kaká. 2-1,
m.66: Manduca. 3-1, m.76: Cristiano Ronaldo. 4-1, m.80: Callejón. 4-2,
m.82: Solari de penalti. 5-2, m.84: Di María.
Árbitro: Gianluca Rocchi (Italia). Mostró cartulina amarilla a Poursaitides por el Apoel.
Incidencias: Partido de vuelta de cuartos de final de Liga de
Campeones, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 60.000
espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria de José María
Zárraga, ganador de cinco Copas de Europa con el Real Madrid.
CHELSEA FC [2-1] SL BENFICA
El Chelsea sella con suspense su revancha ante el Barça
El equipo británico venció en un polémico encuentro en el que el Benfica jugó con 10 hombres desde la primera mitad.
El Chelsea será el rival del FC Barcelona en las próximas semifinales de la Liga de Campeones después de que el equipo inglés lograse vencer al Benfica en el partido de vuelta en Stamford Bridge 2-1 tras el 0-1 de la ida en Portugal. Los goles de Lampard -de dudoso penalti- y Meireles en el descuento terminaron otorgando la victoria a un Chelsea que jugó con un hombre más en el terreno de juego desde la primera mitad.
El partido comenzó con mucho ritmo y tensión.
El Benfica sabía que debía ganar en Stamford Bridge para pasar de ronda
tras la derrota por 0-1 en el partido de ida, por lo que el equipo luso
decidió no esconderse e ir a por el primer gol del partido con una
táctica ofensiva y agresiva que pusieron en acción desde el minuto 1 de
juego.
Así todo, el Chelsea supo defender las acometidas de su
rival y sobrevivir a la fuerte presión, algo que terminó agotando al
equipo visitante. Precisamente, a pesar de que las ocasiones de peligro
eran para los portugueses, fue el Chelsea el primero en ponerse por
delante en el marcador gracias a un riguroso penalti cometido por Javi
García, que empujó a Ashley Cole en el área de castigo. Lampard fue el
encargado de disparar la bala de la pena máxima y, como suele ser
habitual, el pistolero de Stamford Bridge no falló desde los once
metros.
El Benfica acusó mucho este tanto en contra, aunque más
acusaría la posterior expulsión de Maxi Pereira por doble tarjeta
amarilla. Con este lance del partido, el equipo lisboeta terminó de
venirse abajo, aunque todavía sacaría fuerzas en la segunda mitad para
hacer sufrir un poco a su rival.
Bien entrado el segundo tiempo y
tras varios intentos fallidos, Javi García enmendó su 'error' en aquel
extraño penalti anotando un gol de cabeza a la salida de un córner que
dio alas a los lusos, que lo intentarían hasta el último minuto de
juego.
A pesar de esto, y como suele ser habitual, fue el Chelsea
quien mató el partido en un contragolpe magistral en el que Meireles lo
hizo todo para subir la pelota al área rival y marcar con un potente
disparo que coloca a los ingleses en semifinales.
Ahora, el
Chelsea se enfrentará al Barcelona en un duelo que tiene como objetivo
un puesto en la próxima finalísima de la Champions League.
Chelsea FC: Cech; Ivanovic, Cole, David
Luiz, Terry (Cahill, m.59); Ramires, Lampard, Mikel; Mata (Meireles,
m.79), Torres (Drogba, m.88), Kalou.
SL Benfica: Artur; Emerson, Pereira, Capdevila, Javi García; Bruno César (Machado, m.72), Witsel, Gaitan (Djalo, m.61), Matic; Aimar, Cardozo (Oliveira, m.57).
Goles: 1-0, m.62: Lampard, de penalti; 1-1, m.85: Javi García; 2-1, m.92: Meireles.
Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia), mostró tarjeta amarilla a Bruno César, Javi García, Aimar, Cardozo, Ivanovic, Ramires y Mikel, y roja a Pereira.
Incidencias: Encuentro de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones en el estadio londinense de Stamford Bridge ante 37.264 espectadores.
SL Benfica: Artur; Emerson, Pereira, Capdevila, Javi García; Bruno César (Machado, m.72), Witsel, Gaitan (Djalo, m.61), Matic; Aimar, Cardozo (Oliveira, m.57).
Goles: 1-0, m.62: Lampard, de penalti; 1-1, m.85: Javi García; 2-1, m.92: Meireles.
Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia), mostró tarjeta amarilla a Bruno César, Javi García, Aimar, Cardozo, Ivanovic, Ramires y Mikel, y roja a Pereira.
Incidencias: Encuentro de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones en el estadio londinense de Stamford Bridge ante 37.264 espectadores.
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