El corazón irlandés no fue suficiente
Contra todo pronóstico, Irlanda no solo logró empatar, sino que fue superior a su rival en muchas fases del partido y pudo haber ganado. Ibrahimovic, una de las estrellas de este campeonato, no brilló en su debut.
La selección de Irlanda dio una de las primeras sorpresas de la Eurocopa 2016 al empatar contra Suecia en su primer partido de la fase de grupos. Los suecos, con Zlatan Ibrahimovic a la cabeza, se presentaban a este encuentro como una selección superior a su rival, algo que no se vio plasmado sobre el terreno de juego.
De hecho, pocos minutos tardó la República de Irlanda en hacerse no solo con el control del partido, sino con las mejores y prácticamente únicas ocasiones de gol. Jeff Hendrick fue uno de los más activos, sobre todo mediante disparos desde fuera del área, y uno de ellos fue el primer aviso de los Irlandeses, pero Isaksson respondió bien bajo palos, mientras que el segundo intento se estrelló en el travesaño. Fue en cambio John O'Shea quien dispuso de la mejor ocasión del primer tiempo tras no alcanzar a rematar en boca de gol con el portero sueco y la defensa rival ya batidos.
Sin premio en la primera parte, no tardó en llegar el gol irlandés en la segunda mitad. Una gran jugada por banda de Coleman terminó en un centro de Hoolahan remató a gol de primeras desde el segundo palo para subir el primer al marcador. La reacción de Suecia llegó de forma inmediata, como si el tanto rival sacase lo mejor de la selección amarilla, algo se estaban guardando. Ibrahimovic realizó un par de remates peligrosos que no vieron portería, mientras que la entrada de John Guidetti al terreno de juego ayudó a sumar efectivos en ataque.
A pesar del potencial ofensivo, Suecia evidenció una gran falta de ideas y de creatividad general con la pelota, con poco más que pelotazos buscando la cabeza de Ibrahimovic en sus jugadas ofensivas. La inspiración finalmente llegó en una jugada con Ibrahimovic y Guidetti como protagonistas, ambos demostraron entenderse muy bien juntos sobre el terreno de juego. Gran acción individual del delantero del PSG por línea de fondo con taconazo de Guidetti incluído, balón al área de Ibra y Clark terminó introduciendo la pelota en su propia portería en mitad de la confusión defensiva de Irlanda, que no se esperaba ese destello de calidad tras 71 minutos sin ideas.
Con el empate en el marcador y diez minutos para el final, la leyenda irlandesa Robbie Keane entró al terreno de juego con la intención de devolver la victoria al marcador de la República de Irlanda. Los últimos minutos del partido fueron muy trabados, con ninguno de los dos equipos conformes con el empate, pero tampoco con la claridad suficiente como para encontrar la jugada de un tercer gol para este partido, que terminó en empate.
Irlanda: Randolph; Coleman, O'Shea, Clark, Brady; McCarthy (McGeady, min.85), Whelan, Hendrick; Hoolahan (Hoolahan, min.78); Walters (McClean, min.64) y Long.
Suecia: Isaksson; Lustig (Johansson, min.45), Lindelöf, Granqvist, Olsson; Larsson, Lewicki (Ekdal, min.86), Källström, Forsberg; Berg (Guidetti, min.59) e Ibrahimovic.
Goles: 1-0, m.48: Hoolahan. 1-1, min.71: Clark, en propia meta.
Árbitro: Milorad Mazic (Serbia). Amonestó a McCarthy (43) y Whelan (77) por Irlanda, y a Lindelöf (m.61) por Suecia
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera jornada del Grupo E disputado en el Estadio de Francia, en Saint-Denis, ante unos 80.000 espectadores. Lleno. Antes del partido hubo una falsa alarma por explosivo en una de las puertas del campo.
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