Francia resiste el chaparrón y se acerca a los cuartos
En la segunda aparición en esta Euro 2012, galos y ucranianos se enfrentaron en un partido donde abundó la lluvia, los truenos y el buen fútbol francés.
En el Donbass Arena se presentaron dos equipos que dejaron un buen sabor de boca en la primera jornada. Los Ucranianos venían de darle la vuelta con un buen fútbol a un conjunto sueco que pecó de soberbia, mientras que Francia desplegó un buen funcionamient ante una Inglaterra que se encerró bien y sólo pudo rescatar el empate.
Antes del silbatazo inicial, Ucrania ya
llevaba ventaja si tomamos en cuenta el himno y su interpretación por
parte de jugadores, cuerpo técnico y aficionados. Maravillosa ejecución y
ambiente.
El partido comenzó y ambos equipos se mostraron muy
ofensivos en los primeros cuatro minutos, presentando un dinamismo
bastante agradable para el espectador. Sin embargo, al minuto cuatro, el
colegiado holandés, Björn Kuipers, decidió suspender el juego por una
tormenta eléctrica que estaba dejando torrentes de agua en el estadio.
El encuentro estuvo suspendido por casi 60 minutos hasta que el clima
mejoró y la decisión de la UEFA, por reanudar el partido, lo permitió.
Ya
reanudado el juego, el encuentro siguió para ambas partes con una
ligera superioridad francesa a la hora de proponer el ataque.
Al
minuto 16, después de una gran jugada de Ribéry que finalizó con una
asistencia, Menez anota el primer gol de la noche, pero que es anulado
inmediatamente por una posición fuera de lugar.
La respuesta
ucraniana vino al '24 con una gran jugada individual de Yarmolenko donde
realiza una doble bicicleta para luego rematar potente y abajo, tiro
que pasa ligeramente desviado del arco defendido por Lloris.
Luego
se vino el embate francés con tres jugadas claras de gol que no pudo
concretar. Al '26, una gran escapada de Ribéry por la banda izquierda
que termina en un centro retrasado que Menez remata y se ligeramente
arriba del travesaño. Al '28 Pyatov se lució y salvó de gran manera a
Ucrania tras un remate a quemarropa de Menez nuevamente tras un nuevo
centro de Ribéry que Benzema no alcanzó a rematar.
Finalmente,
al '39 vino la más clara del primer tiempo. En un tiro de esquina, Mexes
logró conectar de cabeza el centro y Pyatov nuevamente se volvió a
lucir, sacando el remate en el ángulo superior izquierdo. Una tapada
casi imposible.
Así se fueron al descanso sin la aparición del gol pero presentando un gran desempeño de ambas partes.
La
segunda mitad arrancó con una aproximación ucraniana por parte de
Tymoshchuk, quien disparó fuerte pero su remate pasó cerca del poste
defendido por Lloris.
Cuando corrían sólo siete minutos de la
segunda mitad, vino la ansiada apertura del marcador por parte de Jeremy
Menez. El francés realizó una gran jugada individual, recortando hacia
al centro a un defensor ucraniano y luego definió con remate potente y
bajo al primer poste de Pyatov. 1-0.
Ucrania apenas se estaba
recuperando del golpe cuando tres minutos después, vino la segunda
estocada gala. Tras una excelente circulación del balón por parte del
equipo francés, Karim Benzema realizó una gran jugada, eludiendo a tres
rivales y dándole un pase de maravilla a Cabaye, que no se tardó en
definir cruzado para vencer a Pyatov nuevamente. 2-0.
El partido
se comenzó a inclinar hacia un lado ya con el segundo gol, y Ucrania no
veía por donde responder. Al '64, Cabaye estuvo a punto de poner el
tercero cuando, nuevamente tras una gran circulación de la bola por
parte del cuadro de Laurent Blanc, Cabaye reventó el poste de Pyatov con
un gran remate.
Francia siguió dominando el encuentro con nulas
respuestas ucranianas para una posible remontada. Laurent Blanc mandó a
la cancha a sus figuras de la banca, Yann M'Vila, Marvin Martin y Oliver
Giroud para sentenciar el partido pero el marcador no se movió gracias a
una Ucrania que se preocupó más de no recibir el tercero antes de
marcar el descuento.
Una oportunidad más al '86 para Nasri con un
tiro libre que sacó Pyatov formidablemente, tras una falta cometida por
Tymoshchuk que se ganó la amarilla.
El encuentro finalizó y
Francia está con un pie y medio en la siguiente ronda, mientras que los ucranianos necesitan ganarle a la difícil Inglaterra en el último
partido del grupo D, el próximo martes.
Ucrania: Pyatov, Husyev, Khacheridi, Mykhalyk, Selin, Yarmolenko (Aliyev, min 68), Konoplyanka, Tymoshchuk, Nazarenko (Milevskiy, min. 59), Voronin (Devic, min. 45) y Shevchenko.
Francia: Lloris, Debuchy, Rami, Mexes, Clichy,
Cabaye (M'Vila, min. 67), Diarra, Ribery, Nasri, Menez (Martin, min. 72)
y Benzema (Giroud, min. 76).
Goles: 0-1, min. 53, Ménez. 0-2, min. 55, Cabaye.
Árbitro: Björn Kuipers (Holanda). Amonestó a Ménez (min.
