Dinamarca pone patas arriba el Grupo de la Muerte
La Orange fue mucho más que su rival pero se vio en desventaja desde el primer tiempo y le faltó puntería para empatar. Krohn-Dehli firmó el batacazo en Ucrania.
Hoy la Euro se vestía de gala porque
debutaba una de las grandes selecciones del continente, Holanda. La Naranja Mecánica, abría esta tarde el conocido como grupo de la muerte
en el que también estaban enmarcados Dinamarca, Portugal y Alemania.
La cenicienta del grupo, Dinamarca era la llamada a enfrentarse en su
debut con los tulipanes, que salían con la presión al encuentro de no
tener posibilidad de error, en el partido a priori más sencillo.
Y realmente con esa intención salieron
los oranjes, con unos primeros minutos fulgurantes en los que se
sucedieron las ocasiones para Holanda. Primeros minutos en los que cobró
especial protagonismo el tridente atacante formado Arjen Robben que a
banda cambiada ofrecía una movilidad increíble, Afellay con mucho ritmo
después de su lesión, y el siempre peligroso Van Persie. En estos
minutos los holandeses controlaron la bola y el juego e incluso contaron
con numerosas ocasiones, con tiros de Afellay y Van Persie que se
marcharon altos, un cabezazo que Sneijder remató muy forzado y un pase
de la muerte de Robben que despejó la defensa danesa.
Por su parte Dinamarca, dejaba sus opciones a una defensa ordenada,
presión arriba para impedir la fluida salida del balón de los tulipanes y
las salidas rápidas a la contra de Rommedahl y Kronh-Delhi.
Pasados estos primeros 20 minutos de dominio oranje, parecía que el
gol que adelantara a la selección subcampeona del mundo solo era
cuestión de tiempo. Pero entonces, el plan del técnico danés Morten
Olsen se materializó, en una salida rapidísima a la contra del lateral
derecho Simon Poulsen, que llegó hasta la línea de fondo y se la cedió
atrás a Kronh-Delhi que llegando en carrera se marchó con una facilidad
pasmosa de Van Der Wiel y definió la jugada colando el balón entre las
piernas del portero holandés de la Roma, Stekelenburg.
Con el 0-1 el guión se cumplía para los daneses que estaban plantando
cara a una de las favoritas para alzarse con esta Euro 2012. Holanda
lejos de reaccionar tuvo los peores minutos de la primera mitad, en los
que no era capaz de sacar el balón jugado con una medular demasiado
destructiva con Van Bommel y De Jong, y solo Robben, que fue el mejor de
la primera mitad, creó peligro con un disparo al palo en el minuto 35,
después de un regalo del portero danés Andersen que se equivocó en un
pase que puso en los pies del holandés.
De ahí al final de la primera mitad, Holanda se vino abajo y no fue
capaz de generar peligro a unos daneses que con su excelente presión y
orden defensivo esperaba una nueva posibilidad de acercarse a la meta de
la naranja mecánica antes del descanso, ocasión que finalmente no
llegó.
Descanso y muchas dudas para Holanda que esperaba un partido mucho
más sencillo y debía reaccionar en la segunda mitad y reponerse a la
desventaja en el marcador que reflejaba 0-1 en el receso.
A pesar del espeso juego del centro del campo holandés, Van Marwijk
no realizó ningún cambio a la salida de vestuarios, y mucho menos los
daneses que habían cumplido con las expectativas marcadas en la primera
mitad.
En el inicio de la segunda parte, salió de
nuevo con mucha intensidad Holanda buscando igualar el marcador, con
infinidad de ocasiones dirigidos una vez más por Robben y Sneijder,
generaron peligro con ocasiones de Afellay que la envió rozando el palo
de Andersen y Van Persie que solo como la una le pegó muy flojito a las
manos del portero danés.
Dinamarca por su parte, salía de nuevo con mucho peligro sobre todos
por la banda derecha, en la que Poulsen y Krohn-Delhi entraban siempre
con peligro aunque sin encontrar rematadores a sus centros, ante un
inoperante Van Der Wiel que no podía detenerlos.
A Holanda se le seguía haciendo un mundo sortear la línea de presión
danesa, para llegar a la línea de tres cuartos donde verdaderamente su
ataque empezaba a tener peligro y a la que solo llegaba con balones
largos. Dinamarca seguía comodísima en su papel de esperar a Holanda y
salir por banda a la contra.
El tiempo corría en su contra y Dinamarca seguía a lo suyo: salir a
la contra en la que Krohn-Dehli a punto estuvo de anotar el segundo con
un disparo desde fuera del área que Stekelenburg envió a córner.
Ante tal inoperancia en el juego, Van Marwijk sacó en el minuto 70 a
Van de Vaart y Huntelaar para darle más frescura y creatividad a los
tulipanes, sacando del campo a un buen Afellay y a De Jong.
Y ya en el 73 a punto estuvo de dar sus frutos el cambio con un mano a
mano que Andersen detuvo a Huntelaar, que se había quedado solo delante
del potero gracias a un pase en profundidad de Sneijder.
Dinamarca sabía que llegaba la hora de saber sufrir y correr detrás
del balón para lo que Olsen introdujo en el campo a Schone sustituyendo a
Eriksen, aun así los daneses no renunciaban a las contras que tan buen
resultado le habían dado durante todo el partido.
Holanda encaraba los últimos minutos con
el reloj en contra y sus estrellas cada vez más cansadas, como por
ejemplo Robben que no era capaz de superar en banda a Poulsen, y sin
ninguna claridad de ideas en su juego y sus combinaciones.
La defensa danesa no paró de secar en estos últimos minutos al ataque
holandés que no era capaz de crear ningún tipo de peligro ante una
Dinamarca que se defendía como gato panza arriba. A 5 minutos para el
final Marwijk se jugó su última carta sacando de la cancha a Van Der
Wiel e introduciendo a un hombre más en ataque como es Kuyt.
En el 87 saltó la polémica del partido con una mano de Kjaer dentro del área que el árbitro no sancionó.
Algo que no le sirvió para nada a los oranje que de hecho estuvieron
más cerca de encajar el segundo en estas postrimerías del partido que de
empatar.
Esta derrota sorpresiva de Holanda deja aún más abierto el grupo B
con Holanda que tiene que ganar sí o sí sus partidos frente a Portugal y
Alemania para pasar a cuartos. Por su parte, Dinamarca se gana el
derecho a soñar con quedar entre los dos primeros de este grupo de la
muerte en el que todos la calificaban como la selección más débil.
Holanda: Maarten Stekelenburg; Van der Wiel (Kuyt, min.85), Heitinga, Vlaar, Jetro Willems; Van Bommel, Nigel de Jong (Van der Vaart, min.71), Robben, Wesley Sneijder; Ibrahim Afellay (Huntelaar, min.71) y Robin van Persie.
Dinamarca: Andersen; Jacobsen, Kjær, Agger, Simon
Poulsen; Zimling, Kvist; Rommedahl (Mikkelsen, min.85), Eriksen (Schone,
min,46), Krohn-Dehli; y Bendtner.
Gol: 0-1, min.24: Krohn-Dehli.
Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia). Mostró cartulina amarilla a Van Bommel (min.67), Poulsen (min.78) y Kvist (min.81).
Incidencias: Partido correspondiente al grupo B de
la Europa de Polonia y Ucrania, disputado en el estadio Metalist Stadium
de Járkov (Ucrania), ante unos 32.000 aficionados.
ALEMANIA [1-0] PORTUGAL
Mario Gómez sale al rescate de una Alemania sin brillo
Cuando iba a ser sustituido, el delantero del Bayern dio los tres puntos a la Mannschaft, que pudo haber recibido el empate varias veces en los últimos minutos.
Desde antes de empezar la competición se sabía que el Grupo B sería el de la muerte, y hasta ahora no ha decepcionado. Quizá el fútbol no ha sido el más abierto pero, tras los dos primeros encuentros, el desenlace está completamente en el aire. Tras el triunfo de Dinamarca ante Holanda, el otro favorito, Alemania, tuvo que sudar sangre para vencer a una muy ordenada Portugal.