39), Debuchy (min. 79) y Mexes (min. 81) por parte de Francia. Y a
Selin (min. 54) y Tymoschuk (min. 86) por parte de Ucrania.
Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada del Grupo D disputado en el Donbass Arena de Donetsk ante 50.000 espectadores. Nada más iniciarse, el partido fue interrumpido durante casi una hora debido a una fuerte tormenta.
SUECIA [2-3] INGLATERRA
Una maravilla de Welbeck manda a Suecia de vacaciones
En un partido de idas y vueltas y con más fortuna que buen fútbol, los de Roy Hodgson se pusieron en la antesala de los cuartos de final gracias a un gol de antología de Welbeck.
Hay veces que la suerte decide los partidos. Quizá los protagonistas no lo quieran aceptar, e insistan en que estaba todo planeado, pero la diosa fortuna suele ser la que dispone, y los jugadores sus peones en el juego. El Inglaterra-Suecia fue un partido loquísimo, con errores monumentales de los dos lados y caprichos del destino por doquier. Al final ganaron los de Roy Hodgson, porque los dados les dieron la cara una vez más que a los de Érik Hamren, nada más.
Nada en los primeros minutos presagiaba lo
que iba a ocurrir más tarde. Por veinte minutos, ambos equipos se
dedicaron a repartir pelotazos de un lado a otro de la cancha. Lo mejor
estaba en la tribuna, donde 20,000 suecos y unos 7,000 ingleses luchaban
por ver quién cantaba más fuerte el coro de “Seven Nations Army”, una
canción que se escucha mucho más ahora en los estadios de fútbol que en
la radio.
El aburrimiento se rompió al minuto 23 cuando Andy
Carroll se levantó en medio del área y remató un extraordinario centro
de Steven Gerrard. El ariete del Liverpool había sido la apuesta de
Hodgson para el partido y pagó con creces la confianza del técnico, no
sólo por el tanto, sino por su aporte defensivo en la pelota detenida y
su destacada labor como delantero de referencia, acompañando al más
móvil Danny Welbeck.
El resto del primer tiempo tuvo un solo
color, el azul de los ingleses, que sin embargo, no lograron hacer el
segundo frente a un equipo sueco que no lograba hilar dos pases
correctos. El único que intentaba romper lo predecible entre los
amarillos era Zlatan Ibrahimovic, pero su individualismo lo traicionaba.
Todo parecía indicar entonces un triunfo fácil para los británicos, que
ya esperaban definir el pase a cuartos contra Ucrania.
Pero la
diosa fortuna no se lo dejaría tan fácil. Apenas a los cuatro minutos de
la segunda mitad, tras un extraño control karateca de Zlatan en el área
inglesa, una serie de rebotes terminó en las redes de Joe Hart,
impulsada en el último momento por Glen Johnson. Empate casi de blooper y
todo para rescribir, sobre todo porque los ingleses se derrumbaron por
completo con el tanto. Suecia de pronto se vio amo y señor del partido y
rápidamente marcó el segundo en un remate de Olof Mellberg, ante la
terrible marca de la defensa británica.
Ahora era Suecia quien
tenía el control del partido y no se veía por dónde los de azul pudieran
recuperarse. Hodgson, desesperado, mandó a Theo Walcott a la cancha,
con la esperanza de que su velocidad por la banda pudiera proveer algo
distinto a un equipo que se había vuelto muy predecible. Y, en efecto,
el jugador del Arsenal fue quien cambió el encuentro, pero de una manera
más que inesperada. Tras otro ataque desordenado de sus compañeros, la
pelota le quedó botando fuera del área. Su disparo, potente, parecía no
llevar la suficiente colocación para ser peligroso, pero de algún modo,
Andreas Issakson midió mal la pelota y terminó en las mallas.
El
2-2 era quizá justo, pero cuando juega la suerte, los partidos no se
ganan por merecimiento. Un desborde de Walcott por la banda terminó en
un centro, que Welbeck empujó con el talón a la portería. Imposible
saber si el delantero del Manchester United quiso hacerlo así o trató de
controlar y el azar llevó el balón a la tierra prometida. Lo cierto es
que, con suerte o no, Inglaterra ahora está en una posición privilegiada
para clasificar a la segunda ronda. Y sus aficionados no se van a
preguntar si realmente lo merecieron o no.
Suecia: Isaksson; Granqvist (Lustig, m. 65), Mellberg, J. Olsson, Olsson; S. Larsson, Svensson, Kallström, Elm (Wilhelmsson, m. 80); Ibrahimovic y Elmander (Rosenberg, m. 78).
Inglaterra; Hart; Johnson, Terry, Lescott, A. Cole;
Milner (Walcott, m. 61) Gerrard, Parker, A. Young; Welbeck
(O-Chamberlain, m. 89) y Carroll
Árbitro: Damir Skormina (Eslovenia). Amonestó a Mellberg y a Milner.
Goles: 0-1. M. 23. Carroll. 1-1. M. 49. Mellberg. 2-1. M. 59. Mellberg. 2-2. M. 63. Walcott. 2-3. M. 77. Welbeck.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la segunda jornada del Grupo D, disputado en
el estadio Olímpico de Kiev (Ucrania) ante 70.000 espectadores.
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