Tuvo que ser Mario Gomez, el gran goleador
del Bayern Munich, quien sacara de apuros a los de Joachim Löw, que
jamás se sintieron cómodos en la cancha de la Arena Lviv. El pressing
constante de Meireles y Veloso sobre Özil provocó que la Männschaft no
encontrara fácilmente el camino al marco de Rui Patricio y, hasta el
momento del gol, en el minuto 73 Pepe había anulado por completo a
Gomez.
Prácticamente desde el minuto 1, las posturas de ambos
cuadros habían quedado claras. Alemania tendría el control de la pelota y
Portugal buscaría la contra, intentando frecuentemente la combinación
entre Nani y Cristiano Ronaldo que, por lo menos en la primera mitad,
hizo sufrir a su marcador Boateng, con sus potentes carreras verticales.
Con
excepción de un remate de cabeza de Gomez en los albores del encuentro,
ninguno de los dos equipos tuvo una oportunidad clara de gol, hasta
prácticamente el final de la primera mitad, cuando Pepe tomó un rebote
en el área tras una pelota detenida, y mandó un precioso disparo que se
impactó en el travesaño de Neuer y rebotó en la línea de cal. La suerte
acompañaba a los de Joachim Löw, y no sería la última vez.
Si en
la primera mitad fueron los alemanes quienes controlaron el ritmo del
partido, en el complemento, el duelo se tornó sordo y tenso. Alemania
generó una clara al principio de la primera mitad y Portugal dos más o
menos decentes unos minutos más tarde, pero desde entonces la pelota
estuvo mucho más en medio campo que en cualquiera de las dos áreas.
Con
el partido trabado, Löw decidió mandar al campo a su talismán, Miroslav
Klose. El goleador de las grandes noches alemanas estaba ya en la
banda, listo para sustituir a Mario Gomez, cuando Khedira, quizá el
mejor de los germanos, mandó un centro preciso, que el delantero del
Bayern mandó a las mallas. ¿Qué habría pasado si la jugada se hubiera
producido un minuto después? Jamás lo sabremos. Lo cierto es que la
suerte volvió a darle una manita a los de Löw, cuando más la
necesitaban.
Portugal se lanzó al abordaje en los minutos finales
y generó más ocasiones que en todo el resto del partido. Primero
Cristiano, con un potente disparo, estuvo a punto de generar el error de
Neuer, después, la pelota se paseó por el área alemana sin encontrar un
rematador y luego un tiro-centro de Nani rebotó en la horquilla ante la
angustiada mirada del portero alemán. Para rematar, Varela, con el
marco abierto, reventó su disparo en el valiente Neuer cuando parecía
más fácil marcar.
No pudo ser. Sin convencer, Alemania consiguió
sus tres primeros puntos del torneo, que no son poca cosa en un grupo
que parece que será resuelto por el más estrecho de los márgenes.
Alemania: Neuer; Boateng, Hummels, Badstuber y Lahm; Khedira y Schweinsteiger; Müller (Lars Bender, min.90), Özil (Toni Kroos, min.66) y Podolski; y Gómez (Miroslav Klose, min.79).
Portugal: Rui Patrício; Joao Pereira, Pepe, Bruno
Alves y Fábio Coentrao; Miguel Veloso, Rául Meireles (Silvestre Varela,
min.79) y Joao Moutinho; Nani, Hélder Postiga (Nélson Oliveira, min.70) y
Cristiano Ronaldo.
Goles: 1-0: m. 72, Mario Gómez.
Árbitro: Stéphane Laurent Lannoy (Francia). Amonestó a
Hélder Postiga (min.13), Fábio Coentrao (min.60) por Portugal, y a
Badstuber (min.43) y Boateng (min.69) por Alemania.
Incidencias: Primer partido de Alemania y Portugal
del grupo B de la Eurocopa disputado en el Arena de Lviv, al oeste de
Ucrania, ante unos 30.000 espectadores (lleno). Asistieron el entrenador
del Real Madrid, José Mouriho, y el legendario exfutbolista portugués
Eusébio da Silva Ferreira.
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